Capítulo 57 Una última jugada
¿Exactamente como podría describir lo que sentía en esos momentos? ¿Miedo? ¿Nerviosismo? Ni siquiera cuando se presentó a uno de los exámenes más importantes de Japón estuvo nervioso, sin embargo ahora debía hablar de frente con su hermana menor y aunque Kazuyoshi no lo decía, realmente una parte de él aún dolía por las palabras de Ririka, palabras que pudieron ser vacías, pero al final ciertas
A pesar de su gran orgullo, era consciente que siempre fallaba en proteger a Ririka, ya que en su mente siempre visualizaba una gran balanza en donde residían su posición de heredero de la familia y la vida de su hermana ¿Ser la cabeza de la familia era más importante? Ni en mil años lo sería, sin embargo ser el heredero le daba el poder de decidir y dirigir, por lo que así podría mantener segura a la peliverde
Fue efectivo de cierta forma, pero es claro que en algún momento aquel fino vaso de agua se rompería al ya no poder almacenar más líquido, ahora esos pequeños vidrios comenzaban a herir a sus seres cercanos, siendo claramente la más afectada Ririka. Pensar en ella era como verle caminar con los ojos vendados y con sus pies desnudos sobre el vidrio, solo que la venda no era porque la joven no fuera consciente de lo que estaba haciendo, sino que aquello le servía para ocultar su dolor y lágrimas
"Sacó demasiado de madre"
Al final ¿quién fue realmente el protegido? Ririka que no tenía ningún poder o influencia se las arregló para tomar todo por si misma y protegerle a él como el heredero y a sus amistades cercanas como un raro tesoro, en cambio ¿qué había logrado él para agradecerle? Sus acciones le parecían mínimas, a pesar de todo el esfuerzo aún seguía sin ser suficiente. Realmente no le sorprendería si alguien le dijera que era patético como hermano mayor
La mirada en el retrovisor de Kizuka le hizo caer en cuenta de que ya habían llegado a la casa de los Rengoku y justo en ese momento se dio cuenta de que su mano estaba temblando levemente al intentar abrir la puerta del auto, Kazuyoshi pensó que probablemente lo que más temía en este mundo era ser odiado por su hermanita y es que el solo concebir la idea en su cabeza hizo que le doliera el estómago y le pareciera por un momento ver búhos volando
"Puede ser contagioso"
El camino hacia la puerta principal le resultó todo un sufrimiento como si estuviera recorriendo un vasto desierto, sentía su garganta seca y de repente dudaba de que pudiera formular correctamente una pregunta o respuesta. Ririka era lo único que le quedaba junto al pedido de su difunto padre de cuidarla, así como también así mismo, ya que eran hermanos y debían permanecer juntos y apoyarse
Aún así cualquier pensamiento negativo quedó suspendido en el aire al ver como la puerta corrediza se abría y en su campo de visión aparecía primero Tōjuro, quien llevaba a alguien de la mano y esa persona resultó ser Ririka que le miraba tímidamente ¿acaso temía que fuera a ser duro con ella? Quería decir algo y sonreírle de manera amable, sin embargo verla y recordar todo el dolor que había pasado resultaba pesado
¿Siquiera tenía derecho a sonreírle y decirle que ya todo había terminado? Kazuyoshi simplemente se sentía tan inseguro como si fuera la última hoja de un árbol que se resiste en caer al llegar el otoño. Finalmente Ririka alzó su verde mirada hacia él y pudo ver como su aparente expresión de nerviosismo ahora reflejaba sorpresa junto a algo más que no supo descifrar
La peliverde se había quedado estática al ver por primera vez a su hermano desde que había recuperado sus recuerdos, por eso verle de pie ante ella con aquel ceño levemente fruncido y los mismos ojos verdes fue como si hubiera sido transportada de repente al pasado y todos sus recuerdos de niños y reencuentro que terminó en la muerte de uno se reprodujera en su mente, el dolor no había desaparecido
Ririka pudo notar como el cuerpo de su hermano pareció temblar al verle y es que ella no había podido controlar sus lágrimas que ahora recorrían sus mejillas y se perdían en su mentón, a estas alturas ya no importaba la pequeña discusión que habían mantenido, solo quería abrazarle con todas sus fuerzas al ser consciente que en esta vida estaba vivo y a su lado, aquella promesa que hicieron realmente se había cumplido
De esta forma la joven solo pudo dibujar una sincera sonrisa en sus labios mientras corría hacia los brazos de su hermano mayor, quien por unos instantes vio en ella a la pequeña Ririka que corría con sus brazos extendidos para que no se fuera, por lo que él también se movió por aquel impulso repentino y atrapó entre sus brazos a su hermana menor, quien le rodeó también con sus cálidos brazos y escondió su rostro en su pecho
"Yoshi-nii... Kazu-nii..."
Las lágrimas simplemente no se detenían y tantos sentimientos le embargaban que Kazuyoshi solo pudo tomar el rostro de su pequeña hermana entre sus manos e intentar limpiar sus lágrimas, pero no paraban y en parte él se sentía tan culpable de que fuera el causante de ellas, sin embargo él no sabía que aquellas lágrimas eran de pura alegría y alivio por volver a estar juntos como hermanos
— Kazu-nii, lo siento —le escuchó decir finalmente— todo lo que dije realmente no lo creo así, pero quería alejarte al igual que a todos, por eso...
— Sh, no es necesario que me digas algo tan obvio —le cortó el ojiverde soltando un suspiro— no soy tan sentimental como tu, tonto guisante
— Ya te dicho muchas veces que no soy un guisante —balbuceó la contraria dandole un ligero cabezazo en su pecho
— Lo eres. Porque a pesar de todo, siempre seremos hermanos y como aquella verdura permaneceremos juntos ¿no es así? —le cuestionó Kazuyoshi con una sincera sonrisa— por eso deja de llorar, te arrugarás
— Kazu-nii...
— Dime
— Gracias... por existir y ser mi hermano mayor —respondió Ririka con una cálida sonrisa
Solo esas palabras bastaron para conmover al joven, quien solo pudo sentir que se estaba sonrojando, por lo que se apresuró en abrazarla para ocultarlo. Realmente había ido imaginando el peor escenario, pero ahora su corazón lo sentía tan cálido y tranquilo al igual que su consciente, por fin después de algunos días sin descansar apropiadamente podía hacerlo, ya que su pequeño guisante se encontraba bien
— ¡Buenos días, Kazuyoshi-san! —exclamó Tōjuro uniéndose a ellos
Los ojos verdes del mayor le recorrieron mientras una parte de él pensaba que le habían arruinado su momento con su hermanita, sin embargo no pasó mucho para que Kazuyoshi recordara sus "palabras de consuelo" y mirara con desconfianza al chico mientras se alejaba con Ririka de manera muy sobreprotectora. La peliverde no comprendió cuando su hermano como a darle vueltas y escanearla
— ¿Qué sucede?
— Solo me estoy asegurando de que ese búho no te haya puesto sus garras en mi ausencia —masculló Kazuyoshi con una expresión seria y determinada— fui muy claro ayer por la noche
Ririka solo pudo reír para sus adentros, pues la "advertencia" de Kazuyoshi había llegado muy tarde, ya que ¿qué no habían hecho esa tarde? Definitivamente aquellos no eran pensamientos que debía mantener en su cabeza y menos ante su hermano mayor, puesto que su sonrojo podría perfectamente delatarla, por lo que respirar profundo era su única opción, su hermano no encontraría nada sospechoso
— Hum, todo parece estar en orden —susurró después de unos segundos
— Eso es bueno —respondió Ririka tranquila
— Aunque bien podrías haber eliminado las pruebas antes de que yo llegara
"Justo en el blanco, es tan astuto como un zorro"
— Deja de decir cosas raras y más cuando los padres de Tōjuro están aquí
— Es bueno ser un poco desconfiado
— Tu lo eres demasiado
— ¿Puedes darme un porcentaje exacto?
— Siquiera un 99.9%
— ¿En qué cifras te basas para ello? ¿Acaso me has hecho un estudio?
— El estudio de la intuición de una hermana menor
— Hmp
— ¿Qué sucede? —inquirió Tōjuro al ver la mini discusión entre ambos
— Nada, búhito enérgico —le cortó Kazuyoshi despeinando sus cabellos, a pesar de tener el ceño fruncido
— ¡¿Cómo que búho?! ¡¡Kazu-nii!! —exclamó Ririka avergonzada
— Lo es —respondió como si fuera lo más normal del mundo— si lo buscas en Google o Wikipedia te sale uno igualito, solo que este mutó y no es nocturno
— ¡¡Kazu-nii!!
— ¡Puff-...! —a pesar de la preocupación de la peliverde, Tōjuro había soltado una corta risa ante la situación y aquello solo fue un detonante para que su corazón volviera a latir muy rápido
— Deja de sonrojarte por una risita —le cortó el mayor devolviéndole a la realidad— eso es lo malo cuando te enamoras, el cerebro te lo pone más bonito y decente de lo que es
— ¿Acaso dices que Tōjuro no es muy guapo? —Ririka estaba claramente indignada, si por ella fuera le construiría un altar a esa sonrisa
— Solo no te quiero ver llorando en unos años, no hay devoluciones —negó Kazuyoshi con una sonrisa burlona que probablemente haría suspirar a muchas otras chicas
"Ya quiero ver cuando llegues a enamorarte"
Por fin podía respirar profundamente y soltar un suspiro de alivio, ella también había estado algo nerviosa de reunirse con su hermano mayor, pues era muy diferente mirarle con los ojos y recuerdos de Yamamotoyama Ririka que ahora que también era consciente que un día hace más de cien años fue Tsukino Ruri y hermana de Tsuyoshi. Claramente cuando él apareció en su campo de visión todos sus sentimientos se arremolinaron en su corazón y las lágrimas afloraron sin control
Ahora debía centrarse y no dejar nublar por completo su juicio, ya que desde antes que llegara Kazuyoshi, la peliverde había estado hablando con su novio ante la decisión de decirle toda la verdad que dejó atrás su padre antes de morir a su hermano. Ya no deseaba cometer el mismo error dos veces y mentirles para que no intervinieron, sabía que no era lo correcto y como hijo mayor que Kazuyoshi es tiene derecho a saberlo
Claramente su yo actual se había comportado bastante maduro, ya que en el pasado habría analizado todos los posibles escenarios y escogido una forma de hacer de frente a su familia mientras protegía a todos, pero en cambio se había arriesgado el contener toda la arena del desierto ella sola cuando tan solo una noche de tormenta sería suficiente para derribarla, por eso sería astuta y no dejaría pasar nada por alto
— Kazu-nii, durante el tiempo que estuve ausente y huí de Rikuto... —habló la peliverde con la mirada baja— tomé muchas decisiones de las cuales me reprocho y también hay otras que me salvaron en ese momento —añadió volcando su verde mirada en Tōjuro con cariño— pero dentro de todo, también descubrí una retorcida verdad
— ¿Qué quieres decir? —inquirió Kazuyoshi serio mientras le tomaba suavemente de los hombros— ¿alguien te hizo daño?
— Nada de eso, tiene que ver más con... —susurró antes de mirar con desconfianza su alrededor— Kazu-nii, al venir... ¿te aseguraste de que nadie te siguiera?
— La abuela ya conoce la ubicación de la residencia Rengoku, sin embargo mis hombres han estado vigilando desde el día en que decidiste romper el compromiso. Son muy leales y les he puesto a prueba muchas veces, por lo que debería estar bien hablar aquí, ya que no puedo decir lo mismo de nuestra casa...
— Entiendo, pero ¿cómo reaccionó... luego de que yo rompiera el compromiso?
— Creo que estuvo más molesta conmigo que contigo, Ririka —suspiró— incluso se te hubieras arrepentido, es claro que habrías sido forzada a responder ante el padre. Esa fue una de las razones también por la que la abuela permitió una recepción pequeña y con pocos presentes
— Fue para asegurarse que en caso de presentarse un problema nadie dijera nada fuera de las puertas de la iglesia...
— Es correcto, así que mi intervención tuvo por supuesto más peso, prácticamente expuse al asesino del hijo mayor de los Hoshi y toda la atención se volcó en Rikuto, quien heredó la posición luego
— ¿No te dijo nada...?
— ¿Te refieres a un castigo? —únicamente la preocupación brillaba en los ojos de Ririka— no fue precisamente un castigo, pero esa cachetada... aún no puedo olvidarla —negó alzando sus hombros levemente y restándole importancia
— ¿Dolió?
Probablemente era una pregunta tonta, pero Kazuyoshi siempre había sido fuerte y orgulloso, por lo que siempre escondía su dolor y decía que realmente no había sido para tanto, por lo que sin importar cuanto le atacaran eso no iba a apagar el brillo y determinación de su mirada, sin embargo su debilidad también siempre fue clara y eso era: Yamamotoyama Ririka, una existencia que podría obligarle a arrodillarse por perdón
"¡¡Splash...!!"
— ¡¿Cómo pudiste?! —exclamó furiosa la anciana tanto que su cuerpo temblaba y su cara estaba roja— ¡¿sabes la vergüenza que has hecho pasar a la familia Yamamotoyama?! ¡¿Eres consciente?!
— Entonces, ¿dice que debí haber permitido que RIrika se casara con alguien sospechoso?
— ¡¡El mayordomo era el sospechoso!! ¡¡No RIkuto-san!! ¡¡Claramente lo hiciste porque querías detener la boda!!
— Nunca estuve de acuerdo con esa unión y lo sabe, menos iba a estarlo con un caso en donde un inocente fue asesinado
— ¡Hablamos de una muerte que sucedió hace muchos años, ni siquiera debería tener relevancia!
— ¿Está diciendo que esa víctima no merece justicia? Si alguien pequeño y débil murió ¡¿quién me podía asegurar que Ririka estaría bien en esa familia?!
— ¡¡Modera tu tono conmigo jovencito!! —le cortó la anciana golpeando el piso con su bastón con fuerza— ¡no intentes engañarme con tus palabras! ¡¡Ririka esto, Ririka aquello!! ¡¿Acaso tienes alguna enfermiza obsesión con ella?!
— Ahora yo le pido con todo el respeto que cuide y mida sus palabras, no me ponga a la altura de su asqueroso hijo cuando Ririka es mi única hermana con la que crecí desde que tenía dos años ¡¿cómo puede decir algo tan bajo?!
— Eres hijo de esa mujer sucia también, no debería sorprenderme si sacaste alguna maña asquerosa
— ¿Acaso no es consciente de que su hijo mayor sin ser hijo de mi madre resultó ser una de las escorias más bajas? ¡Poniendo sus manos en una niña pequeña! ¡¡Solo Dios tuvo que tener misericordia para que eso no escalara!!
— ¡¡Ya basta!! —nuevamente Kazuyoshi fue golpeado en su otra mejilla— ¡podrás ser mi amado nieto, pero si tengo que sacarte de esa posición, no me temblará la mano para hacerlo!
— Y a mi no me temblará la boca para decirle que me importa muy poco la posición de heredero —declaró Kazuyoshi frío y con una mirada desprovista de emociones que hizo temblar por escasos segundos a la mujer
La discusión no terminó en nada y luego de aquello se había marchado tan furioso que tuvo que respirar profundo para no matar a aquel tipo asqueroso que le miraba con una sonrisa burlona ¿realmente la abuela había sido capaz de ponerle a su altura? Simplemente seguía sin poder creerlo, pero el ardor en sus mejillas aún seguía caliente, por lo que realmente había sucedido
— ¿Kazu-nii? —escuchó decir a los lejos y pronto Kazuyoshi cayó en cuenta de que se había quedado en silencio mientras sostenía la mano de Ririka. Su expresión reflejaba por completo su preocupación
"Si hay algo que puede causarme dolor en este mundo... sería separarme de mi guisante"
— No dolió —negó con una sonrisa— sabes que se necesita más que eso para doblegarme, por eso no te preocupes y cuéntame lo que has descubierto
Ririka sonrió en respuesta y pronto le guió al interior de la casa para que pudieran hablar más tranquilos, sin embargo no sabía como su hermano mayor lo tomaría, ya que para ella resultó en un gran shock que le obligó a perder la consciencia y negarse por un corto tiempo. Debía reconocer que había sido bastante inocente en ese aspecto, ya que la maldad de aquella mujer no tenía para nada limites o una pizca de misericordia
"Es ganar y ganar sin importar el costo"
— O las lágrimas que se derramen, ni las vidas que se pierdan —pensó para si misma soltando un suspiro
¿Realmente las vidas tenían un peso? Una persona al morir desaparece de este mundo, por lo que siempre solía pensar que tenía muchos cofres llenos de secretos porque los involucrados al morir habían sellado su lengua para siempre. La confianza es algo muy valioso y al mismo tiempo tentador de vender como si de pan caliente se tratara, por eso ella siempre optaría por el silencio sepulcral
— Ahora todo es un desastre —pensó para si misma con ambas manos en su cabeza— ¿por qué? ¿Por qué no pude deshacerme de ella? ¡¿Acaso el destino es tan retorcido que busca protegerla?!
Cada movimiento en su tablero de ajedrez había sido revisado y pensado meticulosamente, se supone que no deberían haber errores y aún así una nueva variable siempre había aparecido y salvado a Ririka de un destino fatal. Su cabeza dolía al igual que sus uñas, las cuales había mordido hasta hacerse sangre, su escritorio era un desastre al igual que su cabello que normalmente estaba pulcramente peinado
— ¿Acaso un terremoto ha sacudido esta oficina? —inquirió una voz masculina sacándole de sus pensamientos
— ¿Qué haces aquí?
— No ha salido de este lugar en dos días, apenas si ha comido o tomado agua —le recordó Toshiro soltando un suspiro— podré no ser una persona de la cual se enorgullezca, pero sigo siendo su hijo
— ¿Ahora que quieres? ¿Un premio? ¿Qué te alabe por eso? —el sarcasmo era evidente en su tono de voz
— Como si fuera a lograr algo por hacer eso —rió el contrario— aunque no lo crea, los sirvientes, la prensa y el público en general se preguntan por usted desde el escándalo de la casi boda con el hijo de los Hoshi —le recordó lo obvio— incluso si yo no viniera, los sirvientes o cualquier otra persona lo haría
Lo que decía su hijo tenía sentido, ya que su teléfono no había dejado de sonar en ningún momento y los papeles pendientes de acumularse, de repente se sintió molesta ante esto porque sin importar cuan molesta o irritada estuviera el mundo no iba a detenerse y el ritmo de vida seguiría, dejándole sola y atrás. Nuevamente su frustración estaba creciendo y deseaba tanto tener el poder de detener el curso de todo
— Si desapareciera de una vez por todas... —masculló en voz baja con evidente odio mientras la mirada también oscura de su hijo le observaba
— Madre, usted siempre nos decía que no habláramos entre dientes
— ...
— Déjeme adivinar, para usted es Ririka quien tiene toda la culpa ¿no es así?
— Ella fue la que echó todo a perder desde el momento en que se negó a casarse
— Pero fue Kazuyoshi, quien verdaderamente terminó con el compromiso —le recordó— Ririka no hubiera tenido la fuerza para negarse por si misma
— No...
"Ese día hubo algo diferente"
La anciana por más mayor que pudiera ser aún no había perdido su lucidez y claramente en los ojos de aquella niña percibió algo diferente, como si hubiera pasado de ser solo una chica de quince años a una mujer que podía mantenerle la mirada e incluso amedrentarla, pero ¿cómo sería posible algo así? La forma de hablar, mirar y gestos en general los percibió mas maduros y decididos, ya no estaba lidiando con alguien débil
— Madre
— ¿Qué es lo que quieres?
— Sabe que será muy difícil mantener bajo control a Ririka mientras tenga el apoyo de Kazuyoshi
— Entonces ¿qué es lo que propones? —le cuestionó de vuelta mientras tomaba su pluma dorada favorita y jugueteaba con ella entre sus dedos— te digo de una vez que ni en mi lecho de muerte pienso entregarte a esa niña, jamás permitiré que te mezcles con esa sucia sangre
— No es así, madre. La verdad es que he estado pensándolo un buen tiempo y he llegado a la conclusión de que la persona a quien amé siempre fue a Tsubasa y Ririka no es, ni nunca será ella. Tsubasa está muerta y jamás volverá y esa niña tendrá su apariencia, pero no es tan linda y agraciada como su madre, solo sería perder mi tiempo en una existencia mediocre
— Hijo... —susurró la anciana atónita ante sus palabras— ¿realmente te has rendido en ir tras Ririka?
— Lo juro por el apellido que llevo y también, creo que tengo una idea de como podrá finalmente deshacerse de Ririka
— ¡No, no pienso caer en tu engaño! ¡No pudiste haber cambiado de parecer tan pronto y tu plan puede ser solo una coartada para llevártela!
— Mi plan equivale a desaparecer por siempre la existencia de esa niña, madre
— ¿Cómo dices?
— Creo que Tsubasa estará feliz de reunirse con su hija —suspiró el hombre con una sonrisa como si en verdad simpatizara con su madre— madre, por favor mate a Ririka
"Una sentencia de muerte jamás puede ser vacía"
— La verdad creo que es la única forma de liberarse de esas mujeres, ya que siento que en cualquier momento podría volver a caer... por favor, madre... ¡libéreme de esa mujer y su hija, ya no quiero seguir decepcionándole!
— Hijo mío... —soltó la anciana al ver por primera vez en tanto tiempo lágrimas en los ojos de su hijo mayor— ¡tienes razón, debo terminar de una vez por todas con esa mujer!
La mente retorcida de aquella mujer llegó a la conclusión de que si Ririka moría, entonces todo podría llegar a ser como antes y la familia Yamamotoyama estaría libre de unas vergüenzas como lo fueron aquella mujer y su hija. Toshiro podría llevar una vida normal y apoyar a Kazuyoshi como el futuro heredero de la familia, pero para eso ella tendría que sacar sus cartas una última vez
— ¿Cuál es tu plan, hijo mío?
— Esto llegará a sorprenderle, pero deberá poner pendiendo de un hilo la vida de Kazuyoshi
— ¡¿Cómo?!
— No se exalte, él solo será la carnada para atraer a Ririka —le explicó al ver la palidez en el rostro de su progenitora— sabe que como hermanos son muy leales, por lo que la única forma de salir de esto y que Kazuyoshi no tomé el lugar de su hermana es creando un escenario en que su vida esté en peligro y sea Ririka, quien decida ser el sacrificio para protegerlo
"Eso tiene mucho sentido, solo así Kazuyoshi lo aceptará"
— Solo sería pensar en un buen momento para que ambos vengan a la mansión... —fingió pensar Toshiro mientras su madre observaba el calendario y concebía una oscura idea
— ¿No es el mejor escenario mi fiesta de cumpleaños? En solo una semana toda la mansión estará llena de luces y ajetreo
— Oh... —soltó el hombre dibujando una sonrisa en su rostro— madre, justo estaba pensando que tipo de regalo le gustaría este año. Me ha facilitado mucho las cosas al decirme que es lo que desea exactamente
— Lo estaré esperando con ansias, definitivamente será uno de los mejores cumpleaños que he tenido en toda mi vida —rió la anciana totalmente complacida mientras la mirada de su hijo únicamente residía en el brillante dorado de aquella pluma
La sensación de pesar aún no se iba de su pecho, ya que por más que Kazuyoshi hubiera mantenido la mirada baja y susurrado un "estoy bien" no fue suficiente para convencer a Ririka, sin embargo tampoco podía culparle y exigirle que le dijera como se sentía al respecto, era demasiado información por analizar y aún faltaba, ya que su hermano mayor había decidido ir a la casa de los Tokito para también acceder a la información dejado por su padre
"Solo espero no se sobreesfuerce"
Ahora su destino era diferente, ya que a diferencia de su hermano, ella se dirigiría a la residencia de los Hoshi, pues necesitaba comprobar algo o no podría quedarse tranquila. Tōjuro, quien iba a su lado tomó su mano con cariño en un claro gesto de que estaba allí para apoyarle, por lo que la joven solo pudo sonreírle de vuelta y dejar reposar su cabeza en su hombro. No sabía con que clase de ambiente se toparía
Ririka deseó haberse tragado sus palabras, ya que el ambiente era mucho peor de lo que imaginaba, el padre de Rikuto estaba encerrado en su despacho, pero sus gritos se escuchaban por todo el salón. Un sirviente se vio obligado a agachar la cabeza completamente apenado, sin embargo les guió sin problemas a la habitación de Rikuto, quien también había decidido encerrarse en su pieza
Al llegar pudieron ver varios platos en el suelo, algunos a medio probar y otros totalmente intactos, mientras para sorpresa de la joven, la madre de Rikuto estaba de pie en el pasillo mientras dejaba reposar su frente y mano en la fina puerta de madera. Ella no podía decir con certeza como fue exactamente la relación entre sus padres e hijos, por lo que era algo que únicamente le correspondía al ojiazul
— ¡Ririka-sama! —exclamó la mujer al verla mientras se dejaba caer de rodillas al suelo— ¡¡le ruego por su perdón!! ¡¡Nosotros no sabíamos nada de esto, mi pobre niño-!!
— Señora, no es necesario que se disculpe —negó Ririka acuclillándose a su altura para ayudarle a levantarse. En su rostro pálido y demacrado se arremolinaban las lágrimas, la joven no podía dudar de que estuviera sufriendo
— ¡¡Incluso si ese hombre actuó contra mi hijo, no culpo de esto a Rikuto!! Yo sé mejor que nadie que cuando perdimos a nuestro primogénito, Rikuto adoraba a su hermano, pero nosotros... mi esposo...
— Eligieron a su heredero —respondió la peliverde al conocer esa parte de la historia
"No puedo culparles, todo esto es debido a los Yamamotoyama"
— Señora Hoshi, yo tampoco creo que Rikuto haya tenido que ver con la muerte de su hijo mayor. Hoy no he venido a exigir una disculpo, sino que deseo hablar con él una última vez
— ¡Oh, señorita! —suspiró la mujer visiblemente aliviada— ¡claro, por supuesto!
Luego de obtener el debido permiso, Ririka se quedó de pie ante la gran puerta de roble y una parte de ella tuvo miedo, ya que no era como si pudiera borrar de golpe todas las cosas que Rikuto había hecho, pero si algo siempre estuvo presente es que ella siempre tuvo como una pequeña espina que le hacía plantearse y dudar de la persona que le había atacado y encarcelado. Por otro lado estaba el Rikuto pequeño e inocente que solo deseaba ser amado y sentir que su existencia no era inútil
Luego de tocar la puerta dos veces junto a una pausa y volver a hacerlo tres veces, la peliverde abrió la puerta y entró seguida de Tōjuro, aquello era la forma en que ambos anunciaban la presencia del otro cuando eran niños y Ririka jamás imaginó que un día luego de la primera tradición volvería a usarlo. El interior era un desastre y las cortinas habían sido completamente corridas, por lo que la luz era escasa que la joven varias veces llegó a trastrabillar
Por suerte Tōjuro había sido más rápido y había logrado salvarle en cada ocasión, hasta que finalmente se decidieron por abrir las cortinas y dejar que la luz entrara por completo, siendo entonces que la peliverde enfocó su mirada en su novio, quien parecía mirar a alguien o algo en la habitación que le había causado una profunda impresión. Ririka siguió su mirada y pronto vio como a los pies de la cama residía una persona envuelta en sabanas
Se trataba de Rikuto que mantenía la mirada fija en el suelo y solo cuando Ririka estuvo a menos de dos metros de él fue que alzó su azulada mirada para observarla. Una sensación de completa lastima y sorpresa se instaló en la joven, ya que al igual que su madre también lucia cansado y demacrado, las ojeras bajo sus ojos indicaban que no había dormido casi nada y su aspecto tan descuidado que ni siquiera había tomado una ducha
— Ririka... —susurró con la voz rota— ¡p...perdón, perdóname...! ¡te juró que jamás deseé hacerte esas cosas...! ¡¡pero lo hice!!
"Ellas tenían razón"
El tono de voz que había empleado, la mirada llena de dolor y vergüenza como si le doliera mirarla e incluso sus gestos, Ririka sintió como si viera al viejo Rikuto y tuvo que respirar profundo para no ablandar su corazón y dudar sobre su decisión. Sin importar como sucedieron las cosas o si hubiera sido manipulado las cosas estaban hechas y ella no podía conservar personas así en su vida
— Fue el destino que le forzaron a cumplir, el hilo que cortaste es la viva prueba de ello —le escuchó decir a Nadora con una mirada triste— pobre, solo ha sido una marioneta durante toda su vida
— Él es como aquel muñeco de madera, la diferencia es que su propósito era ser reconocido y amado
— Entonces vino la bruja y manipuló aquel frágil corazón a su conveniencia —acotó Flanna soltando un suspiro— los hilos no deberían ser manipulados a la ligera, ya que el corazón de ese niño no podrá recuperarse y la ley del karma vendrá para quitarle lo más preciado, es una lástima
"Una lástima"
Todos decían lo mismo y ahora al verle en tal estado no podía evitar sentir un poco de pesar, ya que muy probablemente los sentimientos de pequeño Rikuto fueron puros y sinceros, pero alguien aprovechó esa debilidad para teñirlos de sentimientos negativos como el enojo, resentimiento, envidia, y mucho más que solo transformaron aquella amistad en un supuesto "amor" enfermizo y posesivo en donde ambos habían sido heridos
— Yo también me lo pregunto... ¿por qué hice lo que hice? —le escuchó decir en un tono de evidente burla hacia si —la basura es basura sin importar como intentes clasificarla, por eso es estúpido que yo ruegue por tu perdón, pero solo puedo decir... que yo jamás deseé hacer todo eso, era como si juicio hubiera sido nublado y puesto bajo varias vendas, no podía hacer nada... el constante sentimiento de que debía odiaba y destruirte estaba presente, solo que no sabía ¿por qué debía hacerlo?
"¿Por qué?"
Esa era solo una pequeña pregunta a todas las incógnitas que la cabeza de los Yamamotoyama había dejado atrás con cada persona herida y arruinada, sin embargo esto solo se había ido transformando en una gran bola de nieve que parecía querer arrasar con todo y lamentablemente ella no la detendría, ya que ante tal daño un precio debía ser pagado
— ¡Mi señor! —exclamó el mismo sirviente de antes entrando en la habitación nervioso— ¡¡es terrible!!
— ¿Qué sucedió? —inquirió Ririka al ver que Rikuto no reflejaba ningún interés el querer saberlo
— El señor mayordomo... —soltó en un hilo de voz— ¡¡ha cometido suicidio!! —añadió con evidente pesar
Los ojos verdes denotaron sorpresa al igual que Tōjuro y pronto se sintió como si tono el ambiente se hubiera tornado frío y ya los rayos de luz no tuvieron ningún tipo de efecto en la gran habitación, sin embargo cuando Ririka volteó en dirección a Rikuto, pudo ver que se había puesto de pie y por primera vez en muchos años vio lágrimas reales y sinceras recorrer sus mejillas antes de que finalmente perdiera la consciente y cayera con un movimiento sordo sobre la fina baldosa
"Vendrá para quitarle lo más preciado"
¡Hola a todas y todos! Finalmente luego de una ausencia de casi dos semanas tenemos nuevo capítulo y el motivo de mi ausencia fue debido a que estaba saturada las últimas dos semanas para cerrar el mes, prácticamente no tenía tiempo de nada y terminaba casi a las diez de la noche, por lo que caía rendida y no tocaba para nada el borrador. Escribir así siento que no sería justo para ustedes porque sería como leer un texto vacío de emociones, aburrido y simple, por eso no actualicé e intenté mantenerme un poco activa en Instagram, pero finalmente tengo un mes libre y podré retomar las actualizaciones, aunque claro ya me tome unos días para descansar de todo y regresar con mucha energía a terminar esta loca historia, agárrense porque se vienen muchas cosas y tengo una que otra sorpresa para ustedes, así que manténganse atentas (os) y muchas gracias por todo su apoyo tanto aquí como en Instagram, todas ustedes son mis soles y motivo de seguir escribiendo con todo el corazón. A partir de este lunes las actualizaciones retomaran su ritmo normal y aprovecharé para presentarles a alguien que llegó a mi vida y ahora es mi compañerita en mi días tanto felices como difíciles. Un gran beso y abrazo para todas y nos vemos en el siguiente! -3-
Att: Andysakurai15
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top