Capítulo 42 Una probada de Miel
Capítulo dedicado a: anguieQ
Sus labios eran pequeños y suaves, sin embargo parecían encajar perfectamente con los suyos, la dulzura del melón dibujó una sonrisa en su rostro al saber por fin a que sabían los labios de su amada. Fue un beso corto y sincero y aunque creyó que la pena del momento le ganaría, la verdad era que Ririka lucia tan roja como un tomate y sus verdes ojos brillaban más de lo normal
"¿Acaso me habré pasado?"
Tōjuro negó para sus adentros mientras se permitía tocar su rostro y volver a acortar la distancia para dejar un beso rápido sobre los labios de ella, la expresión de sorpresa y pena que había en el rostro de la peliverde le fascinaba e incitaba a querer molestarle más, pero por más que quisiera seguirle besando debían tomarlo con calma o eso es lo que quería intentar
— Ririka, yo...
— ¿Q...Qué dijiste antes? —le cuestionó de repente sorprendiéndole
— ¿Umu? —en un comienzo no comprendió su duda, sin embargo ver aquel verde esmeralda expectante y casi al borde de las lágrimas le hizo ver a que se refería
— El como te dirigiste a mi...
"Me adelanté..."
Un corto suspiro escapó de los labios del rubio antes de tomar los hombros femeninos para acercarla hacia él y brindarle una cálida sonrisa. Si dijera que estaba preparado para este momento estaría mintiendo, pues los nervios se estaban haciendo presentes, sin embargo no podía dudar, deseaba estar con ella
— ¡Ruri, eso dije! —respondió sobre sus labios— supongo que tardé en volver ¿no crees? Pero de todas formas volví a encontrarme con mi primera amiga en aquellas vacaciones de hace cinco años
Ririka se quedó en silencio mientras las lágrimas recorrían sus mejillas y sus manos cubrían su boca debido a la sorpresa, en su momento creyó que había escuchado mal, sin embargo la mirada que él portaba en ese instante le llevó a sentir una oleada de nostalgia y sacudió con fuerza su corazón
— ¿Acaso tu...?
— Recuerdo todo, recuerdo que yo ya te conocía hace cinco años atrás —completó Tōjuro mientras la envolvía en sus brazos con cariño y dejaba reposar su mentón en su cabeza, aspirando su aroma— fue inesperado, pero estoy feliz de que antes e incluso ahora me gustas
— ¿Estás seguro? —le cuestionó entre lágrimas— no fui a verte y desaparecí de tu vida, fue como si nunca nos hubiéramos conocido. Soy cruel y egoísta, pero aún así ¿me quieres?
— No eres cruel ni egoísta —negó el joven tomando su rostro entre sus manos— estoy seguro de que debes haber tenido una buena razón para no ir a verme y algo me dice que eso es porque querías protegerme, me dejaste por mi propio bienestar ¿cómo puede ser eso egoísta?
— ¿No me odias por ello? Por mi culpa, fuiste lastimado por una persona en quien confiaba tanto —Ririka no podía solo dejar la culpa que había estado cargando durante esos cinco años
— ¡Me gustas! ¡Quiero que seas mi novia, mi chica a la cual pueda dedicarle todas mis victorias! —soltó Tōjuro logrando sonrojarla— tu jamás hubieras deseado herirme, no podías saberlo Ririka
— También me gustas, aunque no sea digna —le devolvió la peliverde secándose sus lágrimas— ¡te prometo compensarte por esos cinco años de ausencia!
— Puedes comenzar por un beso —propuso Tōjuro en broma, sin embargo Ririka no notó esto, por lo que se puso de puntas para dejar un corto beso en sus labios
Fue rápido, pero ella aún podía sentir su calidez en sus labios y si antes él disfrutaba en apenarla, ahora Tōjuro la observaba sorprendido y rojo hasta las orejas. Ririka solo le brindó una sonrisa mientras alzaba su mano y hacia el signo de paz, era su victoria en este juego de besos
— Entonces ¡¿cuál es tu respuesta?! —le cuestionó el joven tratando de cambiar el tema y controlar su agitado corazón— ¡¿Puedes aceptar ser mi novia?!
Los ojos verdes le observaron fijamente y en ellos había una alegría que poco a poco fue sustituida por una expresión de inseguridad, era como si quisiera decir algo, pero no estaba segura de que palabras emplear para responder a su pregunta. Tōjuro volvió a sentirse muy nervioso y más con la idea de que pudiera ser rechazado
— Tōjuro —le llamó la joven— voy a darte una respuesta, pero antes... creo que es necesario que sepas más sobre mi y la familia a la que pertenezco, los Yamamotoyama
La expresión en su rostro era seria y ambos coincidieron en que debían dejar la torre para poder tener más privacidad al hablar, además era momento de que volvieran a casa. Tōjuro guardo silencio en todo el camino hasta que comenzaron a caminar por las iluminadas calles de Tokio. Podía ver como Ririka apretaba sus labios, quizás nerviosa por lo que fuera decir, así que acercó su mano hacia la de ella para entrelazarla en una clara señal de apoyo
— Desde pequeña mis padres me dijeron que heredaría la compañía junto a Kazu-nii, que juntos sacaríamos adelante el negocio familiar —habló la peliverde con la mirada fija en el suelo— yo aún no entendía el gran peso que llevaba mi apellido, que significaba ser una Yamamotoyama, ya que mamá deseaba que tuviéramos una infancia normal. Pasó el tiempo y mi madre comenzó a enfermar, su cuerpo se volvió débil
Si cerraba sus ojos aún podía visualizar ante si aquella habitación blanca y su madre postrada en aquella cama volviéndose más y más delgada con el pasar de los días, sin embargo siempre tenía una sonrisa en su rostro y un abrazo que darle al partir. Su padre no lo decía, pero estaba asustado e iba cada día a quedarse con ella y sostener su mano hasta que ambos cayeran dormidos, no había duda en que él la amaba
— Nadie de la familia fue a ver a mi mamá durante el tiempo que estuvo en el hospital hasta su muerte, desde el comienzo no le aceptaron y le cerraron sus puertas. Ni siquiera se esforzaron en conocerla, sino que le juzgaron duramente y aún así nunca se quejó ni lloró por ello...
— ¿Por qué le profesaban tanto odio? Yo... cuando veo las fotos de tu madre, siento paz. Es como si ella hubiera sido un hada, es una suave sensación —confesó Tōjuro observando con preocupación a la peliverde
— No tengo claro el motivo, pero todo apunta al hecho de que ella era una modelo, una extranjera que desconocía nuestras costumbres y sobre todo no tenía un legado importante. Solo por eso mi madre no era digna a los ojos de la familia, sin embargo a mi padre que era la actual cabeza de la familia no le importó nada de eso y se casó con ella
— ¡Tu padre debió ser también un hombre sabio, pudo ver más allá de todo estatus o riqueza y lo que vio fue a tu madre y su buen corazón!
— Yo también creo lo mismo y en parte tanto Kazu-nii como yo crecimos deseando eso, que alguien nos viera por quienes somos y no por lo que poseemos, sin embargo eso se volvió difícil para él luego de dos años —negó Ririka soltando un suspiro— mi madre falleció y mi padre aunque no lo demostraba estaba destruido, si iba al baño por la noche podía escuchar sus sollozos provenir de su habitación, pero él también puso una sonrisa en su rostro y nos cuidó con todo el cariño que pudo, éramos su vida y prioridad
De nuevo los recuerdos del pasado se agolpaban en su mente y en ellos podía ver a su padre, escuchar su risa, percibir su mano cálida en su cabeza. Su progenitor fue un hombre humilde y dispuesto a ayudar a otros, él siempre decía que si querías tener un aliado debías conocer su corazón porque antes que jefe, ambos son seres humanos con los mismos derechos, el dinero o las posiciones no son nada ni en la muerte
— Aún así pasó lo inevitable y en los últimos meses mi padre comenzó a trabajar más y recibir informes, no dormía bien y cada cierto tiempo podías encontrarlo observando el álbum de fotos de mamá. Yo era pequeña y no entendía que mi papá estaba siendo consumido por la tristeza y el dolor de la perdida hasta que una noche se lo llevó para siempre, fue extraño porque esa noche nos tomó entre sus brazos y nos abrazó como si se estuviera despidiendo, podía ver dolor en sus ojos...
A este punto la voz de Ririka se quebró y sin darse cuenta una gota de agua cayó sobre el suelo, pero no era porque fuera a llover, sino que sus lágrimas nuevamente se arremolinaban en sus ojos ¿por qué su padre también tuvo que irse? ¿Acaso aquel abrazo significó algo? ¿El dolor reflejado en sus ojos que era? ¿Era consciente de que iba a dejarlos? La joven sabía que solo eran preguntas tontas
— A solo un día de la muerte de papá, mi hermano fue declarado como el heredero de la familia y lo separaron de mi lado. Estaba tan asustada de quedarme sola, de que Tamaki también fuera a dejarme en esa villa oscura, pero Kazu-nii siempre buscaba visitarme y jugar conmigo, quería lograr darme un lugar entre los Yamamotoyama
— ¿Darte un lugar?
— Cuando confirmaron que yo no heredaría la compañía, perdí todo derecho y posición —le explicó la peliverde— era solo un estorbo y nadie estaba interesado en la pequeña que había heredado la apariencia de su madre, por eso recibir miradas frías, odio y tratos bruscos se convirtió en una rutina. Aún si tenía voz era inútil porque nadie me ayudaría
— ¡Eso es cruel! —exclamó Tōjuro captando su atención— ¡Si yo...! —la ira era clara en su rostro, escuchar aquellas cosas le herían, pero más debieron calar en la joven a su lado— ¡yo siempre te hubiera protegido!
— Gracias Tōjuro —susurró Ririka sonriéndole a través de las lágrimas— de todos formas no estuve sola, tuve a Kazu-nii durante el tiempo que le fue posible y Tamaki también cuidó de mi hasta la actualidad, dentro de los Yamamotoyama ellos son mi única familia
— ¡Umu y lo agradezco! ¡Sin ellos yo no hubiera podido conocerte! —negó el rubio serio— pero ¿eso fue lo único que tu familia te hizo? —inquirió Tōjuro al recordar como hace tiempo la joven había reaccionado con miedo en su presencia, no quería pensar en esa posibilidad porque nunca los perdonaría
— Yo... —no podía decirlo, hablarle a Tōjuro sobre sus castigos implicaría que él se enterara de las desagradables cicatrices que ocultaba en su espalda y no deseaba que las viera— a veces me encerraban en mi villa sin poder salir y mis maestras eran estrictas...
— ¿No me estás mintiendo?
— Si te estoy contando todo esto ¿crees que lo haría? —le devolvió nerviosa
"Perdón Tōjuro, no puedes saberlo"
— Esta bien, creeré en tus palabras —se limitó en responder el joven no muy seguro, pero no podía forzarla
— En su momento Rikuto fue un amigo al cual mi abuela le permitió acercarse, pero como ya debes saber las cosas no fueron muy bien —la peliverde no deseaba profundizar en el mencionado y su acompañante pareció comprenderlo— mi castigo fue permanecer cinco años dentro de la villa y sin tener mucho contacto con el exterior, tal vez por eso no pude verte en mucho tiempo
— En parte me siento culpable por no recordarte, pero siempre tuve esa confusión de porque desperté en un hospital y como mis padres evitaban el tema cada vez que preguntaba, solo que ellos no sabían que el verdadero benefactor era el heredero de los Yamamotoyama...
— Así como antes dijiste que no era mi culpa, también te digo lo mismo ahora. Ninguno de nosotros deseó que eso pasara, pero ya debes saber que mi familia no es fácil y yo no soy bienvenida en ese lugar —siguió hablando Ririka mientras tomaba su mano hasta dejarla en su mejilla— aún así ¿deseas formar una relación conmigo? Es probable que solo nosotros dos sepamos sobre ello
Tōjuro no tenía duda, pero le dolía percibir que la mano de ella temblaba levemente, sabía de sobra que Ririka temía que fuera a dejarla atrás, sin embargo no decía nada y esperaba su respuesta. A partir de ahora se aseguraría de abrazarla mucho y decirle cuanto le quería porque para él ella valía todo su mundo
"¡Te quiero Ririka, de eso no debes dudar!"
— ¡Ya lo pregunté antes, pero no me molestaría hacerlo cien veces más! —soltó el joven tomándole de la cintura para acercarle— ¿quieres ser mi novia, Ruri?
— Si, quiero serlo —respondió la peliverde con una sonrisa, ya que le hacía feliz que le volviera a llamar así— será todo un honor, Rengoku Tōjuro
— ¡El honor es mío! —rió Tōjuro antes de besar el dorso de su mano y finalmente sus labios ante la sorpresa de ella
Ririka no se quejó ni opuso resistencia, sino que se dejó llevar y le siguió el beso aunque era algo torpes y en parte eso les causaba gracia. No llevaban ni cinco minutos de enamorados y se sentía como si hubieran estado juntos por mucho tiempo, la primera vez que se besaron fue un momento especial, pero también con algo de pena, sin embargo ahora es como si fuera algo común unir sus labios
No lo veían de una mala manera, todo lo contrario, solo que ¿cómo explicar esa extraña conexión y temblor que sentían en sus cuerpos al conectar sus miradas? Ella amaba perderse en aquel dorado con detalles en rojo y él en aquellas gemas esmeralda que ahora le miraban con amor, tal y como lo había deseado antes
— Soy feliz —susurró Tōjuro sobre sus labios, sintiendo como el aliento de ella chocaba contra los suyos
— ¿Por qué?
— Porque incluso en el pasado y ahora siempre me atrajo tu forma de ser y en especial el hermoso esmeralda de tus ojos ¿cómo lo haces? —le cuestionó— ¡eres muy peligrosa para mi corazón!
— ¡Esa es mi frase, sol andante! —soltó la peliverde antes de taparse la boca rápidamente
— ¿Sol andante? ¿así es como me ves? —la sonrisa que invadía el rostro del chico era de inmensa alegría y orgullo
— No dije nada, fue mi alter ego que se cruzó con otra dimensión —se excusó Ririka antes de echar a correr para ser perseguida por su ahora novio
Ya era hora de volver a casa, pero al menos lo harían juntos. Esa noche no había sido tan mala, sino todo lo contrario, ya que su relación fue el paso a que muchos sucesos buenos como malos comenzaran a cruzarse, pues nada es fácil y mucho menos lo es alcanzar la felicidad, eso él lo sabía mejor que nadie
— Nada cambiará mientras no vea ese testamento —masculló Kazuyoshi lanzando un suspiro y aflojando su corbata, estaba cansado— necesito que Ririka tenga una mayor estabilidad, es la hija del anterior heredero de los Yamamotoyama
— Lo sé hombre, pero debes calmarte ¿si? —Tenma estaba ya un poco cansado de su misma cantaleta, pues él deseaba pasar un buen rato— agradece que la reunión terminó y fue perfecta, además la abuela pasa no dijo nada
— ¡¿Por qué no puede darme de una vez por todas ese testamento?!
— No me lo preguntes a mi, sino a la pasa —suspiró el peliblanco llamando a toda su paciencia
— ¿A dónde vamos?
— A mi apartamento
— ...¿Piensas secuestrarme o algo? —inquirió Kazuyoshi con una expresión de desconfianza mientras fingía abrazarse a si mismo
— No digas algo tan horroroso, ningún secuestrador te soportaría más de una hora
— Creo que el secuestrador saldría estafado o perdiendo conmigo —rió el ojiverde observando las luces de los postes perderse por el retrovisor
— Hasta yo me compadecería de ese secuestrador
— Idiota
— Es mejor que me digas idiota a babosa —negó Tenma lanzándole una mirada asesinada— yo no tiro dardos de amor, sino extravagancia
— Oye extravagancia, ya llegamos —le cortó Kazuyoshi chasqueando la lengua
Uzui guardó silencio y se centró en ir ingresar al parqueadero para luego entrar al complejo de apartamentos, el suyo quedaba en un penthouse gracias a que Kazuyoshi se lo había apartado. Conforme se iban acercando el ojiverde le pareció escuchar música y aquello se le hizo extraño, sin embargo su compañero lucia una gran sonrisa en su rostro
— ¿Dejaste encendida la música antes de venir?
— ¿Eso crees? —inquirió Tenma colocando la tarjeta para que la puerta se abriera y Kazuyoshi se viera rodeado de música y luces como personas
"¡¿Qué rayos?!"
— ¿Acaso tu casa es un antro o algo por el estilo? —le cuestionó en voz alta para que le escuchara
— ¡Es una pequeña reunión para que te relajes!
¿Pequeña? Kazuyoshi sabía que esa "fiesta" era todo menos pequeña ¿a dónde rayos había ido a parar? Estaba cansado y una reunión llena de luces, cuerpos pegados moviéndose como los muertos en el video musical de Michael Jackson y alcohol no era lo suyo, por lo que intentó escaparse, pero la puerta ya estaba cerrada
"¡Uzui Tenma, voy a matarte!"
Al final Kazuyoshi tuvo que posponer sus "planes" de asesinar a su amigo babosa, ya que la gente comenzó a gritarle cuando apagó la música y el muy desgraciado se las había ingeniado para quitarle su billetera y celular, así que no se diferenciaba de un mendigo en esos instantes. Sin desearlo, el heredero de la familia estaba atrapado en una fiesta a altas horas de la noche
Le había mentido y realmente si había sido su intención secuestrarle, había mucha gente que no conocía y sombras que se pegaban unas a otras dejándole algo incómodo al respecto, sin embargo era consciente que era de lo más común en estos días. No tuvo de otras que salir al gran balcón para tomar aire fresco y pensar en la posibilidad de echarle sal encima a Tenma, con suerte y se derretiría
— Esto es aburrido... —habló para si mismo soltando un suspiro
— Probablemente la música no es muy buena o el ambiente no es el adecuado —comentó una voz femenina a su espalda
— ...Disculpa, no noté que había alguien aquí —soltó Kazuyoshi evidentemente incómodo, pues detrás de él y en unas sillas demasiado extravagantes para su gusto residía una chica sola y con un cuenco de galletas en mano
— No hay problema, si vine aquí es porque quería ser invisible, así que cumplí mi objetivo ¿no? —rió suavemente realzando el color de sus ojos que iba de un miel oscuro, casi como el chocolate
— Hum, entonces no debo ser el único aburrido de este ambiente
— Una cosa es decir que es aburrido y otra que por mas que te guste no encajes en él, tal vez socializar no es lo mío
— Si socializar no es lo tuyo, entonces ¿qué haces aquí? ¿No crees que pierdes el tiempo?
— Las mismas preguntas aplicarían para ti ¿no crees? —la joven no dudaba en responderle y lucia muy segura de lo que decía
"Es una chica lista, eso es seguro"
— El anfitrión de esta fiesta me tiene en calidad de secuestro, sin billetera y celular
— Genial, estamos igual
— ¿Lo tuyo no sería acoso sexual?
— No, Tenma intenta ayudarme a salir de mi burbuja, ya que pronto entraré a trabajar
— ¿Trabajar? ¿Estás en la universidad?
— Primer año y quiero sentirme útil por mi misma, no puedo depender de otros o les pondré en aprietos
— Puff —rió Kazuyoshi sorprendiéndole— perdón, me recordaste a mi hermana menor
— ¿También quiere ser una chica independiente?
— Desde pequeña lo ha sido, lo malo es que quiere cargar con todo —negó mientras se dejaba caer en una de las sillas frente a la joven— aunque...
"Ella parece confiar en ese búho"
La expresión del ojiverde cambió enseguida a una de molestia, ya que para él no había pasado para nada desapercibido cuando se llevó a su guisante y sin siquiera consultarle, sabía que esa cara inocente no le haría daño a Ririka, pero ¿qué pasaba si se le ocurría la brillante idea de decirle sus sentimientos? Primero lo tiraba al río con una piedra
— Tienes una cara digna de fotografiar, pareces el meme de Tom enojado
— Creí que era un cumplido, no un motivo de burla para las masas
— Bueno, las risas son buenas, así que piensa que toda una masa de personas al ver tu cara como meme tendrán beneficios con su bienestar psicológico
— Entonces tendré que cobrar por cada sonrisa
— Pues estoy segura de que las chicas te tiraran billetes, pero ¿por qué estás molesto?
— Nada interesante
— Hum, antes estabas hablando de tu hermana menor y ya que tu cara se descompuso de repente debe ser... a causa de un chico ¿no es así?
"Odio la intuición de las mujeres"
— Tu silencio me lo confirma, pero es normal tener sentimientos por alguien
— Es muy joven para ello, no conoce el mundo ni los juegos de los hombres
— Si el interés de tu hermana fuera malo, ya hubieras intervenido y no tendrías esa expresión en tu rostro —comentó la joven a lo que Kazuyoshi guardó silencio— puedo decir que tu tampoco debes tener pareja y ya que no tienes mucho tacto con una joven, asumo que tampoco sabes como coquetear con ellas
— No estoy interesado en las relaciones
— Eso es lo de menos, pero en tal caso deberías confiar más en tu hermana menor, tiene que experimentar para conocer el mundo y a su vez comprender los juegos mentales de los hombres —le aconsejó mientras se levantaba
— No quiero que salga herida, ya ha tenido suficiente
— Eso es inevitable, una mujer tiene que saber confiar en su juicio y elegir. Si ella siendo joven es una chica que busca ser independiente, ten por seguro que hará una buena elección, pues es consciente que no se pueden bajar la luna ni las estrellas —añadió dirigiéndose hacia el interior
— ¡Espera...! —soltó girándose abruptamente— soy Kazuyoshi, ¿cuál es tu nombre?
— Creo que es una presentación tardía —rió la joven con el cuenco vacío en mano— soy Mitsuka, se lee con el Kanji de Miel y flor, un gusto Kazuyoshi-san
Sin más que decir aquella misteriosa joven que respondía al nombre de Mitsuka abandonó el lugar dejando solo en el balcón al ojiverde, tal parece que sería una noche larga viendo el bullicio que había en el interior del apartamento, pero la presencia de esa chica no estuvo del todo mal, le sirvió para despejarse y alejar sus ideas de asesinar a Tenma con sal
El clima era perfecto, se podía sentir ya el ligero calor del verano, sin embargo en las mañanas aún quedaba rastros de la fresca brisa que había dejado como despedida la primavera. Tōjuro le había citado temprano al día siguiente para ir juntos a caminar por el parque cercano en donde crecían altos arboles y había un arroyo cerca en donde los niños se acercaban curiosos a ver los pequeños peces ser llevados por la corriente
Ririka descubrió que al lado de su novio el tiempo pasaba rápido y antes de darse cuenta habían comido helado, jugado en el arrollo para refrescar sus pies. Tōjuro se había ofrecido a ayudar al grupo de pequeños a cruzar al otro lado para que continuaran su viaje en búsqueda de insectos, en resumen quedaron encantados con el rubio
"Será un buen padre a futuro"
Ante ese pensamiento rápidamente las mejillas de la peliverde se tornaron rojas por sus pensamientos, no era que deseara que Tōjuro fuera padre, sino que era inevitable que pensara en ello al verlo rodeado de niños, al menos es de lo que ella quería convencerse. Al ser ya las cuatro de la tarde y haber caminado casi todo el día estaban exhaustos
El sol estaba algo fuerte, así que la sombra de un gran árbol les pareció tentadora para poder tomar un respiro y volver a casa, había sido casi como un día de campo y en parte el rubio se sentía algo apenado con su novia, pues se había dejado llevar por lo niños y así estuvo casi tres horas jugando con ellos mientras Ririka les veía a la distancia
"Soy un tonto, a este paso va a dejarme"
Tōjuro no sabía que más bien había ganado más punto con la peliverde, quien miraba encantada las fotos de su celular. No comprendía como es que su novio salía perfecto en todas las fotos, por lo que no podía decidirse en cual utilizar como fondo de pantalla, aquello le sacó un suspiro que captó la atención del contrario
— ¿Qué estás mirando? —le cuestionó bastante curioso intentando mirar la pantalla a lo que Ririka la acercó rápidamente a su pecho
— ¡N...No es nada! —se apresuró en responder la joven nerviosa
— ¿En serio? —inquirió con una sonrisa de lado mientras se acercaba a ella
— ¡De verdad!
— Entonces, quiero ver
— Hum, no... —negó en voz baja antes de echar a correr y ser perseguida por Tōjuro
— ¡Si te atrapo vas a dejarme ver!
— ¡Entonces menos voy a dejarme atrapar!
— ¡¡Soy muy rápido!! —soltó el rubio al tenerla casi atrapada entre sus brazos
— ¡Y yo muy escurridiza! —le devolvió la peliverde deslizándose por debajo y volviendo a escapar
— ¡No voy a rendirme, Ruri! —exclamó para su sorpresa logrando confundirla, aún no se acostumbraba a volver a ser llamada por ese apodo— ¡¡te atrapé!! —festejó al tenerla entre sus brazos para luego perder el equilibrio y rodar sobre la verde hierba entre risas
— Puff —Ririka no pudo evitar romper en risas al ver como el cabello de Tōjuro estaba lleno de hojas, el se alzó divertido sobre ella para poder verla— me parece que el césped te ha despeinado ¿no crees?
— No soy el único al menos —le devolvió mientras le quitaba una hoja de su cabello verde— ahora que lo pienso las hojas me recuerdan a ti por su verde, solo que tu eres una hojita hermosa
— ¿Me está coqueteando, Rengoku Tōjuro? —le cuestionó la joven mientras cruzaba sus brazos por el cuello de su novio— usar las hojas no es justo
— ¡Puedo darle cumplidos con mi hojita, así que está bien! —declaró sobre sus labios antes de besarla con ternura
Amaba esos momentos con ella en los que sentía que Ririka era ella misma, libre y única, le gustaba su tono de broma, cada palabra que dijera era encantadora y más aquellos labios rosados y suaves con sabor a melón. El tiempo pasó y ambos se echaron en la hierba aunque Tōjuro estaba al revés
La ojiverde pudo verle rodar divertido hasta que su rostro quedó a la altura del suyo, muy similar a la escena de Spiderman en la que Peter besa a Mary Jane bajo la lluvia. El dorado de sus ojos le miraba con amor mientras acercaba su mano para para acariciar los mechones sueltos de su cabello, haciendo que ella también imitara su acción
Le quería tanto que no deseaba que esos momentos terminaran, Tōjuro llenaba su corazón de una manera tan cálida y única que cuando estaba a su lado no podía pensar en nada más que en su presente. Podía ver su sonrisa digna de un sol andante, por lo que ella no podía evitar sonreír también completamente enamorada
— Te quiero, Tōjuro —susurró aunque estaba muy segura de que iba a oírle— eres mi sol andante
— ¡Yo te quiero aún más, Ruri! —le devolvió lleno de energía— eres mi flama, mi esmeralda
"Por favor, que este momento no termine"
El estar juntos era tan dulce como una probada de miel, incluso el atardecer tenía un color similar, pronto tendrían que volver, pero al menos habían quedado en visitar el restaurante de Iguro y Mitsuri, aunque estaban muy seguros de que ellos notarían que había algo extraño entre ellos, pues habían llegado al acuerdo de que su noviazgo debía ser secreto
— Pero cuando ocultas la verdad, no importa cuando la escondas... —susurró una mujer de largos cabellos rojos al ver como la luz del sol se filtraba por la puerta de su tienda— siempre saldrá a la luz tarde o temprano
¡Hola a todos! Vengo a despedirme porque esta escritora ha muerto por una gran cantidad de azúcar, así que no habrán más capítulos de FDP... ¡No mentira, hierba mala nunca muere! Muajajaja. Chale los chistes no son lo mío, pero ¿qué les pareció el capítulo de hoy? Déjenme decirles que la hermosa imagen de hoy ha sido auspiciada por anguieQ ¿verdad que dibuja hermoso? He quedado encantada con su estilo de dibujo y realmente muchísimas gracias por permitirme usarla en el capítulo de hoy linda, ¡así que este capítulo es para ti y espero lo disfrutes! Les comentó que en Instagram compartí un adelanto de lo que será mi próximo fanfic y ¿quién será el protagonista? *redoble de tambores* ¡Con ustedes...! ¡¡Rengoku Senjuro!! Si quieren verlo, ya saben que pueden encontrarme como @andy_sakurai15 y eso es todo mis amores, gracias por leer y nos vemos en el próximo
Att: Andysakurai15
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