¿Por qué los días pasan tan rápido y justo la noche anterior te acuerdas de que tienes un gran problema o pendiente? Ririka no supo que hacer en esos momentos, además de un ir de un lado a otro rogando que se cancelara o cambiaran el sitio. No podía usar un traje de baño, no quería que sus amigos y muchos menos Tōjuro le viera...

"Es horrible, Tōjuro se sorprendería"

Realmente desearía poder usar un traje tan lindo como el de sus amigas, pero su espalda era el problema ¿tendría que usar el traje de la academia? No, igual eso no ocultaría las marcas y de seguro sería anticuado. La noche se le fue pensando en ello y ahora varios suspiros escapaban de ella en el auto de sus amigas

— Riri-chan —susurró Kanae comprendiendo su pesar— no te preocupes, hay chicas que son tímidas y usan una blusa larga para sentirse más cómodas

— Nee-san tiene razón, por eso no te sientas mal por usar una —se unió Shinobu pellizcando sus mejillas— vamos Ririka, dijiste que darías lo mejor por él ¿cierto?

— Si, pero... —la verdad sentía deseos de llorar por no poder usar algo diferente

— ¡Riri-chan se ve muy linda con cualquier cosa que use! —la mayor de las hermanas realmente quería animar a su amiga— estoy segura que de todas formas le encantaras a Tōjuro-kun

— Es claro que le gustará porque Tōjuro es muy amable, nunca diría nada para lastimarme —negó Ririka cabizbaja

— ... —ninguna supo que decir ante eso

— No, si le veo que dice algo tonto y pone una cara rara le lanzaré de un tobogán —declaró Shinobu sin dudarlo

— Ara, ara —rió Kanae— Kazuyoshi-san te estaría eternamente agradecido

Un último suspiro escapó de la peliverde, pues sus amigas tenían razón. No debería apenarse o acomplejarse por lo que use, sin embargo quería sorprender a Tōjuro con algo lindo aunque ¿por qué quería hacerlo? Tal vez porque el día anterior se habían reunido en la casa de Kanae y Shinobu para probarse los trajes

— Si soy sincera —habló Shinobu atrayendo la atención de ambas— me sorprende que no te opusieras a la idea de una piscina cuando no sabes nadar, Ririka

— ¿Ara?

— Oh, rayos... —susurró cubriendo su rostro— tienes toda la razón

— ¿Acaso lo olvidaste?

— Es que en ese momento solo podía pensar en Tōjuro y lo feliz que estaría —confesó apenada

"Y así no reconoce que le gusta"

Shinobu y Kanae no comprendían que era lo que pasaba por la cabeza de su amiga, cuando eran tan claro como el agua que desde ese día en que se reencontraron su corazón se quedó prendado de la energía y positivismo de ese chico. Si había algo bueno dentro de todo es que Tōjuro miraba con amor y anhelo a Ririka, así que rechazada no sería, pero que se diera cuenta si era otro gran rollo

— ¡Oh, llegamos! —exclamó Shinobu al ver por la ventana el parque acuático Toshima-en

Actualmente este lugar es uno de los más famosos de Tokio, ya que tiene gran variedad de piscinas y toboganes e incluso cuenta con una piscina "nocturna", pero claro es para los adultos, así que no será un lugar a donde iremos. Se supone que volveremos todos, sin embargo no les sorprendería si Uzui decidiera quedarse atrás

Según el último mensaje Uzui ya estaba en el lugar junto a los demás, por lo que Ririka antes de bajarse miró sus sandalias por su alguna tira estaba floja. Kanae lucia hermosa con una falda y blusa de tiras junto a unas gafas, Shinobu y la peliverde habían optado por un short y blusa de mangas

Al entrar en el establecimiento la mujer que atendía les dejó pasar enseguida luego de confirmar que eran los invitados del mejor atleta de Japón. El interior era bastante colorido y espacioso, por lo que Ririka no pudo evitar sentir que tenía el aire de un parque de diversiones

"Ririka, esto es un parque acuático"

— ¡Oya, por fin llegaron! —habló una voz masculina a sus espaldas— les estuvimos esperando —añadió con una sonrisa coqueta

— Muchas gracias por invitarnos, Uzui-san —saludó Kanae ejerciendo una reverencia tan refinada que Tenma solo pudo sonreír complacido

— Será muy divertido pasar con todos hoy —se unió Shinobu agarrándose del brazo de su hermana mayor— gracias por esto, Uzui-san

La peliverde no pudo evitar sonreír al ver como su amiga ya estaba marcando territorio con Kanae y en parte le hacia preguntarse que si ella viera como chicas se acercan a su hermano mayor ¿les detendría? Nunca se había visto en una situación similar y Kazuyoshi de por si alejaba a la chicas con su seriedad

"Más bien yo sería su casamentera"

— ¡Hola Ririka! —habló una voz masculina que le hizo congelarse y bajar la mirada

— ¡Ya llegaron! —se unió Toko

— ¡Bienvenidas, hermosas señoritas! —soltó Yoshiteru a su lado sonrojado o ¿emocionado?

— Ahí vas de baboso —negó su hermana

— ¡No soy un baboso!

"Ya hay una babosa en el grupo y es Uzui-san"

— ¿Sucede algo Ririka? —inquirió Tōjuro acercándose a ella

— ¡Ririka-nee! —exclamó Giichi que venía en compañía de Sumihiko y Kanata

— ¡Giichi! —la peliverde aprovechó para ignorar la pregunta y abrazar al menor

— ¡¿Pero cómo?! —soltó la pelimorada ganando la atención de todos— ¿por qué estás aquí?

— Shinobu ¿conoces a Giichi?

— Ara, ara pero si es el pequeño que ayudó a Shinobu —evidenció Kanae con una sonrisa

— ¿Ustedes son amigos? —inquirió Shinobu a Ririka

— Si, lo conocimos hace ya varios meses y ayer le invité

— Realmente eras tu, me alegra volver a verte Shinobu-san

"¿Volver a verte?"

— Desde que te conocí tuve una corazonada, ya que Ririka-nee en alguna ocasión mencionó el nombre de "Shinobu" y ese día de lluvia portaba el mismo uniforme, así que quise comprobarlo hoy —confesó el menor con sus profundos ojos azules brillantes

— A ella le gustan menores —canturreó Uzui divertido antes de ganarse una mirada asesina por parte de la pelimorada

— Bueno, realmente me he sorprendido de verte aquí...

— Entonces si son amigos, me alegra —habló Ririka con una sonrisa

— Si, soy el amigo de la sombrilla

— ¿Sombrilla? —inquirió Toko

— Conocí a Shinobu-san en un día de lluvia y desde allí me he vuelto su amigo de sombrilla —respondió Giichi divertido mientras Shinobu enrojecía

— ¡Kya! ¡Que romántico! —la pelinegra parecía muy contenta

— No, no lo es —negó Shinobu tomando su bolso y marchándose a los vestidores

Kanae y Toko le siguieron enseguida mientras los chicos también tomaban rumbo al suyo, Ririka pensaba hacer lo mismo, sin embargo sintió la dorada mirada de Tōjuro en su espalda como llamándole, pero no deseaba hablar por el momento así que siguió su camino hasta perderse en el vestidor lejos de su amigo

Diez minutos más tarde todas lucían hermosas en sus trajes de baño, específicamente rosado, morado y blanco en cambio ella había optado por uno negro que si bien era de dos piezas se colocó una blusa manga larga del miso color que se amoldó a su delgada figura, Shinobu enseguida le dio su aprobación de que no se veía nada

— ¿Estás segura Riri-chan? —le cuestionó Kanae con disimulo

— Es lo mejor, no quiero preocupar a nadie —negó Ririka con una sonrisa triste

— Bueno Toko-san ni siquiera lo notó —rió Shinobu tratando de alejar la pesada atmósfera y es que su nueva amiga estaba tan distraída subiendo la foto que se había tomado con Tenma en Instagram que ni por enterada de la situación

— Si Toko se entera lo dirá, sé que se preocuparía...

Lo que sea que deseara hacer quedaría en manos de ella misma, pues no eran quien para refutar sobre su decisión, por lo que solo pudieron darle un fuerte abrazo demostrando que estaban para ella antes de abandonar los vestidores. En el exterior ya estaban los chicos esperándoles y mirándoles

— Fiu —silbó Uzui con una gran sonrisa— parece que hoy unas diosas decidieron hacernos compañía

— ¡Se ven muy bien! —les animó Sumihiko mientras Kanata asentía

— ¡Ah, están tan lindos y hasta diría que un poco sexys! —confesó Yoshiteru con su cara completamente roja y Toko tomó aquello como una acción para caminar hacia él, arrastrarle a la pileta cercana y lanzarle

— ¡¡Ey, nee-chan!! ¡¿Por qué lo hiciste?!

— Para que le bajes a tus neuronas

— ¡¿Ah?! ¡Que cruel!

— Yoshiteru-san ¿se encuentra bien? —le cuestionó Ririka alargando su mano hacia él para ayudarle a salir

— ¡Ririka-chan! —sollozó Yoshiteru entre lágrimas

Lo que sucedió a continuación les dejó mudos a todos, pues Tōjuro alargó su mano para tomar la mano de Ririka e incluso su rostro reflejaba cierta sorpresa antes de soltarle y ayudar a salir a Yoshiteru, quien comenzó a soltar algo similar a alguna maldición en voz baja mientras lloraba

— ¡Bueno hoy hemos venido a divertirnos! —habló Tenma quizás intentando disipar el incómodo silencio— pero en especial hemos decidido en reunirnos hoy porque...

"¡Feliz cumpleaños Tōjuro!"

Ni siquiera dejaron que Uzui terminara su discurso antes de que todos gritaran aquello y se acercaran a abrazar y felicitar al cumpleañero, sin embargo Ririka se mantuvo de pie junto a Uzui sin saber que hacer, incluso la acción de su amigo de antes le había dejado confundida. Se sentía insegura e incómoda y justo en un día tan especial

— ¡Vamos a lanzarnos desde los toboganes! —declaró Tōjuro mientras los demás asentían

"Esperen... ¡¿toboganes?!"

— Quizás deberíamos nadar un poco antes de hacerlo ¿no creen? —inquirió Kanata— es preferible calentar un poco antes

— ¡Si, opino igual que Kanata-kun! —Ririka no pudo mostrarse más de acuerdo con aquella idea

Nadie tuvo quejas al respecto e incluso Tōjuro retó a Sumihiko a una carrera para ver quien era más rápido. Las chicas se interesaron en ellos así que decidieron seguirles y nadar en un extremo para poder verles, sin embargo la peliverde solo podía quedarse sentada en los escalones, pero al menos no tenía que preocuparse de nada

Sumihiko demostró ser un buen nadador y sorpresivamente Kanata también, pero no estaba tan interesado en competir sino en pasar con Toko. Shinobu y Kanae habían comprado helado junto a Giichi y disfrutaban de el en la orilla mientras Tōjuro no dejaba de nadar junto a su mejor amigo y en parte verle sonreír así le hizo sonreír inconscientemente más de una vez

"Nunca pensé que un chico nadando..."

— ...Podría ser tan lindo —pensó en voz alta viendo en dirección a ambos. Tōjuro emergió del agua y movió su cabeza de un lado al otro deshaciéndose del agua y por inercia volcó su dorada mirada en ella antes de sonreírle

"¡Me sonrió, no, no!"

Incluso una sonrisa era demasiado para el pobre corazón de Ririka, simplemente no podía entender que había hecho Tōjuro con ella para ponerle tan nerviosa en cuestión de segundos. Un suspiro de cansancio escapó de sus labios mientras bajaba su mirada centrándose en lo claro del agua y el fondo de la piscina

Un escalofrío recorrió su cuerpo cuando vio unos cabellos rubios con mechones rojos debajo del agua, Tōjuro le brindó una sonrisa juguetona antes de tomarle de los pies y jalarle dentro del agua para gran sorpresa de la peliverde que comenzó a moverse desesperadamente al no sentir un suelo firme bajo sus pies y mucho menos aire

Por breves segundos pudo apreciar los dorados ojos de su amigo mirarle con cariño antes de que esa gentil expresión se sustituyera por una de preocupación. Tōjuro al ver que Ririka no reaccionaba se apresuró en sacarla mientras ella inconscientemente se abrazaba con fuerza a su cuerpo como si temiera que fuera a dejarla allí

— Coff coff —tosió la peliverde con su rostro oculto en su cuello

— ¡Perdón, Ririka! —se apresuró en disculparse Rengoku muy apenado— no me imaginé que no sabías nadar

— Coff, está bien... —susurró Ririka sin apartarse de su cuello hasta que notó que se sostenía a él con fuerza— perdón...

— ¡No hay problema! —negó enseguida— es normal ya que te he dado un buen susto

— Creo que he recibido peores —rió la peliverde finalmente mirándole

— ¿Se siente bien el agua? —le cuestionó Tōjuro— noté que no habías abandonado los escalones, pero pensé que era por vernos competir

"¡Dios, me vio!"

— No había abandonado los escalones porque no sé nadar —se limitó en responder Ririka a lo que su amigo rió divertido

"Ósea si, pero también era por verte"

— ¡Umu, lo entiendo! Pero Ririka ¿tienes frío? —le cuestionó

— ¿Frío? ¿Acaso ya no estamos mojados por el agua?

— Por eso lo pregunto —añadió a lo que la joven entendió que se refería a su traje de baño y aquello comenzó a preocuparle

— Hum, me gusta así —respondió— es más cómodo para mi

— ¡Umu! El negro te sienta muy bien —declaró Tōjuro y no mentía en lo que decía, ya que le había parecido encantador como el negro se amoldaba a su piel blanca

— Deberías ir con los demás ¿no crees?

— Si, tienes razón

Tōjuro se encargó de llevarle a la orilla en donde todos estaban reunidos, la duda comenzó a crecer en ellos, así que se acercaron para ver que sucedía y grata su sorpresa de ver como Uzui Tenma había acaparado las miradas de todas las mujeres del parque. Prácticamente estaban haciendo fila para tomarse una foto con él y besar su mejilla

"La babosa ha comenzado a lanzar sus dardos"

La peliverde se reprendió por tener pensamientos así, pero no podía evitarlo. Uzui lucia muy feliz por la atención, sin embargo aquello estaba causando bastante revuelo en el parque, por lo que todos llegaron a la conclusión de que deberían seguir disfrutando sin él o harían que cada juego colapse de tantas chicas

— ¡Ya es hora de los toboganes! —declaró Sumihiko

— ¡Si! —todos se mostraron de acuerdo, excepto Ririka

Cada quien tomó un mapa de lugar para ver a que atracción deseaban ir, Sumihiko y Kanae optaron por una resbaladera y al que solo irían ellos, Shinobu decidió unirse y fue seguida de Giichi. Toko y Kanata tomaron como reto lanzarse desde el tobogán más alto y largo del parque, mismo que Tōjuro también decidió probar

Yoshiteru se congeló con solo poner un pie en el primer escalón dándose por vencido y Ririka hubiera seguido sus pasos de no haber sido por Tōjuro que no soltó su mano y le dio tal mirada dulce que ella aceptó que probablemente moriría al tirarse de semejante tobogán infernal, pero valdría la pena si era con él

— ¡Kya, Kanata es muy alto! —soltó Toko abrazándose de su pareja

— No te preocupes Toko —le tranquilizó el joven— me aseguraré de sostenerte

"Una pareja acaramelada"

Los colores abandonaron el rostro de la peliverde al escuchar el grito que había pegado su amiga y la verdad no sabía si había sido por susto o porque realmente se estaba divirtiendo. Un hombre alto y fortachón se paró a su lado para poner un nuevo flotador para dos personas por donde corría el agua

— La señorita debe ir al frente por ser más liviana y baja —habló dirigiéndose a Tōjuro— usted ira detrás

— ¡Umu, entendido!

El mismo hombre les dedicó una sonrisa mientras sostenía el flotador y Ririka con todo el temor del mundo ponía sus pies en el agua para luego situarse en la primera abertura y sentarse. Enseguida Tōjuro imitó su acción, sin embargo pasó sus piernas por las de ellas y se acercó lo suficiente como para dejar caer su barbilla sobre su suave hombro

— ¿Estás lista, Ririka? —le cuestionó con un tono de voz divertido

"Esta vez no nací lista"

— ¿No me voy a caer?

— ¡Claro que no! —negó Tōjuro— tienes que sujetarte muy fuerte y también me aseguraré de que eso no suceda. Confía en mi

— Bien

Al sonido de un silbato Tōjuro impulsó con cuidado el flotador hasta que Ririka solo sintió como iban cayendo y el agua salpicaba su rostro. Por momentos les rodeaba la oscuridad del túnel y en otros era capaz de apreciar los rayos del sol sobre su piel, la risa de su amigo quien disfrutaba del juego a su espalda

Por alguna razón al estar con él y sentir su cuerpo tan cerca del suyo sintió que estaba segura y que podía divertirse. Tōjuro seguía riendo y gritando por momento, por lo que Ririka se le unió enseguida compartiendo los gritos y risas mientras apreciaban el paisaje que se abría a sus ojos, ya faltaba poco para que llegaran al final

El agua les empapó por completo hasta caer en el circulo que daba vueltas y que se encargaría de dejarles caer en la amplia piscina. Los ojos verdes brillaron divertidos al poder apreciar a pesar de la distancia rodeado de chicas a Uzui y no muy lejos a Yoshiteru que le lanzaba más de una mirada asesina

Ya estaban cerca y una extraña sensación comenzó a crecer en su estómago, sin embargo no tardó en desvanecerse al sentir como Tōjuro posaba sus cálidas manos sobre las suyas obligándole a voltear solo para toparse con aquella sonrisa sincera y despreocupada que vio ese día en que volvieron a encontrarse, misma que tuvo el día que le conoció cuando solo tenían diez años

— ¡Woah! —gritaron ambos para finalmente aterrizar en la gran piscina con fuerza y levantar pequeñas olas a su alrededor

Su corazón latía con fuerza, pero mantenía una gran sonrisa en su rostro. Aquello había sido totalmente divertido y el agua que llegaba a sus pies se sentía tan placentera al igual que los ligeros rayos de sol sobre ellos y eso solo le daba más encanto al joven que ya brillaba sin aquella luz

Tōjuro comenzó a moverse hasta finalmente dejarse caer en el agua para sumergirse y volver a salir mientras Ririka negaba en respuesta. ¿Por qué había estado tan asustada antes? Pudo haber estado sonriendo desde antes si no se hubiera dejado cegar por su inseguridad, ya que Tōjuro era su más preciado amigo

— Ven Ririka, te ayudaré a bajar —le indicó el menor ejerciendo un poco de fuerza en el flotador para que la joven se deslizara sin problemas— cuando sientas que caes, agárrate a mi porque está bastante hondo

— ¡Entendido!

"Ya no dudaré, no con Tōjuro"

A la señal de su amigo se soltó para luego sentir como el agua comenzaba a rodear su cuerpo, sin embargo no llegó a más pues se aferró con sus brazos a los hombros de Rengoku para luego cruzarlos por detrás de su cuello. No entendía como, pero él le mantenía a flote sin ningún problema

Los ojos dorados con detalles en rojo miraban encantados a la peliverde mientras una idea divertida comenzaba a tomar forma en su mente. Con cuidado y sin asustarle le hizo desprenderse para solo tomarle de las manos e impulsarse hacia atrás para que Ririka supiera lo que era nadar en una piscina tan extensa

— Ririka —le llamó— ¿confías en mi?

— ¿Tirarme de un tobogán contigo no es suficiente? —le devolvió la joven entre risas

— No puedo argumentar nada contra esa verdad —negó Tōjuro antes de acercarla una poco a su cuerpo— intentemos mantener la respiración, creo que necesitas mojar un poco tu cabeza por el sol

— Lo he visto en películas —respondió Ririka— solo que no sé si podré hacerlo

— Estás conmigo, no te soltaré jamás —le recordó apretando su mano con más fuerza, pero sin lastimarle— ¿a la cuenta de tres?

— Si

¡Uno, dos, tres...!

Ririka solo cerró sus ojos en respuesta y contuvo la respiración inflando sus cachetes antes de sentir como el agua le cubría por completo, pronto sintió que alguien tocaba su mejilla y cuando temerosa abrió sus ojos se topó con los dorados de Tōjuro. Su amigo le había tocado con su nariz ya que conservaban ambas manos entrelazas

Una sonrisa comenzó a formarse en el rostro de la peliverde al notar lo tan despeinado que se veía Rengoku bajo el agua, por lo que pequeñas burbujas comenzaron a escapar de sus labios y Tōjuro lo tomó como una indicación de que ya debían salir. Nuevamente Ririka pudo respirar sin problemas en los brazos del joven

Su alrededor estaba tan tranquilo y las voces se sentían tan lejanas, probablemente porque todas las chicas estaban persiguiendo a Uzui, sin embargo esa calma de la que disfrutaban no le molestaba para nada. Por primera vez se permitió apreciar el como mantenía sus brazos cruzados por el cuello de su amigo

Podía sentir su respiración chocar contra su cabeza al igual que los desbocados latidos de su corazón, pero ¿realmente eran los de Tōjuro? Algo le decía que seguramente serían los de ella, ya que estaban tan cerca y solos en esa piscina. No estaba mal disfrutar un poco de su presencia, por lo que dejó que sus dedos recorrieran los mechones rubios y rojos mojados de la nuca del joven

Tōjuro reía ante las caricias, ya que al parecer le causaban cosquillas y mantenía sus brazos rodeando la cintura de la joven. Los ojos verdes brillaron levemente al sentir como el chico frente a ella seguía desprendiendo aquella esencia a sol, pues era muy seguro de que ella solo oliera ya a agua y cloro

"Me gusta estar junto a él"

No podía negar que su presencia era agradable, sin embargo ahora que su amigo cumplía dieciséis años sentía que habrían cambios, ya que su cuerpo no era delgado sino que estaba trabajado ¿por el Kendo? Pero no era exagerado, sino lo normal para su edad y en parte aquello le daba un gran atractivo. Sus espalda joven y no tan ancha de igual forma le decía que la mantendría segura

— ¿Fue divertido? —le cuestionó Tōjuro con una sonrisa a lo que Ririka se alejó para poder mirarle

— ¡Lo fue!

Ahora era el turno de Tōjuro para poder apreciarle por completo, sus cabello no tan largo completamente mojado y pegándose a su rostro y hombros, su rostro y pestañas también húmedas, sin embargo eso no le quitaba el discreto sonrojo que decoraba sus mejillas. Eso solo podía realzar el verde de sus ojos que parecían brillar como el agua al ser iluminada por la luz del sol

La joven que reposaba en sus brazos era hermosa y la principal culpable de que su corazón corriera completamente desbocado, pues ese día en que chocaron y la conoció jamás esperó sentir algo tan fuerte como lo que estaba sintiendo ahora. Quería tenerla a su lado y disfrutar de su suave aroma a fruta, escuchar su risa

No muy lejos un grupo de niños comenzaron a lanzarse al agua con fuerza y al sentir las leves olas llegar a ellos, inconscientemente Ririka mermó aún más la distancia y un notorio sonrojo comenzó a apoderarse del rostro de Tōjuro al sentir los pechos de la chica golpeando su cuerpo y no supo que hacer cuando ella notó que hasta la punta de sus orejas estaban rojas

— Tōjuro ¿qué sucede? —le cuestionó

— No, no es nada —negó el joven mientras su mano libre recorría con cariño la espalda de la chica— solo que... eres muy hermosa —confesó sin rodeos a lo que Ririka sintió un leve temblor recorrerle

Era claro que se estaba sonrojando y luchó con todas sus fuerzas por no sonreír como estúpida ante ese cumplido, sin embargo esa mirada dorada con detalles en rojos tan fija en ella le tentaba y cada vez le sentía más cerca. Su aliento chocaba con él de Tōjuro y como si no fuera suficiente para su corazón, el joven tocó con su cálida mano el rostro de la peliverde para apartar algunos mechones

Estaban tan cerca y ninguno parecía querer cortar con ese momento, la cercanía de sus cuerpo en el agua, la poca cálidez que se filtraba por las manos del joven y las mejillas y labios rosados de la chica. Todo eso era una tentación que solo iba aumentando la gran atracción que sentían con solo mirarse por unos segundos

— ¡Tōjuro, Ririka! —les llamó una voz femenina que les hizo alejarse, pero no tanto o Ririka comenzaría a hundirse como el Titanic

"Y esta vez sin bote salvavidas"

Tōjuro no dudó y comenzó a nadar hasta la orilla en donde Toko les esperaba junto a Kanata y Sumihiko, por las expresiones serias de sus rostros parecía que algo había pasado durante los minutos que se quedaron hablando en la piscina

— ¿Qué sucede? —inquirió Rengoku mientras Ririka también esperaba una respuesta

— Es Uzui-san —respondió Sumihiko— al parecer la gente del parque se molestó por el alboroto y mandó a llamar a la policía para calmarles

— ¿Qué? —soltó la peliverde sin poder creerlo

— Si, pero el lado bueno es que se trata de los policías que conocimos ese día Ririka-san

Sumihiko parecía visiblemente aliviado por ello, sin embargo ella no lo estaba para nada, más bien creyó que nunca más volvería a topárselo. Muy tarde, la babosa extravagante había sido la encargada de mandar a llamarles, por lo que todos comenzaron a caminar hacia el lugar en donde debería estar llevando a cabo todo el alboroto

Ririka se mantuvo en silencio, ya que su mente solo daba vueltas en lo que había sucedido hace tan solo unos minutos atrás y es que si Toko no hubiera llegado ¿qué hubieran hecho Tōjuro y ella? No, probablemente había una explicación o ella se dejó llevar por sus impulsos, sin embargo los constantes latidos de su corazón y nerviosos les hacían pensar en solo una cosa

— Oh, no... —susurró caminando mientras miraba de reojo la espalda de Tōjuro

"Estoy enamorada de Rengoku Tōjuro"

¡Chan, chan, chan! ¿Se lo esperaban? La verdad estaban bien inmersa escribiendo este capítulo que no me di cuenta que me estaba pasando, así que mil disculpas por eso y bueno... este capítulo tendrá que ser dividido en dos partes, pero al menos si cumplí con ustedes y el solecito ;-; ¿qué les pareció? ¿Demasiada azúcar? Jajaja era mi meta y estoy satisfecha aunque tuve que cortarlo

Ahora, quiero aprovechar para compartirles un lindo dibujo que me obsequiaron hace unas horas y estoy tan encantada, pero a ver si adivinan a que escena hace alusión esta obra de arte uwu la primera que acierte... le dedicaré el próximo capítulo porque el de hoy es para ¡Rengoku Kyoujuro! Que aquí es Tōjuro jajaja :v...

Mil gracias a Kaoru-san por tan lindo dibujo, lo amé <3 

@Simp_de_Kaoru

Sin nada más que agregar nos vemos en la siguiente parte que al parecer va a estar llena de muchas cosas divertidas y eso que falta ver la reacción de Kazuyoshi, no deben subestimar su instinto de hermano mayor, no señor uwu 

Att: Andysakurai15