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Una relación como la suya era difícil de desglosar. Se conocieron de una forma peculiar, y hasta cierto punto vergonzosa; su vida como un noviazgo oficial y establecido era aún más rara. Dazai se quedaba solo haciendo quién sabe qué hasta que Chuuya volvía de sus diplomados y apenas entraba saltaba a sus brazos para molestarlo. Por su parte, Chuuya se aseguraba de que su novio comiera al menos dos veces, y que no se desvelara tanto.

Chuuya amaba a Dazai en cada aspecto de su persona. Incluso lo amaba cuando se quejaba por un poco de atención -aún cuando Chuuya ya lo estaba abrazando-. Nunca había conocido a nadie como él, tan exigente, malcriado y poco paciente, pero estaba bien con eso, también era amoroso a su modo, protector y sobre todo, alguien que amaba incondicionalmente.

El corazón de Chuuya brincó de alegría cuando entró a la cocina para después de unos minutos salir con un café servido y yendo a la sala para ver a su novio—. Buenos días, ¿Estás nervioso?

—Chuuya, dime tres cosas que ames de mí, solo físicas —pidió el castaño, quien estaba acostado en el sofá.

El de ojos azules suspiró, vaya manera de empezar el día—. Tus ojos, tus grandes manos y lo lindo que te ves despeinado.

Dazai sonrió antes de hacer una mueca—. Pensé que dirías "tu fantástico pene".

Chuuya se ahogó mientras sorbía su café—. Ni siquiera eres tan bueno con eso —murmuró divertido.

El castaño rápidamente se puso de pie—. ¡Sé cómo usar mi pene! —gritó indignado—. Yo estuve con otras personas antes…¡Y te gustó cuando lo hice contigo!

Chuuya dejó la taza de café sobre la mesa del centro—. Cálmate…oye, me gusta cuando cambiamos de posiciones, pero tú disfrutas más de los orgasmos de próstata, y yo de tenerte llorando por más, no eres malo follando, pero disfrutas más ser cuidado.

Dazai se puso rojo, de coraje y vergüenza—. ¡Chibi tonto! ¡Vas a tragarte tus palabras!

Nakahara soltó un suspiro—. ¿Podemos dejar de gritar? Hoy es un día importante para tí.

—¡La maldita exhibición de arte no es tan importante como esto! —dijo severamente—. Crees que no puedo ser activo…eso es una ofensa y caes en un estigma tonto.

—Creer que por mi altura tendría un pene pequeño es un estigma, y lo pensabas hasta que te mostré lo contrario —el de ojos azules se puso de pie acercándose a su novio—. Pienso que está plática es importante para tí porque intentas decir algo más, entonces ¿Qué es?

El más alto infló las mejillas—. Quiero se activo hoy.

Chuuya soltó una risa mientras acariciaba su mejilla—. Claro, sabes que siempre estoy abierto a cosas nuevas, así que ¿Después de tu exhibición de arte?

El más delgado asintió suavemente—. V-verás que soy bueno en ambas posiciones…¡Soy mejor que tú!

Chuuya tiró de su mejilla haciéndolo chillar—. Cállate, tonto. Ahora desayuna algo, no quiero que te salga comidas.

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—Esta pieza parece que refleja algo más que desesperación, es impresionante lo bien que capturaste la tortura de uno mismo —dijo la directora de la exposición en galerías—. Me encanta tu manejo de las luces, Dazai-san.

"Solo lo pinte después de pelear con Chuuya por el cereal" pensó el más alto—. Es fácil retratar pensamientos, pero no sentimientos…cuando pinte esto pensaba en lo difícil que es tomar decisiones, por eso el hombre intenta ahorcar a su reflejo.

La mujer parecía ahora más intrigada—. ¿Eso es una caja de cereal?

—Claro, son mis cereales favoritos —respondió divertido—. A veces el arte no tiene sentido, por eso es libre y bello —de reojo podía ver a Chuuya mirar confundido los nombres de las pinturas—. Siga viendo la colección, vuelvo en unos minutos.

El de ojos azules lo vio acercarse hacía a él—. ¿Por qué se llama "trece pecas"?

Dazai señaló sus mejillas—. Tienes solo trece pecas, las he contado cada noche antes de dormir —al ver que el mayor se sonrojaba sonrió ampliamente—. Mis pinturas son solo cosas que se me ocurren, no pienses mucho en su significado, la única constante es mi inspiración.

—Realmente eres bueno con las palabras —señaló la obra—. ¿Las vas a vender? Quiero comprarlas todas.

El más alto se recargo en su hombro—. Chibi podrá tener mucho dinero, pero no podría pagarlas. No están en venta, si me terminas después quiero tener algo que ver para ahogarme en mi miseria.

—¿Cómo puedes decir cosas tan sombrías en un contexto tan romántico? —giró suavemente la cabeza y plantó un beso en su cabello—. Entonces avísame cuando las quieras vender, será divertido colgarlas por el departamento. Estoy muy orgulloso de tí, de lo que logras y como te superas cada día.

Dazai soltó un jadeo mientras giraba completamente para abrazarlo aferrándose a sus hombros—. Gracias por ayudarme a ser una persona más humana.

Chuuya sonrió por el cosquilleo que le provocaban los mechones castaños—. No necesitas agradecerme nada, estoy contigo porque te amo.

—No solo me amas, también logras que me ame a mí mismo —dijo como un susurro—. Debo volver a lamer las botas de la directora, pero disfruta de la exposición…no quiero dejarte solo.

Chuuya lo alejó suavemente para verlo directamente a los ojos—. No te preocupes, invite a Akutagawa —al verlo fruncir el ceño soltó una risita—. Vendrá con una cita, un chico llamado Atsushi.

Solo así Dazai lo dejó sin hacer un drama, en realidad nunca le prohibiría nada, pero le gustaba hacer rabietas para que Chuuya terminara castigándolo por ser tan posesivo.

La exposición culminó con Dazai dándoles las gracias a sus invitados, y anunciando que las ofertas por las pinturas serían rechazadas, pues planeaba quedarse la colección pero en un futuro haría réplicas para su distribución. Tan pronto como apagó las luces salió encontrando a Chuuya fumando en la entrada.

—No me gusta que fumes —dijo Dazai alegre cuando Chuuya apagó su cigarrillo y lo arrojó a un bote de basura—. Vamos a casa.

Nakahara tomó su mano asegurándose de darle un apretón gentil antes de caminar hasta el metro, después de unos treinta minutos llegaron a su edificio.

—No estás tan parlanchín, ¿Qué sucede? —cuestionó el más bajo al subir juntos al elevador.

—Nada, solo estoy guardando energías.

Su novio lo miró confundido—. ¿Para qué?

"Para follarte los sesos" pensó, pero no dijo nada, simplemente sonrió arrogante y apenas entraron a su departamento lo estampó contra la pared besándolo agresivamente.

Chuuya suspiro mientras le seguía el ritmo y se desnudaba al mismo tiempo que torpemente tiraba de la ropa del castaño—. ¿Tan impaciente por tenerme?

Dazai tuvo el impulso de responder, en cambio apretó las mejillas de Chuuya dándole una mirada condescendiente—. No actúes duro, ambos sabemos que en el fondo eres una patética perra.

Su novio no esperaba esas palabras, se sonrojo como pocas veces lo hacía y comenzó a tartamudear—. ¿F-fue por lo de la mañana?

El más alto lo empujó por la habitación hasta que lo tiró sobre la cama—. ¿Te crees jodidamente mejor que yo? ¿Crees que no puedo hacer que ruegue por mí? Recuerda que eres mi maldito perro, si te digo que ladre es lo que harás.

No hubo una respuesta verbal, solo unas gotas de líquido preseminal salir del miembro de Chuuya, el mayor suavizó su expresión dejándole tomar el control esa noche—. N-no me he preparado.

Dazai sonrió suavemente, deslizando su pulgar sobre los labios de Chuuya, y eventualmente metiéndolo en su boca apretando su lengua—. No te quejes, perro —retiró su dedo—. Ladra si quieres que me tome la molestia de estirarte.

El de cabellos naranjas se sacudió. Era su forma de decirle "No seas un idiota".

—Entonces supongo que te lo daré así —disfrutó del quejido de Chuuya—. Ladra.

Avergonzado y enojado, Nakahara soltó un ladrido, era una buena señal porque si realmente no quisiera hacerlo, habría usado su palabra de seguridad.

—Date la vuelta, voy a prepararte.

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Chuuya tenía la cabeza hundida en la almohada, luciendo bastante sensible, pero no era su culpa; Dazai dijo que iba a estirarlo, pero de repente tuvo la gran idea de usar sus dedos hasta que Chuuya tuvo un orgasmo, y siguió hasta ese momento, dónde el mayor estaba sobre estimulado.

—¡Usa tu maldito pene! —gritó entre suaves gemidos.

Dazai le dió una nalgada solo para seguir amasando su carne—. Si yo quiero te tendré así toda la noche, me lo merezco, dijiste que estabas muy orgulloso de mí.

Ahora mismo Chuuya quería golpearlo—. Dijiste que me follarías.

El de ojos avellana soltó un suspiro antes de bajar su mano para apretar levemente sus testículos—. Y ahora actúas como una molestia, déjame hacer las cosas a mi modo —nuevamente sus dedos agitaron su agüero lubricado—. Mmm~ creo que ya estás flojo.

Nakahara sintió como su amante se alineaba en su entrada. Antes de decirle algo más, el castaño lo penetró hasta que estuvo completamente dentro—. ¡Ve más lento!

Dazai acarició su espalda gentilmente—. Parece que me excedí —se inclinó hasta que su pecho chocó con la espalda de Chuuya—. Pero ambos sabemos que te gusta cuando soy arrogante…te sientes tan apretado, pondré más lubricante.

Nakahara esperaba que se retirará completamente, pero no fue así, solo untó más lubricante en su borde mientras sus dedos lo rozaban. "Maldito idiota". Esos pensamientos no duraron mucho, pues en cuestión de minutos estaba mordiendo la almohada para no hacer sonidos más humillantes.

Aunque Dazai no estaba mejor, su cuerpo sudaba mientras empujaba fuertemente dentro de Chuuya, soltando gemidos ruidosos—. ¡Se siente tan bien dentro de tí! ¿Me estoy volviendo adicto a esto? Oh joder~ —gruñó cuando se sintió cerca del climax, su mano izquierda se deslizó hasta el miembro de Chuuya estimulandolo hasta que alcanzo un segundo orgasmo—. Eso es, eres un perro tan bueno~ —segundos después él también alcanzó la liberación dentro de su pareja.

Chuuya se dejó caer completamente exhausto y adolorido—. No olvides limpiarme.

El más alto negó mientras separaba sus piernas disfrutando de la vista—. Oye Chuuya, ya estoy listo para seguir.

—¿De dónde sacaste toda esa energía? Normalmente ya estarías desmayado como cuando te follo —se quejó Chuuya.

—Te dije que estaba guardando mis energías, planeo seguir hasta que entiendas que soy mejor que tú.

Sucede que durante las últimas semanas ví que muchas personas esperaban que está historia fuera Chuuya bottom, y realmente fue divertido, pero llevaba rato pensando en hacer un segundo especial, y aproveché que la idea de Chuuya pasivo seguía en mi mente. Escribí esto y me gustó. Literalmente estuve mucho tiempo sin revisar mi documento de Camboy.

Si alguien lee esto sepan que respeto gustos, pero Dazai bottom es simplemente mi estilo de vida.
-Honey