Capítulo cinco

Advertencias: Contenido NSFW (nada muy explícito).

~•~

¿Cómo vives tranquilo sabiendo que tu camboy favorito está a unos pasos de tí? ¿Qué la única cosa que los divide es una pared? Es imposible estar sereno con esa información. Así era como Chuuya llegaba a sentir sus palpitaciones golpear el eco de su departamento, apenas hace horas Dazai se fue de su vivienda.

—Estoy jodido —se dijo a sí mismo recargando la cabeza en su escritorio. Se supone que su tarea era la prioridad de su día pero el encuentro con el castaño lo desequilibró y solo pensaba en él—. Carajo, no debí entrar a su maldita página desde un principio.

Chuuya encontró su canal por medio de publicidad en Instagram "Si quieres ver mi contenido exclusivo, suscríbete a mi página y recibe beneficios" junto a una foto de su abdomen ceñido a un traje rojo de lencería.

"Que linda figura" indagó en el perfil que estaba repleto del mismo contenido sin mostrar su cara "¿Cuál era su página?". Un par de clicks y ya estaba registrándose para darse de alta en la página del jóven. No era un gran golpe económico, era casi la mitad de su mesada y se cobraba directamente a su tarjeta de débito.

Sin darse cuenta quedó fascinado por la actitud del muchacho ante la cámara, su sonrisa asusta se asomaba cada que alguien le donaba. Para Nakahara era obvio que le gustaba su trabajo, tal vez la atención que la gente le daba, o la emoción de poder tener el control total, y fingir ser sumiso con sus suscriptores.

"Tiene una bonita cara" el pensamiento era tan realista que se deslizó los pantalones hasta las rodillas y acarició su dureza lentamente, subiendo el ritmo a medida que el castaño hacía o decía algo.

Pensó que solo estaba bien mirar algunas veces, no tenía mucho tiempo de todos modos, pero después de hablar por videollamada se interesó aún más por las cosas que le pasaban. "¿Habrá cenado? ¿Tendrá novio, o novia? ¿Estudiará o solo trabaja? ¿Qué cosas podrían gustarle? ¿Necesitaría mucho dinero para salir con él?" Fueron preguntas que se hacían más fuertes conforme recibía más mensajes de Dazai.

¿Estaba mal tener un enamoramiento por un camboy? No ¿Pero tener un enamoramiento con tu vecino camboy? Absolutamente sí.

Nakahara soltó un suspiro. Era tarde, pero no podía dormir, no sabiendo que Dazai tendría un vibrador metido, o estaría saltando sobre un gran consolador con esa preciosa sonrisa de oreja a oreja. Decidió que lo mejor era verlo por sí mismo, aunque claro que no le haría donaciones para no incomodarlo. Se levantó del sofá buscando su laptop, una vez la encontró se acomodó con ella en los muslos. Buscó la transmisión y para su fortuna llevaba unos treinta minutos, temeroso dió click en el botón para unirse.

Dazai sollozando frustrado casi lo hizo pensar que algo estaba mal. Estaba vestido con lencería, y un lindo collar, ambos de encaje. Las donaciones eran constantes pero realmente no le pedían casi nada, salvó gemir algún nombre y decir alguna palabra extraña. El castaño parecía desesperado por terminar, pero no lo conseguía.

—S-solo un poco más…por favor —se escuchó su voz tan jodida que era adorable—. Es tan di~fícil.

Chuuya movió el cursor a la zona de regalos donde podía donar algunas cantidades de dinero real. Le mandó cuatro mil yenes junto a un pequeño mensaje >>Luces hermoso con esa cosa en tu cuello<<. Esperaba que Dazai no lo llamará pervertido y terminará la transmisión para después ponerle una orden de restricción.

—¿D-de verdad me veo hermoso? —preguntó aturdido. Entonces dejó escapar un grito que atravesó las paredes de Chuuya, era el sonido más obsceno que jamás escuchó y fue directo a su miembro.

Otra donación moderada le dió la oportunidad de escribirle un mensaje corto >>Yo creo que eres adorable. Muestra ese hermoso rostro para que todos vean lo lindo que eres<<

Osamu sonrió de lado por su confesión. Ahora parecía tan cerca del orgasmo cuando lo intentó por largos minutos, estaba ansioso de poder montar a Chuuya, quien se encontraba en el departamento contiguo—. Seré bueno, lo prometo —señaló el vibrador con forma de bala que sobresalía de su agujero—. ¿Puedo empujarlo más adentro?

Chuuya sintió como el líquido se escapaba de su hendidura, y se vió obligado en sacarlo de su pijama para acariciarlo suavemente, imaginando que así sería el tacto de Dazai. Alguien donó dinero diciéndole que podía meterlo hasta sus intestinos, y Dazai obedeció.

Necesitaré ayuda para sacarlo después…necesitaré una mano extra ¿No quieres ayudarme? —soltó una risita que se vió interrumpida por el vibrador tomando un ritmo violento dentro de él. Chuuya volvió a donarle la cantidad máxima para verlo temblar patéticamente hasta la liberación. Y así lo hizo, jadeando y sollozando logró salpicar por toda su cama—. G-gracias por donar~ ¡Ah, es demasiado! —notó que las donaciones de Chuuya no sé detenían—. Ya terminé…¡Es mucho!

Nakahara bombeaba su propia erección buscando la liberación, y de paso molestaba a Dazai llevándolo a la sobre estimulación. El muchacho de bragas rosas de encaje se retorcía mientras más lágrimas caían por sus mejillas hasta que sin previo aviso volvió a tener un orgasmo en seco. Un grito ahogado fue lo último que hizo antes de comenzar a hipear—. F-fue demasiado…por favor dejémoslo aquí por hoy, estoy tan cansado —gimió con su poca resistencia que le quedaba—. ¿Te gustó verme destrozado?

Chuuya donó una pequeña cantidad, que apenas le permitiera aparecer en la pantalla >>Solo porque te veías hermoso llorando<<. La transmisión finalizó con la cara en primer plano de Dazai limpiando sus lágrimas jadeando. La sonrisa de Nakahara se desvaneció al cerrar su computadora.

Me volví loco —dijo con un suspiro a la par que se estiraba por un pañuelo para limpiar su rastro que escurría por sus muslos. Cuando terminó se sentía aún más ansioso que antes—. Debo mudarme, este sujeto es un maldito peligro…uno tan hermoso.

.
.
.

El castaño se miró a sí mismo una última vez en el espejo de cuerpo completo que estaba justo a lado de su cama para apreciar el encaje que ahora estaba mojado. Tentado a tomar una fotografía tomó su celular y se dejó llevar por sus deseos, hasta que sus dedos pararon en seco. Pasó saliva avergonzado—. Que idiota soy…¿Por qué no me pediste follar? Se supone que te gusto.

Dejó el dispositivo sobre su encimera y arrojando las pocas prendas que lo cubrían se dirigió al baño para tomar una ducha. Su piel estaba sudada, y cualquier con sentido del olfato podría distinguir el olor a sexo que desprendía, pero de alguna forma a él le gustaba, era algo con lo que estaba familiarizado, y aún más cuando el agua se llevaba todo eso. Se sentía tan puro sabiendo que todo lo pegajoso se iba por la coladera, y solo quedaba la satisfacción.

Ojalá todo fuera así, solo quedarse con lo que te gusta y desechar lo que no. Ojalá el amor fuera así para él, tan simple.

Cuando salió de la regadera, se puso cómodo sobre su colchón y pasó el rato viendo una película. Suspiró profundamente al darse cuenta de sus "limitaciones"—. No es posible que ese idiota sea la razón por la que terminé…no puede ser.


¿Vieron como si es Whorezai? Dios lo amo.
Ya en el siguiente habrá contenido más explícito, ojalá wattpad soporte
-Honey

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top