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El anuncio de Winter en Stray Kids salió, al igual que el trailer del nuevo álbum, ODDINARY.
Y con ello, el masivo hate hacia Youngmin.
Muchos comentarios eran buenos, pero esos comentarios buenos lograban ser opacados por los ofensivos y groseros comentarios de aquellas fans que no estaban de acuerdo en que un miembro nuevo se uniera al grupo.
Y menos una mujer.
Youngmin hacia como si no le afectara, aunque por dentro se sentía mal de ver tantos comentarios feos hacia su persona. ¿Tan malo era estar en Stray Kids? ¿O era el trauma que la salida del ex integrante dejó años atrás?
No lo sabía, pero por más que aparentara ignorar dichos comentarios, era imposible hacerlo cuando eras tendencia mundial por debutar en 2022 con uno de los grupos es ascenso más famosos de la actualidad.
¿Cómo se enteró de los comentarios? Fácil.
Lee Minho.
— Hay demasiados comentarios de hate hacia Winter — Dijo con tranquilidad mientras miraba los comentarios de YouTube. Chan hizo una mueca ante ellos y miró de reojo a Youngmin, que estaba con su inexpresivo rostro viendo su teléfono.
Felix, quien estaba con la chica ya que tenía su cabeza recostada en las piernas de Youngmin -quién ni siquiera le prestó atención cuando hizo aquel acto-, notó como la chica estaba tensa y tenía una cara no tan inexpresiva.
Porque se le miraba triste.
El pecoso hizo su cabeza hacia atrás para mirar a Jeongin y hacerle una seña para que se colocara detrás de la menor y descubriera que estaba viendo, aunque claramente ya tenía una idea.
Jeongin con total disimulo, se levantó de su asiento con la excusa de ir a sacar una botella con agua, y al regresar se quedó detrás de Youngmin sin que ella lo notara, y su rostro frustrado lo dijo todo.
Estaba viendo los comentarios.
Jeongin y Felix miraron a Chan, quien al parecer ya se había dado cuenta de ello, y con su sonrisa más forzada debido a la tristeza que sentía en ese momento por la chica, aplaudió para llamar la atención de todos y se levantó para quedar al frente.
Youngmin apagó su teléfono para verlo, sabiendo que no le estaba haciendo bien el estar viendo cada palabra mal sonante y ofensiva hacia su persona. Le recordaban a las ofensas de su padre.
— Buen trabajo, chicos. El trailer salió de maravilla y todo STAY están esperando ansiosos por ver el álbum — Comentó con una sonrisa, aliviándose de saber que la peliblanca había dejado el teléfono a un lado, menos Minho.
— "Manden a la nieve atrás, ella no es visual". — Leyó Minho con diversión viendo su teléfono. Hyunjin lamentablemente se comenzó a reír porque le dio más gracia la forma en la que lo dijo que el propio comentario, siendo fulminados por el resto.
Youngmin no decía absolutamente nada. Estaba con su rostro serio y su mirada indiferente, causando una decepción en Minho.
¿Era normal? Él solo quería molestarla para irritarla y que por presión se terminara yendo del grupo.
Era inmaduro, sí. Pero ninguno de ellos quería ser un grupo de nueve otra vez, incluyendo a los que ya se llevaban bien con la peliblanca.
— ¡Minho! — Reprochó Chan con molestia. El chico lo miró de forma inocente.
— Solo leí un comentario, hyung — Se defendió el pelimorado. Chan se acercó a él y le arrebató el teléfono, haciendo que el chico frunciera el ceño con molestia.
— Dejen de leer comentarios malos de Youngmin. Es grosero y a ninguno de ustedes les gustaría tampoco leerlos — Espetó tratando de que finalmente entendieran que estaba mal.
Minho rodó los ojos pero no dijo nada y solamente siguió escuchando las palabras del líder.
Youngmin se sentía mal, pero no iba a demostrarlo, y menos frente a él.
Cuando todos llegaron a casa, estaban tan cansados que solo querían tirarse a dormir, y algunos lo hicieron porque podían.
Otros no.
— ¡Winter! — Jisung y Youngmin miraron hacia el segundo piso al escuchar el grito, haciendo que la menor comenzara a subir las escaleras con Jisung detrás ya que quería saber que había pasado como para que Seungmin y Minho hubieran gritado de esa forma.
Al llegar, tanto Jisung como Youngmin abrieron la boca del asombro.
La habitación estaba desordenada, llena de pelo de gato y excremento en las camas de los dos chicos. La peliblanca miró a las dos bolitas de pelo causantes de tal desastre dormidas en su cama como si nada.
Varios papales rasgados en el suelo, pelo de gato hasta en las paredes, y los regalos que los dos gatitos dejaron en las camas.
Iba a decir algo, pero ninguno la dejó porque comenzaron a reclamarle.
— ¡Saca a esas dos malditas ratas con pelo de aquí! — Gritó Seungmin alterado. Ahora ni siquiera podría dormir en su cama porque estaba sucia y asquerosa.
— ¡Ahora tú vas a limpiar este desastre! — Le gritó Minho tirándole una toalla en la cara. La chica no se enojó ni se alteró. Simplemente escuchó como ambos chicos tomaban sus cosas y se iban de la habitación totalmente molestos.
Youngmin suspiró y se acercó a su cama para agacharse y sacar las dos jaulas de sus mascotas, despertándolas para meterlas ahí y que no causaran más desastre.
Comenzó quitando el excremento de sus gatitos de las camas y tirarlos en una bolsa que sacaría a la basura apenas saliera de la habitación, y quitó las sabanas sucias para cambiarlas por nuevas que encontró en su cama sin razón alguna.
Al girarse, encontró a Jisung llegando con más cosas para limpiar y más sabanas para arreglar las camas, dejando confundida a la peliblanca.
— ¿Por qué me ayudas? — Le preguntó sin expresión. Jisung alzó los hombros.
— No fue tu culpa. Los gatos son animales, no humanos. No saben lo que hacen. Y entre dos es más rápido — Terminó divertido, pero Youngmin no hizo ni una mueca y solo asintió.
Mientras ella arreglaba las camas, Jisung recogía los papeles y los metía en una bolsa, para luego barrer todos los pelos de gato del suelo y cada rincón de la habitación. Cuando Youngmin terminó con las camas, tomó el trapeador y lo dejó a un lado para ayudar a Jisung a recoger los pelos y meterlos en una bolsa, pero cuando colocó la pala en la bolsa, la soltó al estornudar.
Para Jisung, fue la cosa más linda y tierna que habían visto sus ojos y escuchado sus oídos.
Pues Youngmin estornudaba como un gatito, bajito y tierno. Y debido a la palidez de su rostro, sus mejillas y nariz se habían vuelto rojas por el estornudo y el que le siguió. Sin contar que la chica sobó con su dedo índice entre medio de la boca y la nariz, evitando estornudar otra vez.
— Salud — Dijo Jisung con diversión.
— Gracias — Respondió con un tono bajo, ya que estaba avergonzada por estornudar frente a Jisung.
— ¿Te da alergia el pelo de gato?
— En exceso sí, más sí se combina con el polvo y el olor a desinfectante — Comentó con una mueca. Jisung sonrió de lado.
— Fue tierno. Estornudas como un gatito — Youngmin lo miró, y pese a todo, sonrió levemente, sorprendiendo al chico.
Ambos terminaron de limpiar sin decir nada más, acabando a la una de la mañana su profunda limpieza. Youngmin sacó a los gatitos de la habitación y les avisó a ambos chicos que ya estaba limpia la habitación, por lo que ambos subieron sin decirle una sola palabra y se fueron a acostar, encontrándose con Jisung sacando las bolsas de basura.
— ¿Le ayudaste? — Preguntó Minho confundido. El chico asintió.
— Yo no soy como ustedes, que en lugar de limpiar entre los tres la dejaron sola.
— Fue su culpa — Se defendió Seungmin.
— Claro que no. Son gatos, no saben lo que hacen — Respondió el chico de mejillas regordetas.
— Mis gatos sí saben lo que hacen y tienen más educación que esas dos ratas — Defendió Minho con molestia. Jisung rió.
— Youngmin tal vez nunca ha tenido el tiempo de entrenar a sus gatos ni tampoco tiene quién los cuide, ¿o si no por qué están aquí?
Minho 0 - Jisung 1
El chico bufó y se acostó en su cama sin importarle si Jisung seguía ahí.
A los segundos llegó Youngmin y simplemente se acercó a su escritorio y sacó un CD que tenía guardado, acercándose a Jisung para dárselo.
— Por ayudarme aunque no debías — Jisung la miró sorprendido, pero no por el CD, sino por lo que era en realidad.
— ¿Son todas las temporadas de Boku no Hero Academia grabadas? — Youngmin asintió.
— Es mi segundo anime favorito, y sé que te gusta porque te he escuchado cantar los openings a todo pulmón en tu habitación — El chico se sonrojó al saber que ella lo había escuchado, pero su felicidad era mayor y la abrazó de golpe.
Youngmin se quedó quieta en su lugar sin decir nada, pero sentía dos miradas tras ella y se sintió incómoda.
— ¡Vamos a verlo! — Dijo Jisung con emoción. La chica ladeó la cabeza con confusión y lo miró.
— ¿Quieres verlo conmigo? — Jisung asintió varias veces y ni siquiera la dejó responder porque la tomó de la mano y la llevó a rastras a su habitación, dejando a Minho y Seungmin confundidos.
Al llegar, Hyunjin no estaba ya que estaba con Chan y Felix en el piso de abajo. Jisung colocó el CD y se acostó en la cama, dándole lugar a Youngmin de que hiciera lo mismo, a lo que la chica lo hizo aún reacia.
— ¿No es muy tarde para ver anime? — Preguntó al ver el reloj.
1:13 de la mañana.
— Tal vez, pero quiero verlo y estoy emocionado ahora — Dijo con felicidad, dándole play en la televisión y comenzando a ver el anime.
Con el paso del tiempo Youngmin se fue acomodando con la presencia de Jisung y ambos hablaban mientras veían el anime, hasta que ninguno se dio cuenta y se quedaron dormidos en la cama del chico.
A las tres de la mañana entró Hyunjin por fin a la habitación y se encontró a los dos menores dormidos con el televisor aún reproduciendo el anime.
Hyunjin apagó el televisor y los miró detenidamente, para luego suspirar y tomar dos sabanas para taparlos a ambos.
Notó que el cabello de Youngmin estaba suelto y le estorbaba a la chica dormida ya que se veían sus mueca al sentir su cabello en la cara, por lo que Hyunjin tomó una liga de cabello de su espejo y le ató el cabello a la chica con cuidado de no jalar sus blancos cabellos ni de despertarla, y finalmente él se fue a dormir.
— ¿Puede venir mi amigo aquí? — Preguntó mientras se comía sus waffles de desayuno hechos por el mayor, que literalmente la había obligado a desayunar. — Ya que no puedo salir...
Resulta que a eso de las seis de la mañana, Jisung y ella se habían levantado por los gritos de Hyunjin y Changbin en el piso de abajo, y a causa del susto que Jisung se pegó al despertar abruptamente, chocó con Youngmin y provocó que la chica se cayera, lastimándose la muñeca levemente.
Ante esto, Jisung entró en pánico y pegó un grito más fuerte que los de abajo, logrando que los seis chicos llegaran a la habitación asustados, viendo como Jisung casi estaba por llorar mientras Youngmin lo miraba raro.
Les explicó de manera breve, y Changbin siendo Changbin, jaló la muñeca de la peliblanca para verificar si tenía algo grave, lo que provocó una mueca en la chica.
Chan insistió en llamar a un doctor, y resulta que se dobló la muñeca y necesitaba al menos unos dos días de reposo y no usar su mano, junto a un vendaje.
Youngmin se quejó ya que Chan no la dejó ir a la empresa y tampoco tenía permitido salir de la casa durante los dos días, llamándolo exagerado ya que ni siquiera se había doblado fuertemente la muñeca.
— Claro, con que no salgas está todo bien — Youngmin rodó los ojos y comenzó a comer antes de que los waffles se enfriaran. — No me mires así, Youngmin — Sentenció apuntándola con la espátula.
— Bien — Murmuró sin verlo nuevamente. Chan sonrió y siguió haciendo el desayuno para el resto, ya que tenían solo una hora para irse a la empresa o llegarían más tarde de lo normal. Se habían retrasado con lo de Youngmin, así que iban tarde.
— ¿Y quién es tu amigo?
— Yeonjun de TXT — Chan se giró sorprendido y la miró con la boca abierta. — ¿Qué?
— ¿Eres amiga de Yeonjun? ¿Desde cuándo? — Preguntó asombrado, ya que se supone que la chica no salía ni tenía algún tipo de relación con nadie más que con ellos ocho y su padre.
— Desde la infancia. Nos conocimos hace 16 años — Comentó con indiferencia. Aunque con Chan era difícil no hablar, ya que él era tan amable y cálido que le parecía muy feo el no responderle, por lo que tenía que acostumbrarse a hablar cuando se trataba de él, o de Felix y Jeongin, pero al menos los dos menores no hablaban mucho porque sabían que la chica era de pocas palabra.
— Es increíble. Deben de ser los mejores amigos — Dijo Chan con una pequeña sonrisa. Youngmin asintió.
— Pues es el único que tengo — Murmuró para ella, pero Chan logró escucharla e hizo una mueca.
Sabía que Youngmin era muy fría y difícil de tratar, y tenía una leve idea del porque, ya que para nadie era novedad el saber como era la relación de padre e hija del CEO y Youngmin. Chan se compadecía de ella, y quería cambiarla para bien.
Si bien no era partidario de cambiar a la gente porque hay que aceptarlas como son, él quería cambiar a Youngmin para bien. Quería que la chica entendiera que no estaba sola y que ahora tenía a personas que la apoyarían en todo y nunca le darían la espalda. Quería que ella fuera sociable, que tuviera amigos, que saliera a divertirse, que tuviera una buena alimentación, y que tuviera una sonrisa siempre en su rostro.
No sabía los problemas por lo que Youngmin había pasado para volverse una chica tan fría y sin corazón para muchas personas, pero él quería ver a la verdadera Youngmin escondida bajo esa máscara de crueldad e indiferencia. Él quería que Youngmin cambiara para bien, y poder prosperar todos como grupo y como familia, pero para ello sabía que tendrían que recorrer un largo camino.
Finalmente los chicos se fueron y Youngmin quedó sola en la casa, totalmente aburrida sin saber que hacer, así que se puso a pintar por su mano buena en lo que se daban la una de la tarde y llegaba Yeonjun a hacerle compañia.
Hasta que pasó y escuchó el timbre sonar.
— Años sin verte — Youngmin sonrió divertida y lo dejó pasar.
— Nos vimos hace un mes, idiota — Dijo con una mueca. Yeonjun la abrazó, y como siempre ella solo dio dos palmaditas en su espalda y se separó del chico.
— Para mí fue una eternidad, cállate — La chica alzó las manos en señal de rendición, pero Yeonjun se percató del vendaje en su mano izquierda y la miró preocupado. — ¿Qué te pasó en la mano, Min-min?
La chica miró su muñeca y suspiró. — Me doblé la mano en la mañana y Chan literalmente me obligó a descansar por dos días hasta que se desinflame y esté bien — Comentó con indiferencia mientras ambos subían a la habitación de la chica. — Fue una exageración porque no es nada grave ni fuerte, pero Chan es así. Tengo que acostumbrarme, tal vez.
— ¿Vives con los demás? — Preguntó al ver la puerta de la habitación con dos nombres al lado del de la peliblanca.
— Lee Know y Seungmin, sí.
— ¿Te llevas bien con ambos? — Un suspiro sonoro lo hizo reír. — Eso suena a un rotundo no.
— Me odian y yo no los tolero, así que es mutuo el sentimiento — Comentó sentándose en su cama y llamar con su silbato a sus dos mascotas que andaban rodando por la casa.
— No es mutuo — La chica lo miró confundida al momento de ver a Shiro y Haru entrar a la habitación y subirse a la cama para ser acariciados por el chico y su dueña. — Dices que ellos te odian y tú no los toleras.
— ¿Y?
— Que tú no los odias.
— No tengo tiempo para estar odiando gente, Jun. Suficiente tengo con el viejo, mis clases y el comeback como para ponerme a pelear con esos dos — Dijo mientras levantaba a Shiro para revisar que estuviera bien, ya que en la mañana la había visto algo sucia, pero tal parece que estaba limpia.
— Deberías de intentar llevarte bien con ellos, porque tienes que quedarte aquí si tu plan es joder a tu padre.
Ahí el problema.
Si no quería tomar el puesto de su padre como CEO de JYP, tenía que estar en Stray Kids, o de lo contrario, no tendría más opción que volverse lo que juró destruir.
Una empresaria reprimida y sola.
Los chicos llegaron temprano ese día ya que realmente no podían hacer mucho sin Youngmin en la empresa, así que regresaron a casa para descansar.
Pero la sorpresa de los dos chicos dueños de la habitación fue encontrar a Choi Yeonjun de TXT acostado en la cama de Youngmin viendo lo que parecía ser una película, mientras la chica leía un libro y de vez en cuando pateaba al chico por moverse y chillar tanto.
— Oh, hola chicos — Saludó el mayor con una sonrisa. Ambos menores lo miraron confundidos pero sonrieron con confusión. — Tranquilos, ya me iba. Es solo que Min-min habla mucho que me retiene aquí — La peliblanca le tiró el libro que estaba leyendo, haciéndolo reír. — Ni los dieciséis años conmigo te han hecho cambiar, mocosa.
— Vete a la mierda.
— Siempre tan linda — Youngmin le sacó el dedo medio mientras le tiraba la chaqueta para que se fuera. — ¿No me irás a dejar a la puerta y despedirme bien como la grandiosa mejor amiga que eres?
— Conoces la salida y no me vas a comprar con tus palabras de mierda. Lárgate ya. El mes sin verte ya me pasó factura al tenerte aquí jodiendo por seis horas — Yeonjun rió pero no dijo nada ya que Chan había llegado.
— Un gusto verte, Yeonjun — Saludó Chan con una sonrisa. — ¿Cómo se portó Youngmin?
— A la perfección. Intentó cocinar con su mano vendada pero lo evité golpeándola con el sartén en la cabeza — Chan rió y Youngmin fulminó a su mejor amigo con la mirada.
— ¿Ya te vas? Te acompaño a la salida.
— Gracias, ya que la canosa amargada no quiere ir a dejarme — Ambos chicos rieron cuando la menor pateó a Yeonjun antes de que este se alejara con Chan y finalmente ambos se fueron.
Minho y Seungmin solo la vieron con duda, ya que ninguno tenía idea de que Youngmin y Yeonjun eran amigos.
Ya que bueno, ni siquiera sabían que ella tenía amigos.
Ambos le restaron importancia y bajaron para cenar, ya que habían llevado pizza y morían del hambre.
— Younnie, trajimos pizza de cena. ¿Vas a bajar? — Comentó Felix llegando a su habitación. La chica negó y se acostó en la cama dándole la espalda al rubio.
— Comí con Yeonjun, gracias.
— Oh, está bien — Dijo el pecoso y se fue para no molestarla ya que parecía cansada. Y como no, si Yeonjun le chupaba toda la energía cada que estaba con ella. Literalmente bajaba su batería social después de que pasaban todo un día juntos.
Y lo de comida no era verdad, pues aunque si comió algo con Yeonjun, solo fue un helado en lo que iba del día.
Pero nadie tenía porque saber eso.
¿No?
Aquí les dejo un moodboard chafa de Youngmin pq sí <3
Son de las cositas que Younnie ama.
1. La nieve, en este caso son copos de nieve, y por eso su nombre artístico es Winter, además de que la nieve es blanca y ella ama el color blanco.
2. Sus bebés Shiro y Haru.
3. El café con leche.
4. Su cabello blanco.
5. Minho <3
Claro que aún no le gusta porque esto es como un enemies to lovers, pero pronto comenzará el amor entre el Minter y será bien bonito.
6. Y el hijo del Mino junto a sus revistas porque Youngmin best Minhista.
Y ya, tomen agüita y cuídense.
Besitos 💋
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