La continuación del libro ha comenzado. A partir de aquí se toca la segunda temporada de la serie, así que alerta de spoilers.

Nunca supo cómo sucedió todo tan rápido, hubo una explosión y lo siguiente que escuchó fue que el Consejo había sido atacado.

El corazón se le había salido del pecho.

Sus pies se movieron lo más rápido posible, no supo cómo sacó tanta energía para subir tantos pisos y esquivar a tanta gente en cuestión de minutos.

La escena le hizo estremecerse.

—¡Viktor, Jayce! —gritó cómo pudo con la voz al borde de la desesperación, buscó por los escombros y tosió por la cantidad de polvo que se había levantado por los restos.

—¡Jayce! ¡Viktor! ¡Por favor, alguien!

Siguió buscando pero su visión era limitada, a su alrededor todo estaba distorsionado y la visión era limitada.

Volvió a toser y caminó por debajo de unos escombros, notando un cuerpo robótico que sin tener que inspeccionarlo mucho supo que no seguía con vida.

—¡Jayce! —vio una figura parecida y corrió hacia ella.

Se supone que ellos iban a formar un acuerdo de paz con los de abajo. No debería estar sucediendo esto.

—¿Rosslenne? ¡¿Dónde estás?! —escuchó la voz de Mel pero se mantuvo estática por el miedo y el pánico.

—¡No puedo verte! —siguió el origen de la voz como pudo.

Siguió caminando, escalando restos de las paredes y después bajando otras. Hasta que por fin lo vio.

Viktor yacía sin vida en uno de los extremos de lo que quedaba de la sala.

Su voz casi no pudo salir de su garganta, pero el grito de dolor no se pudo comparar. Se perdió entre la nada y solo fue captado por los pocos sobrevivientes.

—¡Viktor! ¡Viktor despierta, por favor! —pudo llegar a su cuerpo, tomó su pulso en una mínima esperanza de que reaccionara y rompió en llanto.

—¡Ross! —pudo ver a Jayce a la lejanía pero su mirada estaba nublada por las lágrimas que salían sin parar.

—Es-está... —su voz no terminó de salir, no paraba de temblar y tomar la mano de Víktor entre las suyas.

De repente en un impulso de negación. Buscó aplicar respiración boca a boca y dar pulsaciones hacia su corazón.

Sin esperarlo, Jayce llegó a su lado y después de desplomarse lo que fue una eternidad, tomó el cuerpo del difunto para levantarlo.

—Es-espera... ¡¿Qué haces?! —lo tomó del brazo y no tuvo más opción que seguirlo hacia el cuarto donde llevaban su investigación. Lugar que estaba sin duda bastante lejos y tomaron varios minutos en llegar.

Apenas entraron a la sala la fémina buscaba respuestas cuando vio un extraño artefacto con colores morados que flotaba como si tuviera vida propia.

Una luz iluminó por completo la habitación cegándolos cuando el clase de núcleo prácticamente absorbía el cuerpo de Viktor.

Cayó sobre su propio peso y no pudo cuestionar nada cuando poco a poco se creaba una clase de barrera que mantenía cautivo al castaño.

—¡¿Qué carajo acaba de pasar?! ¡¿Qué es esa cosa y qué diablos le está haciendo a Víktor?!

—¡Espera, no te acerques!

Se vieron mutuamente y después al frente, Rosslenne juraba que su corazón iba a salir de su pecho.

—Me tienes que explicar qué mierda está pasando aquí... 

La segunda temporada me dejó destrozada... pero haré catarsis con lo que está por venir.