Soltó una bocanada de aire al momento de dar un paso fuera del aula como el resto de compañeros. Acababan de presentar un proyecto individual sobre arte contemporáneo y June al salir sentía alivio al ya no tener que escuchar la desinformación de los demás.

Yejun le dio una palmadita en la espalda y las dos se encaminaron a la cafetería como ya se les había creado de rutina día a día. La rubia de mechas onduladas le dio una media sonrisa y echó un último vistazo al pasillo con la pequeña esperanza de encontrarse con los ojos avellana de Dohwa.

Como era de esperarse, el gran Baek Dohwa no había hecho acto de presencia desde hace al menos dos días en la escuela, sin contar el fin de semana. Para el colmo, June perdió su teléfono el mismo día de la salida al parque de diversiones, por lo que no tenía manera de comunicarse con él.

Se había convertido en una costumbre buscar a Dohwa con la mirada en cafetería o por los pasillos, como a veces podía llegar a encontrarlo al estar de vago evitando las clases.

—— Él es algo raro, creí que al menos al no estar en sus clases podría estar perdiendo el tiempo por ahí, pero ni eso. —Yejun explotó la burbuja de chicle de sus labios y metió ambas manos a los bolsos de su sudadera.

June dejó de mirar para ignorar lo que dijo su amiga y tomó una bandeja para ponerle el desayuno del día, sin olvidar su caja de jugo de naranja.

Definitivamente Dohwa estaría faltando por su trabajo, no había otra explicación a sus faltas, o al menos eso le ha confesado el rubio a ella.

—— ¿Sabes? Estaba pensando en hablar un día de estos con Ra Im para que el tema ya se de por finalizado. —cambió de tema en cuanto tomaron asiento en una de las mesas en medio del gran salón, Yejun alzó una ceja al mismo tiempo que le daba una mordida a su sándwich.

—— ¿Ya? Eso es... Bueno, creí que les podría tomar más tiempo, pero no está mal. —apoyó la barbilla en la palma de su mano sin dejar de masticar.

June se encogió de hombros y miró la bandeja de comida con aire pensativo. Recordó la conversación de hace unos días en el parque con Juwon.

—— Bueno, es que el día de la salida al parque hablé con Juwon en contra de mi voluntad y me terminó confesando algo de lo cual no sé si estoy segura de creerle después de todo. —jugó un poco con la comida del plato sin mirar directamente a su amiga—. Al parecer Ra Im también intentó acercarsele con otras intenciones, pero como dije, no estoy segura.

—— ¡¿Qué, qué?! —sus cejas de hundieron y tuvo que tranquilizarse en cuando se dio cuenta de que había llamado la atención de las otras mesas—. Ahem... ¿Ra Im metiéndose con ese patán? ¿Cuál es su problema? La única razón por la que podría creerle es por lo que le hizo a su propia her-...

—— Shhh... —le tapó la boca con su dedo índice y miró al rededor para asegurarse de que nadie las escuchara—. Eso mismo pensé, igualmente solo hablaré por lo que yo sé bajo experiencia y por lo que pasó entre ella y yo en su momento, es todo.

Yejun negó lentamente con la cabeza, —— Sí, mejor.

En cuanto pararon de cuchichear entre ellas para ponerse a desayunar tranquilamente, la castaña abrió los ojos con sorpresa y sin poder darle un sorbo a su bebida. Intentó hacerla una seña a June de que volteara, pero fue demasiado tarde.

Alguien colocó su bandeja de comida a un lado de la de June, la cual con bastante confusión se giró levemente para ver a la persona intrusa en su mesa.

Juwon se sentó con tranquilidad y un semblante impasible en su rostro al momento de ver a los ojos a June. En ese momento, un silencio de cementerio se proclamó en la mesa de los tres, creando una atmósfera pesada e incluso incómoda ante los ojos de Yejun, quien aún se encontraba con la boca medio abierta y la pajilla del jugo tocando sus labios estando frente a ellos dos.

—— Hola, Yejun. —saludó el de cabellos oscuros—. Hola, June.

Ambas lo miraron aún con confusión, por lo que el chico las regresó la mirada y alzó una ceja.

—— No es para tanto, solo voy a desayunar y las dejo en paz, tampoco es como que les vaya a hacer algo.

—— Es lo bueno, ya hiciste suficiente. —Dae June dejó de verlo y siguió comiendo de su plato, en cambio Yejun solo pudo encogerse de hombros y darle la razón a su amiga.

—— Quiero que seas consciente de que en esta ocasión yo no traje el tema a la mesa. —canturreó el de perlas azules y se llevó la manzana a la boca con una media sonrisa.

June tragó en seco y ladeó la cabeza para darle una expresión de cansancio a su intento de broma.

—— Eres tú el que vino a mi mesa a molestar.

—— La cafetería es de todos, no solo tuya, Junny.

—— ¡¿Por qué sigues llamándome así?!

—— ¡Cállense ya! —Yejun se mojó los dedos con un poco de jugo y les salpicó a los dos en el rostro para que dejaran de gritarse, por lo que esta se llevó una mirada de mal humor de parte de ambos—. Si van a discutir háganlo en otro lado, yo quiero comer y les aseguro que todos en esta cafetería también, pero sus griteríos no nos dejan.

Les hizo una seña para que miraran al rededor, la mayoría, si no es que todos los presentes se encontraban mirando a su mesa con cierta curiosidad

Se regresaron una mirada con molestia y sin decir nada continuaron comiendo en total silencio. La castaña suspiró y no tuvo de otra que seguir con lo suyo a pesar de tener que estar calmando a la pareja divorciada.

[...]

Terminando las clases de ese mismo día, June y Yejun quedaron para verse en el karaoke/arcade junto a unos amigos que los habían invitado desde el día anterior. La rubia sacó algunas cosas de su casillero y las colocó dentro de su mochila al mismo tiempo en que sacaba sus zapatos para colocarselos y salir de inmediato.

"¿Por qué a Juwon le gusta molestarme cuando ya no quiero saber nada de él?" se sentó en una pequeña banca al lado de la puerta de salida y al agacharse para ponerse el zapato, su mochila cayó de lado al suelo.

Iba a levantarla, pero alguien se le adelantó y la puso de nuevo en su lugar. June alzó la cabeza dispuesta a agradecer, sin embargo, su expresión cambió por completo de nuevo al ver el rostro de Juwon.

—— Quería hablar contigo. —se quedó frente a ella, haciéndose notar la diferencia de estatura entre los dos. Juwon tenía su cabello ondulado y desarreglado como era costumbre, junto al uniforme y su mochila de un agarre atravesandole en torso. June no pudo evitar mantener las miradas con él durante unos segundos antes de regresar sus ojos a los zapatos y atarlos con cuidado.

—— No tenemos nada de qué hablar. —murmuró.

—— Claro que sí.

Una caja de jugo de naranja hizo acto de presencia frente a su rostro, Juwon estaba extendiendo su mano para ofrecerle el pequeño regalo que era más bien un cambio para poder hablar con ella. June se reincorporó en su lugar y lo tomó con algo de inseguridad, dejándolo continuar.

—— Estos días estuve pensando sobre lo que pasó en el parque. Tengo que admitir que me pasé de idiota nuevamente y sé que no lo puedes creer ahora mismo, pero he intentado cambiar desde que me dejaste. Supongo que haberte visto de nuevo me pudo molestar por recordar lo que pasó entre nosotros y por eso actué de esa manera. —miró hacia fuera de la puerta, ahorita ya no había nadie pasando por la salida, quedaban muy pocos estudiantes—. No busco excusarme, solo quería que lo entendieras. Y respecto a lo de la cafetería... Iba a disculparme desde ese momento pero te enojaste y tu amiga estaba presente.

June parpadeó varias veces seguidas cuando Juwon se quedó en silencio. Él le regresó la mirada unos segundos después, conectandola con la de ella.

"¿Este es el mismo Juwon que me encontré en el parque? No... Mejor dicho, este no es el Juwon que yo conocía hace unos meses." sus respiración se agitó ligeramente y optó por ponerse de pie a su par, aún así obviamente no le llegaba ni a los hombros.

—— Está bien, pero sigo sin perdonarte, Juwon. Hiciste cosas que me hirieron, dijiste cosas que me humillaron, así que no puedo verte con sinceridad. —apretó la caja de jugo—. Gracias por el jugo y por querer disculparte, yo me tengo que ir.

Él se quedó ahí de pie mirándola irse sin haberle regresado la mirada al final de la conversación, solo tuvo la oportunidad de soltar un fuerte suspiro y caminar en la misma dirección que ella pero sin alcanzarla.

June abrió la pajita y la colocó al envase para ir tomando de la bebida en el camino, sonrió inconscientemente cuando el sabor tocó sus papilas gustativas. Era de la marca que más le encantaba.

Aunque a mitad de camino tuvo la necesidad de voltear hacia atrás, sentía que alguien la perseguía.

—— ¡¿Por qué me estás acosando?! —June dejó de tomar del jugo cuando vio a Juwon a unos pasos detrás de ella.

Él rodó los ojos, —— No te estoy acosando, pero tengo que ir a la misma dirección aunque no te guste.

—— Tú no vives hacia esta dirección.

—— Tú tampoco y aquí estás.

June se estaba cansando del sarcasmo de Juwon.

—— Voy al karaoke.

El de cabellos ondulados parpadeó y sonrió cuando se percató de algo.

—— Yo igual, así que te acompaño. —la alcanzó y se puso a su lado, siendo seguido por la mirada amenazante de la rubia.

—— No te creo nada... —lo ignoró y continuó caminando volviendo a tomar del jugo.

Juwon la miraba de reojo y veía lo rápido que se tomaba la bebida, no se había equivocado en irse a la segura comprándole el de naranja, aunque no esperaba que siguiera siendo su favorito.

El resto del camino no hablaron mucho, solo cuando Juwon decidía soltar una que otra pequeña broma de la cual solamente dos hicieron sonreír a June.

—— ¿De verdad nos invitaron a los dos? A las personas no les importa si ya no nos hablamos. —dijo Dae June con un poco de recelo, pero lo dejó pasar y entró al arcade siendo seguida por Juwon, quien ya iba menos tenso como ella.

—— Ya sabes que a los demás les gusta crear chismes. —alzó los hombros y miró al rededor.

—— Lo sé, pero tenía meses sin verte y de la nada pareciera que de nuevo te tengo en mi clase del día a día. —no era como tal una queja de Dae June, si no que se le hacía curioso.

—— ¿Comienzas a extrañarme? —Juwon sonrió y colocó ambas manos en los hombros de la más baja, pues se encontraba detrás de ella. June abrió la puerta del cuarto que habían reservado sus amigos para el karaoke mientras le daba una mirada de soslayo a Juwon para que dejara de tocarla.

Solo que al momento de abrir la puerta, justamente se topó de cara con Su Ae y Dohwa, quienes se encontraban riendo a morir hasta que notaron las nuevas presencias en la habitación.

—— Eh... —June los miró a ambos, algo desconcertada de verlos convivir tan de cerca cuando según ella no se conocían de casi nada.

Juwon alzó una ceja, —— Disculpen, pero este cuarto está reservado.

Su Ae y Dohwa compartieron miradas incómodas y después miraron a su amiga.

—— Lo lamento, Dae June. —Su Ae se puso de pie con algo de vergüenza—. No sabíamos que ya iba a ser ocupado y en realidad solo pasamos por una emergencia, pero ya nos vamos, ¿verdad, Dohwa?

Lo volteó a ver, amenazante, por lo que el chico asintió varias veces y también se puso de pie.

—— Hey, no pasa nada, tampoco hay prisa para que salgan. —la rubia volvió a sonreír y miró de lado a Juwon para que no lo exagerara—. Solo me sorprendí un poco de verlos aquí.

—— Sí, yo diría lo mismo... —Su Ae miró de arriba a abajo a Juwon, este ya la reconocía al ser una muy buena amiga de su ex pareja, pero ni se inmutó a su escaneo—. No sabía que habían vuelto a hablar.

—— ¿Qué? No, para nada. Solo nos invitaron a los dos de casualidad. —June soltó una risa que sonó más a un bufido, se había puesto nerviosa, especialmente con la mirada de Dohwa puesta sobre ella.

—— Sí, sí, se nota. —Su Ae tenía los ojos puestos en las manos de Juwon que seguían sobre los hombros de su amiga.

—— Hablo en serio. —quitó sus manos de inmediato y Juwon intentó esconder la risa dándoles la espalda.

—— Como sea, ya me voy. —Dohwa les hizo una seña con la mano para que lo dejaran pasar.

Juwon, quien era el único que le estorbaba el paso, primero lo vio directamente a los ojos y después le dio espacio para que pasara. Se notaba que para nada se conocían, aunque ambos eran conscientes lo de lo que era cada uno para Dae June.

Ella se quedó para en silencio por unos momentos hasta que recapacitó y salió disparada por la puerta para perseguir a Dohwa.

—— ¡Dae June! —Juwon intentó detenerla, pero no alcanzó a tomarle la mano.

Su Ae y el alto se quedaron en el marco de la puerta y se miraron de regreso con confusión.