"YOU SO FUCKIN' PRECIOUS WHEN YOU SMILE. HIT IT FROM THE BACK AND DRIVE YOU WILD. GIRL, I LOSE MYSELF UP IN THOSE EYES. I JUST HAD TO LET YOU KNOW YOU'ARE MINE"

NARRA ALAIA

Estoy acostada en mi cama sin hacer nada mirando videos de cualquier cosa en mi teléfono, son las dos de la mañana, me dormí a las diez de pero ahora me levanté en la madrugada y no tengo para nada de sueño. Lo único que puedo sentir es el frío de la noche. Cené con mi familia como todos los días, pero esta vez estaba un poco fuera de mi mundo por estar pensando en la propuesta de mi amigo arácnido la cual obviamente acepté. Es genial, ahora somos pareja, puede que sea raro de solo conocernos una semana pero es que siento como si lo conociera desde siempre y no sé por qué.

Iba a pagar mi teléfono cuando vibró un poco, ví que era un número desconocido que se me hacía conocido. Abrí el mensaje viendo la conversación. "¿Puedo preguntar por qué estás en línea a esta hora? supongo que es mi deber preguntar" Fruncí mi ceño con algo de confusión pero al mismo tiempo sabía quién era, agregué el número a mi teléfono como "Spidey💪🌼", regresé a la conversación.

"Solo me desperté y no tengo ganas de dormir. Aunque no me molesta para nada que me preguntes. ¿Y tú? ¿por qué estás a esta hora?"

Lo envié, él enseguida lo vió y comenzó a escribir. Me senté en la cama con la sábana y tomé una liga para amarrar mi cabello en una coleta mal arreglada. Mi celular vibró y lo miré. "No te voy a mentir. El hecho de que seamos novios me tiene emocionado y tampoco puedo dormir, es decir, la chica más linda del mundo está contigo."

Sonreí. "¿"La chica más linda del mundo"? creo que es un término largo si quieres darme un apodo aceptable."

"De acuerdo, entonces usaré otro." Ruedo los ojos divertida "oye, y... ¿No te molesta que no sepas mi identidad? quizás estés enojada, quién sabe".

"No me enojo por cosas insignificantes, y si no quieres que sepa quién eres debajo de esa máscara, lo entiendo. Te entiendo."

"Me mata la curiosidad así que no me quedaré con mi pregunta, ¿cómo crees que soy? hablo de físicamente"

"Mmmm, no te diré cómo creo que eres, más bien te daré pistas de lo que me gusta y no me gusta. Nunca me gustaron los chicos con ojos azules, pero si los tienes de ese color, quizás haga una excepción por tí."

"Awwww, me siento especial para tí 🙈 Pero descuida, no tengo ojos azules."

"Tengo una idea, más bien un juego, claro, solo si quieres aceptarlo, no te obligaré. El tiempo que quieras puedes decirme un rasgo físico tuyo o una pista sobre tu vida, así puedo lograr saber quién eres en verdad."

"Suena interesante... Okey, acepto, no tengo ningún problema con eso. Pero con una condición: si no averiguas quién soy en una semana, yo te diré."

"Trato hecho. Bueno, me han dado ganas de dormir, mañana tengo escuela, debo irme."

"De acuerdo, descansa. Las pistas comienzan desde ahora. No tengo ojos azules, son marrones."

"Okey... Lo tendré en cuenta. Buenas noches Spidey 💕"

"Buenas noches bonita 💕"

Salí de la conversación y me tiré boca arriba en la cama con una sonrisa mientras apretaba el teléfono de la emoción, pero al mismo tiempo sentía un extraño presentimiento de reconocer ese apodo. Pero no sé de dónde.

[...]

Al día siguiente

NARRA PETER

- Ya te dije que no voy a ir a hablarle, Ned. - le negué a mi amigo gordito por décima vez mientras hacía flexiones

Era día de escuela, estábamos en la última hora del día en clase de gimnasia. Todos estábamos haciendo ejercicio, de vez en cuando volteaba hacia el otro lado del gimnasio donde estaba Alaia con Betty haciendo lo mismo. Ned no paraba de hacerme preguntas de cualquier tipo.

- ¿Por qué no? Peter, Alaia te gusta, debes decírselo. - siguió insistiendo, me senté mirándolo

- No puedo decirle, ¿okey? no todavía. Hablé con ella ayer y le dije que no me gustaba, debe seguir creyendo que es así - mentí. En realidad no puedo decirle que me gusta porque me rechazaría ya que está con Spiderman y no conmigo

- Cómo quieras, después te veré celoso cuando esté caminando por ahí con otro chico - rodó los ojos, volteó - solo mírala, dime, ¿cómo demonios no va a conseguir novio tan rápido?

Giré mi cabeza hacia allá, está ayudando a Betty con sus ejercicios. Me le quedé mirando un buen rato mientras estaba distraída. Ned tenía razón, Alaia puede tener a cualquier chico que quiera pero obviamente ya está con Spidey. De pronto estoy pensando en otra cosa. La ropa de gimnasia le queda bastante bien, el short color mostaza deja a la vista sus delgadas y largas piernas blancas y esa camisa azul rey le queda un poco apretada por lo que permite ver su delineada figura. Díos, Peter, ¿así o más perverso?

- Se te va a caer la baba, Pito Parker. - habló Flash pegándome en la frente con su mano, me acaricié con una mueca y lo miré parado al frente nosotros - sé que estás fantaseando con ella, se te nota de distancia

- ¿Y a tí se supone que te interesa? - pregunté con una ceja alzada - y no, no estoy haciéndolo.

- Vamos, ¿quién no lo haría? llevo persiguiéndola como un perro faldero para que me haga caso y ni eso. Pero descuida amigo, si yo no puedo, tú menos.

Comenzó a caminar alejándose de nosotros.- No le hagas caso Peter. Lo único que quiere es desanimarte, Alaia es una muy buena persona, sé que algún día te hará caso. Sé positivo.

Asentí lentamente y seguí con mis flexiones. Flash me cae tan mal, cree que por tener dinero puede querer lo que sea, gracias a Dios y Alaia no le hace caso, es un idiota. Para lo único que la quiere es para tener sexo y listo (aunque prefiero el término "hacer el amor", pero con Flash no puede utilizarse ya que no siente amor como tal hacia ella, en cambio yo sí)

La campana de la salida sonó, enseguida todos se fueron a los vestidores. Me levanté del suelo y empecé a caminar junto con Ned.

- ¡Parker! - me llamó el entrenador, lo miré - ¿puede recoger las pelotas de básquet? hay reunión de maestros y no quiero perder tiempo. Ganarás puntos extras.

Asentí sin importancia, Ned se fue para cambiarse. Me quedé solo en la gigante cancha. Comencé a tomar las pelotas metiéndolas en la malla que había a un lado, duré unos cinco minutos ya que eran muchas. Todo el tiempo me la pasé pensando en las cosas que tenía que hacer hoy: hacer mis deberes, salir a patrullar y luego quizás ir a visitar a mi chica.

Al terminar, miré que todo estaba bien, y caminé hacia los vestidores donde se supone que no había ni una persona. Entré al lugar cerrando la puerta detrás mío, pasé entre las pequeñas taquillas y me acerqué al número de mi casillero, me quité mi camiseta, abrí mi casillero pero fruncí el ceño al no ver mis cosas. Solamente... ¿Maquillaje y libros de color rosado? ¿qué?

- ¡Ah! - escuché detrás mío, me sobresalté volteando, ví a Alaia mirándome con el ceño fruncido mientras se bañaba. Gracias a Dios y había una pequeña pared que la tapaba hasta los hombros, era transparente, pero aún así podía ver su figura - Peter, ¿¡qué estás haciendo aquí!?

- Vine a darme una ducha,son los vestidores de... - miré hacia la puerta, donde había una clara señal de que era el vestidor de chicas. Abrí mis ojos volteando hacia ella. - ¡lo siento! me iré enseguida, te juro que no ví nada. ¡Lo siento!

Tomé mi camisa y fuí corriendo hacia la puerta, quise abrirla pero no podía. Intenté varias veces pero ni siquiera. Me asomé por la pequeña ventanilla y ví que tenía un trapo amarrado con otra puerta del lado evitando que se abriese, miré al final del pasillo y ví a Felicia saludándome cínica para después irse. Esa maldi... ¡Es una venganza!

Me regresé en mis pies de vuelta a la taquilla del frente de las duchas, miré a Alaia con mucha pena.

- Mmmmm... Creo que estamos encerrados. - murmuré rascando mi nuca, ella abrió sus ojos - pero descuida, puedo llamar para que vengan por nosotros.

Busqué mi teléfono en mi bolsillo pero no lo encontré, suspiré recordando dónde lo había dejando. En los vestidos de chicos, en mi taquilla. - No, no puedo llamar- negué - pero... Yo... Necesito bañarme, huelo a sudor, y si me quedo así lo más probable es que huela peor.

- Me estoy bañando yo, ¿cómo crees que vas a meterte aquí? - preguntó frunciendo su ceño

- Podría no mirarte, es decir, ninguno de los dos nos miramos y listo - me encogí de hombros mientras trataba de no verla tanto - ¿qué dices?

Se quedó callada. Simplemente se volteó hacia su frente, lo tomaré como un sí. Comencé a quitarme mi ropa con lentitud, esto es realmente incómodo.

Quedé desnudo y caminé hacia allá, me metí a la ducha a su lado que estaba a un metro de distancia de la suya, abrí la regadera y el agua cayó encima mía. Los dos nos dimos la espalda. Empecé a ducharme como siempre. En el lugar solo se escuchaba el sonido del agua cayendo. Miré un poco a mi derecha, viendo un poquito de su espalda desnuda, pero volví mi vista al frente. No, Peter, dijiste que no mirarías.

Cerré el grifo y salí con una toalla en mi cadera, caminé rápidamente hacia donde había dejado mi ropa y me la coloqué, era lo único que tenía. Alaia salió de la ducha, su taquilla quedaba al frente de la mía por lo que la abrió dándome la espalda, sacó un short y una blusa de tirantes. Me miró.

- Ummm... ¿Podrías...? - dijo haciendo un círculo pequeño con su dedo índice, fruncí mi ceño, pero después entendí lo que quería decirme.

- Oh, sí, no hay problema. - acepté dándome la vuelta con un sonrojo en mis mejillas

Esperé unos segundos a que se cambiara, mi vista se fue a la taquilla de al lado mío, más bien en el espejo que apuntaba directamente hacia ella. Abrí mis ojos mucho al ver cómo se colocaba la ropa interior, aparté enseguida mis ojos de ahí. Peter, no seas pervertido, no la mires. Miré de nuevo y esta vez ya estaba cambiada, volteé. Comenzó a cepillar su cabello, terminó rápidamente.

Fue a la puerta y se asomó, intentó abrirla, pero no funcionó.

- Es una broma de mal gusto... ¿Quién cerraría la puerta? - habló para sí misma cruzando sus brazos, giró hacia mi - creo que estamos atrapados juntos aquí. Mi teléfono no tiene batería y el cargador está en mi casa.

- ¿Qué haremos entonces? - pregunté confundido

- Esperar. A las dos y media empiezan a revisar toda la escuela por si acaso se quedó alguien, lo sé porque me quedo varias veces en la biblioteca. - respondió

Asentí. Me senté en el suelo descansando mi espalda en las taquillas, ella hizo lo mismo, a mi lado. Eran las dos apenas, lo sabía por el reloj que estaba a nuestro frente en la pared. Podría romper la ventana de la puerta y quitar lo que no deja que la abramos pero después me metería en problemas.

- ¿Y estás bien? - pregunté. Ella volteó a verme. - digo... Con los temas de la escuela, tu familia y eso. ¿Y el chico que me contaste del otro día?

- Sí, todo bien- contestó, puso un mechón de su cabello en su oreja - ... El chico del que te hablé me dió una sorpresa ayer, fue muy lindo, supongo que en verdad me quiere.

- Qué bueno - le sonreí, ella lo hizo igual pero sin mostrarme sus dientes - ¿y te hace feliz?

- Claro, digo... No lo veo a cada rato pero aprecio que saca tiempo de sus deberes para verme. Siempre gustan las personas que a pesar de que están muy ocupadas tienen tiempo para sus relaciones.

- Espero que les vaya bien - asintió - oye, lamento si Felicia te ha seguido molestando, es muy pesada. Enserio perdóname.

- No te preocupes, no he hablado con ella, bueno, no de la misma forma que la primera vez que la ví- se encogió de hombros - pero enserio lo entiendo, es tu ex, te sigue queriendo a pesar de que dejaron la relación

Asentí. Dejando de hablar y seguimos sin decir absolutamente nada. Solo estaba esperando que alguien llegase a ayudarnos.

- Pero no lo entiendo Peter - habló, la miré y ella a mí - ¿por qué todos los chicos quieren conmigo? es decir, no soy para tanto, no tengo un cuerpo de Victoria's Secrets y mucho menos una actitud admirable

- Eres linda, supongo que es eso lo que le atrae a las personas - contesté

- ¿Tú qué opinas? - preguntó, alzó una ceja - sé sincero conmigo, si te llegase a gustar, ¿qué hubieras visto en mí? porque realmente yo no lo entiendo.

Mantuve su vista con la mía. Nunca pensé que fuese así de insegura consigo misma, no lo fue, no lo es y nunca lo será. Pero es una faceta de ella que supongo que estoy empezando a descubrir.

- Supongo que no te querría solo por tu cuerpo, eres muy bonita tanto física como mentalmente, Alaia. Eres hermosa, amable, considerada; Y siempre pensaré que eso es lo que vale la pena ver. Tal vez tú no lo pienses así, pero yo sí lo hago. Y quizás, primero hay que ver los sentimientos y después el físico para decir que realmente te gusta alguien.

No dijo nada, ambos nos quedamos viéndonos un rato sin una palabra. Había expresado cómo me había enamorado de ella sin darme cuenta, de cómo me había llegado a gustar. Y es que cada palabra que dije fue cierta; cuando la conocí no me gustó porque sí. Me gustó porque la llegué a conocer bien y eso es lo que me atrajo.

Nuestra pequeña conexión se interrumpió por el sonido de la puerta abriéndose, el guardia de seguridad entró y nos miró con el ceño fruncido. Alaia se levantó y tomó su mochila de la banca, caminó hacia allá, pasó al lado del hombre y se fue. Suspiré. Creo que le estoy dejando muchas dudas sobre lo que siento por ella.

El apodo que Spidey le tiene a Alaia en contactos es: "Esposa👑💕"