Dormí unas pocas horas y estuve pensando en varias cosas, aún tenía muchas dudas, y quería saber más del plan de Eren aunque en un principio no tenía interés, ahora necesito calmarme y saber qué pasará, ¿Por qué se quedó en un hospital? ¿Qué es lo que trama? ¿Estará sólo? ¿Hay más que luchen a su causa?

-T/N que carita te cargas ¿Estás bien?- Marta me encontró a unos cuantos metros de la entrada del hospital.

-Hola Marta, si todo bien, sólo que ayer me encontré con un amigo y salimos a platicar un rato.

La verdad era que después de hacer mi tiradero en el baño del personal, tuve que recogerlo después para que no se dieran cuenta, eso me tomó más desgaste físico de lo que pensé, aparte de mi estabilidad mental.

-Bueno, por muy amiga tuya que sea, mi deber pisando este edificio es que alejes tus problemas personales del área de trabajo- Entramos al edificio principal.

Ya me imaginaba que su amabilidad de ayer era una farsa, pero ciertamente tenía razón, mi deber moral de mi trabajo no debe interferir con lo que yo siento al enterarme de la verdad.

Nos metimos a la oficina de juntas.

-¿irás con los del edificio del psiquiátrico, verdad?

-Si Marta, me gustaría pasar un par de días en esa zona- Me hice media coleta, tomé los documentos que tenía que revisar del análisis de los otros pacientes que hicieron los enfermeros y aparte inventar uno de Eren.

-En hora buena, sabes que el Doctor Jeager será transferido a nuestro hospital, así que necesito que te quedes más horas, incluso puedes dormir ahí en la sala del personal.

¿Jeager? Cómo el papá de Eren, no importa las medidas que tenga que tomar para sacar toda la información que necesito.

-¿Y ese doctor Jeager, quién es? - Caminé para la salida esperando una respuesta de Marta detrás de mí.

-Era muy famoso entre los eldianos, el primer doctor exclusivo para ellos, pero después dicen que se volvió loco después de que Grisha Jeager su hijo, traicionara a Marley, realmente ya no es de utilidad ese viejo doctor pero logró curar a gente importante en Marley y aún le tienen esa gratitud, es por eso que puede seguir viviendo sin hacer nada, aún por los pecados de su hijo.

-Ya veo, bueno me avisas cuando llegue para preparar la documentación, habitación y medicación necesaria para la hospitalidad de el gran doctor Jeager- Eren tienes demasiada razón, maldito guapo andrajoso.

Camine para el edificio dónde se encontraba Eren, era la hora del desayuno así que mis subordinados sacaban a cada paciente de su habitación y los llevaban al comedor.

Toqué la puerta de Eren, pero no respondió.
Toqué por segunda vez, sin respuesta.
No era alguien de mucha paciencia.
A la tercera vez que toque abrí la puerta.

Eren estaba aún durmiendo tenía el dorso descubierto, dejando a la vista sus pectorales y hombros bien marcados.
Él era totalmente mi tipo.
Pero jamás me metería con un andrajoso por muy guapo que esté.

-Levante, es hora de desayunar- Con mi pierna moví su cama, inmediatamente de ese movimiento él me tomó por la pierna y me apretó abriendo los ojos.

-Ayer escuché tu lloriquienta voz por un largo rato, da gracias que pude reconocerla, de no ser por eso te hubiera roto la pierna.

Se levantó y la sábana que le tapaba cayó hacia el piso, dejando ver más abajo, las entradas del abdomen y el poco vello que tenía debajo del ombligo que conectaba más allá, reaccioné antes de seguir mirando y le aventé la sábana que se cayó.

-No tienes modales enfrente de una dama, porqué duermes desnudó, además tapate no podré dormir bien por tu culpa.

Giré mi cabeza, para que él se pudiera cambiar.

-¿A caso no podrás dormir por qué vas a pensar en mí? -Escuché como tomó la muleta que estaba alado de la cama y camino un par de pasos para estar frente a mí.

-Primero bañate andrajoso, y después piensas por mi.

Salí de la habitación, mientras el se cambió. Después de unos minutos me siguió al comedor, sin decir ninguna palabra.

Al regresar del comedor llevé a Eren al patio, y me regresé a la habitación del personal, dónde podía mantenerlo vigilado viéndolo desde la ventana, mientras terminaba de llenar los documentos que tomé en la mañana.
Pasaron un par de horas y logré ver qué un pequeño niño rubio con uniforme de soldado estaba sentado alado de Eren, y se veía algo decaído mientras platicaban.
¿Quién es ese niño?
Espere un par de minutos y el niño se levantó, pude ver la banda que traía, un candidato a guerrero portador de algún titán.

Eren, por lo que más quieras no involucres a ese niño.