Capítulo #4 "Fiesta De Bienvenida (Final) 

Las luces de neón. La buena música del DJ contratado. Los alumnos bailando. Casi todos llenos de alcohol y diversión. Y otros tantos, con mucha droga encima. La fiesta de Bienvenida, sin más, seguía con todo el éxito esa noche. 

Donde en un mismo escenario, pasaban muchas cosas con distintas parejas y personas. 

Hinata y Takemichi mientras bailaban, se rían y demostraban mucho su amor debido al tiempo que no pudieron verse. Para evitar problemas con el padre de Hina, quien en el acto de graduación de preparatoria, se había mostrado visiblemente estoico con Takemichi al enterarse que era becado, ese mismo día de conocerse.

Cerca de ellos, Chifuyu bailaba en conjunto con su hermana, Allison y un amigo de Takemichi, el cual se había presentado como Atsushi Sendo, pero al que muchos apodan como Akkun. 

Izana bailaba con una compañera de su facultad, pero aun así, cuando la chica le daba la espalda, aprovechaba para mirar hacia donde Rebe aun bailaba con aquel chico rubio de tatuaje en la sien. 

Kazutora y Baji con unas chicas que conocían desde preparatoria. 

Senju bailando con su novio Wakasa.

Hannah con Souya.

Nahoya y Abel con una misma chica.

Emma bailaba con el intenso de Evan. 

Takeomi se encontraba sentado con su novia, ambos bebiendo y disfrutando, luego de bailar un par de canciones. En eso, Takeomi se metía una pastilla en la lengua y se la pasaba a su chica.

Taiju bailaba ahora con Yoko amistosamente.

Shinichiro le había extendido la mano a Yuzuha para que bailaran juntos. La chica pensó por algunos minutos, pues realmente le daba un poco de pena ya que no conocía bien a Shinichiro. Pero suspiró y sonrió tranquila, porque hasta ahora el chico se había portado bien con ella. 

Entonces la música se detuvo de golpe, y todos se quejaron y maldijeron calurosamente.

Pero se detuvieron un poco cuando vieron quién había sido. 

—¿Hola? ¿Hola? — decía Sakura por el micrófono.

Mitsuya no miraba con buena espina a su novia sobre el escenario. 

— ¡Te escuchamos, primor! — gritó alguien entre el mar de gente.

—¡Gracias, desconocido! — canturreo Sakura, y muchos rieron. 

—¿Ahora qué le pasa a esa loca? — le susurró Allison a Hinata, quien solo se encogió de hombros. 

—Bien, muchos se preguntarán porque la bella Sakura tomó el micrófono  — Sakura sonrío gatuna. — Simplemente, quería dejar claro unas cosas… a los nuevos. 

Yuzuha alzó una ceja. 

Senju solo meneaba la cabeza, recordando las palabras de su amiga sobre que les dejaría claro a las chicas nuevas quien era su hombre. 

—Primero, quizás muchos ya me han visto por internet y revistas, pero soy la mismísima Sakura Johnson.  Ya saben, privadas y lujosas clínicas Johnson.

—Mi compañera de cuarto sí que está loca, amor — le susurro Victoria a Takeomi, quien solo meneo la cabeza ante tal numerito.

— Me alegro de no ser Mitsuya en estos momentos — Fueron las únicas palabras que salieron de su parte. 

—Así que ya saben, nuevas, no deberían meterse conmigo si saben lo que les conviene. — Sakura ladeó la cabeza y dejó todo su peso en una sola pierna. — Pero sobre todo, quería dejar bien claro algo  ¡Takashi Mitsuya es mi hombre, así que niñatas, espero no se le acerquen! Si, realmente, enserio, saben lo que les conviene.

Sakura le tiró el micrófono al DJ y se bajó del escenario corriendo, hasta llegar hasta donde Mitsuya ahora estaba, quien estaba un poco colorado por toda la atención en ese momento puesta en él.  

—Mitsuya debe hacerlo bien, para que esa rikura no le dé pena de propagar que está cogiendo con un niñato — comentó sardónico Ran a Rindou desde la barra. 

—Eso, y que es el hijo del legislador — le siguió la burla su hermano menor. 

Cuando Sakura llegó donde Mitsuya, se le lanzó cual koala y le plantó tremendo beso en la boca. 

El DJ justo al momento volvió a colocar música, y muchos se olvidaron rápido de aquel numerito para seguir con lo suyo.  Igual, muchos ya conocían y estaban acostumbrados los arranques de Sakura Johnson.

—Mi amor ¿ves como yo no temo decir lo que siento por ti? Y tú ni siquiera me has defendido aun de aquella salvaje. 

Mitsuya suspiró. Y alargó sus labios molesto. 

—En realidad, sí le dije algo. Pero Sakura, la verdad, lo que acabas de hacer…

—¡Ay! ¿Si le dijiste cosas? Sabía que me defenderías — la chica saltó de nuevo a él y no lo dejó hablar mientras volvía a comerlo a besos. 

En eso, Senju llega a su lado con Wakasa. 

—Amiga, estuviste muy… ¿territorial?— dijo Senju divertida.

—Te dije que iba a poner en sobreaviso a las nuevas — le sonrío zorruna Sakura. Luego se giró de nuevo hacia su novio — ¿Bailamos?

Mitsuya solo asintió.  

Yuzuha desde donde estaba aun no había podido quitar su mirada de Mitsuya y Sakura. Fue cuando ambos empiezan a bailar de forma muy comprometedora, que finalmente apartó su mirada y se encontró con la sonrisa de Shinichiro. 

—¿Aun me aceptarías un baile?

Yuzuha miró su mano.

—Sí, claro, vamos a bailar. 

Yuzuha intentó no tomarle importancia a lo que sucedió hace unos minutos. 

Mientras ambos bailaban, se encontraron sonriendo mutuamente cada vez que sus miradas cruzaban. 

En ese momento, Mitsuya había de nuevo buscado con la mirada a Yuzuha. Hasta que la encontró y tras ver a la chica bailando con Shinichiro, algo se agitó en él y empezó a moverse más intenso en su baile con Sakura.

***

Sanzu en la barra se encontraba con Lin, Koko e Inui, los cuatro bebían y bebían sin parar. 

—¡Que buena fiesta! — gritó Sanzu tomando del hombro de Inui. 

—Jajajaa, lo sé— Fue cuando Inui notó que Sanzu estaba tomado de mano con Lin.

¿Qué demonios está pasando aquí?, pensó Inupi. 

—Mesero, dame otra ronda— gritó muy feliz Sanzu. En eso, volvió a mirar a Inui e hizo una mueca. — Cielos Inui, sin duda estoy tan drogado y borracho ahora, que por un momento te confundí con tu hermana Akane. 

Y terminó riendo escandaloso, a lo que Inupi solo rodó sus ojos. 

La chica junto a Sanzu también se río mientras se aferraba más al chico de cicatrices.  El chico que estaba repartiendo las bebidas le entregó a Sanzu lo pedido, y así ambos se retiraron de la barra. 

—Malditos seas Sanzu. 

—¿Qué sucede?—preguntó Koko. 

Seishu miró a Kokonoi, y por un momento pensó en decirle, pero luego se retractó dado a que aún no conocía bien aquel chico, y quizás, solo quizás, podría hasta ser un soplón. Así que ¿Cómo decirle él que Sanzu le haya dado pastillas y alcohol a la hija de la directora podría volverse un mega problema si a esta se le iba la lengua con su madre?

Koko lo miró esperando que le dijera algo. 

—No, no es nada Kokonoi, mejor sigue disfrutando. 

—Ah vamos, dime, me quedaré con la intriga.  — Y le sonrió sardónico. 

Inui soltó un suspiro y lo miró fijamente. 

Realmente sus ojos me recuerdan a un gato, pensó Inui. 

Inconscientemente una sonrisa apareció en su rostro, la cual no duró mucho.  

—Mira, te parece si de momento disfrutamos la fiesta y el lunes que ya entramos a clases oficialmente ¿te digo como están las cosas aquí? —preguntó Inui a Koko mientras este daba un sorbo a su bebida. 

—Está bien, chance y nos toca en el mismo salón. 

—Depende la facultad en la que te encuentres. — Y tras decir eso, Inupi sonrió coqueto. La bebida empezando a sacar un poco su lado gay. 

—Medicina. 

—Entonces— Inui toma la bebida de Koko y le da un tragó. — Hola, compañero.

Koko sonrió.

—Dime Koko, así me decían en la prepa.

—Y tu Inupi.  

***

Por otra parte en el salón de fiesta, Baji y Kazutora se sentaron un momento con Mikey, quien no se había parado para nada a bailar en toda la noche . Las chicas que bailaban con ellos se dirigieron hacia la barra por más tragos.

—Mikey, deberías bailar un poco, no sé, hay muchas bellezas nuevas que ingresaron.  

—No me interesan— musita el chico mientras bebía. 

—Mikey ¿No será que eres gay como Inui? —dijo Kazutora muy divertido. 

Mikey chasqueo los dientes y miro molesto pero algo divertido a Kazutora. 

—Si se me llega a parar el pene una vez por un chico, te aviso. Pero mejor espera sentado.

Keisuke y Kazutora rieron.

—Pero, realmente sí entraron muchas becadas bellas este año. 

—Sí. — En eso, Mikey dirigió una mirada hacia donde estaba Rebe, quien aún bailaba con aquel chico del tatuaje. 

—¿Solo sí? —Comentó Baji tal vez un poco preocupado por su amigo, a quien conocía incluso desde muy niños al ser casi vecinos. Y no era que Mikey no hubiera tenido sus ligues, porque los había tenido, pero últimamente el chico andaba más asocial y antipático de lo normal. 

—Ustedes a veces hablan como si ya hubieran tenido mucha experiencia con chicas. 

—Oye, ligues si he tenido. —refunfuño Baji. 

Mikey chistó.

—Están tan pegados que muchas veces cuando Kazutora salía con Alma, Keisuke iba, tal carabina, con ustedes dos. Hasta seguro que cuando Kazutora fue a perder la virginidad, Baji estuvo ahí —dijo petulante y burlón el chico. 

—¡Oye! De Alma no hables — saltó Kazutora.

Mikey lo ignoró. 

—Pero, ¿saben? A veces siento que les va a venir una desgracia a ustedes dos. Pegarse tanto a las personas, nunca trae nada bueno.

Baji quedó un poco extraño, alzó un poco la ceja, para ladear un poco su sonrisa. 

—¿A qué te refieres con eso Mikey?

Mikey sin quitar la vista de la pista de baile le contestó a Baji. 

—Cuando uno se enamoré de verdad, las cosas cambiarán entre ustedes y valdrá madre todo. 

Kazutora y Keisuke se miraron entre sí. 

Mikey siempre había sido extraño, pero en ese momento se había superado. 

—Pero no les deseo mal chicos, por supuesto que no. 

—Bueno, ahora de enano asocial a adivino fatalista —No pudo evitar bromar Keisuke para disipar el incómodo momento que los había rodeado.

Mikey solo sonrío frío. 

***

Un poco lejos de ahí, Emma se encontraba ya demasiado ebria mientras bailaba. Cuando Sakura interrumpió para dar su discurso, había ido a por la barra a por más bebida. Y bebió tras cada que su mente le rebobinaba a Draken bailando con Rebe.

No sabía qué le pasaba, pero algo la había hecho actuar impulsiva a diferencia de cómo era ella. 

O puede que muy en el fondo si lo sabía. La desilusión y frustración porque el primer chico que llamaba su atención haya también sido el de su amiga. Y que, solo tal vez, si ella hubiera hablado primero, no sería ella quien ahora tenía que echarse atrás. 

—Eres tan sexy — le susurró Evan al oído. Quien como se había prometido, aprovecharía del estado de ebriedad de la rubia para toquetearla a gusto, como bien deseaba desde hace un año.  

Pero ese atrevimiento empezaba a meterse de a poco en la mente de Emma nublada por el alcohol, dado que su cuerpo empezaba a sentirse incómodo, y le mandaba señales a su cabeza. 

Casi cerca de ellos, Draken había empezado a mirarlos. Había querido apartar su mirada, pero de pronto, observó que la chica rubia empezaba a tratar de quitarse al chico de encima, pero este la jalaba y volvían a bailar. 

Su ceño se frunció un poco. 

***

Por otro lado, la hermana mayor de Chifuyu, Alice, ya se encontraba un poco tomada, en compañía de sus nuevos amigos.

Alice era una chica bastante gordita, pero con una carita muy linda, casi de muñeca con aquellos grandes ojos verdes. Solo que esta belleza escondida la chica no buscaba casi nunca resaltar con maquillaje.  

—Alice ¿no crees que has tomado mucho? —le dice de pronto Chifuyu.

Alice bufó.

—No.

—Claro que sí, y ya sabes cómo te pones cuando te embriagas.

—¡Recuerda quien es la mayor aquí, Chifuyu! — Y tras decir eso, se marchó. A lo que este suspiró amargamente. 

***

—Ahhhh, ahhhh, dameee...m-mmas Sanzu. 

Se podía apreciar a Sanzu dándole fuertes embestidas a Lin, detrás de los baños, en un lugar un tanto oscuro. 

Sanzu con mucha fuerza y resistencia tenía a Lin recargada en la pared de frente con él. 

Este cargándola un poco con los brazos y ella con la falda levantada y el miembro de Sanzu metiéndose dentro de su intimidad. 

Sanzu elevó un poco la blusa corta de Lin, dejando ver sus pequeños senos, a los cuales el chico agresivo, comenzó a succionar y morder con una agresividad uno de sus pezones, incluso llegando hasta a dejarle marcas rojas. 

Cabe mencionar que no tenían protección. 

El rostro de Lin estaba completamente rojo y excitado. Sanzu no detenía las embestidas, hasta que sintió que no pudo más y terminó viniéndose dentro de la chica, soltando un orgasmo un tanto fuerte y audible para ella. 

—Ah, no mames...que rico se siente hacerlo con droga encima. 

Lin intentando recuperar el aliento. 

—De haber sabido que esto se sentía, hubiera probado esto desde hace mucho. 

Sanzu sonrió para Lin y tomó una pastilla y se la puso en la punta de la lengua. Tomó de la nuca acercándola y pasándole la pastilla, la chica correspondió a Sanzu. Tras tomarla, Sanzu la beso, para nuevamente ambos calentarse. 

*** 

Senju se junto a bailar con Sakura en medio de una canción que ambas amaban. Ambas juntaron sus pechos y empezaron a bailar de un modo donde terminaban frotándose y movían las caderas de lado a lado. 

Ambas se conocían desde pequeñas, aun siendo Sakura cuatro años mayor que Senju, habían creado una amistad que ellas consideraban fuerte, lindo y cómodo. Así que tenían la confianza para bailar de esa manera. 

Sakura sin duda hacía todo su mayor esfuerzo porque Mitsuya la viera, pues con la ropa que traía y haciendo esos movimientos sensuales, quería prender a su novio. 

Ellos de novios solamente tenían desde el año pasado, cuando Mitsuya estaba en su último de preparatoria y Sakura ingresaba a su tercer año de administración de empresas. 

Muchos se preguntaron el porqué de esa relación, pero también se abstenía de hacer comentarios con ambos siendo hijos de familias muy importantes.  

Senju enredo sus brazos sobre el cuello de Sakura y está recorrió con sus manos la cintura pequeña, delgada y bien formada de su amiga.  

Se sonrieron de forma pícara, mientras a paso lento iban flexionando las piernas, para llegar al piso, y mover la cintura y caderas al ritmo de la canción. 

Sakura volvió a ver a su chico, el cual aún estaba muy entretenido en su plática con Wakasa. Este último, si veía al dúo de chicas bailar aunque estuviera hablando con Mitsuya. 

Sakura frunció el ceño al ver que su chico aun no la miraba como ella quería.

—¿Qué sucede Sakura? —preguntó Senju al mirar que su amiga dejó de moverse. 

—Senju, ve a Mitsuya y Wakasa—dijo en tono enojada.

La albina dirigió su mirada hacia Mitsuya y después hacia su chico. Mientras se ponía de espaldas con su amiga. 

—¿Qué tienen? —preguntó un tanto confundida. 

—Solo Wakasa nos está observando, bueno, a ti en realidad. Estoy intentando ser lo más sexy, pero nada que el chico me ve. 

Senju nuevamente volvió a verlos y efectivamente, si era como Sakura le había dicho. 

—Tengo que hacer algo para llamar más su atención—dijo muy segura y molesta. —Él sabe que debe verme y prestarme atención. 

—¿Qué tienes en mente? 

—Perdón Senju, ya lo habíamos hecho una vez, pero.....tengo que volverlo a hacer. 

Senju se dio media vuelta encontrándose con Sakura de frente. 

—¿De qué hablas?

—Tú sigues bailando. 

Las chicas continuaron su baile sensual entre ellas hasta llegar a un momento en el que los rostros de las chicas quedaron muy cercas. Sakura tomó a Senju del mentón, acercándose a su rostro, para plantearle un beso, Senju quedó impactada al principio, pero por ayudar a su amiga le siguió el juego. 

Wakasa engrandeció los ojos de inmediato, y entonces le hizo seña a Mitsuya.

Mitsuya miró enseguida y su rostro se desfiguró de la sorpresa, viendo a su novia y Senju besándose intensamente.

Tragó saliva.

Wakasa quien estaba viendo toda la acción, ya estaba comenzando a sentir una pequeña erección debajo de su pantalón. Mitsuya, que a pesar de todo, si deseaba a su novia y era chico en etapa hormonal, también sintió un tirón en su ingle. 

Sakura sonrió y con un beso entre labios le susurró a Senju. 

—Gracias. 

Y lentamente la soltó, terminando el beso. 

Senju le guiñó el ojo. 

—Espero que hagas lo mismo, cuando yo necesite de ti. 

***

Draken y Rebe salían de la pista en ese momento, y  pasaron por un lado de Emma y Evan.

Ambos tuvieron distintas perspectivas de ambos chicos. 

Rebe sonrío pensando en cosas color rosa.

Draken arrugó el ceño viendo que la chica en realidad estaba muy ebria.

—¿Me acompañas a la mesa de mi amigo Mikey? —escuchó de Rebe y volvió la mirada a la joven. 

—Sí, claro, te acompaño. 

Pero en eso volvió a mirar atrás y miró cómo el chico sacaba a Emma de la pista de baile y llegaba casi a la pared del salón. En eso, captó que la rubia extiende sus brazos como una pared, pero el chico no hacía caso. 

Draken entonces no pudo más y fue donde ellos.

—Enseguida vuelvo Rebe—dijo a la peli azul, quien se quedó extrañada en mitad del camino.

Draken sabía a la perfección que no tenía por qué meterse en los asuntos de los demás, pero definitivamente había algo que no le cuadraba en esos dos. 

—Suéltame, Evan. 

—Ándale, no te pongas intensa Emma, se que quieres—decía mientras pasaba su lengua por el cuello de la chica. 

Ella con sus delgadas, suaves y pequeñas manos intentaba quitarse al chico de encima, pero parecía un poco imposible. Sentía su cuerpo muy sensible y sin fuerza. 

Evan de nuevo busco meter su mano por debajo de la ropa de Emma. Esta sintió la fría mano e inmediatamente intentó quitárselo de encima. 

—¿Qué estás haciendo? Voy a gritar — decía con voz patosa. 

—Inténtalo—dijo poniendo su mano sobre la boca de la chica rubia y pasando su lengua sobre la mejilla de ella. 

Emma pataleaba y se movía intentando quitárselo de encima, pero era imposible, hasta que alguien llegó tomando a Evan de su camisa y quitándoselo de encima de la rubia de una manera violenta. 

—¿No escuchaste imbécil? La chica no quiere—dijo viéndolo muy feroz.

Al final, su sospecha no había sido errónea. 

—¿A ti quien te habló? —dijo Evan muy molesto, llamando la atención de algunos cerca de ahí. 

—No puedo creer lo que estabas a punto de hacer pendejo. 

Emma aterrada trago saliva y se puso detrás de Draken, intentando calmar su respiración y ritmo cardíaco. 

—¿Y qué mierda te crees tú? Batman qué viene a defenderla, esto es algo entre ella y yo. 

—Te lo diré una vez más—contestó Draken— Lárgate y no la vuelvas a tocar de esa manera si no quieres que yo te parta tu madre, cabrón. 

Evan miró a Draken muy desafiante, su ritmo cardíaco se aceleró un poco, este levantó un poco su brazo cuando alguien lo detuvo. Este giro su mirada encontrándose con Abel, hermano de Rebeca. 

—No insistas Evan, la has cagado. 

—Abel, quítate de mi camino. 

—No lo haré, mira lo que has hecho, lo que estabas a punto de a hacerle a Emma, ¿Estas idiota o qué? Agradece que Izana, Shinichiro y Mikey no te vieron, porque si no te matan. 

—Ay, por favor, si somos muy buenos amigos míos. 

—Sí, pero ellos no escucharon y vieron lo mismo que yo. 

Draken se acercó a Evan tomándolo del cuello. 

—Escúchame una vez más, o te retiras, o te mató ahora mismo. 

Evan frunció el ceño a Draken y le quitó las manos de encima muy violentamente. Sin decir nada, el morocho se retira a paso marcado y refunfuñando. 

Abel quién vio la acción se acerca a Draken. 

—Gracias, por llegar. 

Abel volvió a ver a Emma. 

—¿Estás bien? 

La rubia sin voltear a verlo asintió con la cabeza. 

—Bien, me retiro—dijo como último tomando camino lejos de ambos rubios. 

Draken dio media vuelta encontrándose con una asustada Emma. Este le puso la mano sobre el hombro y la chica alcoholizada corrió a sus brazos tratando de encontrar refugio ante lo que había sucedido. 

—Gracias. 

—No, no agradezcas, la verdad que bueno que me di cuenta si no...No sé qué hubiese pasado. 

La vista de Emma estaba completamente nublada, quería romper en llanto. Draken pasó su mano sobre la cabeza de Emma acariciándola un poco. 

—Todo está bien. 

—Me quiero ir. 

—¿Quieres que te acompañe a tu habitación? 

Emma alejó un poco su rostro y cuerpo del de Draken, lo miró con un pequeño rubor y asintió con la cabeza. 

Draken le hizo una seña para que ambos salieran del "Night club". Siendo esa imagen captada por Evan, quien tenía un vaso de vidrio en su mano, de tanto coraje que le dio lo apretó de más, reventándose en su mano, a paso lento su mano comenzó a sangrar, pero no le tomó importancia. 

***

Mikey estaba un poco alcoholizado ahí en el sofá. 

Y desde hace rato, Alice no había dejado de mirarlo. 

Ella lo había visto, el primer día que llegó Ayome. El chico había estado tirado en el pasto y mirando el cielo. Y esa imagen había captado su atención, a lo que bautizó como el chico solitario del jardín.  

Y desde que llegó a la fiesta, en su mente busco mil y un maneras de acercarse. Hasta espero el momento exacto en el que él se encontrará solo. 

Movió sus manos un poco nerviosas, y solo entonces se animó a acercarse. 

Al llegar a su lado, dijo tímidamente: 

—¿Puedo sentarme?

Llamó la atención de Mikey, quien tenía la cabeza recargada sobre el respaldo del sillón, La inclinó un poco observando a Alice y la miró de pies a cabeza. 

—¿Me estás preguntando a mí si te puedes sentar? — su voz sonando más antipática que cuando estaba hablando con Keisuke y Kazutora. 

La chica asintió con la cabeza. Mikey sonrió para acto seguido soltar una risa. 

—No sé qué te pasó por la mente que yo quisiera que te sentarás aquí. 

Alice quedó un poco confundida. 

—No entiendo. 

—No hace falta que entiendas, no me interesa que una chica como tú, de tu....amm....talla y peso se siente conmigo. No, gracias, pero te puedes ir mucho a chingar a tu madre de aquí. 

Alice trago saliva y las lágrimas comenzaron a derramarse por su rostro.

Se amargó que su mente la hubiera traicionado e imaginado mil escenarios donde él chico la aceptara a pesar de su físico. 

Mikey soltó un suspiro irritado cuando vio que había hecho llorar a la chica. Odiaba las lágrimas. No pasó mucho cuando una chica de la facultad de Izana llegó pidiéndole bailar con ella. 

Mikey vio que Alice lo seguía viendo, este sin pensarla aceptó la invitación de la chica, en toda la noche no se había parado a bailar, pero con tal de quitarse esa lamentable imagen de encima aceptaría a cualquiera que se le acercara. 

Alice, derrotada, se fue directamente a la barra. 

—Estoy harta de estar así, todo por mi puto peso de mierda.

La chica se menosprecia sola. 

En ese mismo momento, Chifuyu había comenzado a buscar a su hermana cuando noto que realmente se había apartado mucho de él, junto con Takemichi y las chicas. 

—Buscamos en los baños y nada — dijeron Hina y Aly, que regresaban.

—Sigamos buscando — habló Takemichi.

***

—Mitsuya—dijo Sakura. 

—¿Mande? —contestó él. 

—Voy al baño. 

Él asintió con la cabeza y su chica le dio un beso en los labios, mordiéndose un poco.

Tras su novia marchar, dirigió de nuevo la miraba hacia donde aquella castaña se encontraba.  La chica hablaba con su amiga. Y parecía que los chicos se habían retirado, o ido a otra parte del Night Club. 

En eso, notó los ojos de Yuzuha abrirse de par en par. Y no pudo evitar seguir su mirada, encontrándose con un show que estaba haciendo Alice Matsuno. 

La chica se encontraba arriba de la barra, bailando sensualmente, acaparando las miradas y risas de todos. Haciendo el último numerito de la noche. 

Mitsuya engrandeció los ojos por lo que estaba viendo. 

Izana junto con Rindou, Ran, y Evan se reían de lo sucedido. 

Chifuyu vio la acción y a paso veloz se dirigió a donde su hermana.

Alice lentamente se fue desprendiendo de la ropa, hasta quedar en ropa interior. Echándose encima un poco de ponche, haciendo que se le traslucía el corpiño que la chica tenía.

 Draken llegó de dejar a Emma en su habitación para encontrarse con el show. 

—Vamos a ver si podemos ayudar — le susurra Yoko, y Yuzuha le asintió. 

Takemichi corrió junto con Chifuyu para detener esa acción de Alice. Ambos se suben  y  Chifuyu se quita el suéter que traía puesto poniéndolo encima a su hermana. Entonces con ayuda de su nuevo amigo la empezaron a bajar de la barra. 

—Heeey ¿Para que la bajan hombre?—gritaba Evan junto con Izana y los demás. 

Yuzuha y Yoko se detuvieron cuando vieron que aquellos chicos ayudaron a la chica, pero ambas gruñeron cuando notaron que algunos habían sacado sus teléfonos para grabar la escena.  

—Mucha ropa—continuó otro. 

—Hubieran dejado que se le viera todo hombre—seguía Evan, que ya de por sí, se le notaba borracho a simple vista. 

Yuzuha quién estaba delante de ellos no pudo evitar sentir una rabia por dentro, apretó su mandíbula y giró su cuerpo encontrándose con ellos. 

—¿Por qué no mejor te callas la boca pedante imbécil? —dijo Yuzuha muy feroz a Evan. 

Este sonrió petulante. 

—¿O si no qué? 

—Cállate pendejo—dijo Yuzuha ya muy cabreada soltando un golpe a puño cerrado en el rostro de Evan. 

—¡Yuzuha! — gritó Yoko preocupada. 

Pero Yuzuha aun furiosa iba a darle otro golpe, pero Evan le detuvo tomándole la muñeca. Él presionaba el brazo de la castaña lastimándola y con la otra mano libre le soltó una cachetada.

—Vuélveme a hacer quedar mal pendeja y te va a ir como en feria. 

En cuanto Evan soltó la mano de Yuzuha, Mitsuya apareció soltando un golpe a Evan también, seguido de otro, y después otro. 

Izana se le quiso ir sobre Mitsuya para golpearlo, pero Draken lo evitó. 

Otro chico del grupo de Izana se metió, pero Hakkai lo interceptó, quien justo salía del baño y vio como aquel inepto cacheteo a su hermana. 

Y así, se empezó a crear un pleito muy fuerte entre todos los alumnos, haciendo que la fiesta diera su fin. 

Continuará. 

Gracias a @Selfish55 por su ayuda enserio, creo que la historia quedará mucho mejor ✨💞