En un cuarto iluminado por luces blancas.

Estaban teniendo una pelea pero de puño limpio ni de cuatro perillas, pero esa omega, maldición, si que no entendía razones para empezar una lucha.

"Admítelo, soy tu mejor opción"

La contraria solo rio por lo dicho por el cobalto.

"No lo creo" dijo parada en medio de la habitacion, con esas botas de tacón negro, que hacían realzar su figura despampanante. "Hay muchos más alfas detrás de mi, muchísimo mejores que tu, cariño" añadió

"Yo no soy como esos tarados." Respondió

"No lo creo, ellos me han respetado, en cambio tu vienes a imponerte sobre mi y como te lo dije no soy una omega sumisa y no harás que me quiebre con tu voz." dijo con aires de superioridad que con su carácter y figura reflejaban.

El alfa parado frente a la fémina no podía negar el poderío que tenía sobre el. "Si eso es todo, me retiro, debo trabajar. Usted no es mi único cliente."

El alfa estaba desesperado. No la quería perder

"Te daré dinero"

"Ya tengo lo suficiente, 8 cifras en el banco para ser precisos"

"Te daré casas"

"Ya tengo un hogar para mí sola"

"Te daré poder, omega" lo dijo con voz gruesa y sexy

Se le acerca sensualmente, caminando un pie delante de otro, contornea sus caderas y hacia sonar esas botas de tacón de cuero al caminar se acerco al caballero de Familia Hedgehog "Tengo el poder que quiero y necesito" Sus ojos se cruzaron, la omega lo miraba intensamente. "Podría hacer que te arrodillaras ante mi y lamas mis botas ahora, pero no lo haré, Hedgehog" se aleja moviendo sus caderas y el siente su longitud endurecer con solo verla.

"Au Revoir, Sonic The Hedgehog"

Diciendo eso, la omega sale de la presencia del alfa

"Serás irremediablemente mia y ganaré el primer lugar en tu corazón, Blaze The Cat."