✎𝑽𝒊𝒐𝒍𝒆𝒏𝒕𝒊𝒎𝒆𝒕𝒓𝒐 [29]

•⚠️Violar⚠️•

Nota: ya saben, lo de siempre cuando estan estos temas, aunque creo que esta vez lo hize mas violento- y con otras cosas de por medio, pero mevh no esta tan mal como los de Eli🐼

Intentaba con todas sus fuerzas empujarlo, gritandole que se detuviera y que le dolia, sentia demasiado frio. El cuerpo mucho mas grande del adulto contra el suyo, el de un pequeño niño que no paraba de llorar. Otra vez sintió esos dientes encajandose en su piel, un agudo dolor y sangre recorriendo su cuerpo antes de finalmente abrir los ojos y volver a la realidad, que a decirle verdad hasta hace unas horas no había sido muy diferente a su sueño.

Aun sentia frio, después de todo estaba desnudo, incluso si una cobija estaba sobre el, seguia sintiendo frio. Kenji, que aun seguia durmiendo, mantenía un agarre en su cintura, lo que le impedia moverse para poder levantarse.

No recordaba bien cuando se durmio, aunque sus ojos seguia molestandole, asi que supuso que se durmio llorando y como si no hubiera llorado lo suficiente antes, sus ojos volvieron a humedecerse y ya se encontraba sollozando, tapando su boca para no hacer tanto ruido y que el peli-lila despertara.

Le dolia mover su cuerpo de su cintura para abajo y todo su cuello y parte de su pecho ardia, tenia varias marcas de mordidas, algunas con un poco de sangre que se habia secado. Podia ver varios moretones que ya se empezaban a formar y sus muñecas habian terminado de tomar un tono rojizo y ligeramente morado.

¿Era un lloron y un exagerado? Tal vez Kenji si tenia razon, las relaciones sexuales eran normales en una pareja ¿Cierto? Solo que otra vez, no dio su consentimiento, pero el peli-lila no haria nada que lo dañara ¿Verdad? Todo el tiempo estuvo asustado y pidiendole que se detuviera, en ningun momento logro sentir el placer que segun el contrarió debería haber sentido, todo el tiempo sintio dolor y miedo, mucho miedo.

Si le pidieran que encontrara alguna diferencia entre kenji y quienes habian Abusado de él en el pasado, probablemente solo podria pensar en la diferencia física, pero lo que habia sucedido era completamente igual a esas veces, obligado, sometido, preso del miedo.

No era capaz de volver a dormir, pero parecia que sus pequeños ruidos habian sido suficientes para despertar un poco a kenji, ya que este aflojo un poco el agarre que mantenia en su cintura y abrio un poco sus ojos.

"Deja de hacer ruido ¿Sigues llorando? Pense que ya habias acabado con tu drama" murmuro, su tono de voz fue molesto y eso lo sabia bien. "Si quieres ve a bañarte, relajate o algo"

No era una disculpa o un acto gentil, pero cuando se vio libre de al menos alejarse de él lo hizo de inmediato, aun si le dolia moverse, preferia eso.

Tomo una de sus sudaderas que estaba en el suelo, cuando kenji lo empujo hasta la habitación habia tirado un pequeño montículo de ropa que era para lavar. La prenda era de Kenji pero no le importaba, era lo suficientemente grande como para cubrirlo y al menos no sentirse mas expuesto de lo que ya habia estado. Tomo ademas unas mudas de su propia ropa, no quería volver a la habitación de kenji una vez terminara de bañarse.

Apenas llego al baño dejo correr el agua de la bañera, no tardo mucho en tercearla asi que de inmediato se quito la sudadera y se metio en el agua, al principio fue un poco reconfortante, pero a medida que iba limpiando su cuerpo se sentia cada vez mas incomodo y agobiado.

Llego un punto donde ya estaba completamente limpio, cambio el agua, esta vez fría completamente. Rascó todo lo que podia, sus propias uñas arañando sus brazos y piernas, haciendose heridas no tan profundas y dejando esas areas de su cuerpo completamente rojas. Otra vez volvia a llorar, pero no podía evitarlo, se sentia usado, sucio otra vez, y no podia hacer nada para quitar esa sensación, frotaba y rascaba sin parar pero esas manos seguian sintiéndose en su cuerpo.

Estuvo mas de lo necesario. Cuando salio simplemente se colocó su ropa y se fue a la sala, se sento en el otro sofa al lado del mas grande, tampoco se sentía muy comodo ahí, en general, estar en esa casa le provocaba pánico.

Estaba sin ideas de que hacer para intentar alejar sus demás pensamientos e ignorar el dolor que aun prevalecía en su cuerpo, aunque fijandose mejor, pudo ver su celular junto al de kenji en la mesita de vidrio de la sala.

Obviamente tomo su celular, no habia leido los mensajes de akihiro antes asi que ahora al menos podia.

Aki♡💐

Se que te sentias mal por haber extraviado el broche que compartimos los dos, pero no te dije que cuando los compré venian 3

Asi que ya no te preocupes, me puse a buscar el que sobraba y lo encontre.

¿Te parece si te lo doy mañana? Ahorita estoy cuidando al consentido de Yasahiro.

Es tan imbecil que no se como logro que todo el aceite caliente de la sarten cayera en su mano ¡Y dice que no se dio cuenta!

Te manda saludos y al subnormal de kenji también

Sigue molesto con él pero intenta perdonarlo

Aunque yo también sigo molesto.

¿Como va todo con él? Sabes que si pasa algo puedes decirmelo.

Bueno ya tengo que ir a darle de comer a Yasahiro, la mano que se quemo era la que dominaba mas, asi que dice "no puedo comer bien asi"

Parece un bebe, solo falta que le diga "aqui viene el avioncito" 😺

En fin, cuidate, ya nos vemos después.

Perdon por contestar hasta ahora, estuve ocupado.

Se que es muy tarde pero mañana podemos acordar cuando vernos

Y dile a Yasahiro que ojala mejore pronto 😿

Obviamente se preocupo un poco por yasahiro, pero se encontraba con Akihiro asi que estaba en buenas manos.

Una sonrisa sincera se formo en sus labios, la única verdaderamente feliz desde que estuvo ahí.

Dejo ahí el aparato, aunque el sonido de un tono de llamada lo asusto un poco por lo repentino.

Noto que era el celular de kenji, pensó que tal vez podria ser su madre asi que tomo el celular para ver, pero vio otro nombre "Eriol" asi que simplemente dejo el aparato pues no conocía a la persona que llamaba.

Tal vez volver a dormir, o al menos intentarlo, era una mejor idea, aunque el tono de llamada volvio a sonar. Decidió no prestarle atención, no queria invadir la privacidad de Kenji, pero ciertamente se sintio mal por no decirle a quien estuviera llamando que llamara mas tarde pues kenji ahora estaba descansando.

Cerro los ojos cuando el aparato dejo de sonar, hasta que de repente el tono de llamada volvio a escucharse. Ya era la tercera vez, se sintio mal, pero tenia que contestar ya que tampoco queria que quien estuviera llamando perdiera su tiempo.

Contesto la llamada y espero el saludo para poder hablar después.

"Oye bobo ¿Que tanto tardabas en contestar? Se que son las díez de la noche, pero sueles dormirte mas tarde, amor." se escucho a traves del celular, junto a una suave risa. "Solo queria decirte que mañana podemos salir como siempre a las cuatro de la tarde, si es que estas disponible claro"

La voz se escuchaba feliz, muy feliz y tranquila. A comparación, el estaba completamente estatico mientras intentaba entender bien todo, las palabras no salieron de su boca para nada.

"¿Que pasa? ¿Te comio la lengua el gato? Por cierto la otra noche dejaste tu libro de ciencias en mi casa, comprendo que te hayas distraido conmigo cariño, pero por favor, cuida mas tus cosas, mira que tu madre se esfuerza por conseguir tus libros, deberías valorar mas su esfuerzo"

"D-disculpe... Kenji ahora mismo esta dormido, pe-pero le avisaré que llamó en cuanto despierte..." Dijo lo mas rapido que pudo y colgó de inmediato la llamada, tampoco queria ignorar a la otra persona, asi que al menos intentó darle una respuesta. Su voz era inestable, pero esperó no haberse escuchado demasiado mal.

Dejo el teléfono a un lado, no sin antes dejarlo en silencio. No sabia exactamente que hacer ¿Debia hacerle caso a su razonamiento? Si unia los puntos, no era nada dificil deducir que Kenji lo estaba engañando, era estupido, pero no tanto como para no deducir algo tan obvio. Normalmente hubiera hablado con él, pero le tenia demasiado miedo como para confrontarlo siquiera.

Vamos ¿En serio penso que tendria tiempo para siquiera pensar en que haría? Kenji, quien ya estaba vestido, bajo las escaleras. Su cabello estaba algo húmedo asi que supuso que se dio un baño también.

"Es algo tarde, pero aun hay que cenar, si es que quieres" su tono de voz era desinteresado, casi como si ignorara todo lo que había pasado, aunque no era algo nuevo en él.

"Kenji..." Queria decirlo con un tono de voz al menos alto, pero, solo salio un susurro, uno temeroso.

¿Deberia decirle algo? No, mas bien, tenía que decirle lo que escucho, sin embargo también tenía miedo de hacerlo, sin saber que podría hacerle el peli-lila.

"¿Dijiste algo?" Volteo a verlo, acercandose nuevamente a el.

"¿Actuas como si nada después de lo que hiciste...?" Volvio a hablar en un tono algo bajo, pero se podría evidenciar aun su temor, decepción y aunque no del todo, algo de enojo, pero como siempre, no era capaz de demostrar este ultimo adecuadamente.

"Bueno, bueno... Tal vez si se me paso la mano..." Mantuvo su mirada fija en el pelirrojo, para luego tomarlo suavemente de su cintura, aunque luego lo forzo a apegarse a él, tomando su menton con su mano libre para obligarlo a mirarle. "Te amo Takeo, no se que haría sin ti. Solo tienes que obedecerme y veras como todo entre nosotros va a volver a ser como antes, se que quieres eso ¿No es asi? Vamos, no hagas esto mas dificil, no quisiera tener que tomar medias más... Drasticas"

Es facil decir que debería dejarlo y hasta denunciarlo, pero ademas de no poder odiarlo, le tenia demasiado miedo, por un momento no vio a su supuesta pareja, si no la imponente figura de su padre quien estaría a punto de golpearlo, o viendolo con lujuria, a punto de tocarlo.

Entonces asintio lentamente, haciendo lo posible para no temblar.

"Esta bien, te prometo que no volvera a pasar" le sonrio para luego soltarlo y dirigirse a la cocina.

Al final el volvio a la habitación de kenji, no tenia hambre y queria al menos estar solo un rato más, mientras que el peli-lila se quedo en la cocina haciéndose algo de comer, aunque antes tomo su celular.

Llamo al mismo chico que habia escuchado Takeo hace rato, esperando que contestara.

"¿Kenji?" Escucho la voz que parecia dudar de si era él o no.

"Eriol, perdona por no contestar, solo descansaba... Eh, sobre el chico que te contesto"

"Eso te iba a preguntar, no quisiera discutir esto por teléfono, solo dime quien era y mañana podemos vernos para hablar mejor"

"Uno de mis amigos de la escuela, no seas celoso, solo esta aqui para ayudarme con las tareas" rio un poco. "Y claro, podemos vernos mañana"

"Bueno... Igual debemos de hablar mañanas... Por cierto, uno de tus libros de la escuela se quedo en mi casa, te lo llevare"

"Esta bien, ahora descansa, ya es algo tarde"

"¿Preocupandote por mis horarios de sueño? Eso es nuevo"

"Si. Si, ahora vete a dormir"

"Bueno esta bien, buenas noches, bobo" se escucho una suave risa y luego el sonido de la llamada terminada.

"Son dos idiotas inutiles..." Dejo su teléfono a un lado, esperaba que Eriol no haya dicho algo de mas pensando que el habia contestado la llamada, aunque de todas maneras conocia a Takeo. Habia hecho lo suficiente para volverlo su titere, y el favorito de entre los dos. El pelirrojo se quedaria con su dueño, porque si no, le iría muy mal, lo sabia perfectamente.

Se quedo en la sala lo que aproximamente fue una hora, Al volver a su habitación pudo ver a Takeo dormido, se extraño un poco, el pelirrojo no era de los que podian conciliar facil el sueño, aunque no le dio muchas vueltas al asunto, no le afectaba. Se sento un momento mientras lo veía fijamente, pasando tras su oreja un mechon de su cabello que estaba en su cara.

No parecia para nada tranquilo, ademas, sentia un poco humedas sus mejillas, era facil deducir que habia estado llorando otra vez antes de volver a dormirse, pero de nuevo, le pareció una simple exageración, aunque su tacto fuera suave en ese momento.

Sus manos estaban algo levantándas, asi hubiera sido facil llorar mientras quitaba las lagrimas cuando le molestaran, o eso penso. Paso sus dedos por una de las manos de Takeo, pese a todo, eran suaves, podria estar tocando algodon y preferiria tocar las manos de Takeo, aunque no lo diria para nada.

Ahora podía ver las marcas en el cuello de Takeo, Los chupones y mordidas que habia dejado, En su momento eran de un color rojo mezclado con algo de sangre, pero ahora tomaron unos colores más morados y un poco oscuros, volviendose moretones. Podia ver sus ojeras, evidencia de que no habia estado durmiendo bien, ademas, Las muñecas de Takeo también tenian un color algo morado, habia pasado un momento por alto que apretaba demasiado su agarre cuando lo tomaba por las muñecas, aunque no era un dolor muy grande a su parecer. Bajo un poco las mangas de la sudadera que llevaba para ver si las marcas se seguian extendiendo, no sabia si solo estaba aburrido o le generaba una especie de satisfacción verlo, y mas si estaba en ese estado por él.

Al bajar las mangas se extraño un poco, aparte de cicatrices, habia unas cortadas que parecían recientes, de hecho, aun salia una mínima cantidad de sangre de ahí, no las había hecho él, de eso estaba seguro, eso indicaba que se las habia hecho el mismo Takeo.

Lo miro con un poco de asco, pero al mismo tiempo cierta obsesión. Volvio a subir la manga de la sudadera, y con sumo cuidado se hecho a su lado, viendo de frente al pelirrojo dormido, aun con todo, parecia un hermoso Angel. Era una lastima que se hubiera encargado de cortarle las alas y apriosionarlo con él, la definición de una persona humana en carne y hueso, pero con el alma de un mismísimo demonio, que estaba obsesionado con ese ser de luz y amor, robando su espíritu para alimentarse de él.

A la mañana del sabado los rayos de luz que se filtraban por la ventana despertaron primero a Kenji, que tras despertar completamente pudo notar la ausencia de Takeo. Se levanto para ir a la sala, donde encontro al pelirrojo en la cocina haciendo algo para el desayuno.

Takeo volteo de inmediato a verlo cuando apenas y terminaba de bajar las escaleras, parecia estar demasiado tenso.

"B-buenos dias... Eh... S-sientate ya solo falta el té..." Le dijo rápidamente y se dio la vuelta para sacar unas tazas.

"Esta bien" se limito a decir mientras iba a sentarse a la mesa, ya todo estaba listo para que solo tomara lo que quisiera y comiera. Algo que le gustaba de Takeo, era que el pelirrojo no podia evitar ser demasiado servicial, cosa de la que obviamente muchos se aprovechaban, y él no era la excepción.

Cuando ambos ya estuvieron sentados en la mesa, el peli-lila noto algo después de unos minutos. Takeo estaba demasiado distraido, pero a la vez tenso, ademas, solo estaba tomando una de las tazas de té que sirvió, de hecho no había preparado nada para él.

"¿No vas a comer algo?"

"¿Eh? N-no yo... No tengo hambre... P-pero quería hablar contigo..." Dejo la taza en la mesa, sus manos temblaron un poco asi que las bajo para no hacer evidente esto.

"Si es por lo de la llamada de ayer, ya te dije que no le des importancia, no seas tan inseguro" le respondio de una manera tajante, preferia evitarse tener que hablar de eso con Takeo, aunque daba igual si sabía o no que lo engañaba, el pelirrojo le tenia demasiado miedo como para confrontarlo.

Si bien Takeo no haria nada y se quedaria callado, Tarde o temprano estaba seguro que Akihiro o Yasahiro le sacarían toda la verdad, Takeo no sabia y le disgustaba mentir, si llegaba a hacerlo, no sabia como mantener su mentira, ya que estas giraban entorno a su bienestar, aun en esta actual situacion, mentiria y diria que todo estaba bien, pero tarde o temprano les diria a esos dos la verdad sin darse cuenta, o ellos le harian decirlo tras descubrir parte o todo lo que pasaba.

Akihiro por un lado sabia leer demasiado bien a Takeo, no por nada habian sido amigos desde niños. Por otro lado, Yasahiro, aunque pareciera, no era un estupido, solo hacia parecer que si por su propio beneficio, tampoco tardaria en darse cuenta.

Tenia que admitir que a quien mas odiaba era a Yasahiro, la definición de alguien que lo tenía todo, pero no estamos aquí para sumergirmos en ese odio algo irracional al chico millonario de cabello rubio.

"N-no es eso... Ya me quedo claro... No te preocupes" aparto la mirada un momento, se sentia fatal, pero tenia demasiado miedo como para confrontarlo. "Queria... Decirte que hoy voy a salir... Pe-pero volvere antes de las siete de la noche" se apresuro a específicar ¿Cuando es que llegaron a esto? Poco mas y le pedia el permiso para que lo deje salir, todo solo iba empeorando mas.

"Como quieras, yo también voy a salir, solo asegurate de estar aquí cuando vuelva ¿Entendiste? Y si llegas tarde y te pasa algo no vengas a hacerme algun drama. Si llegas tarde haste responsable"

El pelirrojo solo asintió, levantandose de la mesa.

Mientra limpiaba la cocina antes de irse, estuvo pensando un poco en las palabras del peli-lila, podia deducir que iba a salir para estar con el chico que habia llamado ayer, y ciertamente no dolia tanto como espero que lo estuviera engañando, ya no era el amor lo que lo mantenia con el, era el miedo, mas aun asi, pensar que eso pasara incluso cuando él no se cuestionaba sus sentimientos por kenji lo afectaba ¿Desde cuando habia estado jugando con él? Llenadolo de mentiras que podia reconocer pero no aceptaba que lo fueran e inconscientemente las camuflaba con verdades, incluso se estaba planteando la pregunta de que si kenji alguna vez lo amo de verdad.

Tal vez tampoco era lo suficiente para él, un chico que se rehusa a tener intimidad por miedo, alguien que no tiene muchas cualidades en las cuales destacar, un físico no muy atractivo y un caracter debil.

Quizo quitarse de la cabeza esos pensamientos, al menos por unos momentos, asi que solo se ocupo de arreglarse el cabello antes de salir, llevaba una camisa de mangas largas, asi evitaba que se viera cualquier marca o herida dejada por kenji, estaban en invierno, no generaria ninguna sospecha, o eso esperaba... Antes de eso tuvo que ponerse un poco de maquillaje en algunas zonas del cuello, aun había marcas demasiado notorias ahí, y aun asi se sentia el doble de mal con saber que le estaría mintiendo a Akihiro, ya no sabia que hacer.

Estuvo en el baño peinando su cabello mientras intentaba no desviar sus pensamientos a todo lo que lo estaba abrumando, hasta que el sonido de la puerta principal lo saco de la especie de trance en la que se sumio. Deducio que Kenji ya habia salido, y solto un suspiro de cansancio, tal vez ahora se sentia menos tenso por la falta de la presencia del peli-lila, aunque en realidad estar en esa casa seguia sin ayudarlo.

En cuanto termino simplemente salio, tomando la replica de las llaves de la casa para cuando volviera ¿Siquiera debia volver?

Definitivamente no, pero no queria problemas con kenji. Caminaba por la calle, sin concentrarse en el camino realmente, se preguntaba una y otra vez si habia hecho algo, o era algo que no había hecho, para que Kenji actuara asi con él.

Era tan dulce, cariñoso, siempre le sacaba una sonrisa y lo aconsejaba, estuvo con el en varios momentos difíciles e incluso lo salvo, por voluntad propia, o eso queria creer. Tal vez hubiera sido mejor que kenji lo dejara caer ese dia hace unos años, hubiera Sido mejor que no lo salvara y lo dejara lanzarse, pero claro... Él le dio esa esperanza, también podia quitarsela.

Estaba volviendo a sumirse en sus pensamientos, sobrepensando y hasta echándose la culpa, no sabia cuánto mas iba a poder aguantar.

"Eres un estupido" Escucho la voz de Akihiro, lo que lo saco de sus pensamientos.

Penso que estaba pasando algo malo, pero de inmediato esa idea se esfumo. Solo era Akihiro regañando a Yasahiro.

"¡Pero no iba a quedarme ignorando que te estuviera acosando!" Replico el de cabello rubio, sobando su cabeza por un golpe que le dio akihiro.

"Ya ibamos a irnos, ademas ¡tienes una mano vendada! ¿Que te paso por la cabeza al golpearlo? Ni siquiera yo lo hize, si queria podia romperle la cara de un solo golpe"

"No me arrepiento" se cruzo de brazos, inflando sus mejillas en un puchero, con el ceño fruncido.

"¿Qué voy a hacer contigo?" suspiro y nego, pero volteo a un lado su cabeza para besar su mejilla. "Gracias, pero puedo defenderme solo"

"Lo se..." suspiro, cambiando su expresión por una sonrisa pequeña tras unos momentos.

"¿Tuvieron algun problema?" Llego hasta enfrente de la pareja, sonriendo un poco y saludando con un gesto de mano. "Buenos dias"

"Buenos dias ¿Todo bien? Y no te preocupes, fue un percance pequeño" le sonrió el bicolor, acercandose a abrazar brevemente al pelirrojo como saludo.

"Nada que no hayamos manejado, no te preocupes"

"Nada que yo no haya manejado, querras decir" le corrigió Akihiro.

"Bueno... Bueno, nada que Akihiro no haya manejado ¿Feliz?"

"Si" rio un poco, sacando de su bolso un broche de forma de estrella con detalles brillantes y una especie de decoración de hojas muy pequeñas colgando, antes de estas una perla. "Ten, te dije que tenia otro, asi que no sigas sintiéndote mal ¿De acuerdo?" le sonrió, acercandose atras de él para poder acomodar el broche en su cabello.

"Gracias, y lo siento... Debi cuidar mas el otro" dejo que acomodara el broche en su cabello, sonriendo, pero se sentía mal por no haber cuidado como debia dicho broche, aunque al final haya sido kenji quien habia roto el adorno.

"Es lindo compartirlos... ya que simbolizan algo, pero sigue siendo algo material, no serian tan importantes como tú, ya quita esa cara, vinimos a divertirnos" termino de acomodar el broche, viendo a takeo una vez más, sin quitar esa sonrisa de su rostro para tranquilizarlo.

Takeo no tuvo tiempo de responder, Yasahiro ya habia jalado a los dos de sus manos para que comenzaran a correr. Escuchaba las protestas de akihiro y como lo regañaba, pero al final los dos estaban riendo, y el pelirrojo no tardo en unirse a ellas, al menos por unos momentos no estaria pensando en kenji, eso esperaba, o mas bien eso queria.

En el camino hablaba con ellos, extrañaba esas conversaciones que ocurrian tan espontáneamente, sin ser pasivo-agresivas, o con alguna especie de doble intención, simplemente la conversación era pacífica, divertida y animada, podia reir y sonreir, no completamente, tampoco sinceramente, sería dificil actuar asi después de todo lo que paso, mas estar con ellos dos ciertamente lo ayudaba muchísimo a olvidar un momento su situación.

Algunos copos de nieve iban cayendo y cubriendo todo de blanco, era algo hermoso, pero también habia frio, suerte que el clima estaba pronosticado, no hubiera querido tener que volver a la casa de kenji por uno de sus abrigos y bufandas.

Yasahiro los habia invitado a salir y divertirse, el orden que mas o menos iban a seguir, a petición de akihiro de elaborar por escrito a donde iban a ir, era el siguiente: Primero irían a patinar en una pista de hielo, luego irían a una colina a jugar con la nieve, después a comer algo y finalmente solo caminarian devuelta a casa.

Llegaron, compraron las entradas y después de ponerse los patines, Yasahiro hizo lo posible para no caerse. Todos los años Akihiro intentaba enseñarle como patinar, pero Yasahiro aun se caía seguido.

Akihiro Habia aprendido el solo, también intento enseñarle a Takeo pero ciertamente era mejor enseñando equitacion que patinaje sobre hielo, le salia solo el saber patinar en hielo.

"Vamos no es tan difícil, hazlo como yo, vas a poder" lo alento, patinando de espaldas mientras veia a Yasahiro y Takeo.

"Y-ya, pero deja de patinar de espaldas, me das miedo" se quedo viendolo con pánico de que le sucediera algo, una cosa eran los caballos, al menos en ellos si confiaba, pero no en los patines. Irónico sabiendo que Takeo se cayó de su caballo alguna vez y se hizo bastante daño.

"¿A si...?" Le sonrio con burla, dejando de patinar de espaldas y solo avanzando un poco rapido antes de agarrar algo de impulso y saltar, cayendo perfectamente.

"¡Akihiro!" Casi se le salia el corazon, y por eso se tambaleo y cayó al suelo. "Ay..."

"Vamos, yo creo que si agarras mas confianza para patinar solo dejes de tenerle miedo a los patines" rio un poco el pelirrojo, deteniendose y extendiendo su mano para ayudar a Yasahiro a levantarse.

"Tiene razon, ya calmate" se rio también, tomando la otra mano de Yasahiro para que se levantara.

Tanto akihiro como Takeo continuaron con su intengo de enseñar a Yasahiro a Patinar, parecía que iba bien por ahora, asi que Takeo decidio dejarlos un momento solos mientras el se paseaba por toda la pista.

Con cada movimiento para avanzar su vista se perdía más, solo estaba moviendose de un lado a otro por instinto para no chocar con nadie. Le gustaba patinar, recordaba que su hermano mayor siempre quizo aprender pero lo único que podian permitirse era jugar con nieve.

Siempre esperó aprender a patinar sobre hielo junto a Ryushiro, pero al final aprendió gracias a kenji. En su primer cumpleaños junto a él peli-lila como su novio, este se aseguro de que la pasara de maravilla, lo llevo a distintos lugares y uno de ellos fue una pista de patinaje sobre hielo, ciertamente esa vez le dio vergüenza decirle que no sabia patinar, pero al escucharlo, kenji se tomo el tiempo que fue necesario para que aprendiera, incluso les falto tiempo, asi que el peli-lila pago otro tiempo más para seguir enseñandole.

Recordar eso era lindo, pero doloroso, sabiendo que kenji jamas volveria a ser así. A veces hasta empezaba a olvidar esos momentos tan lindos.

"Vamos, no tengas miedo, yo te sostendré, y si tropiezas te atrapare" el peli-lila estaba sonriendo, ya en la pista de hielo e intentando alentar a Takeo para que pudiera entrar también.

"E-es que... M-me da miedo" el pelirrojo estaba agarrado de un pequeño pilar de la entrada a la Pista, cada que intentaba poner sus pies dentro se resbalaba.

"¿Confias en mi?" Se acercó un poco más para poder tomar sus manos. "Te prometo que estaras bien, solo no me sueltes ¿De acuerdo?"

"... E-esta bien, si confio en ti" sonrio levemente, apretando un poco las manos de kenji mientras poco a poco iba avanzando hasta estar en la pista, cada vez mas lejos de la salida. "W-wouh... Es-pera, quedemonos asi un momento..." Se habia comenzado a tambalear pero logro quedarse de pie.

"Tienes un increible equilibrio y flexibilidad, y no se como hiciste que un caballo salvaje te quisiera, puedes con unos zapatos de cuchillas y una pista de hielo ¿No?" Rio un poco, sin soltar aun sus manos.

"P-pero es distinto... Eso creo..." Se sostuvo de las manos de kenji, sin soltarlas en ningun momento mientras avanzaban.

Kenji lo guiaba mientras le hablaba para que no estuviera tan tenso, lo hacia reir y como prometió, en ningun momento lo solto. Parecia que solo eran ellos dos pasando tiempo juntos, kenji cuidandolo y él intentando aprender a patinar, no le gustaba tanto en ese entonces, pero kenji logro que patinar fuera hasta liberador y por supuesto muy divertido, mucho mas si estaba con el peli-lila.

Pasado unos momentos el pelirrojo penso que era buena idea empezar a patinar solo, al menos ya se movia sin tambalearse, asi que por petición de él, kenji fue soltandolo hasta que se alejó. Con algo de torpeza fue avanzando, iba bien pero como era de esperarse termino tropezando; pensó que caería, asi que solo cerro los ojos de todas maneras solo le dolerian las rodillas, mas al sentir el duro y frio abrió los ojos, Kenji lo habia sostenido antes de que cayera. Esa sonrisa que veia en el más alto aliviaba todos sus miedos y preocupaciones, aunque no pudiera patinar bien, era todo perfecto, mas que perfecto.

Sabia que si tropezaba Kenji lo atraparía, sabia que a menos que se lo pidiera, kenji no lo soltaria, estaria junto a él, enseñandole con paciencia.

"Vas mejorando, pero... Aun te falta bastante" el peli-lila ya no sostenia las manos de takeo, ya que este pudo moverse solo sin tropezar, aunque de una manera bastante lenta. "¿Ya te he dicho que eres la cosita mas tierna del mundo?" Rio, cyando takeo se acercó presionó su nariz con uno de sus dedos y luego acarició au cabeza.

"Ay..." Se quejo levemente cuando presiono su nariz. "Gracias por enseñarme, me divertí bastante... Y también me asuste pero tu estuviste ahí conmigo asi que no tuve problema" rio levemente, tomando la mano libre de kenji. "Te amo..."

"También te amo Takeo" le devolvió la sonrisa, inclinandose un poco y posando la mano que antes acariciaba la cabeza del pelirrojo, en la cintura de este mismo.

Ambos se vieron un momento, obervandose con detenimiento como si fueran lo mas importante y magnífico del mundo. El primero en seguir adelante fue kenji, quien atrajo a Takeo a sí para poder darle un beso en los labios, que fue correspondido de inmediato.

Se quedaron de esa manera un momento, hasta que el pelirrojo se tambaleo por estar de puntillas con los patines, así que ambos terminaron cayendo en el hielo, pero ninguno se solto del otro en ningun momento. Se vieron otra vez antes de reir a carcajadas, no dolio mucho pero vaya que las risas sobraban.

"Te amo, pero sigues siendo pésimo patinando" se burlo, levantándose con cuidado y luego extendiendo su mano hacia el pelirrojo para ayudarlo.

"Lo sé, lo siento" se disculpo con una pequeña risa, tomando su mano para poder levantarse.

Esa imagen quedo vivida en su mente, era como si aun pudiera ver a ese chico tan dulce y divertido del que se enamoró. Tener esperanza era estupido y lo sabia muy bien, esa parte de su pareja ya estaba muerta, y nunca podrian volver a ser lo que alguna vez fueron.

Kenji solo lo queria, como si fuera un objeto, un trofeo, un juguete... En cambio él lo amaba, se preocupaba por él, queria escucharlo y saber que tanto le habia pasado para volverse así, queria que fuera feliz, incluso a costa de su propia felicidad, pero ya no podia seguir asi, no más. Terminaría muerto de ser el caso.

"¡Takeo!" la voz de Akihiro lo saco de sus pensamientos y divagaciones. "Ven ya va a cabar el tiempo, estemos los tres juntos antes de salir"

"¡Y luego a tragar!" Escucho gritar a Yasahiro, y mientras volteaba para ir con ellos vio como Akihiro le daba un golpe en la cabeza. "¡Auch! ¿Y eso porque fue?"

"Porqué prometiste que seguiríamos mi itinerario, ademas el restaurante al que queriamos ir aun no esta abierto, es fin de semana bobo" andaba regañandolo

"Ay esta bien... Más que mi novio pareces mi mamá" se quejo pero rápidamente corrigió sus palabras al ver la sonrisa supuestamente amable de akihiro. "Era broma mi amor..."

"Que gracioso eres mi vida" le dio un codazo, aunque no reacciono a tiempo cuando Yasahiro lo jalo y lo beso, aunque eso implico que ambos se cayeran en el hielo. "Para que haces pendejadas si ni sabes hacerlas" murmuro algo sonrojado

"¿Necesitan ayuda?" El pelirrojo le extendio sus manos a cada uno para ayudarlo, intentando no reir por lo que vio.

"Gracias, este de aca no sabe ni patinar y ya esta haciendo maniobras extremas" tomo la mano de takeo para levantarse.

"Lo extremo era besarte asi y ver si me golpeabas o no... Y no me golpeaste" sonrio burlonamente.

Estuvieron persiguiendose entre los tres después de eso, incluso Yasahiro se arrastro por el hielo para "ir mas rapido", eso no salio muy bien pero después de estrellarse los tres entre sí se quedaron riendo.

Cuando acabo su tiempo salieron del lugar para caminar hacia su próximo destino, esta vez Yasahiro no los jalo para ir corriendo porque se habia doblado el pie, nada grave pero estaba haciendo un drama y akihiro tuvo que cargarlo un rato para que se sintiera mejor, a palabras del propio Yasahiro.

"¿Ya esta mejor el niño?" Se burlo Akihiro después de bajar a Yasahiro.

"Perfectamente, gracias por preguntar" siguio el juego, inclinandose un poco para besar la mejilla del bicolor. "Ya casi llegamos, cambiamos un poquito el destino pero ey, recien me acuerdo que ese parque es bastante extenso"

"No te preocupes, de todas maneras el lugar es mejor así que esta bien" el pelirrojo estaba caminando un poco adelante con su celular para guiarlos con el mapa. Por haber cambiado de destino se habian perdido un poco.

Caminaron un rato mas hasta que pudieron llegar al parque, como era de esperarse habia varias personas jugando con la nieve que ya se habia acumulado. Ellos solo estaban ahí para caminar un rato, normalmente harían un muñeco de nieve pero sarai no iba a ir esa vez por ir a la casa de su amigo Demian a hacer una pijamada, asi que no llevaron las cosas para que quedara mas bonito.

"Uh... Hace bastante frío" el mas bajo temblaba un poco, habia ido abrigado, pero desearia tener su bufanda ahora mismo.

"Ten, yo tengo algo de calor" el bicolor se acercó mientras se quitaba su bufanda, acomodando esta en el cuello de Takeo.

"¿Seguro? Podria aguantar, no quiero que te resfries"

"Alto ahí" dijo el rubio, posando uno de sus dedos en la boca de akihiro antes de que respondiera. "Si se ponen a hablar sobre quien lleva la bufanda se demoran medio año en terminar de decidir. Vamos y compramos una, listo, ahí hay una tienda"

Ambos chicos se miraron entre si y luego vieron a Yasahiro, asintiendo para ir a la tienda, sabian que tenia razon, ambos eran bastante tercos y si el rubio no los detenía, hubieran seguido por bastante tiempo insistiendole al otro.

"Bueno, Takeo elige la bufanda que quieras, andale sin pena" le dio una palmadita en la espalda con una sonrisa. "Aki ¿Tu quieres ver si alguna te gusta? O tal vez guantes, tus dedos estan algo rojos, si mejor vamos por guantes" tomo la mano de akihiro antes de que este dijera algo y lo llevo hasta donde habian algunas opciones.

"Uh, que exagerado" murmuro, pero sonrio levemente, le parecia lindo que se preocupara por él, solo porque sus dedos estaban algo rojos por el frio.

La pareja se fue por un lado y Takeo por otro. El primero en encontrar lo que buscana fue el pelirrojo, solo una bufanda de color azul con algunas franjas blancas al final de cada extremo; Volvió con sus amigos, aunque estos seguian escogiendo algunos guantes... Mas bien, Yasahiro estaba buscando uno que sea adecuado para Akihiro, quien solo habia tomado el primero que le quedo, pero Yasahiro hizo que los devolviera porque eran de lana, y la lana a akihiro le generaba a veces picor.

Fue entonces que Yasahiro se quedo escogiendo no solo material si no tamaño, diseño y color.

"Oye bobo, los anteriores cinco pares de guantes que habías sacado estaban bien" akihiro estaba con la bufanda acomodada cubriendo hasta su boca, según Yasahiro para protegerlo mas de posibles resfriados.

"¡No es cierto! El primero tiene un color que no te cae, el otro sigue siendo de lana, y los otros también tenian defectos" se quejaba Yasahiro, moviendo sus brazos frenéticamente de un lado a otro en desorden antes de seguir buscando.

"Amor, son simples guantes"

"Simples pero hasta en lo simple mereces lo mejor" siguio en su travesía, pero Akihiro lo jalo un poco para poder darle un beso rapido. "Hum... ¿Y eso por qué fue? Bueno tampoco me quejo..." Sus mejillas estaban algo sonrojadas.

"Pues porque te amo, y eres tan tierno cuando quieres conseguirme cosas de calidad, pero por favor, vinimos a divertinos, no de compras" sonrio algo divertido, apretando una de las mejillas de Yasahiro. "Mira, estos son de color verde oliva, la tela no me molesta y tiene diseños blancos de margaritas a los lados, me gustan las flores y el color, llevemos este par"

Se dijo a si mismo que no recordaría a Kenji, queria divertirse, no torturarse, pero en la posición en la que estaba le era demasiado dificil no pensar en el peli-lila, su corazon se apretujaba con fuerza y dolia como si se lo atravesaran cada vez que los mas minimos detalles podian hacerle recordar el tiempo en él que kenji realmente parecio amarlo y brindarle todo su cariño, el tiempo en que a los ojos de Kenji, Takeo era el ser mas unico y perfecto, a quien le prometió nunca ponerle una mano encima con malicia.

"Queria traerte de compras, se me ocurrio la idea y ya, no tiene que ser una ocasión especial para poder comprarle algo a mi novio" rio un poco el peli-lila, desordenando un poco el cabello del maa bajo.

"Oye... Habia tardado en peinarme el cabello" se quejo un poco, intentando acomodar su cabello. "Y gracias, pero no quiero que gastes tanto dinero..."

"Vamos, no sere Yasahiro que me bañar en plata, pero si puedo permitirme comprarle algo a mi pareja, además tú siempre estas comprandome cosas o preparándome postres, al menos hoy quiero darte algo, asi que no protestes y elige lo que quieras, dijiste que querias comprar algo de joyería alguna vez pero no querias pedirle algo innecesario a tus padres, entonces yo te comprare las joyas"

"¿Estas seguro? Algunas cosas cuestan mas que otras..." Se estaba preocupando bastante, no soloa gustarle pedirle algo a los demas o hacerlos gastar dinero.

"Oye" se agacho un poco para verlo a los ojos, da dole un golpesito en su frente. "Te dije que podias elegir lo que quisieras, no te preocupes por el dinero Takeo, eres una buena persona, pero hoy elige lo que quieras ¿Sí?" Le dio un beso en la mejilla, sonriendo y esperando que ahora si aceptara.

"Mnh... B-bueno esta bien, pero no te esmeres en que compré algo caro, dijiste lo que me gustara ¿No?" Le sonrio de vuelta y tomo su mano para ir caminando y ver los aretes, collares, pulseras y broches

"Bien, bien, pero elige algo bonito, Aunque la mayoria de cosas te quedan bien" apreto levemente su mano, tampoco queria que se perdiera, la joyeria era algo grande. "Cuando tengamos que separarnos al comprar algo estoy considerando seriamente amarrarte un golo a la muñeca, eres tan bajo que te me vas a perder ¡De hecho ya te me perdiste en el centro comercial la semana pasada!"

Recordo mientras caminaba, la verdad no estaba bromeando con lo del globo, sabia que a Takeo le daba ansiedad quedarse mucho tiempo solo en lugares con tantas personas y se sentía agobiado o comenzaba a marearse, asi que no le gustaba dejarlo solo.

¿En serio kenji no queria dejarlo solo? Eso habia sido lindo, pero el recuerdo se vecia manchado con la vez que lo asusto dejandolo solo en su cada en la madrugada, sabiendo que a el le daba pánico dormir en lugares ajenos a su casa, y cuando se digno a volver estaba borracho, Kenji también sabia que el alcohol lo mareaba con solo olerlo debido a su olfato, espero que fuera mas comprensivo o empático con el, era lo minimo que pedia, después de todo era su pareja ¿No?

"No es mi culpa ser bajo" inflo un poco sus mejillas en un puchero, la verdad es que si le molestaba un poco que kenji fuera tan alto y él tan bajo, fácilmente si se besaban en la calle podia mal interpretara de lejos.

"Y eres tierno asi, pero deberias comer mejor si quieres crecer, no solo por eso, si no también para que te cuides" explicó, riendo un poco al ver su expresión. "Ya, perdon, no te enojes conmigo"

¿Unas disculpas? ¿Kenji preocupandose por su alimentación? Extrañaba eso, extrañaba el dulce chico que era antes su novio.

"¿Eh...? N-no, no me enoje" se apresuró a aclarar.

"Solo te molesto, anda ya dejemos de hablar, mira si algo de aquí te gusta"

Estuvieron paseando por la tienda mientras buscaban algo para él pelirrojo. Probaron algunos aretes y collares, pulseras o anillos no mucho, Takeo no solia usarlos tanto ya que temia que se le cayeran o rompieran pues siempre estaba haciendo algo, y en cuanto a los broches, solo compraron uno pequeño de unas rosas blancas, Takeo prefería usar el broche que compartía con Akihiro.

Al final termino llevando 6 pares de aretes y un collar, ademas se llevaron unos llaveros que se complementaban, acordando llevarlos a la escuela colgando de sus mochilas.

Podía recordar que mientras probaban esos aretes kenji le dijo que con todos se veia hermoso, y más bien él hacia resaltar a las joyas, un hermoso halago que atesoró, pero ahora lo hacia más, o mas bien le dolia saber que Ahora kenji solo criticaria el como se veia y que necesitaba usar algo que al menos realse la poca belleza que poseia; Esas criticas eran como dagas, más cuando habia empezado a mejorar su autoestima y aceptar que se veía bien, el cambio de kenji solo fue un empujon para retroceder en todo el avance que habia estado logrando.

¿Y que hay de esos llaveros? El aún tenia el suyo en su mochila, el suyo era de un sol de crochet y recordaba que el de Kenji una luna, igualmente de crochet, ambos encajaban y aunque esa metafora fuera tan cliche, a ambos les gustaba, de hecho fue kenji quien sugirió llevarlos, aludiendo que El pelirrojo era su sol.

Todos esos recuerdos antes tan hermosos y alegres ahora solo eran el motivo de su desesperanza y dolor en el corazon.

"De acuerdo, pero solo porque tienes razon, vinimos a divertirnos, aunque si estuvieramos de compras le tardaria mucho mas encontrando algo digno de ti" se inclino un poco para besar su mejilla, tomando los guantes en el proceso. "Vamos a pagar ¿Donde esta Takeo? Espero que no haya escogido una bufanda solo porque es barata, el es peor que tu cuando quiero comprarles algo"

Volvio a escuchar a Yasahiro de repente, se habia perdido parte de la conversación mientras intentaba disipar sus pensamientos.

"Oye, no tome esta bufanda porqué fuera barata... Me gusto... Y bueno si esta a bajo precio pero no la tome por eso" se quejo un poco mientras se acercaba y le daba la bufanda a Yasahiro para que pagara.

"Ay señor, que voy a hacer con ustedes dos" palmeo su frente mientras negaba, adelantandose a la caja de pago.

Ambos chicos se miraron entre sí y luego rieron en lo que seguian al rubio, ya a este punto Yasahiro estaba acostumbrado a que siempre dijeran que no debia gastar tanto por ellos. Claramente los ignoraba y cada vez que escuchaba eso de ellos buscaba algo todavia más caro que lo anterior.

Tras pagar la bufanda y el par de guantes, Yasahiro se tomo otro rato en acomodar a ambos para que no tuvieran frio, a palabras del rubio, ellos no iban a ponerse bien las prendas y se iban a resfriar, y él no queria eso.

Tardaron mas de lo que quisieron pero, ey, quedaron abrigados y los colores les favorecían, la insistencia de Yasahiro tal vez sirvió de algo.

Por fin fueron al centro del parque para caminar un rato, aunque no fue mucho el tiempo de calma; Yasahiro fue el primero en tirarle una bola de nieve a Akihiro en la cara, eso significaba guerra.

Primero fue una conspiraciones contra Yasahiro, claro, el fue quien inició. El pobre estaba solo, escapando de Akihiro y Takeo, obvio perdio, ambos lo tiraron al suelo y akihiro dejo caer encima suyo una gran bola de nieve justo unos segundos después de que Yasahiro dijo que se rendía.

Yasahiro se quedo un momento recuperando el aire que perdio por correr de su pareja y amigo, parecía que ahí terminaba todo, pero entre una cosa y otra, el que escapaba ahora era Akihiro, quien tenia obvia ventaja pero aun asi el rubio y el pelirrojo se esmeraron en capturarlo.

El bicolor por instinto al verse acorralado una vez intento saltar en los arboles, pero recordo que en el lugar en el que estaban no podia hacer eso, y mientras convencía a su cerebro que estaba jugando y no escapando de asesinos, Takeo le tiro una bola de nieve a la cara y seguidamente Yasahiro le tiro otra mas grande, tumbandolo al suelo, afortunadamente estaba la nieve pata amortiguar su caida.

"¡Ya te ganamos!" Se rio el rubio mientras veia al bicolor en la nieve.

"Bien, bien, tiro la toalla, ahora vengan y hechense aqui" les diji aun sin levantarse solo quedandose tranquilo, estaba algo cansado.

Los dos chicos solo obedecieron y se dejaron caer a cada uno de los lados del bicolor, quedandose observando el cielo, moviendo un poco sus brazos y piernas para así formar una especie de angeles de nieve. El silencio era tranquilo asi que ninguno rompió este por un tiempo, cada uno necesitaba algo de tranquilidad por unos momentos y los tres estuvieron de acuerdo.

El silenció fue por unos momentos tranquilo para todos, pero para el pelirrojo comenzo a ser abrumador, porque la extensión del silenció significo que otra vez su mente divagara entre sus recuerdos, incapaz de pensar en algo más o en como estaba disfrutando un día en mucho tiempo.

"La nieve es como escarcha... Hum... Y tu debes brillar bastante" dijo el peli-lila mientras reia, tirandole algo de nieve a Takeo.

"Eso fue una excusa, ven aqui" se rio también, pero mientras que kenji ya estaba corriendo, él se ocupaba de formar una bola de nieve en sus manos. "¡No vas a escapar!"

El pelirrojo corria tras el más alto, las risas y sonrisas no faltaban, estas eran genuinas, cada uno pensaba que nada podria arruinar el momento y que podria repetirse todos los años, que esos momentos tan felices iban a ser para siempre, ambos lo prometieron, pero solo uno sabia perfectamente que podria cumplir esa promesa, mientras que él otro tenia dudas de si podria o no.

"Te atrape" respiraba agitado el pelirrojo, hechado en la nieve. Tras tanto correr se habia agotado y kenji a su lado no estaba mejor.

"Me de-je a-atrapar, eso es distinto" estaba igual o incluso mas cansado que Takeo, recostado a su lado.

"Sabes que sé cuando mientes"

Ambos se rieron, entrelazando sus manos y quedandose en silencio por unos momentos, para ambos ese silencio era completamente comodo.

"Todos los días contigo son especiales... te amo" murmuro el peli-lila, volteando un poco para ver a Takeo.

"También te amo kenji, más de lo que podría decir" sus mejillas estaban algo sonrojadas y una hermosa sonrisa adornaba su rostro.

"No quiero que este tipo de días se acaben nunca, a tu lado soy más que feliz" apretó un poco la mano del pelirrojo, acariciando suavemente esta con sus dedos.

"Pues no tienen que acabar nunca... No veo nuestra relación como algo pasajero o del momento, sabes lo importante que son los sentimientos para mi y en general como soy... Prometo que este tipo de felicidad nunca va a acabar" extendió su mano libre, solo levantando su dedo meñique. "No se si te parece infantil, pero a mi me gusta esta manera" rio algo nervioso, apartando un poco la mirada.

La duda comenzo a crecer para el peli-lila, sabia que si decia que también lo prometia no estaria siendo sincero, porque el no estaba seguro de todo, mas al ver el hermoso rostro del pelirrojo y escuchar su voz que era como una melodia tranquilizadora, no dudo en levantar su mano libre y entrelazar su meñique con el de Takeo.

"Es algo infantil... Aunque ¿Sabes...? También me gusta" sonrió, viendolo con adoración.

Una mentira, debio de notar esa mentira... Y era un tonto, un estupido, no solo por no notar esa mentira, si no por que ahora mismo aun pensaba en alguna posibilidad de ayudar a kenji, incluso si sabia que nada volveria a ser como antes.

"¿Takeo? Takeo... ¡Takeo!" El grito de Yasahiro llamo su atención, habia estado mas tiempo del que creyo fuera de sí.

"¿Eh...? Oh, perdonen, me distraje demasiado" murmuro, sentandose en la nieve, aunque sentia sus mejillas algo mojadas y sus ojos le molestaban, asi que levanto su mano para frotar sus ojos. Estaba llorando

"¿Estás bien?" Akihiro estaba sentado a su lado, con una mano en el hombro de takeo.

"S-si estoy bien... No se que me paso... En serio, estoy bien ¿Ya nos vamos?" Se levanto casi de inmediato, quitando las ultimas lagrimas de su cara.

"¿Estas seguro? Podemos hablar, no tenemos ningun problema" Yasahiro también lo estaba viendo preocupado, Takeo era bastante sentimental, pero habian estado divirtiéndose tanto que le preocupo que este haya comenzado a llorar de un momento a otro.

"Estoy seguro, no quiero hablar ahora... ¿No seguia ir al restaurante que mencionaron? Vamos, si no tal vez nos tome mas encontrar una mesa libre para comer" intento reir.

"Esta bien, pero después tendremos que hablar, sabes que no tienes porqué guardarte todo ¿De acuerdo? Somos tus amigos, puedes contarnos lo que sea" el bicolor desordeno un poco el cabello de Takeo, mostrandole una sonrisa para intentar que todo se calme, sabia que lo que menos necesitaba era sentirlos preocupados.

No se tocó más ese tema, Akihiro le dijo a Yasahiro que mejor no mencionara nada sobre lo que paso para no hostigar a Takeo, mas bien, ahora llegaba la parte dificil, ver si el pelirrojo comia o no.

Al llegar todo parecía volver a mantenerse normal y tranquilo, pidieron la mesa, pidieron la comida y se quedaron hablando un poco mientras esperaban, Aunque en realidad era la pareja quienes hablaban más, intentaban que takeo responda o algo, pero Estaba bastante ido y sus respuestas eran cortas, ya no sabian que hacer.

Pensaron que cuando llegara la comida iba a volver en sí, pero no, Takeo estuvo a parte de en silencio, sin tocar casi nada de la comida en su plato.

"¿Por qué no comes? Deberias comer más, estas pequeño por eso, si te alimentas bien seguro aun tienes esperanza de crecer un poco más" el peli-lila lo apunto con su tenedor, viendo al pelirrojo quien apenas y habia pedido algo pequeño para él, y nisiquiera iba por la mitad del plato.

"Es que tampoco quiero comer tanto... N-no se... Es... Complicado" desvio la mirada, ciertamente ni el mismo podia entender bien lo que le pasaba.

"Puedes... Eh ¿Intentar explicarme? Si es porque crees que vas a subir de peso y te vas a ver mal te equivocas, estas demasiado delgado, no digo que sea malo, pero si perjudica a tu salud si lo es" su tono de voz expresaba bastante preocupación.

"Lo se... Es que no me siento bien, por varios motivos, y no se que  hacer... Solo no tengo hambre ..."

"Vamos a mi casa entonces"

"¿Eh?"

"Vamos a mi casa, el domingo pasado te quedaste a comer y pudiste comer con mas facilidad lo que te prepare, tal vez eso ayude ¿No? cualquier alternativa razonable me parece bien para intentar que no descuides tu salud"

"P-pero ya gastaste en esto... Esta bien voy a comer ¿Si? Solo no quiero que gastes mas por mi capricho de no querer comer...

Tomo su tenedor, aunque en cuanto vio el plato era como si todo su entorno se sumiera en una oscuridad y solo estaba él y el plato, era incapaz de no verlo con asco, incluso si no queria o se forzaba, empezaban a darle nauseas.

No podia seguir viendo el plato, pero se siguió forzando hasta que sintio una mano sobre la suya que sostenia su tenedor.

"Tampoco quiero obligarte si te hace mal... En serio no tengo problema, podemos pedir para llevar y mi hermana se lo comera después o yo, asi que no te agobies" se habia levantando para tomar la mano de Takeo, haciendo que poco a poco suelte el tenedor. Tras esto beso su frente, soltando lentamente su mano. "Ire a pagar y que pongan esto para llevar, quédate aqui y si quieres toma algo de agua, eso te hara bien"

Un trato con tanta delicadeza, era extraño que kenji actue asi... Ahora era extraño, pero antes tan solo su voz o tacto lograba calmarlo ¿Ahora? Ahora lo llenaba de miedo, le daban ganas de correr, pero al mismo tiempo su cuerpo estaba tan paralisado que no podia moverse, tantas contracciones, tantos cambios ¿Por qué tuvieron que terminar asi? No lo entendía, todo estuvo tan bien durante tanto tiempo, no sabia si kenji en realidad nunca lo amo, o él habia hecho algo mal, no lo entendia y tal vez nunca iba a poder entenderlo.

"Ya esta todo, vamos a casa ¿Quieres caminar o pido un taxi?" Le extendio su mano libre a Takeo para ayudarlo a levantarse, ya que con la otra llevaba la bolsa con la comida ya empaquetada.

"Caminemos, no estoy tan mal..." No se convencía mucho de lo que dijo, pero queria intentarlo, ya iba a hacer que el peli-lila gastara el doble de dinero, no queria que gaste mas en un taxi si podía caminar.

"Bueno entonces ten" le extendio la bolsa con la comida para que la tomara.

"¿Eh? Si esta bien" tomo la bolsa, ya iba a empezar a caminar, pero de un momento a otro kenji lo cargo. "¿Q-que haces? ¿No te peso demasiado...?"

"No digas tonterías, no pensas, dijiste que caminando, y tienes razon, servira para que tomes algo de aire, ahora vamos" antes de que él pelirrojo pudiera objetar ya habia comenzado a caminar.

"n-no es necesario que hagas esto..."

"¿Es que a caso no puedo cargar a mi novio para que él pueda descansar? Yo digo que si, y quiero hacerlo, asi que silencio, no te voy a bajar, al menos hasta que lleguemos" aunque le dijera un sin fin de cosas no lo iba a bajar hasta que llegaran a casa.

No dijo nada mas, solo apoyo su cabeza en el pecho del peli-lila y cerro un momento sus ojos para descansar, aunque hubiera objetado hace un momento, debia admitir que en sus brazos se sentia seguro y protegido.

En cuanto llegaron, Kenji lo dejo sentado en una de las sillas y se puso a cocinar, hablando un poco mientras tanto.

"Se que no cocino tan bien como akihiro, pero ey, mi comida también sabe bien asi que supongo sirve" siguio en lo suyo, sabia que de todas maneras takeo no iba a querer comer tanto, asi que solo estaba preparando unos oniguiris y algo de carne.

"Gracias por intentar, prometo que esta vez intentaré acabarme toda la comida" suspiro mientras jugaba un poco con su cabello.

"Tampoco te fuerzes, ya te dije que puedo guardar lo que sobre, pero al menos comeras más si yo preparo la comida asi que si te ayuda al menos un poco más, no me molesta cocinar para ti, si quieres otro dia organizamos todo mejor y cocinamos los dos"

"Mnhm... Si, eso me gustaria mas" sonrio, la idea era mejor, hacer algo juntos.

Ese dia kenji cocino para él, solo buscando que aun con su problema alimenticio pudiera comer al menos un poco mejor, y eso continuo por bastante tiempo hasta que pudo comer adecuadamente. Era ironico, kenji lo habia ayudado bastante a superar su TCA y sus problemas de autoestima, pero también fue quien lo volvio a hundir en ese abismo.

"Takeo ¿Estas seguro que no quieres comer algo mas? Apenas comiste la mitad de tu plato..." Dijo con cautela el bicolor, no entendía que habia pasado para que su amigo mostrara este cambio de emociones tan radical.

"Oh... No asi esta bien, Prepare un buen desayuno con... Kenji... Y como bastante asi que no se preocupen, igual cualquier cosa puedo preparar algo en casa ¿No? Volvamos a casa... Estoy bastante... Cansado, si eso, estare mejor en la tarde o mañana, en serio, no se preocupen mi, estare bien..." Se levanto lentamente.

"De acuerdo... Pero si pasa algo o necesitas algo nos llamas, estaremos ahí en menos de lo que canta un gallo" el rubio se inclino para desordenar el cabello de Takeo mientras intentaba sonreir. "Voy a pagar la cuenta, vayan saliendo"

"Vamos Takeo ¿Carrera hasta la salida? No hay mucha gente y estamos en un segundo piso, yo digo que es buen tramo" le dio un leve codazo junto a una sonrisa, aunque aun lo vio bastante distraido "¿Takeo? En serio me estas preocupando..."

"Necesito ir un momento al baño... ahora vuelvo" suspiro, alejandose un poco, necesitaba enjuagarse la cara.

Camino poco hasta el baño, pero algo cerca de las escaleras, se quedo totalmente estatico, sin mover ni un musculo ¿Por que? Simple, habia visto algo que ya se esperaba, pero que no quiso haber visto.

"Eriol ¿No podíamos solo comer en el primer piso?" Se quejo el peli-lila, siendo llevado de la mano por un chico de cabello azul oscuro y ojos amarillos.

"¿Bromeas? ¡La vista en los ultimos pisos es increible! Esta nevando pero aun se aprecia, anda amor, no seas un vago, solo son dos pisos más, si aguantas" el chico estaba riendo mientras jalaba al mas alto con emoción.

"Lo que el principe ordene" rio levemente, negando mientras se dejaba llevar, aunque antes de eso jalo al mayor para darle un beso en los labios.

Ver ese beso y trato tan delicado y tierno fue su limite en ese día, salio corriendo del restaurante lo mas rápido que pudo, ni siquiera pudo poner una buena excusa para irse asi, solo era él corriendo por la calle mientras sus ojos se llenaban de más y más lagrimas.

¿Por que era asi con ese chico? ¿Qué le faltaba a él para merecer devuelta ese trato tan amoroso y tierno? ¿Esos besos tan calidos y sin segundas intenciones de por medio?

Solo estaba corriendo de vuelta a la casa de kenji para tomar sus cosas antes de que fuera tarde, ya no aguantaba, no podía más, estaba por romperse completamente.

El aire en sus pulmones no llegaba adecuadamente, respirar le estaba doliendo y cada que intentaba hacerlo de su boca salia un pequeño humo por el frío que sentia, incluso si estaba tan abrigado se sentia como si estuviera con ropa de verano en plena tormenta de nieve. Tal vez era un cobarde por no enfrentar a Kenji ahí mismo y sin duda un estupido por creer que algo cambiaría, no era mas que un iluso a quien llenaron de mentiras, ya se habia dado cuenta desde hace mucho, ya estaba completamente perdido, estaba completamente destrozado, pero tuvo que esperar al ultimo segundo.

"¡Espera!" El peli-lila se apresuro hasta llegar a él, sosteniendolo suavemente del brazo, sin lastimarlo pero haciendo que se detuviera. "Perdoname... Se que debi quitarla antes pero era tan encimosa que no pude... Y los demas siguen sin aceptar que eres mi pareja, pero eso no significa que yo piense algo de todo eso"

Kenji lo habia invitado a una pequeña cena familiar en su casa, era la primera vez en mucho tiempo que su familia estaba reunienda y el peli-lila, a petición de su madre, quizo aprovechar en presentar a Takeo al resto de su familia.

El padre de kenji no solia estar en casa, ese dia no era la excepción, pero  para compensar esa incomodidad, la hermana de kenji trajo a dos de sus amigas, una de las cuales desde un inicio se mostro demasiado apegada al peli-lila, mucho mas después de que este estuvo presentando al pelirrojo a su familia.

Algunos lo aceptaron, otros hicieron algunos comentarios fuera de lugar hacia Takeo, y vaya que algunos lo hicieron sorprenderse de la ignorancia de algunos, cosas como "Si iba a parecerse a una mujer mejor buscabas una" o "¿Estas seguro de que eres gay y no trans?" "¿En serio eres hombre?" "Si llegan a más no habra problema en pasar a tu novio como chica, al menos en, ya sabes, una ceremonia de bodas, asi nadie juzgaria a la familia" unos pocos fueron los que los miraron con mas asco que otros y abandonaron la reunion, otros supieron disimularlo.

Kenji y él ya sabian que iban a tener este tipo de comentarios, ya que el mismo peli-lila conocia a su familia, lo que no se esperaban era que fueran tan... Cómo decirlo ¿Estupidos? ¿Ignorantes? Lo primero a palabras de Kenji, mucho mas directo y ofensivo; y lo segundo a palabras de takeo, aun a pesar de todo intentando no ser grosero con ellos.

La madre de kenji incluso hecho a algunos diciéndoles que no eran bienvenidos con actitudes asi, al principio intento tolerarlo por petición del propio Takeo, pero después de ver una escena donde hostigaban al menor decidio tomar cartas en el asunto.

La reunion se volvio tan incomoda solo por querer decir algo tan simple como que estaban saliendo, de por sí el pelirrojo habia reunido el valor para reunirse con tantas personas desconocidas y aglomeradas, kenji tuvo que alejarlo antes de que sufriera un ataque de pánico.

En ese momento parecio tan preocupado por él, tan enojado por los comentarios que recibía, tan protector y afectivo, que era dificil aceptar el monstruo que ahora era su pareja.

otro problema mas a la lista, fue esa amiga de la hermana de Kenji, quien hostigaba al peli-lila de una manera distinta, mas coqueta, intentando alejarlo del pelirrojo, teniendo una actitud sutilmente agresiva con él.

Fue cuando kenji alejo a takeo que le dijo que esperara, que iria por algo de agua, pero la chica tuvo que cruzarse en su camino. Para colmo, sus familiares que aun no querian aceptar que estuviera saliendo con un chico intentarin juntarlos, cerrando el paso, nisiquiera pudo ir por el vaso de agua.

Lo empujaron hasta una silla, donde quedo sentado. La chica se apego al peli-lila, apretando sus muñecas para que no se moviera, estuvo a punto de besarlo, mas ya habian acabado la paciencia de Kenjiz asi que con nada de delicadeza la empujó, la mayor se lastimo peroneso podria importarle poco a kenji, quien vio de reojo a Takeo salie de la casa, por lo que fue corriendo a por él.

"Ya lo sé... Disculpa por salir así... No me enoje, solo... Ya no podia aguantar más, no pense que tu familia seria tan..."

"¿Estupidos? Si, lo siento..."

"Yo iba a decir Dificil, p-pero ¿Eso también...?" Se quedo con la cabeza agachada y sin mirarlo, se sentia demasiado humillado ya.

"No seas modesto, fueron unos completos idiotas... Y perdona, no pude apartar a esa zorra" dijo con molestia, soltando poco a poco el brazo del pelirrojo.

"N-no, esta bien, se que te esta hostigando y tu no le querias aceptar, no tienes que dar explicaciones" estaba diciendo la verdad, solo había salido de esa manera porque aquello habia sido la gota que derramo el vaso de su tolerancia.

"Aun asi, no fue correcto" se acercó para acariciar su mejilla. "Sabes que solo te amo a ti, y no me importa lo que diga mi familia, son todos unos idiotas, no lo escuches, parece que se quedaron en la edad media" rio un poco, agachandose para poder darle un beso en la frente.

El peli-lila tardo unos momentos mas en alejarse, pero grande fue su sorpresa cuando Takeo lo jalo suavemente y le dio un beso en los labios, no exactamente por el beso, si no porque normalmente Takeo era demasiado vergonzoso para tomar la iniciativa en un beso a comparación de los abrazos o en tomar sus manos.

"Te amo... No se que hize para que un ángel tan bello se enamorara de mi" hablo al separarse del beso, viendolo con una sonrisa.

"No digas eso, me enamore de ti por como eres, tan afectuoso, divertido, responsable, cuidadoso... Por ser tu" subio su mano para posarla en una de las  mejillas del peli-lila.

"Igual que yo, te amo por ser tú, no hay nadie que se compare contigo"

Podia recordar ese abrazo tan unico y especial, que solo transmitía amor, cariño, paz, ninguna intencion maliciosa o falsa, en ese entonces podria haberse quedado en los brazos de kenji sin temor alguno, como su lugar seguro, pero ahora  Sus piernas solo avanzaban por el miedo de que su supuesta pareja llegara a casa y le hiciera algo. Eso es, miedo, se habia quedado por miedo, pero también por amor, también por una esperanza que debio morir hace tiempo, porque era un idiota, un estúpido, un completo tonto.

En cuanto llego a la casa abrió la puerta torpemente, las manos y piernas le temblaban demasiado, tanto que cuando estuvo subiendo las escaleras tropezó, no paso nada mas en ese momento pero se sintio demasiado mareado, mirando el suelo con miedo y pánico, su pecho le dolía y sus lagrimas no dejaban de salir. Reconocio lo que pasaba cuando ya nisiquiera pudo respirar bien, no le gusto nada, no tenia tiempo para eso ahora, intengo calmarse con todas sus fuerzas pero solo termino golpeando el suelo y gritando, todas las emociones que habia estado reprimiendo salian a flote... En un mal momento, en un muy mal momento.

Intentaba levantarse entre tambaleos, todo lo que veia estaba borroso y su cabeza dolia demasiado, estaba mareado y el dolor en su pecho solo incrementaba, no sabia como controlarlo, solo quería que para, queria dejar de llorar, dejar de sentir.

En ese momento intento bajar torpemente las escaleras, afortunadamente no habia subido demasiado, tal vez ya hubiera caído y todo habría sido peor. Bajo hasta el primer escalon, de este haciéndose a un lado para apoyarse en la pared y aliviar un poco el pesar de su cuerpo.

Ese habia Sido su limite y su cuerpo se lo estaba haciendo saber con todos esos malestares; De repente todos esos moretones comenzaban a sentirse y a quemarle la piel, quemarlo vivo. Sentia todo como si los golpes se le fueran dados en ese momento, su vista desenfocada confundiendo lo que era real y lo que no, estaba seguro que iba a desmayarse, y normalmente hubiera querido eso, el dolor fisico y mental era insoportable, pero si se desmayaba, kenji podia llegar en cualquier momento y no queria pensar en lo que le pasaría.

La línea habia sido cruzada desde hace tiempo, pero el permitio que se siga avanzando y perturbado su vida, arruinandolo y matandolo lentamente ¿Hasta que punto iban a llegar? ¿Era esto lo maximo que haria kenji? Que tal si llegaba y lo veia asi de destrozado y vulnerable ¿Seria ese su limite y se detendría? O ¿Seguiría destruyendo su alma?

Recordo su miedo a las relaciones, su miedo de terminar como su madre. Sabia que la mujer no era malvada, habia sido corrompida, manipulada y estaba bajo el poder el miedo, el miedo ante la idea de que podría hacerle su marido si desobedecia.

El verdadero monstruo sin alma ni corazon era su padre, y la silueta de Kenji se confundía desde hace tiempo con su padre, ambos violentos, hipocritas, tan agresivos e irritables, pensando que podian pisotearlo y hacer lo que quisieran con él... Aunque ¿No les estaba dando la razon?  Actuar asi de sumiso frente a sus maltratos y ordenes, sin refutar y siendo la persona amable que era ¿Eso era lo que se ganaba por amar a alguien de esa manera? ¿Era ese un castigo por ser como era? ¿Era un crimen ser una buena persona en ese mundo lleno de seres maliciosos, codiciosos y violentos?

Podria pensar o decir que ya no le dejaria a kenji tratarlo como hasta ahora, mas ¿A quien se supone que queria engañar? Era un caso perdido, él era un caso perdido, un desperdicio, daba igual lo que dijera, en cuánto viera a kenji se congelaría del miedo y volveria a dejarse dominar y maltratar, sin saber como salir de todo eso. Ya estaba en la boca del lobo desde hace mucho, ya no podia escapar, no sabia como escapar.

Comenzo a tirar de su cabello, le dolia la garganta y estaba tirado en el suelo, intentando con toda su fuerza de voluntad estabilizarse, pero ¿Que sucedia si su voluntad ya estaba rota, destrozada, hecha trizas? Aquella que alguna vez se le fue devuelta, se le fue arrebatada por la misma persona que alguna vez lo salvó de acabar con todo. Se preguntaba porque no lo dejo caer esa vez, todo estaría mucho mejor asi, si ese día hubiera caido de la azotea de su escuela nada de esto estaria pasando, podria estar en paz.

El dia no lo habia ayudado en nada, era de tarde y el sol que era tapado por nubes, con bastante lentitud iba terminando de esconderse. No fue consciente del tiempo que estuvo asi, en el suelo, tan patético como siempre, tan patético como kenji decia, tan patético como su padre decia. El no era mas que patético, y su vida una desgracia.

Se calmo lo suficiente, o eso esperaba. Pudo levantarse, aunque nuevamente cayo al suelo, sentado y abatido, sin esperanza de vida, sus ojos supuestamente hermosos y brillantes, de un cielo azul y brillante amarillo, se veian opacos, muertos. Si alguien pudiera verlo directamente a los ojos tal vez podria escuchar su grito desesperado de ayuda, podria ver su sufrimiento y no juzgarlo, solo estar ahí, esperando que el mismo pudiera entenderse.

No podia más, solo queria que Alguien lo abrazara sin hacer preguntas, sin hablar, solo abrazandolo, acariciando su espalda o cabello, hacerle saber de alguna manera más que estaba con él, que no lo iban a dejar, que no lo iban a juzgar, que le darían el tiempo que necesito para entenderse, para calmarse, para sentirse seguro y parcialmente en paz.

Se arrastro un poco hasta que su espalda choco con una de las paredes. Se quedo ahí, intentando calmarse, intentando desesperadamente guardar la calma, abrazandose un poco para lograr algo más, siempre habia funcionado, aunque hace tiempo que no le tomaba muchisimo tiempo calmarse.

Las lagrimas poco a poco dejaron de salir, su garganta le seguia doliendo, y respirar era como una apuñalada a sus pulmones, mas fue intentando e intentando hasta que esa sensación fisica dolorosa desapareciera.

Habia tenido suerte hasta ahora, pues Kenji no habia llegado a casa, pero no queria seguir tentando su suerte que ya de por si era mala, así que con ligeros temblores y tambaleos se levanto, respirando profundamente antes de volver a subir esas escaleras, ahora tenia otro malo recuerdo en esa casa, un prolongado, fuerte y doloroso ataque de pánico.

Termino de subir las escaleras y se dirigió a la habitación del peli-lila, acercandose hasta abrir la puerta, pero cuando abrio esta al mismo tiempo la puerta principal fue abierta; Aun estaba algo ido, así que eso evito que notara ese paralelismo, el sonido o el solo olor familiar su pareja.

Sus cosas estaban en distintos lugares. Su mochila estaba en una esquina de la habitación y junto a la de kenji. Ahí podia ver ese llavero a juego que compartieron, ahora solo el llevaba él del sol.

Su celular para su suerte lo tenia, kenji no se lo habia vuelto a quitar, aunque veia que tenía algunas llamadas perdidas tanto de Akihiro como de Yasahiro. Su ropa, algunas prendas aún estaban sucias, otras dobladas, así que las coloco en su mochila; Sus cuadernos, sus utiles escolares, ya todo estaba guardado, incluso guardo sus guantes, la bufanda y el broche que le entrego akihiro, para en todo caso no sufrieran daño, pero aun habia algo que queria recuperar, y eso era su diario.

"Dondo lo habrá dejado..." Dijo en voz alta, comenzando a buscar.

Intento buscarlo en la estanteria pero no lo veia, asi que busco en el armario, la mesita de noche y por ultimo en los cajones, aunque cuando iba a abrir el ultimo se quedo completamente paralizado al escuchar y reconocer los pasos que subían las escaleras. Comenzo a temblar, sin poder moverse, su respiración agitandose un poco.

"¿Buscabas esto?" Escucho la voz de kenji, quien se apoyó en el marco de la puerta, en su mano izquierda que estaba levantada tenia el diario de Takeo.

"K-kenji... P-perdon solo queria... Tener otra vez mi diario..." Balbuceo, alejandose unos pasos, agachando la cabeza.

No queria reaccionar así, si no que por primera vez queria reclamarle todo lo que hizo y que lo habia estado engañando ¿Desde cuando? Esa era una de sus muchas preguntas ¿En realidad lo habia amado alguna vez? Otra de las preguntas.

"Te vi corriendo fuera del restaurante, eres bastante obvio a decir verdad" entro a la habitación, cerrando la puerta tras él y poniendo el seguro, guardando la llave en el bolsillo de su pantalón.

"... M-me viste, eso quiere decir que sabes perfectamente porqué sali corriendo... Al menos un motivo" intento mantenerse firme, pero aun estana temblando y no era capaz de hablar sin tartamudear.

"Felicidades, eres un genio Takeo" Dijo con sarcasmo, rodando los ojos "y la verdad es que me importa poco mientras no habrás la boca y sigas conmigo, podemos hacer que nada de esto paso... Tu decides" se acercó más al pelirrojo de manera amenazante, aun sosteniendo el diario entre sus manos. "Asi yo puedo olvidar lo que lei en este diario y no voy a castigarte"

"¿Entonces a él también lo estas engañando...? No puedo hacerte caso, estoy cansado de como me tratas ¿Y ahora quieres que guarde silencio? Cuando no solo me engañas a mi si no a alguien más ¿Y Seguir contigo? Ya no puedo seguir asi... ¡No eres mi dueño!" Se atrevio a Gritar, cerrando fuertemente sus ojos y agachandose la cabeza para no ver a Kenji a los ojos, era incapaz de eso.

No escucho respuesta hasta unos momentos después, y ni siquiera fue una respuesta, fue una risa.

"Miren nada más, el perrito faldero intentando revelarse ¿Que no entiendes tu lugar?" Golpeo dos veces a Takeo con el diario y luego se lo lanzo con fuerza. "Eres mio, no tienes manera de alejarte de mi, te tengo en la palma de mi mano, eres uno de mis juguetes, el favorito, no quisiera desecharte a este punto..." Paso su mano por el cabello de Takeo, sosteniendo suavemente uno de sus mechones en su mano.

Le daba asco que tan solo se acercara, mucho mas que lo tocara, pero estaba comenzando a faltarle la respiración al tenerlo tan cerca y tocando su cabello, tenia miedo sin lugar a duda, ese sentimiento que ya odiaba fuera tan característico de sí.

"Y también tienes que entender... Que asi como eres mio, no puedes tener a alguien mas en tu vida...ese amigo tuyo, saiki, hablan tan bien de él... Lo extrañas mucho ¿No es asi? Me pregunto porque no has ido a intentar buscarlo y quedarte en sus brazos como la puta barata que eres" solto el mechon, pero solo para levantar su mano y jalar su cabello con fuerza, haciendo que el pelirrojo levante la cabeza y lo mire directamente a los ojos, deleitandose cuando vio ese miedo en sus ojos, esa incredulidad, esas lagrimas que amenazaban con salir. Tenia total dominio sobre él y lo sabia.

"B-basta... No sabes nada de él, era mi amigo... Me ayudo cuando mas lo necesite... A diferencia tuya" su mirada bacilo entre mantenerse firme y sus lagrimas tanto por elndolor fisico y emocional, que hacian un contraste perfecto a sus emociones desordenadas. "Si enserio crees que te engañaría... Entonces nunca me conociste realmente"

"Oh... Claro que te conozco... El tema aqui es... Que tu no conoces tu lugar... Tal vez tenga que recordartelo ¿No lo crees?"

"¡N-no! ¡Espera! Ya te lo dije, creeme, te lo juro enserio" se veia mas que patético, pero el miedo lo obligana a humillarse de tal manera, preferia cualquier castigo verbal o fisico antes que volver a sentir las manos del peli-lila tocandolo con morbo y lujuria. "Siempre fue mi amigo, y él no me veia de otra manera estoy seguro, éramos solo niños, lo unico que hago es extrañarlo por lo mucho que pasamos, por favor, en toda mi vida solo me he enamorado una vez... Me enamore de ti... Pero ahora no te reconozco kenji... ¿Donde esta ese chico dulce y protector? ¿Donde esta aquel a quien ame? No eres tú, para nada eres tú... Se que no eres asi, confio en que no... Aun quiero pensar asi... Aún..."

"Deberias entender algo Takeo... Las personas no son como las idealizas o como crees que son... Todos tenemos secretos, todos tenemos facetas que no mostramos a los demas, pero yo me canse de eso, me canse de actuar ¿Quieres saber dónde esta ese chico del que tanto hablas? Pues la verdad es que nunca existio, solo era una actuación, una distracción para toda la mierda de realidad, tu me servias para ignorar todo esto, eras medianamente util pero poco a poco me  dejas de ser util" el pelirrojo pudo notar su duda, su mentira mezclada con la verdad. "Poco a poco estas perdiendo tu valor... ¿En realidad crees que mereces un trato asi? Vaya que me haces reir, no mereces ni la mitad de lo que tienes, piensa por un momento, se razonable, no hay nadie que pueda amar a alguien como tu, eres horrendo, completamente manipulable, no tienes sentido de la vida, te la vives obedeciendo y complaciendo a los demás... Y en cuanto uno sepa tu pasado sabra cuando tiene que alejarse de ti ¿Quien va a amar a alguien que fue prostituto?  Entiende takeo, por mas que quieras pensar lo contrario, por mas que digas que no lo eres, eres un juguete, uno roto, uno que aparenta ser util para seguir jugando, pero no, no es la verdad ¿No es que odias las mentiras?"

El peli-lila Dio un paso adelante para empujar al pelirrojo hacia la pared, acorralandolo ahí, sus rostros quedando separados por tan solo unos centímetros.

"Entonces deja de mentirte a ti mismo... Y acepta tu realidad de una vez por todas, el unico hombre que podria amarte aunque sea un poco soy yo, no hay nadie mas, Takeo... Nadie mas que este dispuesto a estar contigo e intentar apreciar lo poco que tienes para ofrecer, si no es que no hay nada que puedas ofrecer... "

Cada palabra que Kenji decia era como una daga que se enterraba profundamente en el corazón de Takeo, sus lagrimas solo corrian por sus mejillas mientras no podia hacer mas que escucharlo, quedarse callado y... Y darle la razon.

"Te quiero Takeo, aunque sea lo intento,  te quiero para nadie mas que para mi, tu eres de mi propiedad... Y creo que ya es momento de hacerte entender cual es tu lugar, para que dejes de hablar o pensar en cualquier hombre que no sea yo, porque solo yo soy el dueño de todo su ser" y fue ahí que entendio, no era mas que posesion, lujuria, adicción, agresividad y dependencia lo que sentia por él. No habia amor, ni una pisca de él, ni una pisca de lo que alguna vez fue.

El más alto corto toda separación que tuviera su rostro con él de Takeo, inclinandose a besarlo sin ningun tipo de suavidad, ese beso fue intenso desde un inició, solo separandose cuando kenji asi lo quizo, no sin antes morder el labio inferior del pelirrojo, haciendo que este sangre.

"Espero que esta vez estes mas dispuesto... ¿Quieres saber otro motivo del por qué te engañe?" Dijo y luego se acercó para susurrar a su oido. "Porque tu no lograrias satisfacerme nunca" se alejo un poco, comenzando a desabotonar la camisa que llevaba Takeo, quien no opuso resistencia, en ningun momento.

Una cez quito la camisa del pelirrojo, tomo con fuerza las muñecas de este y con una sola mano, con la otra se quito su corbata y en unos rapidos movimientos ato las muñecas de takeo, esto siendo mas facil debido a que parecia ya haber roto por completo la poca voluntad que le quedaba

"tu nunca estarias dispuesto a tener sexo conmigo ¿Que haria si no? ¿Esperar a que tu estuvieras listo? Por favor, salimos desde hace bastante tiempo, asi que comenze a hartarme de que todos mis intentos por avanzar los frenaras, intente esperar, porqué solo colaborar yo no era divertido, pero ya me canse... Y que bueno que lo hize, tomarte por la fuerza es mucho mas divertido si me permites decirte, aunque nunca dude de que pudiera... Eres tan debil, tan obediente que eres perfecto..."

Le empezaba a doler la espalda por tener que inclinarse, odiaba que Takeo fuera tan pequeño, pero solo lo jalo y luego lo empujó hacia la cama, sin ningun tipo de delicadeza. Se posicionó sobre él, manteniendo las muñecas atadas del pelirrojo hacia arriba.

"¿Qué? ¿No intentas resistirte? ¿Ya estas entendiendo que no tienes nada mas que intentar?" Susurro a su oido, bajando lentamente, dejando besos en su cuello. "Repite entonces que esto es lo que quieres, repite que me das el permiso de tocarte y usarte como quiera hasta que yo decida parar, repitelo Takeo... Quiero escuchar tu voz"

Al principio no tuvo respuesta, solo sintió unas lagrimas en su frente, ya que estas habian rodado desde los ojos de Takeo hasta su barbilla y finalmente cayendo en él. Frunció el ceño por esto, asi que para motivarlo abrio un poco su boca y luego mordió fuertemente el cuello del pelirrojo, deleitandose con el grito de dolor de este y el sabor metalico de la sangre en su boca.

"Dilo Takeo, es una orden" su tono de voz era uno amenazador que intentaba sonar medianamente cariñoso, ciertamente un muy mal intento.

"Y-yo... Yo... Quiero..." Comenzó a balbucear, su mirada estaba completamente perdida y de sus ojos solo caian lagrimas, pero su voluntad y alma estaban completamente rotas. "Quiero que me... Que me..." Guardo silencio otra vez al recibir una cachetada, unas ultimas lagrimas rodaron por sus mejillas, parecia que ya no era capaz ni de llorar.

"¡Habla bien! No eres un maldito bebé, sabes que odio cuando balbuceas o tartamudeas.... Adelante, dilo, suplicalo" 

"Puedes... Hacer lo que quieras... Tocarme, u-usarme como... Como... Te plazca... Eso es... Lo que quiero..." Sus ojos vacios y muertos conectaron con los de kenji, donde nuevamente solo vio lujuria y enojo. "Por favor..." Cada palabra que salio de su boca en ese momento fue lo peor, hace años le obligaban a decir lo mismo, no penso que volvería a escuchar esas palabras de sí mismo. "Te lo suplico..." No queria suplicar aquello, esas ultimas palabras fueron mas una súplica para que lo dejaran, por eso fueron un susurro desesperado, pero sabia que era en vano, kenji lo interpretaria porque estaba desesperado por sentir que lo tocara, cuando era todo lo contrario.

"mnh~ ¿Lo ves? No era tan difícil cariño.... Tus deseos son los mios, porque los mios son los tuyos" sonrio burlonamente, quitandose su propia camisa de manera algo lenta, dejandola a un lado.

Acercó su boca al cuello de takeo nuevamente, dejando un par de besos antes de succionar en algunas zonas, dejando marcas rojas que después se transformarían en marcas de chupetones, aunque las mas notorias serian las mordidas que ahora estaba dejandole, sacandole además de sangre algunos suspiros y gemidos al pelirrojo, una reaccion que no pudo evitar, pero sentia asco de reaccionar de esa manera, sentia asco de no intentar resistirse, pero no podia, era inutil, su cuerpo no le respondia adecuadamente, estaba tenso pero no podia golpear a kenji, alejarlo o lo que sea. Le estaba dando a kenji lo que queria, la sensación de dominio total sobre él y su cuerpo.

Sus brazos comenzaron a adormecerse al tenerlos hacia arriba y atadas sus muñecas, fue un alivio que Kenji lo desatara, pero ese alivio rápidamente se acabo cuando la corbata paso de aprisionar sus muñecas a privarlo de su sentido de la vista.

"K-kenji... Q-que estas..." Escucho el sonido de un cajon abriendose y luego un pequeño raspon de metal contra madera, y finalmente en su mejilla el frio de ese metal acariciandolo y amenazando con hacerle daño.

"Dijiste que haga lo que se me plazca... Y ciertamente aun tengo que castigarte por atreverte a pensar tanto en ese chico del que tanto escribes en tu diario" susurro a su oido,  lamiendo el lobulo de su oreja. "Me fascina ver como sangras, como te retuerces de dolor... No importa que te haya tapado los ojos, seguiras oliendo tu sangre y sentiras cada cortada ¿No es así?"

El peli-lila tenia en sus manos una navaja que presiono más contra la mejilla de Takeo, provocando un corte que no tardo en empezar a sangrar. Bajo desde su mejilla hasta su cuello, cortando la piel solo superficialmente, en una parte del pecho dibujando una pequeña "K"

Los quejidos de Takeo por la incómodidad, dolor y ademas de el ardor no tardaron en escucharse, aunque sentía más pánico por no poder ver, ya que cada que Kenji provocaba un corte, llegaban unos recuerdos demasiado vividos de su tiempo en el distrito rojo, y entonces las manos de kenji que comenzaron a recorrer su cuerpo no se sintieron como las de él, si no como las manos grandes y asperas de otros hombres que querian hacerle daño, que solo buscaban satisfacerse con él.

Mientras tanto el peli-lila paso aquella navaja por el pecho del pelirrojo, haciendo algunos trazos a su gusto y lamiendo la sangre antes de morder esas mismas zonas, tocando y apretando con su mano libre el area de uno de los pezones del menor, escuchando con satisfacción las quejas, suspiros y hasta gemidos salidos de su boca, ademas de sentir su cuerpo retorcerse o encorvarse, esos movimientos que le hacian saber que Takeo aun intentaba resistirse aunque sea un poco, más nuevamente, ya había roto su alma y voluntad para que sea capaz de detenerlo.

Aunque ya hace bastante que le habia cortado las alas a ese hermoso angel de la manera mas cruel y despiadada posible, habia arruinado a aquel que amo su desastre sin que se lo pidiera, pero era eso exactamente, el nunca le pidió que lo amara, nunca le pidio que lo cuidara o se preocupara, el pelirrojo era él unico que vivia en una fantasia de tener un amor hermoso.

Poco a poco fue deteniendo sus trazos con aquella navaja, alejandose para poder admirar su obra de arte. Cortes, sangre, moretones comenzando a formarse, mordidas, la piel blanca estaba llena de marcas que él mismo habia hecho y el mismo takeo estaba con el cabello algo desordenado y de su respiración ni hablar, estaba intentando estabilizarla como podia.

"Odio tus cicatrices, te ves horrendo... Solo muestran cada mano que te toco, Pero las que yo hago son mas que perfectas en ti" dijo con un tono obsesivo, acercandose a besarlo con fiereza, hudiendo sus uñas en los brazos del pelirrojo y callando sus quejas con el beso.

Al separarse del beso las manos del peli-lila bajaron por los brazos de Takeo hasta llegar a su cintura, donde ambas manos se acercaron para desabotonar sus pantalones y bajarlos lentamente, con sus uñas arañando los muslos del pelirrojo en el proceso.

"Ke-kenji... Para... Te lo ruego, detente por favor...." Pronunció con la voz entrecortada, posando sus manos en las del mas alto, nuevamente de sus ojos comenzaron a caer unas lagrimas imposibles de retener, sabia lo que seguia, y no quería que fuera asi otra vez ni nunca, no de esa manera.

Supo que suplicar para que se detuviera fue un error, porque Entonces comenzo a llegar golpe tras golpe y luego fue tomado del cuello, por instinto llevo sus manos a las de kenji para intentar separarlas y asi poder respirar, pero esas manos lo apretaban cada vez mas hasta que sintio que perdia las fuerzas, pero antes de que comenzara a perder el conocimiento kenji lo tiro al suelo.

Empezo a toser con fuerza, intentando ignorar el dolor creciente en sus rodillas, brazos y su cabeza, no le habia dado tiempo de caer adecuadamente asi que se lastimó mas de lo que creyó, además el aire en sus pulmones volvia a llegar, pero dolia demasiado.

No escucho ninguna palabra de kenji, ni siquiera reclamos, pero en cambio volvio a sentir como ataban sus muñecas y de manera brusca se le era despojado de las últimas prendas de ropa que le quedaban, el frio provocandole escalofríos, sin la posibilidad de al menos generarse algo de calor abrazandose a sí mismo.

No le dio tiempo de pensar en el frio, ya que sintió un pie presionando su pecho con fuerza, solo pudiendo mantener una respiración pesada mientras se quejaba, no era capaz ni de mover sus manos.

"Recuerda lo que dijiste... Nunca faltas a tu palabra ¿O sí, Takeo?" Se rio burlonamente, su sonrisa no siendo mas que sádica mientras levantaba su pie y volvia a pisar el pecho del pelirrojo con fuerza provocando que escupiera sangre. "Que asco me das" 

El sonido de ropa cayendo al suelo llego a los oidos del pelirrojo, aunque no pensó mucho en eso ya que el peli-lila lo levanto otra vez, pero cargandolo, quizas fue lo mas amable que hizo en todo ese tiempo, pero eso no duro mucho ya que lo dejo caer a la cama sin ningun tipo de delicadeza, y la navaja que se habia quedado en la cama se incrustó en su cadera, generando una herida profunda que no tardo en empezar a sangrar.

Takeo quedo boca abajo, respirando de manera agitada e intentando liberarse, la sangre que caia de algunas heridas en su rostro combinandose con sus lagrimas.

"Amo como te ves de esta manera, totalmente a mi disposición, a mi merced" susurro a su oido mientras se posicionada sobre él, llevando sus manos a la espalda del pelirrojo y bajando hasta su cintura, apretando un poco su agarra y comenzando a manosear su cuerpo, agachando la cabeza para poder morder la parte de atrás de su cuello.

Mientras pasaba sus manos por accidente hundio un poco mas la navaja en la cadera de Takeo, no la hubiera quitado pero le incomodaba tenerla ahí, obstruyendo su paso, asi que la retiro sin cuidado, agravando la herida, la sangre manchando aun mas las sabanas.

El pelirrojo estaba sumido en el panico, intentando moverse para poder liberarse, antes habia podido hacerlo incluso siendo un niño, pero ahora no entendía porqué su fuerza era menor, era como si el mismo estuviera reteniendose ¿En serio queria eso? ¿De verdad queria que lo tratara asi? ¿Estaba disfrutandolo? Porque su cuerpo reaccionaba a cada toque del Kenji, los sonidos que salian de su boca solo invitaban a este mismo a seguir y seguir, demostrandole que su cuerpo le pertenecia, aún si él no quería eso, mas si su cuerpo estaba reaccionando de esa manera ¿Kenji tenia razon?

No, no la tenia, definitivamente no la tenia ¿Verdad? No estaba sintiendo mas que dolor, en ningun momento pudo sentir placer de todo eso, aunque su cuerpo reaccionara así, no paraba de pensar en que quería que se detuviera, que eso sea una horrible pesadilla, o incluso haberse quedado con Akihiro y Yasahiro, tal vez si no hubiera salido corriendo no hubiera terminado solo, y asi no estaria en tal situación. Pensaba en tantas situaciones en las que no hubiera terminado asi, tal vez si hubiera actuado desde el inicio, ponerle un algo a kenji, terminar con él, alejarlo, cualquier opcion para que su sufrimiento sea tan inmenso como ahora, como si esa etapa que tanto odiaba de su vida volviera a repetirse ¿Estaba condenado a vivir asi? Mas bien ¿Estaba viviendo siquiera?

Llego a pensar que seria feliz, llego a pensar que kenji era el amor de su vida, aquel que lo ayudo a superar tantas cosas, asi como el ayudaba al peli-lila de igual manera, todo era reciprocro, todo iba mejorando ¿Que tuvo que pasar en realidad? ¿De que clase de persona se habia enamorado? ¿Hizo mal en otorgarle toda su confianza sin titubear?

Estaba condenado a que su felicidad sea momentánea. Sabia que ese sentimiento no era para siempre, todo el mundo alguna vez era feliz y Luego sucedia algo que arruinaba esa felicidad, y asi era un ciclo, porque asi es la vida, pero para él esa felicidad nunca fue tan duradera, y cuando menos se lo esperaba, desaparecía de la manera mas cruel posible, he intentando aferrarse a que no, es como habia terminado de esa manera.

Entrego su alma y corazon a alguien que no se lo merecía, a alguien que lo engaño todo el tiempo y jamas lo noto, y cuando lo hizo intento arreglar incluso lo que él no habia roto, pero solo era un chico al cual nunca nadie iba a merecer el amor tan puro e inocente que podria otorgar, lastima que el mismo no pensara asi.

¿Y que haría cuando terminara esto? ¿Como podria mirar a su familia a los ojos? ¿A sus amigos? Se sentia tan rebajado, humillado, kenji se ocupo perfectamente en que pensará que no valia absolutamente nada, ni una sola moneda del mas minimo valor, cuando en realidad era todo lo contrario, porqué personas como él eran dificiles de hayar en un mundo lleno de egoismo, avaricia y crueldad, pero eso mismo era lo que consumia a las personas como él, lo que los volvia tan distantes, desconfiados, temerosos, sin poder abrir nuevamente su corazon a alguien que en verdad se lo mereciera por miedo a salir lastimados otra vez, esa ers su realidad, eso era lo que los mataba desde dentro hacia afuera o desde fuera hacia dentro.

Primero consumia su alma y después su cuerpo, o en cambio primero su cuerpo y después su alma, al final personas asi terminaban muertas, porque no se les conocia por su bondad y amor, si no que se les conocia por su ingenuidad, estupidez y falta de instinto de supervivencia, personas como él no sobrevivían en un mundo tan cruel que les cortaba las alas de manera despiadada a todos a aquellos angeles que intentaban solo vivir felices y hacer felices a quienes los rodearan.

"Deja de llorar, Takeo, te ves patético... Oh, espera, ya lo eres" le susurro al oido con burla.

Patetico, era sin duda patético, y un ingenuo por confiar en él.

El peli-lila estuvo moviendo sus manos por todo su cuerpo, apretando sus muslos, arañando su espalda y mordiendo su cuello. Con sutileza desato sus manos, viendo las marcas rojas por la fuerza que habia usado en el nudo,  era evitdente que ademas estaban adormecidas.

Poco a poco fue levantandose ligeramente para poder introducir su miembro en la entrada del pelirrojo, quizas otro de los escasos gestos amables que tuvo con este fue esperar para que no le doliera tanto, manteniendose escuchando sus quejas y como se contraía, apretando las sabanas bajo el y mordiendo su labio con fuerza, intentando que esa intromisión tan brusca deje de doler o arder, nuevamente la diferencia de tamaño entre ambos no haciendo mas que lastimar a Takeo, aplastandolo y siendo demasiado para que pudiera soportarlo por mucho tiempo.

No fue tanta la paciencia de kenji para esperar a Takeo, no espero que le dijera algo, solo comenzo a moverse, al inicio de una manera lenta, pero eso no duro mucho para la ya mala suerte del pelirrojo. La rudeza con la que lo estaba embistiendo era demasiada asi que los gritos y gemidos no se hicieron esperar, mas estos no eran de ningun tipo de placer, ni siquiera el más minimo, todos eran de un profundo dolor, acompañados de lagrimas que caian y caian pero se les hacia caso omiso.

Aunque gritara, llorara, rogara o suplicara kenji no se detuvo y sabia que no pararia hasta que estuviera completamente satisfecho ¿Hasta que punto? ¿Cuando seria eso? ¿Cuando podria dejarlo respirar?

"¡K-kenji! Po-por favor, para, para por favor... ¡Te lo ruego para!" Ya no le importaba que lo golpeara ahora o después, suplicaria hasta que su garganta le doliera, por mas que fuera en vano o se humillara más iba a suplicar.

Apretaba cada vez con más fuerza las sabanas, intentaba no moverse pero por instinto intentaba liberarse o hacer que ese dolor se detuviera, aunque en realidad no hacia mas que aumentar, era como si lo estuvieran quemando vivo desde adentro. De kenji no escuchaba palabras, solo algunos gruñidos o quejas leves, a veces risas, sabia que esas eran de burla, y alguna que otra vez lo golpeaba para que guardara sus suplicas, seguramente lo unico que escucharia si es que se dignaba a hablar era que dejara de hablar asi y que solo se dejara llevar, que disfrutara algo que él claramente no pidió y a lo que fue forzado.

Los minutos parecian horas, horas eternas, esperando que estas acabaran pronto; sin embargo, parecia que solo se prolongaban más y más, torturandolo hasta llevarlo al borde de la inconsciencia ¿Lo peor? No era capaz de quedar inconsciente, por mas cansado o adolorido que estuviera no era capaz de quedar inconsciente, en esos momentos odiaba su propia resistencia, porqué estar lucido en ese momento era mucho peor, porque todo el tiempo fue consciente de lo que hizo y hacia kenji.

Pensó que iba a detenerse cuando la velocidad de las embestidas disminuyó, seguia llorando, pero con algo de alivió. Eso se esfumo en cuanto sintio las manos del peli-lila en su cadera, apretando con fuerza y nuevamente las embestidas retomaron su ritmo y dureza, habia sido nada mas un pequeño descansó que sirvió para uno de ellos, y era evidente para quien.

¿Se suponia que debia encontrar ese supuesto placer en todo ese dolor? El unico que se encontraba totalmente complacido era kenji, mientras que él le rogaba que pare, le rogaba a cualquier dios que existiera que lo salvara de ese tormento, queria que alguien lo salve, que alguien le dijera que todo iba a estar bien, sentir un calido abrazo, o volver a sentir los labios del peli-lila sobre los suyos, pero con esas emociones de amor y cariño, no esas frías, vacias y lujuriosas.

¿Se suponia que era una especie de trofeo?  No... Claro que no lo era, un trofeo tenia valor. Kenji se lo habia dicho, era un mero juguete, y asi es como ño estaba tratando, un juguete que se podia usar como se le plazca a cualquiera, estaba roto, pero aun era usable después de todo.

En la habitación no se escuchaba mas que sus gritos, gemidos y suplicas, podria ser la descripción de un encuentro entre dos amantes que se entregaban él uno al otro, en cuerpo y alma, pero no, para él era la descripción de un abuso, de una violación, de su sufrimiento y dolor.

Otra vez, una y otra vez ¿Hasta cuanto? Repetía todas sus preguntas ¿Cuando pararia? No hablaba solo de kenji, hablaba de todo en general ¿Hasta cuanto? ¿Cuando pararia? Hasta cuando sufriría, cuando pararia su sufrimiento.

Vivir era un infierno, estaba cansado de vivir, cansado de respirar, cansado de sentir, cansado de existir, cansado de sobrevivir, estaba cansado de todo, cansado y harto, harto de que solo lo usaran, harto de que le mintieran ¿Por qué no podia expresar lo que sentia? ¿Por qué no era capaz ni de odiar a quien ahora mismo lo estaba haciendo pasar un verdadero infierno? ¿Por qué era así? ¿Por qué era él? ¿Por qué él?

No le deseaba a nadie esa vida, no queria que nadie sufriera algo como esto, pero ¿Por qué él? ¿Qué es lo que habia hecho mal? ¿Que pecado tan grave había cometido para terminar de esa manera? Le rogaba a cualquiera que le dijera cual era la condena que estaba pagando ¿Habia cometido un crimen tan grave en otra vida que ahora pagaba el precio de sus actos? ¿Quizas fue por qué su nacimiento arruino la vida de muchos? ¿Estaba acaso maldito?

Seguramente cansaba a los demas con tantas preguntas que nadie iba a poder responderle o que quizas otros se hacian, pero ¿Sorpresa? El también estaba cansado de ess pregunta, también estaba harto, enojado, aterrado, completamente sumido en una tristeza inmensa, incapaz de salir de ella.

Estaba perdido, tan perdido... No escucho claramente cuando kenji comenzo a hablar, era pocas esas palabras y seguramente cargadas de odio, deseo o incluso ambos, pero supo que al menos esa tortura, ese castigo, ese infierno habia acabado por al menos un momento cuando Kenji lo solto y finalmente eyaculó dentro de él, al mismo tiempo que mordia otra vez su cuello con fuerza, él mismo sintio otra vez asco de sí al sentir que se corria entre las sabanas, manchando estas.

Otra vez, otra vez era como si lo reclamaran como el objeto de Alguien, y no habia nada que pudiera hacer para abogar por si mismo y hacer ver lo contrario.

"Maldita sea, vaya que si hiciste esto algo dificil, pero de todas maneras estuvo bien, no tengo tantas quejas, aunque Con Eriol se siente mucho mejor que contigo" hablo sin remordimiento alguno en su voz, mas bien nuevamente era burla lo que habia en su voz, rebajando al pelirrojo una vez más.

Contuvo lo mas que pudo otro grito cuando kenji salio de él, no queria darle el placer de seguir escuchandolo, aunque sí seguía intentando recuperar el aliento y estabilizar su respiración, intentando ignorar el dolor de sus heridas y el ardor en su interior.

"Que cansado... Ah, ni siquiera quiero arreglar este desastre..."

Las palabras de kenji comenzaron a escucharse confusamente, llego un poco en él que ya no lo escuchaba con claridad, pensó que era porqué estaba murmurando, pero en realidad era porque él estaba cayendo poco a poco en la inconsciencia.

El peli-lila, para la buena o mala suerte de Takeo, noto esto y le dio la vuelta de manera brusca, quitando la venda en sus ojos. Supuso que ahí se detendría, pero kenji le dio una cachetada que lo volvio a despertar.

"No te di permiso de desmayarte, estupido perro" escupio con veneno en su voz.

La cabeza le daba vueltas, aun si estaba despierto no podia ver a kenji con claridad, mucho menos cuando este volvio a tomarlo del cuello, aunque esta vez no se espero y lo azoto en el suelo, empujandolo hasta la pared para que quedara recostado contra ella.

"Tendre que dejarte a un lado en lo que arreglo este pequeño lío, mas es tu sangre la mancha las sabanas... Por favor ¿Sigues llorando? No me digas que es por todo esto... No, espera, no me digas que es por tus heridas, anda no seas una princesita y aguántate el dolor, te hiciste peores heridas ¿No es asi? Entonces estas no son mas que cortes superficiales, Ahora deja de llorar o vas a ver que esto no es lo ultimo que tengo para ti, Takeo" lo tomo del cabello con brusquedad, obligandolo a mirarlo.

Sentarse en esa condición fue horrible, ademas de golpearse la cabeza y los codos, las piernas le temblaban, su trasero y caderas le dolian y sentia punzadas repetidas de dolor que no paraba, solo aumentaban la sensación.

Sus ojos volvieron a conectar, la mirada de Kenji era la misma, y la mirada de Takeo parecía mucho mas vacia, destruida, sus hermosos ojos cristalizados por las lagrimas, unas ojeras abajo de estos y alrededor unos tonos rojizos por tanto llorar.

El peli-lila no dijo nada, solto a Takeo, pero tomo su menton, acercandose para poder besarlo una ultima vez en esa noche.

"Bien, bien, te has ganado un premio, puedes descansar, pero si te necesito haras lo que yo te diga... Espero que con esto ya hayas comprendido tu lugar y el nombre de tu dueño, perro faldero" presiono la nariz del pelirrojo, empujandolo antes de soltarlo.

Fue la unica orden de kenji que siguio. Lo vio salir de la habitación y fue cuando pudo dejar de estar tan tenso, dirijiendo su vista hacia la ventana, ya era de noche y la luz de la luna iluminaba la habitación, algunas estrellas brillando un poco y otros copos de nieve cayendo, era un paisaje hermoso haya afuera, y dentro de esa habitación solo podia verse a un chico destrozado, herido, con el alma completamente rota, un bello ángel que sufria la realidad del mundo cruel en el que vivia, que sufria de los deseoa horribles de aquel que amo con todo su corazón, a quien protegio, apoyo y escucho siempre, ahora era su verdugo, su perdicion, un nuevo infierno que duro tanto, que seguia persistiendo, pero que no detuvo a tiempo, se veia a una pobre alma pidiendo ayuda a gritos desesperados.

"R-ryu-shiro... Hermano, tengo... Miedo... Mu-mucho miedo... y me duele todo... ya no puedo sop-portarlo... Quisi-era que... Me abrazaras... O ir contigo..." Su voz fue un susurro desesperado, rota por los llantos. Inusualmente, esbozo una pequeña sonrisa, debil y triste, menteniendo su vista fija en el cielo hasta que ya no pudo mas y cayo desmayado.

La sangre de sus heridas seguia manchabdo el suelo, el frio seguia golpeandolo y haciendolo temblar, sus lagrimas cesando y no emitiendo ningun otro sonidom no estaba tranquilo, para nada lo estaba, pero habia llegado a su limite esa noche. Sabia que sus heridas y su dolor no eran el suficiente para matarlo, a la mañanas siguiente estaría incluso peor y su cuerpo estaria repleto de marcas, pero por ahora, solo descanso, al menos unas horas de paz tendría, al menos unas, por pocas que fueran, no queria nada mas que dormir, o quizás, dormir y no volver a despertar.

¿Que seguia? ¿Que haría al despertar? No seria capaz de enfrentar a kenji o hablar de lo que paso ¿Ese habia sido el limite? O ¿Aun quedaba algo más? No estaba seguro de que pudiera aguantar algo más, no tenia las fuerzas para eso, nisiquiera tenia la voluntad para seguir viviendo, era como si ya estuviera muerto, aun si seguía con vida, porque esa no era una vida, era un completo infierno, uno que ya no soportaba.

Palabras: 18008

MI CAPITULO CON MAS PALABRA DESPUÉS DEL DE LA BELLA Y LA BESTIA

Ese no lo cuento mucho ya que en su mayoría segui el guion de ambas películas, animado y live action, asi que bueno, para mi este es mi capítulo con mas palabras.

En fin señoras, yo digo que terminando de leer los comentarios que dejen, voy a leer una tremenda funada para kenji JAJSJAJS

Soy una babosa porque termine esto antes de entrar a semana de examenes, estoy intentando mentalizarme para no llorar si pasa algo, mi mamá y mis tios ya me han hablado de eso y que me ando matando yo solin, incluso mi profesor de matemáticas y de civica ya se dieron cuenta 😭

Estoy intentando mejorar pero ps no sirve mucho🥹 pero ahí vamos con mucho esfuerzo.

Les juro que esto llevaba meses en borradores solo porqué no me dignaba a escribir algo pero tras escribir los capítulos de la sección de Akihiro y yahiro me volvio algo de inspiración

Usana esa inspiración para torturar al pobre takeo JAJAJAJA perdon mi niño, si me pase contigo pero solo un poquito.

Mira el lado positivo vv, Tu no te puedes embarazar a diferencia de tu reencarnación... Digo que?

En fin, igual ame a Yasahiro en este cap, a mi nene y a kenji se me atrevan a ponerlos en la misma bolsa porque funo a todos 😾

En el siguiente capitulo para su satisfacción, pues le van a caer putazos al Kenji asi que no se preocupen, ya mero tiene su castigo🥰

Ryushiro desde el cielo con ganas de putearse hasta en guaraní a kenji y también de abrazar y consolar a Takeo, si hubiera estado vivo el lo hubiera forzado a terminarlo y decirle a cada esto "amiga date cuenta"

Okey no tan agresivo pero si esto no hubiera pasado, pero como el hubiera no existe ps🥹

Yo digo que si Akira leyera esto se queda bien emperrado🐼 okey nou

Ya va a tener tiempo de enojarse con Katsuma.

En fin, creo que eso es todo o no se, siempre hay algo que quiero decir pero a la hora de en la hora se me olvida JAJDJAJS

Se les ama, cuidense familia 💕

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