~Noviembre, 1996~

Lucy Montgomery-Gray

¿Saben que es peor que hacer una tesis?

Hacer una tesis y estar en plena mudanza al mismo tiempo 

Talle mi frente mirando las hojas interminables a mi alrededor y los libros sobre medicina y psicología. Cuando elegí mi carrera, no sabía todo lo que conllevaba, a veces siento que me falta cerebro para todo, y sobretodo porque la criminología lleva de todo

—Amo mi carrera, amo mi carrera...— me repetí en susurro quitando el cabello de mi frente

Además que mi habitación estaba llena de cajas, solo tenía afuera los libros más importantes para mi tesis, un bolígrafo, una taza llena de café y una cajetilla que le robe a Richie cuando me vino a visitar la semana pasada

—Hola, rojita— el sonido de la puerta abriéndose hizo que dejara de ver tanta maldita tinta y papel

—Hola, mi amor— Eddie llegó hasta mí dándome un beso de un par de segundos  

Eddie estaba casi en la misma etapa donde esa barrera entre la universidad y encontrar trabajo nos tenía estresados, él estaba haciendo el internado en el hospital presbiteriano, y por mi parte, hacía mis pasantias en el departamento de policía 

—Estás cansada, ya deja eso— cerró los libros frente a mí

—Debería decir lo mismo— deje que me quitara el resto de las hojas porque de verdad me sentía agotada— ¿ya comiste?

—Un poco en el hospital— me paso una bolsa de papel que contenía un sándwich y una manzana del hospital. Yo no sé cocinar, así que Eddie siempre cocina para mí o me trae el almuerzo— ven, ya va a empezar Friends 

No me lo tuvo que repetir dos veces 

Friends se había vuelto mi serie favorita, era de las pocas cosas que me hacía olvidar la presión de mi tesis, así que cuando encendió la televisión, no dude ni un segundo en tirarme al sillón 

Pero la única posición cómoda que encontré fue volteandome para que mi cabeza colgara mientras tomaba mi guitarra y tocaba el intro de la serie, mi fiel compañera que fue un regalo de la tía Lorraine cuando cumplí 16, y que cinco años después aún no cambia, aunque no tocaba profesionalmente ni componía, solo tocaba las canciones que me gustaban, y entre ellas estaba I'll be there for you

—I'll be there for you— tenía mi guitarra en las manos y la cabeza al aire— when the rain starts to pour— reí— I'll be there for you, like I've been there before. I'll be there for you, 'cause you're there for me too— termine de cantar y deje la guitarra en la mesa de centro 

 Eddie y yo reímos y yo seguía con la cabeza al aire, se sentó del otro lado del sillón pero a los segundos imito mi gesto y se giro de cabeza y así empezamos a ver la serie al revés, literalmente

Nunca pensé que terminaría en Nueva York, pero al menos podría hacerlo, después de todo el apellido de mi madre que era legalmente mi único apellido fue de gran utilidad. Los Montgomery fueron una familia muy rica y poderosa en épocas pasadas en Derry, y al ser la única descendiente del apellido con vida, era la única con el derecho a la fortuna, fortuna que ahora me ayudaría a empezar de cero en Nueva York al lado de Eddie

—¿Crees que me adapte? En unas semanas dejó de ser pasante y seré oficial— dije algo asustada, dentro de poco empezaré a llevar una placa con mi nombre

—Seras la mejor criminóloga del departamento de policía— me sonrió

—Y tú eres el mejor interno del hospital— le regrese la sonrisa 

—Te amo, rojita 

—Yo también te amo

—Mejor piensa que en unas semanas estaremos viviendo juntos

Eso era lo único que me gustaba de la mudanza, Eddie y yo al fin encontramos un lugar que nos gustaba, además que teníamos que dejar las residencias de la universidad, así que le propuse que viviéramos juntos, y en dos semanas nuestro departamento estaría listo 

—Podríamos vivir en un sillón— ambos reímos

—Entonces solo necesitamos un sillón para ser felices— ambos reímos

Me encantaba cuando se reía y lo tomé de la cara, me respondió besándome la mano.

Nos miramos por un segundo por lo que terminamos besándonos, es muy cierto eso que solo necesito un sillón, mi guitarra y a Eddie para ser feliz.

—Lucy, sé que dijimos que las cosas de nuestro departamento las decidiriamos nosotros— Eddie se reincorporó sentándose como la gente normal

—Si...

—Bueno, lo que sucede es que mamá dijo...— no sé porque ya no me sorprenden esas palabras

—Ugh...— solté un bufido mientras que me enderezaba para sentarme con el brazo recargado en el respaldo del sofá y veía atentamente a mi novio

Sonia Kaspbrak jamás dejaría de ser una espina en mi costado 

 Por años he tratado de que me agrade un poco, solo porque es la madre de Eddie, pero simplemente no puedo 

A pesar de que el departamento de la madre de Eddie estaba del otro lado de la ciudad, su presencia se siente en el aire, mínimo le llama dos veces al día y siempre se aparece ya sea en el hospital o afuera de nuestras clases en la universidad

—¿Qué dijo tu mamá ahora?— recargue mi mentón contra mis manos esperando que había dicho ahora Sonia 

—Esto no es sobre mi mamá

—¿Ah no?

—Lucy— me miró más seriamente— solo dijo que nos estamos apresurando a vivir juntos, que tenemos 22 años y estamos terminando la universidad 

—¿Ya no quieres vivir conmigo?— fingía que no me dolia, pero me dolia y molestaba pensar en todo el poder que Sonia ejercía sobre Eddie

—No dije eso— me aclaro— pero, en parte tiene razón 

Si, eso ya lo veia venir, que estaría yo sola en mi departamento, pero bueno, tendría la libertad que quisiera, además, tal vez pueda a adoptar un gato, siempre me gustaron, pero Beverly era alérgica y no podía tener uno, en la universidad no aceptaban mascotas así que ese era obstáculo 

Compartir cama con un gato ya no era tan desagradable de pensar 

—Yo te amo... — la voz dolida de Eddie me volvió a la realidad y deje de pensar en ponerle Chandler a mi gato— Cuando te pedí que viviéramos juntos, no era algo impulsivo, era porque de verdad quiero estar contigo, quiero que me quites el café en la mañana, quiero que seas lo primero que me pone feliz cada vez que llego del trabajo, quiero ver como le hablas a los bichos del jardín porque se sienten solos, quiero hacerte de comer todos los días y que tu solo ayudes dándome ánimos, quiero dormir  pegado contigo todas las noches sin importar que tan grande sea la cama, quiero que tus ojos sean lo primero que veo cuando me despierto y lo último antes de irme a dormir, quiero que seas mi familia y que en un par de años nuestro departamento esté inundado de niños pelirrojos y castaños, quiero todo contigo.... 

En el momento en que Eddie hinco la rodilla en el suelo y se metió la mano al bolsillo, mis ojos se agrandaron y el aire en definitiva se me fue cuando saco una cajita roja que dejó a la vista un anillo con una piedra azul que era lo más hermoso que había visto en mi vida

—¿Lucy Montgomery-Gray, me harías el honor de aceptarme como tu esposo?— no podía moverme— ¿te casarías conmigo?

Mi mano estaba sobre mi boca mientras sentía mis ojos lagrimeados, nunca tuve una idea clara de lo que era el matrimonio, la tía Lorraine me dijo que significaba cuando dos personas unían sus vidas porque se amaban y querían pasar el resto de sus vidas juntos, Richie alguna vez dijo que era una cadena, y que las cadenas eran malas, y papá alguna vez dijo que nadie soportaría estar toda la eternidad con una persona y que era una estupidez 

Pero esto no era una cadena ni una estupidez, esto era estar con el hombre que amo

—Si...— mi voz salió en un hilo— ¡si!

Le salté encima sosteniéndole el rostro para besarlo con todo mi aliento, un par de lágrimas aún resbalaban por mis mejillas mientras le dejaba besos pausados en la cara y le afirmaba muchas veces que sí me casaría con él

—¿Vas a dejarlo en la caja?— extendí mi mano temblorosa, Eddie igual temblaba cuando me puso el anillo en mi dedo que se sintió frío al primer momento, pero encajaba perfectamente

—Es muy hermoso, me encanta— dije viendo el anillo, tenía un zafiro

—Prométeme que jamás te lo quitarás

<<Eso no era difícil>>

—Lo prometo— le aseguré limpiando mis lágrimas de alegria

—Sé que tal vez no debí preguntarlo así, pero quiero que sepas que te amo y que a partir de ahora no hay nadie que me importe más en vida que tú,— lo dijo en un tono que me hacía pensar que era verdad— quiero que solo tu seas mi familia.

—Tú ya eres mi familia— le aseguré mientras le sostenía la mejilla antes de pasarle los brazos por el cuello para besarlo— y lo serás siempre.

Ahora tenía que planear una mudanza, una tesis y una boda.

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#Leddie versión adultos con estrés en multimedia :3

-Ellis