II

𝗔𝗻𝘁𝗲𝗿𝗶𝗼𝗿𝗺𝗲𝗻𝘁𝗲:

Se mostraba molesto al saber que su fantasía sexual, no se había cumplido, pero ahora más que nunca. Tenía ganas de follar a su luna superior, dejarlo con el culo roto, lleno de su jodido semen, marcarlo totalmente, tocar su cuerpo, ver sus facciones al sentir el placer, ver a esos seis ojos soltar lágrimas de exitacion, y escuchar esa voz sería, gemir su nombre como si fuera una prostituta, QUE SOLTARA GEMIDOS NECESITADOS DE EL!

Bueno, creo que se entendió sus deseos con la primera superior. Pero no sólo lo quería por eso, quería ser su consuelo en las noches que lloraba, ser la persona en que puede sentirse cómodo y seguro, que sienta que nada malo le pasaría en sus brazos. Llenarlo de semen y de besos en su cara tan linda. Abrazarlo y tocarlo cada vez que se le plazca.

Y otra vez ya iba a empezar con sus pensamientos "inadecuados"

" Ah.. Como quiero que sea mío. "

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El rey de los demonios se encontraba tranquilamente tomando un baño en las aguas termales, después de una noche de sexo duro y masoquista con una chica, la cual.. Duda que haya sobrevivido.

—(Estúpidos humanos, no aguantan ni una ronda de sexo.. )—pensó sin más.
Para luego suspirar tranquilamente, hasta que su paz se esfumó al escuchar un grito.

—¡¡OH DIOS MÍO, _____!! ¿¡RESPONDEME!! —Toda la atención fue hacia una dama de 3ra edad, la cual tenía en brazos a una chica.. La mujer con la que se había acostado y al parecer no resistió la forma tan "extravagante" que tenía el rey de los demonios.

La gente corrió a ver a la chica y a la mujer de 3ra edad para apoyarla.
Muzan le hubiera dado igual hasta que algo lo desconcertó.

—¡ES EL!, EL FUE EL ÚLTIMO EN ESTAR CON ____!!—Fue señalado por esa mujer con repugnante facción.
La gente lo miro con varias emociones, odio, asco, miedo, entre muchas otras.
Kibutzuyi suspiro tomando una de las batas de ahí, para luego salir del agua.

Este se dirigió directamente hacia la única salida, aunque teniendo que pasar por esa gente, la cual lo miraba con odio. Hasta que alguien decidió hacer algo.
—Sabes que la mujer que mataste era mi hermana—habló un hombre robusto y fuerte mirando con odio a Kibutzuyi.
—Y sabes que?, no me interesaQuito la mano con facilidad zafandose del agarre, recibiendo miradas disgustadas de la gente reunida.

Pero se negaron a actuar, ya que ese hombre era amigo o cercano a Warabine.

Salió del local algo fastidiado, sus deseos sexuales no fueron cumplidos, y ahora unos idiotas lo venían a molestar. "Genial".

Pensó en ir a ver a Warabine, después de todo, la había tratado algo mal, y si quería tener a Gyutaro de su lado, tendría que disculparse con su estúpida hermana.

Y al final, hizo lo pensado, se alistó y fue caminando hacia donde se suponía que debía estar Warabine.

La gente se inclinó al verlo llegar a la entrada de la "casa" "mansión" como quisieran llamarle.
—¿Donde está la señorita Warabine?—preguntó desinteresado. —¡Ah!, ¡La señorita Warabine se encuentra adentro, si gusta pasar!—se inclinó el sirviente apenado.

—Gracias.—paso adentro, con una mirada fría en el.
Y ahí la encontró, estaba en un sillón, esta se miraba decaída. Hasta que al ver al rey de los demonios sonrió ilusa.
—¡¿Muzan-sama!?, ¿¡Que hace aqui!?—pregunto sorprendida. —¿Que?, acaso no puedo venir a visitar a la mujer más bella de este cruel mundo?—sonrió dejando su saco colgado.
Viendo como la mujer sonrió, levantándose corriendo a abrazarlo, sintió como esos fornidos brazos la enrollaban y la "protegían".
—Me.. gusta mucho estar con usted Muzan-sama.. —habló entre susurros.

"A mi solo me das asco"

—Tenemos algo en común.. —sonrió viendo las mejillas rosadas de la chica.
—No tengo tanto tiempo para estar aquí, tengo trabajo.. Pero prometo venir a verte—Daki accedió con pena, aunque se mostró algo triste al ver a su superior marcharse de ahí..

Salió de la casa de Warabine para ahora, ya irse del Distrito rojo.
Con solo cerrar los ojos, se encontraba en la fortaleza infinita. Y en su zona de trabajo

Suspiro cansado, dejando caer su peso, en uno de los muebles acolchonados de su oficina, quitando su saco dejándolo tirado, desabotono el primer botón de su camisa, dejando ver más de su cuello.
—Ah.. Vaya noche. —este se undió en sus pensamientos profundos, calmandose al solo pensar en su luna
—Quisiera, tenerte ahora.. Y violarte sin piedad—hubo un silencio en su zona de confort, usualmente odiaba tener pensamientos así por el estilo. Pero era inevitable con solo ver a su inferior

..

Por lo mientras el dueño de los pensamientos sexuales del rey de los demonios, se encontraba justamente en el gran lugar que este le había hecho.

Apreciando la fauna con asombro, de verdad el ser al que todos le temían había hecho esto, ¿solo para el?
Aún no lo podía creer.

Estaba sentado mientras se concentraba, después de todo aún seguía con su lucha para poder superar a su gemelo.
Se posicionó rápidamente en posición de combate, mientras empeñaba su katana con bastante destreza, que ni siquiera noto los ojos que le observaban desde la oscuridad

"Amo como se esfuerza en lograr aún su objetivo.. "

Sonrió por instinto mirando como su subordinado mostraba destreza en todo

Era tan perfecto.

Había sido su creación perfecta.

Y la única de sus tantas creaciones, de ganarse el lugar en su "mundo perfecto", alado de el como su digna "esposa"

Imaginandose

A su futuro "prometida" caminando hacia el altar, con su kimono blanco, y su peinado que hacia juego con su vestimenta. Con un maquillaje que hiciera contraste con sus seis ojos.

Que cuando llegará a el, se vieran a los ojos, con una sonrisa verdadera. Para que antes de hacerlo oficial, se besaran bajo la luz del Sol.

Con un simple, "te amo", para después declarar la exterminación de la humanidad. Algo bellísimo

A los ojos de el

..

—Eres tan.. bello, Kokushibou.. —dijo entre la oscuridad. Pero algo que no se había dado cuenta era que fue escuchado. —¿Señor Muzan?—su voz lo saco de quicio al rey de los demonios, el cual se asustó algo.

—¡A-Ah, Kokushibou! —respondió con nervios, saliendo de su escondite. —Disculpe me atrevimiento, pero.. ¿Estaba observandome?, o ¿desde cuando esta aquí?—pregunto algo confundido, si hubiera sido cualquier otro demonio, lo más probables es que estuviera en estos momentos, de rodillas pidiendo piedad, para no ser decapitado, pero Kokushibou

Era un caso especial.

—Yo no, estaba haciendo tal atrocidad, solamente escuche que estabas entrenando y pensé hacerte una visita—desvío la mirada evitando contacto con su subordinado, —Entiendo señor Muzan—asintió

—Lo noto algo tenso, ¿algo le molesta? —pregunto sin mostrar mucha emoción, pero a Kibutzuyi esas palabras le tocaron su frío corazón—No, nada me molesta. —vaya forma de responderle a alguien que amas

El de seis ojos solo desvío la mirada, no era muy bueno hablando con sus superiores, mientras tanto el rey de los demonios estaba sintiendo su corazón querer salirse de su pecho, estar tan cerca del demonio que tanto anhelaba tenerlo gemiendo para el, lo ponía algo nervioso.

No era su culpa, el nunca pensó sentir a lo que los humanos le llaman "amor"

Pero algo le saco de quicio, de la nada al voltear a ver, solo vio a su inferior a la esquina del lago, sentado sin hacer ningún ruido. Se veía tranquilo
—Veo que te gusto "tu regalo"—volvió a su tono normal acercandose al de bajo rango—Fue algo, considerado de su parte, mi señor—respondió aún mirando el agua tranquila—Sabes Kokushibou, últimamente he tenido una duda que no la he podido resolver. —se sentó al lado del Azabache

Este le miro curioso, atento en lo que iba a pronunciar su líder. —El amor entre los demonios, ¿puede ser verdadero? —el de seis agrandó sus ojos, al escuchar esa pregunta

Pero, esa no era la verdadera pregunta que le quería decir el de ojos rubi.

" Si empiezo a sentir sentimientos por ti, ¿son verdaderos? "

—A-Ah.. Bueno, es un tema bastante extraño que se de, pero para mi es algo inaceptable, los sentimientos son distractores humanitarios—respondió

—¿Por que la pregunta? —

Una sonrisa tenue se formó en el rostro de Muzan.

" Supuse que dirías eso, y de alguna forma me duele saberlo "

—Kokushibou—

Agarro la mejilla del mencionado con calma, mirando con detalle esos ojos, los cuales también lo miraban a el

—Y si te digo que yo estoy enamorado, ¿que pensarias de mi?—miro con amenaza al de bajo mando, el cual abrió su boca con sorpresa, Kibutzuyi podía escuchar como trago saliva nerviosamente, sintiendo como el sistema nervioso de su subordinado se exaltó

—Disculpe.. Creo que no podré contestar su pregunta-
—Esta bien, pero ahora te pregunto.. ¿Y si esa persona, fuera uno de ustedes? —se acercó discretamente al cuello, del otro, susurrandole tranquilamente

—Disculpe mi.. Atrevimiento pero, ¿C-Como quien? —

—Mmm, que curioso, ¿y si ese alguien, fueras tu?—bajo el tono silenciosamente
—Imposible.. Perdón que me dirija hacia usted de esta forma pero, yo no podría, no me malinterprete, sería un "honor" ser esa persona, pero.. Yo no llegó a su estandar mi señor-
—Kokushibou, ¿Por que pones tantos "peros"?, tan solo fue una pequeña suposición—se retiró del cuello de su inferior, mirándole con molestia

—A-Ah, discúlpeme.. —

—No tienes que hacer eso—
El otro asintió

—¿Crees que mis sentimientos son falsos?, ¿De verdad siento ese repugnante sentimiento llamado amor?, o solo soy un egoísta, que solo quiere algo que no es suyo—
Hizo una pausa tenue

—¿O solo es un capricho?—miro en el lago su reflejo confundido y molesto por ello

—Podría ser que esta confundido por lo que siente, lo mejor a mi punto de vista, es probarle a usted mismo que de verdad quiere a esa persona—

Kibutzuyi sonrió al escuchar la respuesta del contrario—Tienes razón Kokushibou—

" Obtendre lo que quiero, y veré si de verdad siento amor "

¿Y que es lo que quiere?
Fácil.

Y ustedes ya saben que es lo que quiere.

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ACABE ESTO, LIT YA TENGO MUCHAS GANAS DE DARLE CONTINUACIÓN 🗣️🔥 C VIENE LA FOLLA

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