"Quiero ser yo quien te enamore, pero cada vez que sonríes soy yo quien se enamora cada día mas de ti."

Observando como su amigo Jimin comía la hamburguesa se encontraba Taehyung sentando frente a él comiendo la suya.

-No sabía de la existencia de este lugar.

-Este lugar tiene las mejores hamburguesas. -comentó con la boca llena de comida -Jungkook y yo solemos venir todos los fines de semana.

-¿No se supone que ustedes, los jugadores, deben tener una dieta estricta?

-Para nada, lo único que debes hacer es ir todos los fines de semana al gym y mantenerte en forma. Aparte, una hamburguesa a la semana no hace daño. -guiñó su ojo.

-Eres muy agradable, -Taehyung agarró una servilleta y limpió el borde la boca de Jimin en la que tenía un poco de salsa -Jungkook tiene tanta suerte de tenerte como amigo.

-Tú también eres agradable, hice bien en contarle sobre ti a él.

El castaño abrió sus ojos ante la confesión -¿Le-le hablaste sobre mí antes de conocernos?

El rubio tosió -Nos encontrábamos en el salón, la profesora comenzó a entregar exámenes y habló sobre lo bien que habías salido, tu nota era muy buena y Jungkook preguntó sobre ti. -el chico se ruborizó -No sabía que decir sobre ti, así que le dije que eras el chico del video...

Jimin bajó un poco su cabeza dejando de comer y Taehyung solo puso una mano sobre su hombro -No te sientas mal por eso, la mayoría de las personas me conocen por ese video y supongo que no lo puedo negar. -el chico asintió y volvió a comer.

Luego de haber terminado de comer, se dirigieron al colegio. Hablaban sobre diversas cosas, entre ellas sus pasatiempos favoritos como jugar videojuegos o dibujar, como lo comentó Jimin, quien decía que era su hobbie favorito luego del baloncesto. Jungkook quiso ir con ellos ,pero debido a una reunión con el entrenador del equipo no pudo acompañarlos.

-Te gusta Jungkook.

Taehyung se sorprendió ante la pregunta que había dicho de golpe Jimin.

-No.

-No estoy preguntando, lo estoy afirmando. -exclamó el rubio.

-No puedes afirmar algo que no sabes.

-Por supuesto que lo sé, Tae. Se nota en la mirada que le das mientras come o cuando simplemente habla contigo. Debes hablar con él o sino seguirás rompiendote el corazón tú solo.

-Eso es justamente lo que no quiero. -confesó mientras jugaba con sus dedos algo nervioso -¿Qué reacción crees que tendría si le confesara que me gusta?

-Supongo que se asombraría, pero Jungkook es una persona que sabe llevar bien las situaciones.

-No se trata de llevar bien o no la situaciones, el problema es que no quiero perder su amistad.

-Y no la perderán. -dijo el rubio mientras acomodaba su cabello que, por culpa del viento, se había despeinado -Jungkook no sería capaz de perder una amistad por una confesión de amor.

El castaño lo miró extrañado ante sus palabras. -No, no quise decir que tus sentimientos sean como los de cualquiera. De hecho se debe ser muy fuerte para soportar verlo con su novia.

-Es algo a lo que me acostumbré.

-¿Desde cuándo te gusta?

-Desde hace... -hizo una pausa para ver hacia ambos lados de la calle y cruzar -tres años, supongo.

-¡¿Tres años?!

-Sí.

-De verdad estás muy enamorado.

-Como no tienes idea -exclamó mientras sus ojos brillaban con emoción. Al fin tenía alguien con quien dejar salir todos sus sentimientos, hablar sobre lo mucho que le gustaba.

-¿Qué se siente estar enamorado?

-¿Por qué quieres saber?

-Curiosidad -contestó mientras cruzaban la entrada del colegio y saludaban al guarda. -Tengo un primo, bueno son gemelos pero uno de ellos es gay. No somos tan unidos y siempre he querido preguntarle como se siente ser así. Tú me recuerdas a él.

-Oh, pues se siente normal, creo. No es nada del otro mundo, pero tu forma de ver el amor y saber que aparte de luchar por él también debes enfrentar las críticas de las personas, hace que valga la pena cada esfuerzo que hagas. -contestó.

-Se escucha muy bonito. He estado con tantas mujeres, sexualmente, pero algún día me gustaría encontrar el amor verdadero. No importa si sea hombre o mujer, lo único que quiero es amar incondicionalmente y que esa persona me ame de la misma forma.

-Lo encontrarás, ya lo verás.

Habían llegado a la cancha de deportes donde practicaban educación física y de paso se realizaban los campeonatos. Ambos dejaron sus bolsos en las bancas de descanso y se dirigieron donde se encontraban los demás, algunos lo observaron extraños y otros eran indiferentes ante su presencia ahí.

Jimin notó su incomodidad y posó una mano sobre su hombro para susurrarle "No les hagas caso". Taehyung asintió y puso atención a las instrucciones del profesor. Sintió que tocaron su hombro y se giró para ver quien era. Jungkook se encontraba algo sudado y ya cambiado con el uniforme para hacer ejercicios, pero se seguía viendo atractivo para los ojos de Taehyung.

-Hola. -saludó el pelinegro.

-Hola. -ambos saludaron.

-¿Comieron hamburguesas?

-Sí, -contestó el pelinegro -a Tae le encantaron, ¿cierto?

-Demasiado. -dijo sin poder quitar su mirada del rostro de Jungkook, ¿Acaso ser tan perfecto era posible?

-¿Tuviste tiempo para almorzar? -preguntó Jimin.

-Practique un poco con los chicos, en veinte minutos comí y ahora tengo permiso del profesor para reposar.

-Genial. - habló Jimin.

Todos se dirigieron a los vestidores, chicas por un lado y chicos por otro. Taehyung se sentó junto a Jungkook en la banca.

-¿No tienes que cambiarte?

-Dentro de un rato voy.

Ambos se quedaron en silencio. Ese momento a solas se convirtió en incómodo al recordar el beso que se dieron. Bueno, si es que se le podía llamar beso a algo que duró solo pocos segundos y que seguramente Jungkook ya lo habría olvidado.

-¿Te sientes bien? -tratando de romper la tensión

-Si, me siento mejor.

-Yo-

-¡Kim! ¿Qué esperas para cambiarte? -interrumpió el profesor con una cara de pocos amigos, quizá ayer no le dieron lo que deseaba pensó Jungkook.

-Lo-lo siento profesor.

El mayor se alejó corriendo hasta llegar a los vestidores. Para su suerte ya todos se habían cambiado y ahora se dirigían al centro de la cancha. Se asustó cuando de uno de los cubículos salió Jimin.

-Me asustaste.

-¿Quieres que te espere?

-No hace falta, mejor ve con los demás.

El chico se terminó de cambiar y se agrupó junto a los otros. Bajo las órdenes del mayor todos hicieron diversos ejercicios, algunos saltar por obstáculos, otros hacían sentadillas y otros trepaban escaleras. Pero Taehyung se había olvidado de calentar antes de hacer los ejercicios, un calambre en su pierna hizo que perdiera el equilibrio y terminó cayéndose, chocando su espalda contra el suelo y su pie se dobló.

El chico se quejó un poco y a los pocos segundos se encontraba rodeado por Jimin, el profesor, compañeros y la persona más importante para él, Jeon.

-¿Estás bien? ¿Te duele algo?

El rubio lo bombardeaba con preguntas mientras Jungkook lo ayudaba a ponerse de pie. Este colocó una mano en su cintura e hizo que el castaño se sonrojara, aunque no se notara.

-¿Estas bien, Kim?

-Sí, me encuentro bien. -quiso dar un paso y se desequilibró. Jeon lo sostuvo más fuerte y su mano se resbaló tocando una parte de su trasero.

-Lo mejor será que descanses, ve a la banca mientras todos terminan sus ejercicios. -indicó el superior.

Todos siguieron con las actividades mientras Taehyung observaba. Su rostro se calentaba al recordar la mano de su amigo en su trasero. Eso y lo del corto beso en sus labios hacía que se sentiría en una película de romance, esas donde el chico hace lo que sea por enamorar a la chica. pero en su caso ¿Quién era quién?

Taehyung parecía ser el chico, tratando de ganar el corazón de Jungkook, pero los roles cambiaban cuando el pelinegro sonreía mientras hablaban o hacía cualquier cosa. En esos momentos era Taehyung quien se enamoraba, sin vuelta atrás, sin salida. Sabía lo mucho que le dolería si algún día él faltara en su vida.

Todos terminaron sus ejercicios y Jungkook se acercó a él.

-Espera que todos salgan de las duchas y luego nos meteremos tú y yo.

-¿Q-qué?

-No puedes mantenerte en pie solo y lo mejor será que nos bañemos juntos.

Jungkook había olvidado que Taehyung no estaba acostumbrado al ambiente de los jugadores de baloncesto, eso de bañarse todos juntos solo lo conocía él, y Jimin claramente.

-No te sentirás incómodo mientras te sujeto y te bañas, ¿cierto? -preguntó.

-No, pero preferiría que hablaras más bajo. Ya sabes lo que sucedió ayer.

-Tienes razón.

Ambos esperaron sentados. Decir que lo que propuso Jungkook no lo había malpensado, sería una mentira. Fantasear con él, imaginar a Christian bañándolo de la manera más sensual y sexual que se podía imaginar, tomando su pene entre sus manos y ver estrellas mientras él le hacía el mejor sexo oral del mundo. Quería eso y más, todo lo que se pudiera imaginar.

Muchas noches soñó con ellos dos en el baño. Taehyung dejando chupetones en su cuello mientras Jungkook entraba y salía de su cuerpo a un ritmo acelerado, haciendo que se sintiera bien. E incluso le devolvería el favor, ya que en sus sueños no solo el pelinegro era el activo. Escenarios donde era él quien embestía a Jungkook, haciéndole sentir lo que nunca en su vida había sentido, quería verlo feliz y que él fuera el motivo de su felicidad.

-¿En que piensas?

-Nada. -contestó el castaño.

Iba a ser la primera vez que lo vería frente a frente... desnudo.

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VCM⚘