Un pedazo de papel con fuego se deslizó sobre el aire de la habitación, llegó hasta la mano de Maryse y está después de un momento se lo dio a Robert.

— Tenemos que irnos.— anuncio Robert.  — Esperamos encontrarte aquí al volver.— Robert le dio un apretón ligero al hombro de Anna.

— Si y nos contarás sobre tus aventuras, oí que has estado viajando por el mundo, aniquilando demonios.— dijo Maryse.

— Si, yo les contaré todo, solo que Steve y yo tenemos unos asuntos pendientes, tal vez no me encuentren cuando vuelvan pero, volvere.— dijo Anna.
Ellos le sonrieron.

— Alec, estás a cargo!— dijo Robert y la pareja salió de la biblioteca.

— ¿Asuntos Pendientes?— pregunto Jace.

Anna se giró para ver a Alec. — ¿Ah sí que tú eres el jefe?— le dijo. — Que hay de Hodge?—

— Está encarcelado en la ciudad silenciosa.— respondió Jace, estaba apretando los puños.

— Esperen, ¿Que?— pregunto Anna desconcertada.

— Bueno, te has perdido mucho pero te pondremos al tanto. La vez pasada no pudimos,  solo dijiste hola y te fuiste.— dijo Isabelle.
Anna se sentó sobre el sofá que estaba cerca de Jace. Alec se sentó a un lado de Anna. Steve se quedó mirando que lugar podía tomar el pero solo se recargo sobre la mesa enfrente de Anna donde había estado Maryse y Robert. Isabelle se deslizó a un lado de Steve, ella estaba sonriendole.

— Hodge nos traicionó! El estaba conspirando con Valentine, todo este tiempo estuvo de su lado.— le contó Alec.

Anna sintió su pecho doler, sus manos comenzaron a sudar.

— Valentine Morgenstern?— preguntó ligeramente.

— Si!— contesto Jace. — Y al parecer es el padre de Clary y..... el mío!—

Anna sintió lástima por Jace, se vio tentada a abrir la boca para confesarse pero sabía que la marca en su cuello comenzaría a arder, la marca de su promesa, ese era el precio por su secreto.

— ¿Cómo pasó eso con Hodge? ¿Que pasó con Valentine?—
Solo logró preguntar.

— Valentine le había pedido a Hodge encontrar la copa mortal por él, para liberarlo de su maldición, para liberarse por qué la clave lo había exiliado aquí.— dijo Jace.

— Pero solo lo había engañado, Valentine no podía liberarlo!— dijo Clary.

— Espera, tú eres la hija de Jocelyn Fairchild ¿No es así? ¿Ella... Está viva?— pregunto Anna a Clary.
Ella recordaba cuando de niña llegaba una mujer con una niña al menos una vez cada tantos meses, para que Magnus borrará recuerdos de su mente. Clary había sido esa niña.

— Si, es solo que parece que esta en un profundo sueño y no ha despertado aún!— respondió la pelirroja.

Su marca le  estaba doliendo, su corazón también dolía. El recuerdo de sus padres le golpeó en la cabeza. Stephen, Céline. Pareció decir en su mente.
Ella tomó alguna poción o algo así y aún no despierta. Yo, logre encontrar la copa mortal y se la entregué a Hodge pensado que la protegería pero solo se la entrego a Valentine.— estaba relatando Clary de nuevo.

— ¿Él tiene la copa mortal, ahora?— Steve vio el rostro de Anna esconderse como lo hacía cuando ocultaba algo.

— Si y ahora toda la clave lo está buscando!— respondió Alec.

El sonido del teléfono de Anna retumbó por toda la habitación.

— Magnus está aquí!— dijo dejando las palabras retumbar por la habitación. El rostro de Alec pareció palidecer.

— Magnus abrirá un portal para mí y Steve a Idris, espero que no les moleste que lo haya traído aquí!— dijo Anna, parecía dudosa.

— Yo le abriré!— dijo Isabelle.
— Yo voy contigo!— dijo Anna y se fue al lado de Isabelle.

— Con que Bloodwheel, eh?— dijo Jace, Alec puso los ojos en blanco.

— ¿Son amigos desde hace tiempo?— le pregunto Alec.
— Tú y Anna...— explicó.

— amm, si!— respondió el. — Nos conocimos en el instituto de Londres. Vivió ahí por un tiempo! Somos amigos desde hace casi tres años.—

— Y por qué no vino aquí a vivir?— pregunto Alec en un tono bajo para que nadie lo oyera pero las palabras de Alec las habían escuchado todos en la habitación. Su rostro se veía melancólico.

Isabelle abrió la puerta de instituto, el corazón de Anna se iluminó al ver a Magnus. Atrás de él estaba el chico vampiro que estaba con ellos la última vez que visitó el instituto.

— Magnus!— Anna le sonrió y Magnus respondió igual.
Se quedaron así un segundo.

— No sé les vayan a caer las caras!— dijo Isabelle.

— Salomon! ¿Cierto?— dijo Anna al chico vampiro.

— Es Simón!— espeto esté.

— Creí que era Sidney!— le dijo Magnus.

— No lo vayan a confundir con Sheryl— era Jace

— Tiene mas cara como de Shirley!— añadió Clary, riendo.

— Creo que le quedaría mejor Sheila!— dijo Isabelle.