Capítulo Único
Este One-shot fue escrito con todo mi amor para Honey_Honey3 por su cumpleaños.
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Poe abrió los ojos, ¿qué hora era?
Estaba sentado en la silla del escritorio de su oficina, eso solo podía significar que se había quedado dormido mientras escribía una de sus muchas historias, y hacía un plano importante para Fitzgerald.
No le sorprendió, no era la primera vez que ocurría, pasaba muy a menudo. Podría jurar que hasta tres veces por semana.
Levantó su cabeza, que estaba reposando sobre el escritorio.
Al levantarla, uno papeles quedaron pegados en su rostro.
Se los despegó y lo miró, era uno de los planos que tenía que entregar urgentemente, y estaba incompleto.
Fue corriendo a buscar su gabardina, buscó su reloj de bolsillo y miró la hora, las diez de la mañana.
Ese plano tenía que entregarlo dentro de dos horas.
Sus nervios estaban subiendo considerablemente, y solo llevaba 3 minutos despierto.
Fue corriendo a prepararse un café cargado, para poder estar con la máxima energía posible durante la próxima hora y media.
Llevó su taza al escritorio y continuó con el plano.
Mientras más minutos pasaban, mayor era su ansiedad.
Por suerte, terminó a veinticinco minutos de la entrega.
Se dio una ducha rápida y se vistió con ropa formal.
Luego salió de su casa, rumbo a su presentación.
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A pesar de todos sus nervios, pudo completar la presentación de buena forma.
Recibió felicitaciones de los clientes, e incluso Fitzgerald lo felicitó, cosa que era muy raro que ocurriera.
Sus nervios ya no estaban, y ahora solo quedaba un sentimiento de satisfacción.
Volvió a su casa a la una y media, su estómago rugía por algo de comida.
Abrió la puerta puerta de su casa, todo parecía estar de lo más normal, pero un sonido como de plástico lo hizo sobresaltarse y mirar a todos lados.
No había nada.
Caminó por los pasillos de su casa con un jarrón en la mano, en caso de ataque. Buscaba la fuente del ruido, aunque su posición era extraña y algo graciosa a la vista, pero según él era una posición de defensa.
Abría cada una de las puertas con rapidez, buscando al intruso.
Había mirado por todas las habitaciones y no había nadie, ahora solo quedaba su habitación al final del pasillo.
Se sentía como en una película de terror.
Cuanto más se acababa más fuerte se volvía el sonido.
Abrió la puerta, empujándola hacia delante, para tener una visión completa. Y apuntó con el jarrón a la persona que estaba dentro.
Aunque no servía de mucho, ya que tenía los ojos entrecerrados y casi no estaba viendo nada por su flequillo.
Sus manos temblaban furiosamente, y no podía hacer nada para pararlo.
-Ed, ya has llegado, me estaba aburriendo mucho aquí, solo - Poe abrió los ojos grandemente, el detective estaba allí, acostado sobre su cama con una bolsa de caramelos en la mano y un libro en la otra.
Una risa temblorosa salió de sus labios. Bajó sus brazos con el jarrón, dejándolo caer, y rompiéndose en pedazos.
-Ranpo-kun... - Suspiró aliviado. Aún con su corazón latiendo a mil. Ese había sido el peor susto que había tenido en toda su vida.
Fue y se sentó a su lado, para relajarse un poco.
-¿Qué lees? - Preguntó Poe, acariciando su cabeza.
-No sé, cogí un libro cualquiera de tu biblioteca - Dijo dejándose llevar por las caricias del más alto.
'Parece un gatito mimoso'. Fueron los pensamientos de Poe al verlo.
Estar así con la persona que amaba siempre era reconfortante, aunque también fuera el causante de muchos de sus dolores de cabeza.
-Por favor, no vuelvas a hacer eso, puedes llamarme o enviarme un mensaje, sabes que las puertas de mi casa están siempre abiertas para ti, pero no de ese modo - Dijo, aún acariciando los mechones negros de su novio.
-Esta bien, lo tendré en cuenta - Dijo dejando el libro y los dulces a un lado y acurrucándose.
-No te duermas, que en un rato será la hora de comer - Dijo picándole la mejilla con su dedo.
Ranpo se quejó por la incomodidad.
Poe siguió, también haciéndole cosquillas.
-¡Qu-quita! - Dijo entre risas. Y moviéndose a todos lados intentando evitarlas.
Ranpo se acercó lo suficiente a la cara del castaño y le dio un beso, dejándolo pasmado.
Poco a poco fue correspondiendo al beso. El pelinegro puso sus manos tras su cuello y él no se quedó atrás agarrándolo por la cintura. Profundizando el beso aún más.
Se separaron cuando la falta de aire se volvió presente.
El detective quedó sobre las piernas de Poe, se miraron por un buen rato, sonrojados y agitados.
Admiraban las facciones del contrario, fascinados por estar con alguien tan perfecto y que los complementase de esa manera.
Ranpo soltó una pequeña risa, saltó de su brazos y salió corriendo a la cocina.
Poe se quedó allí, tardando un rato en procesarlo.
-¡Oye! - Gritó y salió corriendo a la misma dirección, tratando de no pisar la cerámica rota del suelo.
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-¿Dónde está Karl? - Preguntó Ranpo, que estaba sentado, mientras jugaba entre sus dedos con un bolígrafo, y se hacía dibujitos en sus manos de vez en cuando.
Poe que estaba haciendo la comida, macarrones con tomate y atún, se quedó pensando.
-Lucy se lo llevó ayer para que descansara un poco, y que no tuviera que estar al pendiente de él - Dijo.
-Hgm - Hizó un sonido de afirmación.
Se estableció un cómodo silencio.
Poe terminó de hacer la comida y la puso en los platos.
Los llevó a la mesa, junto con zumo de melocotón y uva.
Se sentaron en la mesa, que anteriormente había sido preparada por Ranpo.
Comieron tranquilos, sin ninguna interrupción. Solo ellos dos, disfrutando de la compañía que se brindaban mutuamente.
Acabando de comer, Ranpo se frotó la barriga, indicando que estaba lleno.
Recogieron la mesa y lavaron los platos.
Lavaron sus dientes y fueron a la habitación de Poe, era la hora de la siesta.
Se cubrieron con las sábanas, Ranpo descansó su cabeza contra el pecho de Poe, y se quedó dormido en cuestión de minutos.
Poe se quedó admirando su rostro tranquilo y luego cayó dormido también.
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Se despertaron unas horas después.
Ranpo fue el primero en despertar, y con cuidado de separó del abrazo de su novio. Luego se sentó sobre su barriga, aplastándolo y moviéndose, haciendo que se despertara.
Poe se quejó por el movimiento, y cuando abrió los ojos lo primero que vio fue a su novio sobre él, moviéndose divertido.
Agarró su cintura cuando vio que estaba empezando a exitarse por el movimiento. Pero no tuvo la fuerza suficiente.
Alertó a Ranpo de su estado cuando un ligero gemido salió de sus labios. Y él solo mostró una sonrisa traviesa.
Levantó la sábana, dejando ver el bulto en sus pantalones.
-Uy, pero qué tenemos por aquí - Dijo acaricándolo por encima de la tela, haciéndolo soltar otro gemido.
-Ranpo-kun...por favor - Dijo avergonzado, no era la primera vez que hacía algo parecido, pero no se acostumbraba a esos momentos tan íntimos entre ellos.
-¿Qué pasa Ed?¿Te molesta que haga esto? - Volvió a acariciarlo.
Poe no lo soportaba, su miembro estaba duro y aprisionado en esa cárcel llamada pantalón.
-¿Tan necesitado estás? - Preguntó con burla, y asintió sonrojado - Aww, que lindo te ves avergonzado - Acarició esta vez su mejilla.
Ranpo quitó poco a poco su pantalón, torturándolo.
Los sacó del todo y continuó con sus boxers, que estaban algo mojados por la exitación.
Finalmente estaba libre.
Ranpo también se quitó la camisa, dejando al descubierto su blanca y suave piel.
Poe acercó sus manos y acarició su cintura.
Mientras, el detective acariciaba tortuosamente su miembro.
Ranpo soltó un suave gemido cuando las manos del escritor pellizcaron sus pezones.
Las posiciones cambiaron y el pelinegro quedó acostado sobre la cama.
Poe empezó a deshacerse de la ropa restante, acariciaba y mordía todas y cada una de las partes expuestas.
Ranpo soltaba ligeros gemidos que lo hacían enloquecer.
-Edgar - Dijo entre gemidos.
Y eso le hizo perder la poca cordura que le quedaba.
Le dio la vuelta, dejándolo boca abajo.
Ranpo levantó sus caderas y Poe quitó sus pantalones, para no tener ningún obstáculo de por medio.
Dejó al descubierto el trasero redondo de su novio, el cual solo él conocía.
Acarició y mordió el interior de sus muslos, causándole una corriente de placer.
Y dejando varias marcas, que no desaparecerían hasta dentro de un par de días.
Masageó las blancas nalgas, a veces dejando su entrada a la vista. Esta se contraía por el placer.
Poe saco un bote de lubricante y un condón del cajón de su mesa de noche. Miró a Ranpo ansioso, buscando una respuesta.
-Tranquilo, antes, mientras dormías, fui a limpiarme, luego volví a dormir - Poe asintió y siguió con su trabajo.
Echó una cantidad considerable de lubricante en sus dedos y un poco sobre su entrada.
Acarició en forma de círculos alrededor de ella, para que se relajara y fuera más fácil meter sus dedos. No quería lastimarlo.
Poco a poco introdujo el primer dedo. Vio a Ranpo sobresaltarse, por la inesperada intromisión.
Lo movía de forma circular, sacándole gemidos de satisfacción.
Cuando vio que ya era suficiente metió el segundo. Esta vez abriéndolos y cerrándolos en forma de tijera, buscando dilatarla para hacerle el menor daño posible.
Metió un tercero, ahora simulando suaves embestidas. Ranpo gemía y movía sus caderas buscando un mayor contacto.
Vio que ya estaba listo y los sacó dejándole una hermosa vista de su entrada palpitando por algo que la llene.
Ranpo se quejó por el sentimiento de vacío que le quedaba.
Poe se puso el condón y esparció un poco de lubricante sobre su pene despierto.
Lo acercó lentamente rozando la punta.
-Espera - Se detuvo por un momento - Quiero verte.
Le dejo espacio y él se dio la vuelta.
Quedó embelesado al ver su cara toda sonrojada, el sudor caía por su frente y sus ojos verdes lagrimosos, opacados por sus pupilas dilatadas que lo miraban con deseo.
Se acercó a su rostro, empezando a besarlo.
Mientras que poco a poco iba metiendo la punta, luego entrando por completo.
Ranpo gimió en medio del beso pero no se detuvo.
Empezó con suaves embestidas, disfrutando de su calida estrechez.
Aunque fue aumentando el ritmo, sacándole gemidos más altos.
Lo único que se escuchaba en esa habitación eran los sonidos obsenos de sus pieles chocando y los gemidos de ambos.
En un punto dejaron besarse y sólo se miraban fijamente con lujuria.
Masturbó el miembro de Ranpo a la vez de sus embestidas.
-E-Edgar ah~ - Amaba cuando decía su nombre y en la forma de cómo lo decía.
En una de ellas un fuerte gemido salió de sus labios. Y Poe arremetió con fuerza a ese mismo punto.
El placer se volvía más fuerte, y el orgasmo se estaba acercando.
Ranpo fue el primero en venirse, manchando su estómago del líquido espeso. Poe se vino unos segundos después llenando el condón.
Salió de él y se lo quitó, luego se acostó junto a él y lo abrazó, ambos se habían cansado.
-Fue magnífico - Dijo aún con su respiración agitada.
Ahi fue cuando Poe entró en razón, se puso completamente rojo.
Ranpo rio y acarició su mejilla, y dejó un beso en su frente.
-Vamos al baño, hay que limpiarnos - Dijo y luego se dieron una ducha refrescante.
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Media hora pasó, Ranpo estaba sentado en el sofá, viendo la tele mientras que era consentido por su novio.
El timbre sonó y Poe fue a ver quién era.
Al abrir la puerta, se encontró con una cabellera rojiza y a Karl, quien saltó sobre su cabeza según lo vio.
-Gracias por cuidarlo Lucy-chan - Sonrió.
-No es nada, parece que te divertirte - Dijo dejándolo confundido - Sabes que cuando quieras puedo volver a cuidar de él - Dijo y se fue.
Entró a su casa con Karl.
Él se fue directo al salón con el detective, mientras que él fue al baño.
Se miró al espejo, ¿a qué se había referido Lucy?
Miró con mayor atención y pudo ver una marca roja en su cuello bajo su mandíbula. Seguramente había sido Ranpo, pero en que momento se la había hecho. Se avergonzó de que Lucy lo hubiera visto así.
Luego volvió al salón y siguió con lo suyo sin decir nada. Ranpo notó el ligero cambio de actitud y dijo:
-Es para que cuando te vean sepan que ya tienes dueño - Ranpo se rio de su cara roja y lo siguió molestando toda la tarde.
Sin duda alguna, el amor es hermoso.
Fin
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Me ha encantado escribir este One-shot, espero que les haya gustado y sobre todo a ti Honey.
Me gustaría también deciles que es la primera vez que escribo +18, y no resultó tan difícil como pensaba, igualmente agradecería cualquier consejo sobre el tema.
Gracias por leer y nos vemos en otras historias.
03/04/2023
2080 palabras.
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