Kazutora<3:

Gracias por la nota y el pastel, estaba delicioso. No asistiré a la escuela hoy, tengo cosas por hacer fuera pero si quieres puedo pasarme por tu casa más tarde. Tengo un montón de ganas de verte. :)

Al leer el mensaje que había recibido soltó un pequeño suspiro y volvió a guardar el teléfono dentro de su mochila. Apoyó su mentón sobre una de sus manos y dejó que su mirada abandonara la puerta a la cual había estado atada desde que llegó al salón. Ima se volteó a ver a Dai y la encontró haciendo un par de garabatos en el cuaderno.

— ¿Qué sucede?

— Nada, es que no vendrá hoy.

Ima arqueó una ceja — ¿Por qué?

— No lo sé, solo me ha dicho que tenía cosas que hacer y si quiero puede pasarse a mi casa por la tarde. — Dai hizo un puchero — ¿y si ya no me quiere?

— Que dramática.

— ¡que mala amiga eres! Consuélame, anda. — Dai se levantó de asiento y casi se arrojó sobre Ima quien comenzó a palmearle la cabeza.

— Ya, ya, llorona. — Dai actuaba un llanto demasiado exagerado mientras dejaba que su amiga la mimara un poco — dejando de lado los dramas... yo de verdad creo que él te quiere.

— ¿Eh? — Dai se separó de su amiga para verla mientras hablaba

— Los ojos le brillan, ¿nunca te has dado cuenta? Usualmente parece muy apagado, recuerdo que cuando llegó al salón de clase el primer día me asustó verlo a los ojos porque se sentía demasiado vacío, pero no es así ahora. Lo comprobé ayer cuando llegó al patio, desde que te vio sus ojos comenzaron a brillar.

Dai parecía estar atónita. Un poco de agua comenzó a nacer en sus lagrimales — ¿De verdad lo crees?

— Por supuesto, yo no te miento nunca. — La castaña sonrió — No vayas a pensar que lo veo a propósito, no me gusta tu noviecito, no es mi tipo para nada, son cosas de las que me doy cuenta.

— Claro que no, boba. — Dai sonrió a su amiga y la estrujó antes de volver a su asiento mientras una idea comenzaba a nacer en su mente. — ¿puedes acompañarme al super mercado cuando volvamos a casa?

...

— Creo que ya está.

— Voy a encenderla.

El pelinegro presionó el pedal de su motocicleta con fuerza y el motor comenzó a hacer ruido. Kazutora suspiró aliviado mientras se limpiaba un poco del sudor que le caía por la frente.

— Ah, al fin.

El par había estado intentando arreglar la motocicleta de Baji, la cual no parecía querer encender. Ahora que había abandonado la Tokyo Manji no podía pedirle a Draken que revisara a su chica como siempre lo hacía, y al fin y al cabo a su amigo tampoco se le daban tan mal todo el asunto de las reparaciones. Los dos pasaron a la casa de Kazutora en la cual se encontraban, y este se acercó al refrigerador con la intención de sacar una jarra de agua helada con tal de bajarse el calor. Aun siendo otoño, estar en el constante contacto con el motor, cadenas y aceite del vehículo el calor comenzó a adueñarse de ellos.

Los dos muchachos se paseaban cómodamente usando solo una camiseta a tirantes, Baji se había amarrado el cabello con tal de sudar un poco menos y se había tumbado en el sofá, no sin antes encender el aire acondicionado de la casa de su amigo.

Kazutora y su madre no vivían mal, su casa a comparación de la unidad habitacional en la que vivían con su madre era un palacio. Un departamento en un piso alto bastante lujoso. Después de todo el padre de Kazutora era un hombre pudiente, respetado en el ambiente empresarial en el que laboraba, y legalmente estaba en la obligación de sustentar todos los gastos de su familia aunque hubiera dejado de considerarlos como tal desde el día en que huyeron de él.

Aun asomado en el refrigerador, Kazutora vio el recipiente en el cual Dai le había dejado un trozo de pie el día anterior y una sonrisa boba se le formó en la cara. Tomó el agua así como el postre y se dirigió a Baji, quien se había tirado boca arriba.

— Tienes que probar esto, es un obsequio de Dai. — el muchacho se sentó a los pies del sofá y Baji se incorporó sobre sí — te traje agua, también.

El pelinegro tomó un trago y después le quitó a su amigo el pastel, tomando un trozo pequeño con los dedos y abriendo los ojos con sorpresa al sentir el sabor. Aquella cosa era exquisita.

— Wow — habló aun con algo de comida en boca — está buenísimo, ¿no tienes más?

— No — Kazutora arrebató el recipiente con recelo e intentó colocarle la tapa, sin embargo, la mano de Baji pareció ser más veloz

— ¿Qué dice aquí? — encontró pegado a la parte interior de la tapa una nota escrita con tinta azul y una caligrafía impecable — "Sé que te gustan las cartas, así que intentaré obsequiarte algunas más seguido. Justo ahora estás dormido en mi sala y te ves muy adorable :) ojalá pueda ver esa paz en tu rostro más seguido, así luces más guapo. <3 espero que te guste el pie. Atte. Tu novia, Dai<3"

— ¡Ya! — Kazutora le arrebató el plástico a su amigo — eres un metiche.

— ¿Cómo que novia? ¿Al menos le obsequiaste una flor o algo?

— Ella dijo que no hacía falta, además...

— ¿Ya se besaron? — preguntó el pelinegro en un tono efusivo y las mejillas de Kazutora comenzaron a tintársele de rojo — ¡Ya se besaron! ¡¿Por qué no me lo habías dicho?!

Baji comenzó a agitar a su amigo de manera frenética mientras Kazutora se perdía en la tinta azulada de aquel trozo de papel, recordando las puntas de los dedos de la rubia hacerle cosquillas en el rostro.

— Las cosas nunca me habían salido tan bien, ¿sabías? — habló Kazutora con la mirada perdida, Baji lo soltó — Dai, ella, bueno... me quiere y me aprecia, y lo siento. A veces me asusta un poco pero cuando la veo las cosas cambian mucho. Y tú también estás conmigo, y si todo sale bien, en Halloween las cosas habrán terminado. La Toman dejará de existir, y voy a estar contigo y con ella, todo estará bien.

Baji se rascó la nuca intentando disimular sus nervios. La poca esperanza que le quedaba era que la cercanía que Kazutora había tenido con Dai lo absorbiera demasiado como para desistir de sus planes, pero parecía seguir igual o aun más determinado... no quería seguir viéndolos pelear, todos eran sus amigos y le afectaba por sobremanera sentirse entre la espada y la pared en esa riña.

— ¿Qué pasaría si la Toman nos ganara en esa pelea?

Kazutora volteó inmediatamente hacia Baji.

— No va a pasar — pronunció cortante — yo mismo me voy a encargar de Mikey. Sin él interponiéndose en mi vida las cosas van a ir mejor.

Sintió un vuelco en el pecho, sabía que Kazutora no quería volver a mancharse las manos de sangre, y el que hablaba en ese momento no era él. Había alguien intentando manipularlo y hacerles daño, estaba seguro, pero no tenía las pruebas necesarias como para aventurarse a atacar.

— Mikey es muy fuerte.

— Eso no significa que no pueda vencerlo. ¿A qué viene todo esto? — su voz comenzaba a salir con más rabia.

¿Ganaría algo al hacerlo desistir? Aún tenía una carta posible por jugar, y se dio cuenta al recordar a su amigo guardando aquella carta con sumo cuidado momentos antes.

— ¿Dai sabe lo que estás planeando, Tora? — atacó el pelinegro callando a Kazutora — ¿tampoco sabe lo de Shinichiro, cierto? ¿qué pasará si lo descubre? Si alguien se lo dijera...

— Nadie se lo dirá. Sabe de la correccional pero no porqué estuve ahí, no tiene por que enterarse.

— ¿Y si matas a Mikey ella tampoco lo sabrá? Su padre era detective, ¿no es así?

— ¿Estás intentando amenazarme con algo, Baji? ¿o es que sigues del lado de Mikey aun? — una vena comenzó a brotarle en la frente a Kazutora mientras hacía el amago de levantarse del suelo.

— No — mintió el pelinegro —Te lo dije, estoy de tu lado. Siempre voy a estar de tu lado. Solo intento hacerte entrar en razón.

— ¿Sobre qué?

— Sobre que si Dai llegara a darse cuenta de toda esta mierda dudo mucho que siga tranquila. Ella no es parte de todo esto, Tora, es la hija de un tipo de la policía, su vida es muy distinta a la de nosotros. No va a tomarse las cosas tan a la ligera como tú y como yo. ¿No has pensado en como todo esto la afectaría a ella?

Kazutora se quedó mudo. Sabía que Baji tenía razón, por completo, pero las palabras que le dijo antes en la azotea también taladraban su cabeza.

"Me gusta mucho la persona que eres, Kazutora, con todo lo que eso implica".

Su mente se sentía en una especie de guerra, ¿sus palabras serían genuinas? Al cabo de unos segundos comenzó a sentirse como un bobo, claro que eran genuinas, ella no era como nadie de los demás, Dai era más real que toda la banda de sujetos que en un momento se dijeron sus amigos y después lo apartaron. Aunque no dejaba de sentir que lo que Baji decía era aun más real, y sintió una punzada sobre el pecho cuando recordó que, sabiéndolo y habiendo prometido que no iba a involucrarla en ello, lo hizo.

— Tora —la voz de su amigo lo sacó del trance — no dudo que Dai te quiera. Lee sus palabras, quiere que estés tranquilo y que estés feliz... piensa en si todo esto te hará genuinamente feliz.

Baji se levantó del sofá y tomó sus llaves, y en silencio abandonó el departamento de Kazutora.

...

Tal como lo prometió, Ima la había acompañado a hacer compras al supermercado. Aprovechó el viaje para reabastecer algunos suministros de casa y lo necesario para su sorpresa. Paró también cerca de un centro de revelado de fotografías, al día siguiente era el día que iban a hacer la entrega de su trabajo de ciencias y lo único que hacía falta eran las evidencias. De igual forma visitar ese establecimiento le terminó otorgando un toque especial al detalle.

Ima la acompañó hasta casa y la dejó en la puerta como solía hacerlo siempre. Introdujo la llave en la cerradura y abrió, encontrándose con el silencio y nada más. Caminó hacia la cocina para dejar los víveres y encontró en el comedor una notita donde usualmente las dejaba su padre, aunque esta vez el mensaje parecía un poco más críptico.

Necesito hablar contigo mañana. Ven a casa directamente después de clases y por favor evita traer a alguien a casa en estos días. Es urgente.

Te amo, cuídate mucho. Papá.

La caligrafía apresurada y el contenido del texto le provocó un escalofrío. No se detuvo a pensar mucho más y solamente siguió acomodando las cosas que necesitaba para comenzar a cocinar.

Hacer brownies le resultaba en extremo divertido, le gustaba un montón trabajar con chocolate porque podía comer un poco de este sin excederse demasiado, y la masa resultaba increíblemente fácil. No sabía exactamente cuales eran los gustos de Kazutora en cuanto a estos, por lo que intentó hacer una masa no muy seca ni tan húmeda. De la misma manera cortó un par de fresas para añadirlas sobre la mitad de los brownies, y sobre la otra mitad espolvorearía un poco de azúcar.

Una vez que estuvieron en el horno y las frutas estaban picadas, Dai caminó hacia el salón y dejó en la televisión el canal de música. Se dejó caer sobre el sofá y tomó su teléfono, escribiendo un texto rápidamente para enviarlo a su novio.

Me temo que no podrás venir hoy :( papá me pidió que no trajera nadie a casa, probablemente me lo cuente después. Espero verte mañana, es nuestro gran día! <3

Dejó el aparato de lado y se quedó tumbada en el sofá hasta que el sonido de un motor comenzó a acercarse y después llamaron a la puerta. Arqueó una ceja ligeramente desconcertada, ¿el mensaje no se habría enviado? Caminó hacia la puerta y ni siquiera se asomó por la mirilla.

— Te dije que no vini...

Una silueta desconocida estaba para frente a ella. Le tomó unos segundos reconocerlo e incluso se talló los ojos para ver si veía bien, y efectivamente, su vista no fallaba. Baji estaba parado frente a su puerta. Un sudor frío le recorrió las palmas de las manos pensando lo peor.

— Hola, Hayashi.

— ¿Kazutora está bien? ¿Pasó algo con su padre otra vez? ¿está en tu casa?

Baji la miró bastante desconcertado hasta que conecto las palabras de la chica con lo sucedido la última vez.

— Sí, tranquila, él está bien.

— ¿Qué sucede, entonces?

— ¿Puedo hablar contigo? — la muchacha parecía no entender todo muy bien — no te voy a robar mucho tiempo, te lo prometo.

— Ah, está bien. ¿Quieres pasar?

— No, estoy bien aquí. — Baji pasó una mano a través de su cabello y se sentó en el umbral, Dai lo imitó sentándose al lado suyo. — Kazutora ha sido mi mejor amigo durante muchos años.

Ella sonrió — Lo sé, habla un montón sobre ti, estoy segura de que te quiere mucho.

— Mira, Hayashi. — pasó saliva con algo de dificultad — no sé que tantas cosas sepas sobre el pasado de Kazutora, pero creo que ha tenido una vida bastante mala hasta ahora. Todo lo que ha pasado lo ha afectado un montón.

— Lo sé, ¿a qué viene?

— Él no es un mal tipo. Es un excelente sujeto y te quiere un montón, pero hay veces en las que a las personas las situaciones las sobrepasan, y no hay nada que los demás podamos hacer. Estoy intentando ayudarlo a dejar todo lo que ha vivido detrás de sí, pero no es una tarea fácil, sobre todo conociendo su vida y los detalles más turbios.

— Suenas como mi papá...

Baji sonrió para después volver a su expresión seria

— No te haré las cosas aún más largas, Hayashi. Vine a pedirte una cosa... si algún día llegases a enterarte de todo lo que hizo antes de ti intenta entenderlo, sé que es pedir mucho, y si decidieras irte no tendría nada que recriminarte. Solo... él nunca ha querido hacer daño a nadie, jamás. Creo que si alguien entiende el dolor es él, y sé que de alguna forma tu puedes entenderle. Si algún día lo vieras y encontraras a una persona que parecieras no conocer, ese no es él. Puedo jurarte por mi vida que el sujeto que es tu novio ahora es el verdadero Kazutora.

— No te entiendo, Baji. — Dai se sentía increíblemente inquieta — ¿por qué me dices todo esto?

— Llegará el día en el que vas a entenderlo, no se cuando va a ser pero no creo que barrer la tierra bajo la alfombra sea algo que pueda hacerse eternamente.

Baji se levantó y caminó rumbo a su motocicleta. Se montó sobre esta y Dai volvió a hablarle mientras él se colocaba el casco.

— ¿Hay otra cosa que deba saber? — pronunció aun sentada en el suelo

— No de mi voz.

El pelinegro sonrió y terminó de ajustarse el casco e inmediatamente después arrancó, dejando a la rubia sentada en el portal de la casa con la mente hecha un lío.

AHHHHHH 8K LECTURAS <3

no saben lo agradecida que me siento con uds, de verdad estoy extremadamente feliz. Gracias por darle una oportunidad a esta pequeña historia. <3

No falta mucho para entrar a la recta final de esta historia, y que emocióóóóón, sería la primera vez que concluyo una historia larga aquí y AH

Btw siganme aquí en wattpad son 8K lecturas y tengo nomás 2K seguidores eso q oigan :( luego ando avisando por aquí de cosillas importantes o dando agradecimientos.

Además me gustaría un montón hacer algún live en tik tok (@ fri.yay13 por si no me siguen) cuando la historia este apunto de terminar para contarles sobre la próxima historia que tengo en preparación <3 y probablemente les diga por ahí, ¿de quien creen que sea?  dejen sus ideas aquí jsjs.

En fin, mega largo el anuncio ahre. Mil gracias x seguirme leyendo, lxs tqm harto. No olviden votar btw. <3