𝐏𝐫𝐨𝐥𝐨𝐠𝐮𝐞

𝐏𝐫𝐨𝐥𝐨𝐠𝐮𝐞
You Are The Anchor That I Tie To My Brain

Actividades para la cápsula del tiempo.

I- Escribe una carta a la persona que crees que serás en cinco años. Cuida la redacción y ortografía.

II- Responde las siguientes preguntas:

a) ¿Cómo eres (físicamente) en cinco años?

b) ¿Cómo eres (sicológicamente) en cinco años?

c) ¿Cómo te perciben las personas en cinco años?

d) ¿A qué aspira tu yo futuro?

e) ¿Qué puedes hacer ahora para ser quien quieres ser en el futuro?

III- Escribe cómo piensas que será un compañero en cinco años.

Nota: Recuerda añadir un mensaje personal hacia tu yo futuro y hacia el compañero que elegiste.

✤╼╍╍╍╍╍╍❛⚘❟╍╍╍╍╍╍╾✤

— ¿No odian los lunes?

— Por supuesto que no, son maravillosos

— No cuenta si eres sarcástico, Edd.

— Tampoco cuenta hacer preguntas estúpidas, Tom.

— Tú no te metas, Tord.

— ¿Podrían callarse y caminar? Me están sacando canas verdes.

— ¡Oh, no! ¡Qué desastre, haremos más horrendo al Horrible Matt!

— ¡Edd! ¡Lo están haciendo de nuevo!

— ¿Podríamos no comportarnos como niños pequeños por UNA VEZ EN LA VIDA?

Cinco años habían pasado desde el entierro de las cartas y ahora cuatro adolescentes se dirigían a la Preparatoria en que habían quedado seleccionados después de dos meses de estudio de Tord, tres días de Edd, uno de Tom y ninguno de Matt antes del examen de admisión por decimo sexta vez en el año escolar. Estudiar no era divertido en absoluto para ninguno, ni siquiera para el "matadito" de Tord, que realmente encontraba una pequeña pasión en leer libros y hacer ejercicios. En lo que ni él ni ninguno de sus amigos encontraba placer era en levantarse temprano en las mañanas para caminar medio kilometro hacia la escuela en una estación fría y después de haberse desvelado por haber olvidado que al día siguiente tenían clases.

No eran estudiantes prodigios. De hecho, a duras penas eran estudiantes.

— ¿No es muy temprano para comenzar a actuar como mi madre. Edd? — preguntó Tom, cuyo cabello había crecido para parecerse a una piña y usaba un hoodie azul distintivo para mantener la temperatura corporal contra los vientos de septiembre.

— Si sigues actuando así, comenzaré a llamarte Paul otra vez— siguió el juego Tord, que usaba un hoodie rojo que, por algún motivo, le daba la imagen completa de satán al mezclarse con sus cuernos. Tom rió ante el comentario.

— No creo que a tu padre le guste eso, Tord— comentó Matt, que usaba un hoodie morado bajo una chaqueta verde. Era pelirrojo y consideraba que ese detalle le hacía único y más hermoso que literalmente nadie más.

— A Paul le importa un bledo lo que haga mientras no rompa la ley— se encogió de hombros Tord—. Además, podemos evitarlo si Edd deja de actuar como nuestra madre.

— Uno tiene que ser responsable entre nosotros y no creo que ustedes quieran tomar esa iniciativa— ante el diálogo del chico de hoodie verde y cabello castaño, los otros tres hicieron un sonido de desmotivación.

Amigos desde primaria y grupo de desastrosos en secundaria, Tom, Tord, Matt y Edd eran conocidos a solo quince días de haber entrado al siguiente nivel educativo. Sin embargo, no era por motivos dignos de admirar exactamente. 

Eran, en todo caso, personajes, personajes que la gente veía como si fueran de un mundo aparte, como si el actor tras ellos no existiera en absoluto. ¿Lo peor? Ni siquiera ellos sabían quién era ese actor, si es que existía uno.

La tercera semana de clases empezaba.

Cuando algo malo está a punto de pasar, hay algo en el ambiente que te lo dice. Algo que te pone nervioso y te da ganas de vomitar, algo que no te permite pasar saliva y tampoco deja que te muevas con normalidad. Era una mañana fría, confundieron los signos con el clima.

Y tal vez ese fue el error que los llevó hasta aquello.

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top