Kyojuro Rengoku.
Parte final.
Llevaban unos pesados minutos defendiendo a las personas del demonio que buscaba hacer de las suyas. El agotamiento se hacía presente en la joven ( _ ) quien se daba unos minutos para recuperar la compostura y ejecutar nuevos ataques para mejor efecto.
A veces miraba a su prometido que no se detenía ni un segundo en hacer el mismo esfuerzo. Le sonreía cada vez que sus ojos se encontraban.
—¿Te encuentras bien? —le escuchó con claridad a pesar de estar separados por un par de metros.
—¡Sí! ¿Qué hay de ti? —ella le sonrió tratando de no demostrar que le costaba seguirle el ritmo.
—¡Nunca he estado mejor! ¡Estoy seguro que el joven Kamado junto con sus compañeros podrán lograrlo!
Así continuaron hasta que un grito de agonía hizo que todo el tren empezara a temblar de manera abrupta. ( _ ) perdió el equilibrio pero no soltó su katana en ningún momento.
—¡Cariño! —pronto unos brazos lograron alcanzarle para aprisionarla contra su cuerpo.
El impacto fue duro. Pero en ningún momento el cuerpo de la fémina recibió daños.
Cuando todo cesó tuvieron que salir lo más rápido posible para asegurarse de que nadie tuviera heridas graves para concluir la misión sin problemas.
—Iré por este lado. —sugirió la pareja del rubio quien asintió para separarse.
Ayudó a salir a varias personas que le agradecieron con mucha ímpetu. Sonreía algo tímida para encargarse de los demás que necesitaban de su apoyo.
En ello se encontró con Zenitsu y Nezuko que al parecer habían pasado por una situación similar. El de puntas anaranjadas abrazaba a la demonio que resguardaba a un pequeño niño entre su pecho.
Se les veía agotados así que para no ser aguafiestas decidió buscar al resto mientras seguía con su tarea. Le alegraba que se encontraran bien.
Sin embargo se detuvo al sentir el ambiente terriblemente pesado. Sus vellos se erizaron por completo teniendo un terrible presentimiento.
Observó por donde se separó con Kyojuro decidiendo volver. Mientras lo hacía algo apresurada notó al cabeza de jabalí ayudando a unos cuantos pasajeros.
Su ansiedad y miedo aumentaron al ver como un demonio de presencia sumamente intimidante estaba dialogando con su prometido. Además de eso notó como Tanjirou estaba en el suelo, no tenía que pensar demasiado para saber que estaba sucediendo.
Por acto reflejo se colocó al frente del rubio buscando protegerlo. No era más fuerte que él y era consciente por lejos. Pero si podía hacer lo posible para evitar que peleara lo haría. Más cuando utilizó mucha energía para proteger a todos los del tren.
En los ojos del demonio notó que decía Luna Superior tres y tragó saliva. Era la primera vez que se encontraban con una de tanto poder.
—( _ )... —la voz de Kyojuro a sus espaldas le hizo reaccionar tomando con tanta fuerza su nichirin que se estaba lastimando.
—¿Así que la conoces? Interesante. —sonrió. —Será mejor que te muevas. No me enfrento contra mujeres.
—Qué mala suerte. —respondió fría.
—Por favor, sal de aquí y llévate al joven Kamado contigo. —tembló al escuchar su pedido. —¡Hazlo!
Al escucharlo tan decidido empezó a dudar. Sabía que no podía hacer las dos cosas a la vez.
Si se llevaba a Tanjirou lejos seguramente empezaría una batalla feroz y no podría intervenir con facilidad.
—Ahora tengo una mejor propuesta. —la voz de la Luna Superior llamó su atención. —¿Qué tal si mejor si la convierto en demonio en tu lugar? No tendrás más opción que hacerlo también.
—¿De qué diablos estás hablando? Estás loco. —respondió la joven frunciendo el entrecejo.
—Es la primera vez que veo una pilar de las estrellas. Tu poder con la sangre del demonio más fuerte de todos solo te hará llegar a los límites que no eres capaz por ser una humana. Puedo ver tu potencial, es increíble.
—( _ ). —Kyojuro inquirió.
Se alejó estando al lado de Tanjirou ayudando a que se levantara.
—Que molesto. Tendré entonces que quitarla también de mi camino. —en un parpadeo el demonio buscó lastimar a ambos. Aunque era más específicamente al de cartas Hanafuda. Sin embargo de manera rápida Rengoku lo impidió.
—Aléjate de ella. —dijo completamente serio y firme.
—Vaya, en serio te importa. Eso es mucho mejor. ¡No dudarás de hacerlo si está al borde de la muerte, Kyojuro!
Al estar en un lugar seguro dejó al pelirrojo recostado con cuidado. Pero el miedo era completamente claro entre ambos.
—Quédate aquí. —le pidió la fémina alejándose.
—¡Pero...! —no logró escucharlo. Estaba demasiado centrada en qué hacer para apoyar a su amado.
La pelea había comenzado y podía ver como sus movimientos eran tan firmes y fuertes que se congeló. Solamente podría hacer algo si utilizaba la última de sus posturas.
Aquello la iba a dejar completamente agotada sin posibilidades de moverse por un buen tiempo.
Tenía que hacerlo. No dejaría que Kyojuro muriera. Era más talentoso, con mucha experiencia. Su vida valía demasiado.
Cerró los ojos que empezaban a picar. Mordió su labio inferior con fuerza a tal punto que iba a sangrar.
—Respiración de las estrellas... Novena postura: Luna llena. —pronto su alrededor tomó un entorno tranquilo. Como si una capa de neblina arropara todo a su paso.
Esto le permitió aumentar su velocidad hasta tal punto que logró impedir que un golpe en concreto le hiciera daño al que hasta ahora era su prometido.
Akaza a pesar de recibir golpes críticos ya se estaba regenerando, más quedó en completo shock al ver como la figura de quien pensaba haber derrotado cambiaba al de una mujer.
Traspasó por completo su pecho. ( _ ) entonces escupió sangre mientras mantenía su espada contra el cuello del demonio. Solo tenía que mover sus brazos pero estaba en un punto tan crítico que su cuerpo no reaccionaba. Kyojuro no podía creerlo, a pesar de que su vista era ahora limitada a un solo ojo el dolor que sintió no se comparaba a ninguna herida física que hubiera recibido antes.
La joven entonces recordó por un segundo su pasado. Momentos donde pudo compartir con su amado siendo apenas unos niños con aspiraciones similares.
Ese día en específico donde habían prometido casarse y estar juntos para toda la vida se perdía en su memoria.
Entonces ambos coincidieron en algo. Si entonces el destino cruel iba a hacer que los dos se separaran de esa manera terminarían su trabajo a como dé lugar. Juntos.
Gritaron al unísono para entonces Kyojuro tomar con una mano las de ella haciendo que el corte avanzara aunque sea un poco.
Akaza desesperado iba a separarse pero entonces el rubio tuvo que detenerlo al igual que su otro brazo que se encontraba aun entre el cuerpo de la chica. ( _ ) sentía como iba a caer en cualquier momento pero su voluntad era más grande.
La Luna Superior sin tener otro camino rompió sus propios miembros para salir corriendo ante el amanecer.
Tanjirou entonces lo siguió pero en ese instante ( _ ) se desplomó, Rengoku la abrazó con fuerza evitando que se cayera. Las lágrimas caían sobre su rostro.
—Kyojuro... Muchas gracias por pasar todos estos años conmigo. Esta es mi manera de agradecerte por haberme salvado tantas veces. —habló bajo sintiendo todo tan lejos.
También estaba llorando. Pero solo quería concentrarse en el rostro de su amado hasta que pudiera. Una de sus manos tocaron su mejilla y el rubio apoyo la suya contra esta mientras sollozaba completamente roto.
Una sonrisa enmarcaba el rostro de la joven. Estaba feliz de que al menos a pesar de todas sus dificultades lograra su cometido.
—( _ )... ( _ )... Te amo, te amo demasiado. Quería estar contigo para siempre. Poder tener hijos y contarles todo lo terrible que pasamos. Ser felices.
—Yo te amo... —juntó su frente con la de ella.
—Por favor, no sigas hablando...
—Así me esté muriendo te diré lo mucho que te amo.
Se mantuvieron así hasta que dio su último respiro. A su alrededor desapareció cualquier cosa que conocía.
Caminaba sin ser capaz de recordar nada. Únicamente tenía la claridad de que estaba esperando a alguien. Estaba como en un cielo nocturno infinito. Era tan hermoso que podría observarlo eternamente.
Una figura se acercaba. Entonces pensó que era quien estaba esperando. Pero no lo reconoció, era un joven de cabello negro y ojos claros.
—Siempre supe que en algún momento nos íbamos a encontrar. Es raro que... Se me permita hablar contigo.
—¿Quién eres?
—No me conociste como realmente era. Te hice... Mucho daño.
Ella giró la cabeza. Por más que intentara no lo reconocía.
—Soy Hakuji, solo quería decirte que me arrepiento por las cosas que hice en mi vida. No hubo otra que más me doliera que hacerme lo mismo por lo cual cambie hasta tal punto que no me reconocí. —las lágrimas brotaron pronto de su rostro. —Lo siento, lo siento... Ni siquiera yo, me perdono...
Sus palabras eran sinceras. Se acercó a él para darle un abrazo que no se esperaba.
—Está bien. No sé qué paso entre nosotros pero me alegra que volvieras a ser el de antes.
Se mantuvieron así hasta que se separaron.
—Bien. Creo que es hora de irme.
—¿A dónde vas? —este volteó a verle.
—Me están esperando, estoy seguro de que... A ti también. —sonrió para despedirse.
La joven se mantuvo en su lugar. Observó nuevamente las brillantes estrellas para sonreír también.
Se preguntaba con cierta incertidumbre a que podría referirse. Tenía la confianza de que fuera lo que fuese podría saberlo a su debido momento.
Entonces una voz la llamó.
Procedo a llorar como magdalena (╥_╥)
Este capítulo tenía pensado hace semanas pero me dolía demasiado en mi corazón. Tuve que prepararme mentalmente. Nunca superaré esta parte del manga.
¡Feliz año nuevo a todooos! Muchísimas gracias por su apoyo, comentarios, votos y añadir esta historia en su lista de lectura. De verdad que dentro de poco llegaremos a 100k de visitas WOOOW
Los amo, los amo <3
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top