006. a shared tragedy
✧・゚: ✧・゚: ✧ :・゚✧:・゚✧
chapter six
❝una tragedia compartida❞
✧・゚: ✧・゚: ✧ :・゚✧:・゚✧
EMILY NO ERA UNA PERSONA MUY INTERESADA EN el amor de pareja. Claro que solía salir con personas cuando le atraían, pero nada solía ser del todo serio, en especial porque sentía que ninguna podría comprender lo importante que era su empleo para ella. Además, estaba el hecho de que nadie nunca la había hecho sentir tanto como para querer involucrarse de una manera más personal...
O al menos así era hasta que Odessa Knight apareció en su campo de visión.
Odessa era maravillosa en todos los aspectos posibles y Emily adoraba cada momento que tenía la oportunidad de pasar con ella. Desde los pequeños contactos que tenían durante las juntas en el trabajo, hasta las noches en donde ambas compartían el ascensor para poder llegar al estacionamiento en donde se encontraban sus autos.
No sabía como explicarlo, pero Odessa se había metido en su piel desde el día que le sonrió por primera ocasión.
Y es que la sonrisa de Odessa provocaba todo un mar de sentimientos nuevos en su interior que no deseaba frenar. Adoraba descubrir todo lo que la castaña era capaz de producir en ella, adoraba escucharla reír en el horario laboral cuando el agente Grier se acercaba a hacer una de sus clásicas bromas, adoraba verla sonreír bajo el marco de su puerta cuando llegaba a ofrecerle comer juntas, adoraba ver el brillo de sus ojos cuando hablaba de esos libros y series que tanto disfrutaba ver... en fin, Emily adoraba cada pequeño detalle de Odessa.
Aunque, pese a todo lo que estaba sintiendo y a que ya se encontraban juntas formalmente y a que incluso no quisiera frenar nada de lo que sentía, Emily aún temía estar dejándose llevar por sus sentimientos.
Y no es que temiera que Odessa pudiera romper su corazón, simplemente no estaba del todo familiarizada con todo lo que involucraba tener una relación con alguien.
— ¿En que tanto piensas?— le preguntó Odessa a su novia— No pareces estar prestando atención...
Ambas se encontraban en el departamento de la castaña viendo una película. Odessa estaba recostada en las piernas de Emily, por lo que cuando levantó la mirada y vio a su novia con la mirada fija en un punto diferente al televisor, sospechó que algo estaba ocurriendo.
— En nada... en cosas del trabajo— se corrigió Emily al darse cuenta que Odessa no creyó lo primero que había dicho— Perdóname. Te juro que estoy prestando atención
— ¿Si? ¿Segura?— cuestionó Odessa levantando una ceja— ¿Quién es Maureen?
Emily se quedó en silencio.
— ¿Qué pasa contigo?— preguntó nuevamente Odessa, solo que ahora pausando la película— Se que el trabajo siempre está en nuestras cabezas, pero no creo que eso sea lo único que te pase como para no prestar atención a uno de los pocos momentos que tenemos en donde no estamos en la oficina
— No es nada, me distraje... no volverá a pasar— negó Emily besando cortamente los labios de su novia— Sigamos con la película...
Por supuesto que Odessa no creía las palabras de Emily, pero sabía que insistir en respuestas sería completamente inútil. Conocía lo terca y cerrada que su novia podía llegar a ser. Cosas que si bien no eran de su agrado, no era algo que pudiera cambiar.
Emily por su parte intentó seguir prestando atención a la película frente a ella, intentando así también el no comenzar a sobre pensar en la situación de sus emociones, después de todo, aún con todo eso, ella adoraba a Odessa y se sentía segura de querer experimentar a su lado toda clase de nuevas experiencias.
Porque aún con el hecho de que la asustara sentir tanto en tan poco, Emily sabía que el hacer de Odessa su novia, era la mejor de sus decisiones.
— Emily, te quiero— le sonrió Odessa— Y se que eres una persona a la que le cuesta confiar. No espero que porque tenemos una relación, comiences a contarme todos tus secretos... pero de verdad me gustaría que intentaras abrirte un poco más y que no te cierres de manera inmediata cuando te pregunto que te ocurre
La pelinegra sonrió al escuchar esas palabras.
No había duda alguna que Odessa era mucho más de lo que ella pudo llegar a desear.
Era tan comprensiva, tan amable, tan encantadora... que no podía creer la suerte que tenía por tenerla a su lado.
— Yo también te quiero, Odessa— le sonrió de vuelta— Y te prometo que haré el intento de ser más abierta... evitaré cerrarme. Gracias por entenderme
— Gracias a ti por hacer la promesa de intentarlo. Solo por favor... que sea una realidad. No me gusta cuando las personas rompen sus promesas— dijo Odessa levantándose y sentándose correctamente en el sofá— Creo al 100% en ti... no quiero que eso cambie
Emily notó un cambio en la manera en que Odessa habló y eso vaya que le parecía extraño.
— ¿Está todo bien?— preguntó ahora Emily
Odessa se quedó en silencio por unos instantes. Como si se estuviera debatiendo entre si contar lo que pasaba en su cabeza o si debía guardar silencio.
Emily sospechaba que Odessa tenía un pasado algo doloroso con respecto a brindar su confianza, varias de las reacciones por parte de la castaña la hacían creerlo, sin embargo nunca se atrevió a preguntar.
— Creo que preferiría no contar eso hoy... no creo que sea el momento— respondió Odessa forzando una sonrisa— Y si, se que te acabo de decir que fueras un poco más abierta conmigo... pero no creo que sea un buen momento para contarte todo de mi...
— Me lo dirás cuando te sientas lista y lo respetaré. Solo por favor, hazlo en algún momento, no dejes que los recuerdos te consuman— le dijo Emily tomando su mano— Yo estaré aquí. Siempre estaré para ti
— Las dos trabajaremos en esa parte de expresar lo que nos pasa. Ya no estamos solas— le sonrió la castaña— Me tienes y yo te tengo.
●●●
Anabeth: “¡Odessa, emergencia!”
“¡Responde, responde!”
“Por la hora y el día asumiré que estás con Emily, pero esto es importante!”
“¡Luego te la comes a besos o de la manera en la que lo andes haciendo, te necesito”
“¡Ava Odessa, responde o te prometo que busco la manera de contarle a Emily que un día por andarla viendo, acabaste babeando documentos importantes”
Me: “Es en este momento donde agradezco que no le pedí a Emily que leyera mis mensajes por mi”
“¿Ahora que hiciste?”
Anabeth: “¿Ya tan pronto le brindaste acceso a tu celular? Que rápido”
“A mi me costó dos años que me dejaras si quiera tocar tu teléfono”
Me: “Porque antes de eso, la última vez que te dejé tomar mi celular, le escribiste a uno de mis ex novios que era un idiota con pocos huevos, que la tenía tan chica que jamás pudo hacerme sentir algo durante el sexo”
Anabeth: "¿Y acaso dije mentiras?”
Me: “No...”
“¡Pero no tenías que publicarlo en mis redes sociales!”
Anabeth: “Se lo merecía. El sujeto te estaba engañando con la que decía que era su prima”
“Si a él no le daba pena ser un infiel, que a ti tampoco te diera pena exhibir sus nulas habilidades para encontrar el clítoris”
Me: “Anabeth, ya mejor dime que quieres”
“Que Emily está en el baño y cuando vuelva, dejaré de responder”
Anabeth: “Empiezo a creer que te interrumpí en un buen momento”
“Es increíble como aún cuando nos encontramos en continentes diferentes, sigo interrumpiendo los momentos en donde te dan como cajón que no cierra”
Me: “¡Anabeth!”
Anabeth: “Si, ya, perdón”
“A lo que venía”
“¡Acabo de ver al sujeto más atractivo del mundo! Creo que es el amor de mi vida”
Me: “¿Un chico? ”
“¿Qué no se supone que le declaraste la muerte de a esa parte de ti a la que aún le gustan los hombres?”
Anabeth: “¡Es que ese chico era el hombre más atractivo del mundo!”
“Iba entrando a la estación del metro que está cerca de la casa de una de mis alumnas”
Me: “¿Tú? ¿En una estación del metro?”
“Tú no entras a una estación del metro ni aunque te revivan a Kurt Cobain para un último concierto de Nirvana”
Anabeth: “Y es justo por eso que no lo pude seguir para preguntarle su nombre”
“Una verdadera tragedia. Estoy segura que ese hombre podría ser el padre de mis hijos”
“Si tan solo me gustaran los niños”
Me: “Debió ser demasiado atractivo si logró romper tu regla de no volver a fijarte en hombres”
“¿Y que harás ahora?”
Anabeth: “Tratar de volver a las cercanías de esa estación el día de mañana, a la misma hora”
“Mi intención es acercarme a él antes de que entre al metro”
Me: “¿Y si entra al metro?”
Anabeth: “Tocará ver partir al amor de mi vida, porque me niego rotundamente a entrar a una estación”
“No me importa estar en un continente diferente, yo jamás volveré a pisar una estación de metro”
Me: “Bueno, te deseo suerte conquistando al supuesto amor de tu vida”
Anabeth: “Es demasiado guapo como para no serlo”
“La única manera en la que no podría serlo, sería si fuera gay”
“Pero no creo. Mi radar gay no sonó por él”
“Apuesto a que es un hombre inteligente e interesante. ¿¡Te imaginas que sea un conocedor de música y que además le guste jugar ajedrez!?
“Solo eso podría hacerlo más perfecto”
Me: “A veces siento que le pides mucho a la vida”
“Pero luego recuerdo que yo pedía una mujer inteligente, exitosa, atractiva y que disfrutara del cine tanto como yo”
“Y la encontré”
“Así que arriba la esperanza”
Anabeth: “Si llego a necesitar consejos para conquistarlo... le pediré ayuda a mi compañera de cuarto”
Me: “En lugar de decir que me vas a pedir ayuda a mi”
Anabeth: “Yo te quiero mucho y se que eres talentosa en muchas cosas”
“Pero ligar no es una de ellas”
“O sea si, ya se que ahorita tu tienes novia y yo no. Pero ni tu misma sabes como le hiciste”
Me: “Y eso me hace aún más increíble”
— ¿Con quién hablas?— preguntó la voz de Emily, haciendo que Odessa dejara su celular de lado
— Con mi mejor amiga. Ya te hablé de ella, se llama Anabeth— respondió la castaña
— ¿La que se mudó a Estados Unidos para intentar éxito en la música?
— Justamente ella. Me estaba contando que cree que conoció al amor de su vida afuera de una estación del metro
— ¿Afuera del metro?— preguntó Emily con una risa
— Dijo que iba de camino a casa de una de sus alumnas y lo vio entrar a una de las estaciones del metro. Mañana intentará acercarse a él antes de que entre...
— ¿Por qué no se acercó hoy?
— Porque Anabeth no entraría a una estación del metro ni aunque tuviera la oportunidad de tocar en las filarmónicas más importantes del mundo
Emily la miró extrañada sin entender.
— No voy a entrar mucho en detalles porque no es mi historia, pero creo que puedes imaginar todo lo que no te diga— suspiró la castaña recargando su cabeza en la parte del respaldo del sofá— ¿Llegaste a escuchar sobre el atentado que hubo en el metro de Madrid en 2004?
— Si, claro. Fue una tragedia...
— Bueno... en esas fechas Anabeth se fue de vacaciones con su familia y pues... estuvieron en uno de los trenes que hicieron explosión...
El estómago de Odessa se revolvió cuando contó aquella historia. Recordó cada momento de incertidumbre en cuanto escuchó la noticia y no lograba ponerse en contacto con nadie de la familia West.
Pero sobre todo... recordó como Anabeth no fue la única que perdió ese día...
— Evidentemente ella sobrevivió... pero su familia no corrió con la misma suerte— explicaba Odessa— Y bueno... esto también es parte de toda mi historia, esa que prometí también contarte...
— Odessa, si no quieres...
— Quiero hacerlo. Quiero que sepas que confío en ti lo suficiente para contarte algo como esto— decía Odessa con nostalgia— Anabeth tenía un hermano mayor... y cuando todo esto ocurrió... yo salía con él. De hecho fue así que la conocí...
Odessa recordó a ese viejo amor con un nudo en el estómago y con gran tristeza.
Y es que pese a que ya habían pasado demasiados años y ya hubiera sanado, aún le entristecía recordar todos esos tristes días.
— Se llamaba Shawn y fue probablemente uno de los amores más intensos que he tenido en mi vida— contaba Odessa con una sonrisa forzada— Llevaba casi dos años con él cuando... cuando murió a causa de la explosión...
Emily se quedó en silencio.
Por un momento pareció que olvidó como hablar o como dar consuelo. Y es que no imaginaba lo que debió ser para Odessa y Anabeth el vivir aquella tragedia.
Miró a su novia y pudo notar como pese a que su semblante reflejaba la tristeza, no parecía existir ningún rastro de alguna lágrima.
— Anabeth y yo nos volvimos mucho más unidas después de eso. Ella tenía 21 años y aún se encontraba estudiando música... quedó a la deriva y la recibí en mi casa después de todo— siguió contando Odessa, pero ahora viendo al suelo— Nos ayudamos mutuamente. Nos costó demasiado el soltar y el aprender a vivir con aquellas perdidas... de hecho esta es de las pocas veces en mi vida que he contado esto sin ponerme a llorar...
— Son de las personas más fuertes que he conocido... bueno, solo a ti te conozco en persona... pero espero me entiendas
— Si, si entiendo— rio Odessa de manera ligera— Pero bueno... después de ese evento, Anabeth se negó a volver a subir a cualquier metro, sin importar la ciudad. Teme que algo como eso pueda ocurrir...
— Tiene sentido... wow, de verdad que pude esperar cualquier cosa... menos algo como eso. De verdad lo siento mucho— dijo Emily tomando la mano de su novia— Lamento mucho que tú y tu amiga tuvieran que perder tanto...
— Si... fue un proceso largo y complejo, pero logramos salir adelante. Ella se graduó con honores, es una excelente violinista y pianista, también es una grandiosa jugadora de ajedrez— sonrió Odessa viendo una foto que tenía con su amiga colgada en uno de los dos muros— Y yo... bueno, yo logré llegar a la Interpol
— Eres una mujer extraordinaria, jamás lo olvides— le sonrió Emily— Gracias por tenerme la confianza para contarme esto... significa mucho
— Como lo dijimos hace un rato. Me tienes y yo te tengo— siguió sonriendo Odessa— Ya no estamos solas
❥
sigo dándoles momentos bonitos entre odessa y emily porque las amo mucho y porque quiero que vean los inicios de su relación.
¿quieren leer algo en especial?
¿les gusta como se va desarrollando el amor entre odessa y emily?
yo sé que vamos rápido con respecto a como se dio el interés entre ambas y su noviazgo, pero todo es necesario oc, voy avanzando lo más rápido que puedo para que estén al pendiente.
ya empecé a subir edits de odessa y emily en tik tok, para que vayan a verlos y a darles amor.
el user es xAlianovna, el mismo que aquí, así que espero verlxs por ahí.
K. 🦋
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top