LVII | aleirbag

—¿Emocionados?— preguntó la italiana a los dos niños detrás de ella— era tiempo que no veías a los abuelos.

—Si mamma, ¿abuelo D estará allá?— preguntó el mayor a su madre.

—No cariño, abuelo D está en Italia trabajando— sonrió de lado.

—Puedo saber qué pasa— pregunto Paul con la mirada en la ventana.

—¿de que hablas?

—Te conozco y lo sabes, decidiste visitar muy de la nada— explicó este—¿qué pasa?

—Nada, solo pensé que sería bueno pasar antes de todo el desastre y mi tío quería ver a mamá— se defendió esta, si bien ni ella sabía lo que estaba sucediendo en si tenía en claro que bella tenía un plan y que eso sólo significaba que algo malo pasaría.

—¿estás segura, Vee?— pregunto la castaña desde la parte de atrás del auto acariciando el cabello de Stella.

—No se preocupen chicos, si tienen que saber lo harán más adelante— sonrió aparcando frente a la conocida casa para ella justo detrás del Volvo que había tomado su hermana.

—¡ahí están!— gritó un emocionado Charlie abriendo sus brazos cuando los tres niños corrieron a estos—¡habéis crecido un montón!

—Hola niñas— sonrió Lorelai abrazando a su hija e hijastra—¡Un abrazó a la abuela también!— abrió sus brazos la mujer para sus nietos, pues todos la llamaban así.

—¡Yo también quiero un abrazo!— un Fabrizio sonriente bajo del auto de bella haciendo que la rubia perdiera la sonrisa.

—Maldita sea— gruño esta— ¡que hice mal para ganarme esto!

—Oh que recuerdos de mi infancia— suspiro la peli negra apoyándose en su auto— debías verlos cuando era pequeña, mamá casi lo mata en varias ocasiones.

—¿matarlo enserio?— pregunto una Leah de ojos sorprendidos.

—Si, creo que todavía no conoces muy bien a Lorelai— le sonrió burlona bella— cuando os amenazo, lo decía en serio.

—Anotado.

—Prepare el almuerzo, ¿vais a entrar?— pregunto la rubia quien ignoraba completamente al italiano que pellizcaba su brazo como niño pequeño.

—Yo tengo que ir a hacer algunas cosas, volveré dentro de poco— sonrío bella subiéndose al auto.

—¿tu quien coño eres?— pregunto Charlie al hombre.

—El jodido diablo reencarnado— respondió la rubia rodando los ojos.

— Es mi padrino— lo señalo— puede ser algo molesto, ama sacar a mamá de quicio.

—Oh bienvenidos seas entonces— sonrió el hombre entrando a la casa con ella en brazos.

[...]

—Voy a golpearlo— gruñó la rubia viendo como el vampiro tiraba de su cabello—¡Fabrizio!— le gritó molesta.

—Siempre con tan poca paciencia, que te salen arrugas si te estresas querida— respondió este riendo.

—¿por que tu hermana se fue así?— pregunto la rubia a su hija colocando las cosas sobre la mesa para que comieran los demás.

—Es mejor que no lo sepas mamá, pero algo grande viene y con bella lo hablamos, debéis iros de Forks por unos días— pidió— Edward y Emmett han comprado los boletos de viaje, necesito que me prometas que os vais a ir.

—Venus...— trato de reclamar la mujer.

—Te lo pido enserio mamá, todos estamos en riesgo.

—Bien— se rindió esta—¡Fabrizio te juro que te arrancare la mano si vuelves a pellizcarme maldito stronzo!

—Oh que linda amistad— sonrió la chica entrando a la sala donde sus hijos y sobrina se encontraban decorando el árbol con ayuda de los lobos.

—Estos tres están pegados a los niños— sonrió Charlie abrazando ligeramente a su hija.

—Si, tienen una conexión muy fuerte— murmuro esta.

—¿Como estáis tú y Emilio?— pregunto equivocándose apropósito de nombre pues desde que ambas chicas habían tenido que comenzar a mantener una distancia con su padre y Charlie sabía algo de su mundo odiaba aún más a Edward y Emmett llamándolos Emilio y Eduardo.

—Estamos mas que bien papá y antes de que preguntes Edward y bella también— lo tranquilizo.

—¿estás segura de eso?

—Muy segura— sonrió.

—¡A comer!— llamó su madre a todos menos los dos vampiros.

[...]

—Háblame Isabella— gruñó molesta la italiana al ver como su hermana escribía cartas y preparaba aquella mochila.

—Solo haz lo mismo, por favor Venus— pidió está tratando de evitar contarle.

—Necesito saber algo Bells— se sentó en la cama de su sobrina pasando sus manos por su rostro con frustración— no me lo digas todo pero dame seguridad.

—Los tres estarán bien— se sentó a su lado apretando su mano— te lo prometo, tendrán un futuro.

—Uno del que no seremos parte...— la miro dolida.

—Eso parece, quien lo diría— suspiro la castaña— sobrevivimos a tantas cosas y nos hicimos inmortales para volver a morir.

—Al menos lo haremos juntas— apretó su mano— y sabiendo que lo que más apreciamos está a salvo.

—Eso es más que suficiente— se levantó la castaña— ve a preparar las mochilas, yo terminaré aquí y las pondremos juntas.

La italiana asintió moviéndose hacia la casa que compartía con su familia, la casa que había construido su esposo y la que dentro de poco tal vez quería vacía.

Camino dentro de la primera habitación, la de Apolo tomando todo lo necesario para este, dinero, algunos objetos que ella sabía le importaban mucho y una que otra ropa para luego escribir una carta.

Mi pequeño solecito, quisiera poder tener más tiempo contigo pero no todo el tiempo del mundo es suficiente para una madre. Cuida de tu hermana y de tu prima como siempre lo has hecho, no dejes a Leah a un lado nunca pues te aseguro que si hay alguien que te quiere tanto como nosotros es ella. Mamá te ama, papá te ama.

Si pudiera llorar probablemente estaría en un mar de lagrimas en aquel momento, nunca se imaginó que después de tanto al por fin tener a sus hijos con ella, por fin teniendo un para siempre con el amor de su vida todo acabaría tan abruptamente y la verdad quien estaba listo para aquello. Lo único que la tranquilizaba era saber que estarían bien sin ella, pero bien.

Camino a la habitación de Stella con el corazón cada vez más roto haciendo lo mismo que en la habitación de su hermano, colocando todo lo necesario e importante para luego tomar un papel y comenzar a escribir.

Mi querida estrellita, pensé que estaría allí para calmar tus sueños hasta que estos se fueran pero al parecer no. Debes aprender sobre tu poder y no temerle ir que solo así podrás controlarlo, no es una maldición si no un don. Vive un poco más y con menos miedo, ábrete a las personas, recuerda que todo te amaremos para siempre.

Como el viento cambia de dirección, la vida cambia de decisión.

Aquello había sido una leve voz ligeramente conocido cruzando por su cabeza.

Venus se giró preparada para luchar con quien sea que estuviera allí, encontrando a nadie, no había absolutamente nadie y por el olor también sabía que nadie había entrado allí tampoco así que prefirió ignóralo.

[...]

—¡Navidad, Navidad!— chillaba la peli negra dándole vueltas a la pequeña castaña que se carcajeaba felizmente.

—¡Otra vez tía, otra vez!— chillaba cuando la bajaba.

Venus siempre había sido fanatica de las fiestas y si aquella era probablemente la última que pasaría con su familia, se aseguraría de darles los mejores recuerdos posibles.

—Alguien esta muy animada— se burló Jacob— ¿alguna razón especial?

—Si, que amo los regalos— bajo a la pequeña que corrió a jugar con Stella y Apolo— ¿donde están los míos por cierto?

—El mío te espera esta noche— sonrió pícaro su esposo.

—¿Quieres que busque mi pistola?— le gruño Charlie al chico quien abrió los ojos recordando donde estaba.

—Lo siento.

—Ahora si, todos abrirán sus regalos— sonrió Charlie sentándose junto a su esposa.

—¡Edward y Emmett primero!— gritó Venus corriendo a tomar a su mejor amigo por el brazo que se encontraba hablando con bella, pero se detuvo junto a la castaña al ver su cara de preocupación—¿que sucede ahora?

—La nieve endurece...— explicó esta— tendremos hoy solamente.

—Todo pasa tan rápido— suspiro esta girándose al escuchar risas de su padre— disfrutemos de esto mientras podemos, luego pensaremos en mañana.

—Tienes razón.

—Parece que sus idiotas se ganan puntos conmigo— sonrió el hombre señalando los boletos que le habían entregado sus yernos.

—¡Hola familia!— la fácil de reconocer voz de aisha— ¡mis niños!— grito lanzándose junto a los niños al piso.

—Es una niña de tres años— se quejó Jared para luego reír— ¿como estáis?

—¡Cabron!— Paul s lanzó sobre su amigo.

—Esta casa se volvió un hogar de perros— se burló Edward ganándose una mala mirada de los cuatro lobos.

—La nuestra es hogar de otra cosa— le recordó Bella.

—¡Bien!— interrumpió Emmett colocando una mano en la cintura de su esposa— ¿que os han regalado los chuchos, pequeños?

Venus sonrió al ver como su esposo se alejaba tomando en brazos a ambos niños uno en cada uno, una vida sin ellos era lo peor que podía imaginarse por lo que prefería perderla si era necesario.

—¡Leah me regalo un collar!— toco su cuello con emoción Apolo dejando ver un pequeño collar de militar con uñas escritas en el.

—Esta precioso, sole mio— besó su frente la italiana—¿y a ti pequeña?

—Unos aretes— abrió su mano dejando ver dos pequeños aretes de perla muy pequeños, Venus abrió sus ojos ligeramente pesando en cuanto podrían haber costado.

—Las pesque y pulí yo— la tranquilizó el lobo.

—Mas te vale Paul Lahote— gruño la chica recibiendo un abrazo de este, se alejo luego de un rato para molestar a Seth y los demás que estaban allí.

—Mamá dejó de mandar cartas— susurró la de pelo azul a su prima disimuladamente, no quería que Lorelai la escuchara— creo que algo le pasó.

—¿no puedes comunicarte?— pregunto también susurrando.

—No lo logró, es como si hubiera desaparecido, no me comunico con nadie que pueda ayudarme a encontrarla.

—¿Que quieres hacer?

—Pensaba en salir a buscarla mañana mismo...— suspiro— pero luego me llegó esto.

Le pasó una carta a la italiana quien la abrió confundida.

Cuando todo parezca perdido, los planetas se alinearán.

Alaeirbag.

¿Que es Alaeirbag?— pregunto— ¿quien envió esto?

—No tengo la mínima idea pero considerando que habla de planetas y tu vida es la más rara de todas, asumí que tendría que ver contigo— bebió de su vaso— iré con Jared, considerando que mañana podría perder al amor de mi vida quiero pasar todo el tiempo que pueda con el.

Venus odiaba pensar en todas las personas que se estaban poniendo en peligro y todas las que podían perder a alguien por la situación pero la verdad todos los que estaban allí estaban luchando por algo para ellos también, la libertad y tranquilidad para un mundo mejor.

—¿Que rayos eres Alaeirbag?

TUVE QUE VOLCER A PUNLIXAR POR QUE ME EQUIVOQUÉ CON LA
PALABRA AHHHHHH

Quedan muy pocos capítulos, por cierto tengo varias nuevas historias pero tenía una pregunta.

De verdad quiero hacer historias de Marvel pero no sé con quien primero así que votad con un comentario.

Capitán America.
Loki.
Bucky.
Thor.
Peter Parker.

¿O quien os gustaría?

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