08

SOLOS

Aviso: contenido sexual. Se requiere discreción. Aún así, avisaré cuando empieza y cuando termina para evitar que quienes no quieran leer puedan saltarlo.

ESTABA DEMASIADO NERVIOSA. Rosalie nos avisó que se iría para una veintitanta luna de miel con Emmett, Alice dijo que aprovecharía para ir con Jasper a visitar a unos amigos del rubio en Texas, según entendía, Charlotte y Peter, por último quedaban Pietro y Edward que se irían a Volterra porque mi mellizo tenía que avisarles de mi cambio al igual que luego se irían a otros lugares para estar solos.

Aún que sabía que era porque Pietro quería desvirgar a Edward, pero este se negaba.

Aún así, estaba nerviosa por Carlisle, estaríamos los dos solos, totalmente solos, deseaba poder aprovechar de ello pero todavía no sabía que hacer. Así que me metí al baño, me metí en la ducha para tomar un baño de agua fría y poder quitarme la última sensación del fuego corriendo mi cuerpo.

Aún había veces que cuando cerraba los ojos volvía a sentir el fuego quemarme.

Las manos de nuestros ancestros sostenerme para que no me moviera.

Mi magia explotando abruptamente como una bomba que detonó.

Abrí los ojos suspirando y tratando de borrar esos pensamientos, volví a pasar las manos por mi cabello mientras cerraba el grifo. También le había prometido a Emily ir a la fiesta para su sobrina, la impronta de Quil, así que tendría que buscar un disfraz o algo por el estilo.

Tomé una toalla para secar un poco mi cuerpo y envolverlo en esta misma. Me mire en el espejo antes de peinar mi cabello con algo de apuro, mire mis piernas para suspirar y morder mis uñas nerviosamente.

Estaba sola, con el doctor apuesto de Forks.

Volví a levantar la mirada al espejo y sonreí para mí misma, mire el reflejo de mis ojos escarlata con seguridad. Iba a hacerlo, podía hacerlo.

Me arreglé un poco para bajar a dónde estaba Carlisle en el sofá, antes de irse, Alice le había dicho que ponga la película de Jurassic Park y él lo aceptó. Así que me senté a su lado lista para ver la película.

A este punto, cuarenta minutos después, la película ya me provocaba aburrimiento, era entretenida por la parte donde gritaban y salían corriendo, pero Carlisle parecía reacio a aceptar con lo que habían hecho los dinosaurios. Podía decir que estuve la mitad de la película riendo por como Carlisle se quejaba de que eso no era posible, científicamente hablando.

- Además, mezclar ADN implicaría muchas más cosas, porque tienen menos... - lo tomé de la camisa para acercarme a darle un beso, ya le sacaba la gracia a Jurassic Park

Subí mis manos a sus mejillas para presionar mis labios y separarme haciendo un sonoro beso. Él mantuvo sus ojos dorados cerrados un momento para luego abrirlos con una sonrisa.

- Es una película, cariño. No te lo tomes tan a pecho, la ciencia ficción trata de eso - explique copiando su sonrisa para darle otro casto beso

- Lo siento - Me devolvió el beso, pero esté siendo uno más duradero

Sus labios se movían como una costumbre sabiendo el recorrido que debían seguir, conociendo cada detalle de mi. Sonreí entre medio del beso riendo un poco para tomar el control de la televisión a ciegas y apagarla.

- esto me gusta más - Conté al ver cómo miraba la televisión apagada

Volví a besarlo, Carlisle llevó sus manos a mi cintura pero bajó la otra para tomar una de mis piernas y ayudarme a subirme a su regazo. Acomode bien mis piernas a su lado, sin romper el beso, sentí su mano subir lentamente por mi pierna hasta pasar por mi cadera y volver a mi cintura.

Nos separamos por falta de aire.

Sonreí algo agitada, adorando internamente la situación en la que nos encontrábamos, él sonreía un poco viendo mis ojos y ahí me di cuenta de la pareja curiosa que éramos. Uno con ojos dorados como el sol y la otra con ojos rojos como el una luna roja.

Precaución, lectoras mías.

Volví a acercarme para besarlo, pero está vez con más pasión, lleve una de mis manos a su nuca para tirar de su cabello, provocando un gruñido de su parte que provocó que me apreté sus manos en mi cintura, recibiendo un jadeo de mi parte. Cada movimiento provocaba una reacción por parte del otro.

- Melanie - suspiró cuando me separé para besar su cuello

- Shh - Susurré sin querer que se rompa el momento, baje mis besos dejando un camino que volví a recorrer para subir hasta buscar desesperadamente sus labios de nuevo

Sus manos bajaron despacio, provocando una descarga eléctrica que erizó mi piel, con suavidad hasta que rozaron con la parte de mi espalda baja descubierta por la remera que se levantó un poco. Metió sus manos debajo de mi camiseta haciendome mover un poco por reflejo y note como él se tensaba un poco.

Me volví a mover un poco, escuchando un gruñido de su parte, sonreí al ver lo que provocaba y moví mis caderas para adelante, luego atrás y seguí con movimientos circulares que lo hacían suspirar mi nombre.

Pagaría millones para volver a tener la imagen de Carlisle con la cabeza echada hacía atrás sus manos apretando mis caderas mientras me insitaba a moverme más.

Bajé mis manos lentamente hasta la parte baja de su camisa y las introduje sintiendo su piel fría. Sus manos se apretaron a mi cadera dándome un claro mensaje de que luego eso me dejaría marcas.

Me acerque a besarlo otra vez, mientras sentía su tacto helado pasar debajo de mi camiseta y recorrer mi espalda de arriba a abajo una y viceversa. Saque mis manos de su camisa para empezar a desabotonar esta misma, pero sin parar de moverme levemente sobre su regazo. Una vez estuvo desabrochada, la quite mostrando su torso desnudo y algunas marcas en él que supuse se debían a su época con los Vulturi.

- Que sexy - solté sin pensar escuchando su risa ronca

Moví mis manos sobre su torso hasta llegar a su cabello y tirar de él cuando sentí sus manos debajo de mi ropa llegar a mis pechos mientras sentía sus besos en mi cuello. Sus manos bajaron despacio hasta el dobladillo de mi remera y la levantaron, dejandome tan solo en sostén.

Me quite las zapatillas sin esfuerzo, al igual que él y me movió en un rápido y ágil movimiento quedando recostada debajo de él en el sofá. Sus besos húmedos recorrieron mi cuello hasta mi pecho y luego bajaron haciéndome arquear un poco la espalda, acción que usó a su favor para bajar las manos a mi espalda y desabrochar el sostén.

Me miró con sus ojos ahora negros y retiró la prenda lentamente, dejándome ahora con el torso completamente desnudo. Me besó con suavidad y dejándome deseando, para luego bajar otra vez el recorrido hasta llegar a mis pechos. Con su mano masajeó uno mientras con su boca se dirijía al otro, haciéndome morder el labio inferior por los jadeos que me aguantaba.

Se levantó del sofá para quitarse los pantalones y yo lo ayude mientras lo besaba, mis besos bajaron por su torso a medida que baja la prensa dejándolo en boxer y sonreí al ver cómo a través de la tela se notaba erecto. Puse mi mano sobre su miembro masajeandolo mientras el quitaba mi shorts corto, quedando en misma cantidad de prendas.

Tomó mi mentón para alzar mi mirada, y aún con sus ojos oscuros mostró ese pequeño brillo de sinceridad en ellos.

- Dime que estás segura - Susurró rozando mis labios

Pero éramos adultos, estaba segura y no estaba para juegos de adolecentes. Sonreí juguetonamente antes de besarlo nuevamente y moverlo hasta echarlo de nuevo en el sofá pero dejándolo debajo de mi. Me senté sobre su miembro erecto, moviéndome sobre él y jugando con la paciencia del gran doctor Cullen.

- Melanie - me tomó de las piernas con fuerza, haciéndome notar que lo estaba torturando un poco

Mi zona comenzó a pedirme a gritos tenerlo dentro, pero quería ver hasta donde llegaba Carlisle, lo que no fue muy lejos porque nos cambió de lugares dejándome debajo y subió mis manos sobre mi cabeza para tomar con una sola mano suya mis muñecas y usar su otra mano para acomodar mis piernas a sus laterales dejándolo entre medio de ellas y con nuestras partes rozando.

Su lado animal ganó y arrancó de un tirón mi ropa interior al igual que la suya haciéndome reír como si yo fuese la verdadera bruja malvada que lo torturó hasta hacerlo desear enormemente. Me besó con fiereza, metiendo su lengua mientras movía su miembro sobre mi clítoris haciéndome gemir por lo mojada que estaba.

- Ya no es tan divertido - Se burló al verme de esta manera, no, no era divertido

- Ya, Carlisle - Rogué echando mi cabeza hacía atrás - Te quiero dentro de mi

- Como pidas, cariño - metió su miembro dentro de mi haciéndome gemir su nombre con fuerza

Bajó su mano a mi zona, moviendo sus dedos sobre mi punto débil mientras embestía con cuidado para que pudiese acostumbrarme a su tamaño pero sin dejar de sentir placer. Ni si quiera me molestaba en ahogar mis gemidos, agradeciendo que la casa Cullen este a las afueras de la ciudad y que no haya nadie en casa.

Las embestidas empezaron a ser más fuertes y no me aguante, así que nos volví a cambiar de posición quedando arriba para empezar a moverme sobre él, subiendo y bajando con fuerza y aumentando cada vez más el ritmo.

Me sentía en el paraíso mismo, adorando la increíble resistencia de los vampiros y la superfuerza, solo me exitaba más el notar las marcas que me dejaban sus manos en mis caderas y como me sentía cada vez más cerca del cielo.

Embestidas y embestidas hasta que sentí una corriente recorrer mi estómago y bajar, junto a la sensación de mi entrada apretarse al miembro del rubio, me moví más rápido aprovechando al punto de llegar el climax, escuchando los jadeos del rubio junto a sus movimiento que me indicaban que estaba en mi misma situación.

Justo cuando llegamos al climax, nuestros gemidos altos dejaron en un silencio la sala. Nuestras respiraciones agitadas se volvieron el único sonido y mi cuerpo con mil sensaciones diferentes el único sentimiento además de placer complacido que quedó.

Escena acabada, hermanas mías, vayanse a leer la biblia después de esto:)

Me moví para acostarme a su lado, quedando recostada sobre su pecho desnudo mientras controlaba mi respiración.

- Te amo - alcé la mirada para observar como sus hermosos ojos negros se iban poco a poco devolviendo el color dorado que tanto doro

- Yo a ti - Susurré con una pequeña sonrisa dejando ahora un suave beso en la comisura de sus labios - pero creo que rompimos el sofá

- Ya me di cuenta - Secundó riendo un poco, risa a la que seguí. No me había percatado de ello hasta ver bien como claramente rompimos el mueble

Había sido la mejor experiencia.

Escuché mi teléfono sonar, así que gruñi cansada para alcanzarlo sobre la mesa que estaba frente al sofá, Carlisle soltó una leve risa pero solo cerró los ojos sin moverse, simulando descansar aún que un vampiro no podía hacerlo.

- ¿Hola? - pregunte confusa

- Necesitamos que vengas ya, ¡Urgencia de chicas! - escuché el grito de Kim haciéndome reír un poco

- Ah... - mire a Carlisle que me miró de reojo despreocupado - Bien, ya voy

- ¿Por qué suenas agitada? - preguntó ahora con su tono de voz coqueto - No me digas que estás con el doctor colmillos

- ¡Kim! - reí al mismo tiempo que Carlisle

- ¡Estás con el doctor colmillos! ¡Oh por los ancestros, Emily ven!

- Adiós, ahora voy - Me despedí cortando la llamada, sonrei viendo al rubio que me miraba divertido

- ¿Doctor colmillos? - preguntó sonriendo de misma manera

- Si - me límite a contestar para darle un casto beso

Ahora debía de ir a la reserva para ver lo que necesitan las chicas.

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top