Hayley estaba en su habitación acostada en su cama mientras veía la primera temporada de The Originals.

‘The Originals’ era uno de sus series favoritas al igual que ‘The Vampire Diaries’, Legacies, Teen Wolf, Harry Potter y Twilight.

Era muy fanática de series sobrenaturales, todo eso le atraería grandemente.

─ ¡HAYLEY! ─ el grito de su madre hizo generar un mueca en la cara de Hayley.

La adolescencia rogaba en su mente que su madre no la mandará a algún lado a comprar algo porque estaba entretenida viendo a sus vampiros favoritos.

─ ¿QUÉ? ─ Hayley devolvió el grito desde su habitación.

¡Nada!

Hayley soltó un suspiro frustrado ya que no era la primera vez que ocurría lo mismo con su madre.

Ella siempre la llamaba y cuándo Hayley contestaba su madre se quedaba sin hablar nada.

─ ¡HAYLEY! ─ de nuevo el mismo grito de su madre resonó desde la cocina.

Hayley gruñó ya que su madre interrumpía lo que estaba viendo con sus gritos.

─ ¿QUEEÉ? ─ gritó nuevamente Hayley impaciente.

¡Nada!

Enojada y con el ceño fruncido, Hayley volvió su atención hacía su televisión dónde mostraban a Hayley Marshall siendo secuestrada por las brujas.

Él golpe de la puerta de su habitación siendo abierta bruscamente interrumpió y asusto a Hayley.

─ ¿Por qué carajos no respondes cuándo te habló niña? ─ preguntó enojada su madre.

Hayley la miró con cara de ‘¿En serio me lo decís?’.

─ Mamá te respondí dos veces y no me hiciste caso ─ dijo Hayley.

Su madre relajó su expresión y suspiro.

─ Bueno. Necesito que vayas a comprar pan al negocio de la esquina ─ le dijo su madre.

Hayley hizo un berrinche al escucharla.

«¡Ya estuvo que no podré ver The Originals tranquila!». Pensó Hayley.

─ ¿Pero por qué yo?.

─ Porque yo te lo ordeno ¿Algún problema con eso jovencita? ─ la madre de Hayley se cruzó de brazos mirándola.

Hayley tragó saliva mientras negaba.

«Estúpida no soy». Pensó mentalmente Hayley.

Lo que menos quería era un chanclazo de parte de su madre por lo cuál se le levantó rápidamente de su cama, luego pausó su programa para verlo luego.

─ Toma, aquí tienes la plata, solo comprá un kilo de pan francés ─ dijo su madre dándole dinero.

Hayley asistió repetidas veces.

─ Bueno.

Hayley tomó su abrigo y se lo puso antes de salir de su casa. La adolescencia sacó su teléfono para entretenerse hasta que llegará a la panadería de la esquina.

Su trayecto fue tranquilo, tan tranquilo que no sintió ningún ruido de vehículos ni personas hablando.

De repente paró y guardo su teléfono, Hayley levantó su vista hacia dónde debería estar la panadería pero con lo que se dió fue con un bosque.

─ ¿Pero qué carajos...? ─ Hayley abrió a lo grande sus ojos mientras veía a todas partes.

Él pánico se apoderó de Hayley al hallarse sola en medio del bosque.

«¿Cómo miércoles llegue aquí?». Pensó confundida.

Hayley estaba segura de dos cosas en esos momentos, la primera era que algo realmente malo estaba pasando, la segunda era que debía salir del bosque lo más pronto posible.

Pero había un problema, ¿Cómo salía de un bosque si ni siquiera sabía dónde estaba la salida?.

Un ruido de una rama rompiéndose sacó de los pensamientos a Hayley.

La adolescente trago saliva mientras negaba rotundamente estar pasando eso.

«¡Seguramente estoy soñando!». Se dijo mentalmente.

La presencia de alguien detrás de ella la hizo temblar. Antes de que pudiera darse la vuelta sintió un terrible dolor de cabeza para luego sentir sus párpados pesados.

Sin poder evitarlo, Hayley cayó desmayada sin ser consientes de que varias brujas la rodeaban.

Sophie Deveraux sonrió al tener por fin a su alcance a la loba.

Deveraux junto a las demás sabían perfectamente que por medio de Hayley podrían recuperar nuevamente el barrio francés atrayendo así al hibrido original para que las ayudará a vencer a Marcel Gerard el actual auto-proclamado rey del barrio francés. 

Las brujas se llevaron a Hayley al cementerio de Nueva Orleans dónde yacia varios de sus ancestros muertos.

Sólo era cuestión de tiempo para que el hibrido original recibiera una carta y volviera a Nueva Orleans. Pensó Sophie Deveraux.

Sophie junto a las demás después de llevarse a Hayley al cementerio de brujas, empezaron a hacer sus experimentos con ella para confirmar que estaba embarazada del hibrido original.

[...]

Hayley miró sus pies sin tener nada mejor que mirar.

Ya ni recordaba cuántos días había pasado ahí desde que la secuestraron, ¿Tal vez 3 o 4 días?, No lo sabía con exactitud.

La ahora loba cambió su mirada hacía su vientre dónde según las brujas tenía un bebé.

Acarició la zona aún procesando el hecho de que estaba embarazada, si su madre la viera en esa situación, Hayley estaba muy segura que ella le daría varios chanclazos.

Hayley sacudió su cabeza quitando sus pensamientos mientras reía por lo que había pensado.

Todo eso había sido realmente loco para Hayley, al principio había enloquecido mentalmente cuando supo que por alguna razón había transmigrado al cuerpo de  Hayley Marshall.

Extrañaba a su madre y también estaba preocupada por ella, ¿Qué había sido de ella en su mundo?, Tal vez estaba muerta o en coma. Hayley deseaba saber que había pasado con ella luego de que las brujas la secuestraran.

Muchas cosas habían sucedido esos días que tuvo atrapada, primero: las brujas la secuestraron y apenas le daban comida decente, segundo: le habían hecho varias pruebas con su magia para confirmar el embarazo, tercero: le aplicaban pequeñas dosis de matalobos cuando intentaba golpear alguna bruja que volvía a hacerle algunas pruebas nuevas.

Hayley ya estaba arta de todo eso. Lo único que deseaba era que la sacarán de ese lugar rápido o enloqueceria por solo estar mirando la pared y sus pies.

Como si el destino la hubiera escuchado, dos brujas entraron al lugar y la sacaron llevándola a dónde estaba Sophie y un hombre de traje el cuál Hayley lo conocía perfectamente.

Hayley casi se va de espalda si no fuera por las dos brujas que la tomaron de sus brazos al ver a Elijah a unos pasos de ella.

Elijah miró a Hayley detenidamente al igual que Hayley a él.

─ ¿Quién rayos eres? ─ preguntó Hayley haciéndose la desconcertada ya que no podía decir que conocía perfectamente a Elijah, sería demasiado sospechoso.

Hayley trago saliva al ver que Elijah se le acercó quedando a pocos pasos de ella.

Ella realmente quería despertar si era un sueño, aún tenía la mínima esperanza de que lo fuera, los pocos días que pasó en ese lugar fueron realmente malos.

Hayley amaba con locura The Originals pero vivir todo eso realmente era una cosa realmente muy diferente porque ahí adentro no era nada ficción como en su mundo, allí era todo real.

─ Danos un momento por favor ─ le pidió Elijah a la bruja Sophie.

Las palabras de Elijah habían sacado un poco de sus pensamientos a Hayley cuando esté habló.

Sophie asistió alejándose de ellos junto a las demás brujas.

Hayley y Elijah entraron a la cripta donde habían tenido retenida a Hayley. Una vez que ambos estuvieron solos, Elijah fue el primero en hablarle.

─ ¿Te tienen aquí contra tu voluntad? ─ preguntó Elijah caminando de un lado al otro.

Hayley lo miró desde donde estaba sentada.

─ Me encontraron en el pantano y me atraparon, hicieron todas esas raras pruebas de bruja ─ dijo agachando su cabeza mientras miraba sus manos con nerviosismo ─ no es que entienda como pudo pasar esto, quiero decir... los vampiros están muertos, no pueden tener hijos ─ mencionó siguiendo las líneas de la verdadera Hayley.

─ Tal vez si supieras la historia de mi hermano, podrías explicar cómo fue ─ dijo Elijah acercándose a ella  ─ me permites ─ pidió permiso acercando su mano a Hayley.

Hayley se hizo para atrás.

─ ¿Qué estás haciendo? ─ le preguntó fingiendo estar desconcertada.

Elijah se sentó a su lado mirándola.

─ Relajante, si abres tu mente a mi te enseñaré ─ le dijo el original.

Hayley se quedó quieta e hizo lo que el original le dijo.

─ Al principio, nuestra familia era humana, hace mil años, ahora ─ en la mente de Hayley apareció una escena de Rebekah cuando era humana junto a Henrik corriendo a ver Elijah y Klaus en un duelo de espaldas ─ aunque nuestra madre incursionó en las artes oscuras, en realidad éramos solo una familia tratando de sobrevivir en un momento en que era bastante difícil hacerlo ─ una imagen de Klaus venciendo a Elijah apareció en la mente de Hayley ─ Y, para bien o para mal, estábamos felices. Sin embargo, hasta que una noche nuestro hermano menor fue asesinado por la mayor amenaza de nuestra aldea ─ la imagen de Klaus cargando a Henrik muerto estremeció a Hayley aún sabiendo de antemano lo que pasaría ─ Hombres que podrían transformarse en lobos durante la luna llena. Nuestra familia estaba devastada, nada más que Niklaus. Desesperado por proteger al resto de nosotros, nuestro padre obligó a nuestra madre a invocar su magia negra para hacernos más fuertes ─ la imagen de los Mikaelson haciendo originales apareció ─ así, nacieron los primeros vampiros. Pero con esta velocidad, esta fuerza, esta inmortalidad, vino un hambre terrible. Nadie sentía este hambre más que Niklaus ─ Hayley vio la imagen de Klaus matando a una persona ─ cuando mató por primera vez supimos quien era realmente ─ la imagen de Klaus rompiendo la maldición de los hombres lobos y Elijah intentando ayudarlo pero siendo retenido por Mikael se proyecto en la mente de Hayley, ella hizo una mueca al escuchar los recuerdos de Elijah cuando Mikael dijo ‹es una bestia, una abominación› en dirección de Klaus ─ No solo era un vampiro...

Elijah quitó sus manos de Hayley quien soltó un suspiro de alivio.

─ Era también un licantropo ─ terminó la oración de Elijah ─ así es como funciona la maldición, no se activa hasta que tomas una vida ─ mencionó Hayley.

─ Niklaus fue el resultado de una indiscreción que nuestra madre había ocultado a todos, un amorío con un licantropo justo como tú ─ dijo Elijah mirando a Hayley quien en ese momento se dió cuenta de ese gran detalle, Hayley entró en pánico dentro de si porque no sabía como la pasaría en la próxima luna llena ─ enfurecido por esta traición, mi padre obligó a mi madre hacer un hechizo para suprimir el lado lobo de Klaus negando cualquier conexión con su verdadero yo ─ contó el honorable.

Hayley mordió sus labios mientras maldecía internamente al ser que la trajo a ese mundo tan peligroso.

Ella había leído varios fan-fiction de chicas que reencarnaban en un personaje de sus series favoritas y eran poderosas y podían con todo pero Hayley no se sentía nada igual, ella era una simple humana asustadiza en el cuerpo de una mujer loba. No era nada de valiente como las chicas que se mostraban en los fan-fiction.

─ Tú padre era un cretino ─ le dijo Hayley una vez que salió de sus pensamientos a Elijah logrando que esté se riera y causando una sonrisa sincera en Hayley desde hace muchos días ─ soy Hayley por cierto ─ se presentó dándole la mano a Elijah ─ tal vez ya sabías mi nombre si ibas a contarme toda la historia de tu vida. Yo se él tuyo, tú familia es legendaria, tu hermano es un loco psicópata con quién dormí, clásico de mi.

─ No puedo excusar su compartimiento pero... debes entender que nuestro padre lo cazó, nos cazó por siglos, cada vez que encontrábamos un momento de felicidad éramos forzados a huir incluso aquí en Nueva Orleans dónde fuimos más felices ─ dijo con melancolía─ no mucho después que Niklaus rompiera el hechizo que le prohibía volverse un híbrido mató a nuestro padre, pensé que eso lo haría feliz pero está más enojado que nunca ─ agregó mirando a Hayley ─ me preguntó si quizás ese bebé pueda ser el camino para que mi hermano tenga felicidad, una forma de salvarse así mismo ─ mencionó.

Hayley iba a abrir su boca para hablar pero una voz conocida la interrumpió.

─ Me alegro que te sientas así porque necesitamos tu ayuda ─ mencionó entrando a la cripta Sophie.

─ ¿Qué es lo que precisamente quieres y qué tiene ver con esto está mujer? ─ preguntó Elijah hacia la bruja.

Hayley los observo manteniéndose callada ya que no tenía idea de que hacer o decir.

─ Queremos sacar a Marcel y a sus vampiros de esta ciudad ─  respondió Sophie ─ Klaus es la clave. Todo lo que Marcel sabe lo aprendió de Klaus, Marcel confía en él, lo admira no verá llegar la traición ─ agregó confiada.

─ Como seguro sabes a mi hermano Niklaus no le gusta que le den órdenes ─ dijo Elijah mirándola.

─ Por eso te trajimos ─ aclaró ella ─  Marcel sacó a los licantropos de la cuidad hace décadas. ¿Realmente piensas que le dará la bienvenida a un bebé híbrido al vecindario?, Convence a Klaus de ayudarnos y nadie sabrá del nuevo miembro de la familia original ─  dijo la bruja.

Elijah levantó sus cejas ─ Eso suena demasiado a como un chantaje ─  gruñó el original.

La loba que los escuchaba rodó sus ojos al escuchar a Elijah.

«Lo es». Pensó Hayley.

─ Ya te dije, estoy desesperada ─ mencionó Sophie mirándolo fijamente.

Hayley mordió sus labios para no gritar miles de blasfemias hacia todos, sobre todo a la bruja Sophie por tenerla en ese horrible lugar.

─ Bien... ya tengo un trabajo a mi medida ¿no es así? ─ el Mikaelson sonrió de mala gana.

Hayley había vuelto a estar en la cripta sola después que Elijah se fuera aunque no sin antes despedirse y prometiendo volver.

Las palabras de Elijah un poco la tranquilizaba, después de todo gracias a él Klaus aceptaba al bebé.

¡CAPÍTULO 1!

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EDITADO
01/11/23