𝟬𝟱. ━ 𝐹𝐴𝑀𝐼𝐿𝐼𝐴 𝑅𝐸𝐴𝐿

..

Ya todos estaban en sus posiciones, Helena y Hugo a cada lado de Ben, la chica traia puesto el vestido junto con su cabello hecho en ondas, resaltando su cabello dorado.

Hugo en cambio usaba un traje en color verde lima, junto con una camiseta blanca por debajo, Ben usando uno en azul royal junto el logo familiar.

Cordelia en cambio, estando detrás de Helena, usaba un vestido en color rosa en corte recto, ambas chicas destacando de entre las demás.

Algunos padres estaban posicionándose para poder ver el acto, sonriendo cada que encontraban a sus hijos.

La música llenó el lugar, iniciando el baile.

Ma cherie Mademoiselle—Ben salió de detrás, con un pañuelo en su antebrazo.

It is with deepest pride and greatest pleasure, that we welcome you tonight

And now, we invite you to relax— siguió cantando mientras se acercaba a saludar a los que estaban cerca de él—. Let us pull up a chair, as the dining room proudly presents...

Your dinner!

—. Br our guest. Be our guest—cantaban los demás a coro, teniendo una servilleta en su antebrazo, al igual que Ben, simulando ser meseros—. Put our service to the test. Tie your napkin 'round your neck, cherie. And we'll provide the rest.

—. Soup du jour. Hot hors d'oeuvres—cantando y bailando sincronizados, escuchando los gritos de emoción de los demás—. Why, we only live to serve. Try the grey stuff, It's delicious!. Don't believe me? Ask the dishes.

Ben al estar alejado, fue alcanzado de los chicos, bailando junto con el—. They can sing, sing sing. They can dance dance dance. After all, Miss, This is France.—rapeando a coro—. And the dinner here is never second best. Go on— lanzando por último todos sus servilletas, las chicas bailando detrás—. Unfold your menu. Take a glance and then you'll. Be our guest. Oui, our guest. Be our guest.

Todos volvieron a sus posiciones, uniéndose de nuevo—. We tell jokes. I do tricks with my fellow candlesticks. And it's all in perfect taste. That you can bet. Come on and lift your glass— todos levantaron sus puños al aire, teniendo la otra mano en su espalda—. You've won your own free pass. To be our guest.

—. If you're stressed. It 's fine dining, we suggest— canto por último Ben.

—. Be our guest. Be our guest—teniendo una sonrisa en su rostro fue que terminaron de cantar—¡Be our guest!





—¡Mamá!—exclamó Helena, corriendo a los brazos de Rapunzel.

La mujer, que estaba de espalda, fue sorprendida por los brazos de su hija menor rodeandola—. ¡Cariño! ¡Mirate, que hermosa! ¡Te he extrañado tanto!.

Helena río en cuanto su rostro fue llenado de múltiples besos por parte de su madre—. Yo también te extraño mamá.

Ambas rubias seguían abrazadas poe un buen rato, hasta que una tercera voz se unió a ellas—¿Y no habrá ningún abrazo para mi?

Helena gritó en emoción cuando escuchó a su padre, mirando como este estaba con los brazos extendidos esperando por ella.

—. Mi rayito...—habló Eugene abrazando a su hija y dando una vuelta con ella en brazos.

—. Hola papá—dijo Helena, mirándolo con una sonrisa.

—. Esa es mi niña, qué espectáculo hicieron y acá entre nosotros... tu resaltaste entre todas—murmuró, guiñandole el ojo a su hija.

—. Eugene—dijo Rapunzel, mirando a su esposo.

—. Solo le decía a mi rayito de luz que se miraba espectacular—hablo Eugene, sonriéndole.

Rapunzel usaba un vestido en color morado, con un escote recto y resaltando un collar con un sol de colgante, su cabello peinado junto con algunas flores en este, mientras que Eugene usaba un traje formal en color negro, pero sin el saco, quedándose solo con el chaleco puesto y la insignia del Reino.

—¿Y dime? ¿Los nuevos son amigables?—preguntó Eugene, mirando a su hija mientras quedaba en medio de ambas mujeres.

Helena asintió con una sonrisa—. Ellos lo son papá..—respondió.

—¿No han causado problemas?—preguntó Rapunzel.

Helena negó, sonriendo en cuanto el camarógrafo se puso enfrente de ellos para tomarles una foto familiar.

—. Si mis ojos no me mienten, tengo a mi sobrina enfrente de mí—bromeó Naveen acercándose con Tiana y Hugo.

La rubia rió, acercándose a los mencionados y abrazados—. Hola tío, tía que bonita se ve—hablo mirando a Tiana.

—. Digo lo mismo de ti querida—dijo Tiana sonriendo.

—¿El crucero tan rápido te aburrió?—preguntó en broma Eugene, saludando a Naveen con un apretón de manos.

—. Digamos que eran las mismas canciones, Tia y yo ganamos por octava vez el concurso de baile—respondió Naveen riendo, pasando el brazo por la cintura de su espalda.

—. Debieron acompañarnos, se sintió aburrido el concurso sin nuestros mejores contrincantes—comentó divertida Tiana.

—. Nos hubiera gustado, pero la coronación de Marcos es en unos meses y todavía nos falta mucho por organizar—Rapunzel tenía una sonrisa de emoción en su rostro.

—. Hablando de...¿Y Marcos?—preguntó Hugo.

—. Debió llegar hace rato—respondió Eugene.

Hugo volteó a mirar a la rubia, Helena solo se encogió de hombros al no encontrar todavía a su hermano entre la multitud.

—. No se ustedes, pero yo iré por esa copa de champán ¿Reinas, gustan algunas?—preguntó Naveen.

—. Prefiero un coctel querido—respondió Tiana.

—. Yo también quiero un cóctel—secundo Rapunzel, siguiendo su plática con Tiana.

—. Yo te acompaño, dejemos a nuestras mujeres hablar—habló Eugene, dejando un beso en la mejilla de su esposa para seguir a Naveen.

Mientras ambas mujeres seguían hablando, Helena buscaba con la mirada una cabellera castaña, intentando encontrar a su hermano con ayuda de Hugo.

Al fijarse en una esquina, se encontró con dicha cabellera, corriendo en dirección a esta—¡Marcos!

El mencionado, quitó su mirada de su celular, buscando con la mirada a la persona que le hablo, al conectar la mirada con su hermana menor, sonrió.

El chico dio unos pasos hacia atrás cuando Helena llegó a abrazarlo—. Si que me extrañabas..—bromeó el chico.

—. Por supuesto que no, son apariencias—bromeó Helena, soltándose del abrazo—. ¿Qué tal va todo?

—. Na, no me quejó—respondió Marcos con una sonrisa—. Todavía me falta mucho para aprender de mamá y el cómo lleva el reino.

Helena asintió—. Lo harás bien, eso te lo aseguro.

Marcos asintió—. Por supuesto que si, princesa.

La chica achicó sus ojos en emoción, ya que Marcos era quien siempre la llamaba así después de su padre.

Ambos hermanos decidieron regresar con su madre y Tiana, caminando entre los alumnos, llamando la atención de uno que otro por su increíble parecido.

Marcos tenía la mayoría de los rasgos físicos de Eugene, como su color de cabello, pero mantenía los ojos verdes de Rapunzel, mientras que Helena era la copia exacta de Rapunzel.

Eugene presumía a sus hijos cada que tenia la oportunidad, ya que ellos junto a su esposa son su mayor tesoro.

[...]

—¿Yo también puedo tomar champán?—preguntó Helena, mirando la copa de su hermano y bajando su mirada hacia su copa con jugo de manzana.

—. No, estás pequeña todavía—respondió Eugene tomando su tercera copa.

Helena frunció su ceño, abultando sus labios en cuanto miro la sonrisa burlona de su hermano.

—. Cuando cumplas 18 podrás probarlo cariño—dijo Rapunzel, apretando la mejilla de Helena y guiñandole el ojo.

—. ¿Qué? No, no, no, mi hija seguirá muy pequeña para probarlo—Eugene frunció el ceño, abrazando sobreprotector a Helena.

—¿Y por qué Ben si puede tomar champán?—preguntó Hugo, él al igual que Helena, tenía una copa con jugo de manzana.

—. Porque es un brindis por su coronación, y también porque Adam le dio permiso poe esta vez—respondió Naveen.

—. Que mal por ustedes—comentó Marcos, riéndose de Hugo y Helena.

—. Solo porque tengas 20 años, tienes derecho de burlarte—murmuró la chica, fulminando con la mirada a su hermano.

Marcos le siguió la corriente, ambos empezando a pelear entre sí, Eugene en vez de detenerlos, se les unió.

Rapunzel solo negó con la cabeza al ver a su esposo e hijo pelear entre sí, dejando un copa en la pequeña mesa y con un pequeño carraspeo fue que se detuvieron.

La mujer sonrió al verlos parar y volver a estar como si no hubieran peleado.

—. Dominado—susurró Naveen, burlándose de Eugene, pero al sentir la mirada de Tiana sobre él, sonrió nervioso.

❈──────•°•°•❀•°•°•──────❈

El sol ya habia bajado, algunos invitados ya se habían retirado, mientras que otros decidieron quedarse.

Los padres de Hugo y Helena siguieron platicando junto a los de Ben, los tres pares de Reyes se consideraban familia.

Siguiendo con la rubia, esta se encontraba con Evie explicando sobre el Croquet, junto con Cordelia.

—. Vuelve a intentarlo de nuevo, pero ahora con un poco más de fuerza—dijo Helena, posicionando una bola enfrente de Evie para que le volviera a pegar.

La chica lo volvió a intentar, pegándole a la bola con más destreza y haciendo que la bola llegue más lejos.

Evie chillo en felicidad, presumiendole a Mal, la cual estaba a su lado mirando como Evie jugaba.

Las cuatro chicas tenían una plática amena, mientras que Hugo estaba con Carlos, Jay y Ben cerca de la mesa de postres.

—. Soy yo, o el hijo de Peter Pan, no deja de verte—susurró Evie, acercándose a Helena mientras que Cordelia ayudaba a Mal.

Helena miro de reojo a donde Evie le señalo, encontrándose con la mirada de Nolan, quitando la mirada y haciendo una pequeña mueca.

—. Debe estar mirando como juegan, tienen mucha habilidad para el juego—bromeó Helena, intentando cambiar de tema.

Evie sintió la incomodidad de la rubia por lo que dijo, asintiendo mientras volvía al juego.

Helena suspiró para sí, acomodando su cabello en nerviosismo.

Antes de que la chica pudiera posicionarse para su turno, el grito de la Reina Leah, madre de Aurora, la detuvo—¡Tu!.

La mayoría volteó hacia las tres mujeres—.¿Q-Que haces..aquí?...Tan joven..—susurró mirando a Mal.

Antes de que Helena pudiera acercarse, fue detenida por Cordelina y escuchando como Ben intentaba razonar con la reina.

—¿Lo dices enserio Ben? ¡Nos destruiran!—gritó alzando los brazos y volteando a mirar a los demás reyes—.¿No lo recuerdan? Manzanas envenenadas y esa magia. Su magia—habló, señalando a Mal.

—. Por culpa de tu madre, yo no pude estar con ella—dijo entre pequeños sollozos.

—. Mi madre también pasó por lo mismo y mis abuelos nunca actuaron como está actuando en este momento... De forma tan insolente—respondió Marcos, acercándose a ellos.

Helena apretó sus labios, sabiendo que Marcos era el más boca suelta y respondón de los dos, algo que habían heredado de su padre.

—¡¿Insolente?! Solo digo la verdad—dijo la reina Leah, sollozando más fuerte y buscando consuelo en su nieta.

—. Verdad o recuerdos que no suelta. Mejor superelos que eso no le traera nada bueno, creame—dijo por último, tomando el último trago de su copa.

Helena solo miro de reojo a su hermano, el cual le sonrió en apoyo, confiando en lo que ella haga.

—. Lo lamento tanto..yo—hablo Mal, intentando acercarse a ella, pero un empujón por parte de Chad la devolvió para atrás, siendo sostenida por Ben.

—. Vete, ella no te quiere cerca—hablo Chad.

—. No te metas en esto Chad—habló Ben.

—¿Qué? Fueron criados por su padres Ben—el rubio pasó su mirada por los otros tres—. ¿Bondad, alegría? No juegues con eso Ben.

—. Le robaste el novio a otra chica—habló señalando a Mal.

—. Ey, ey..—Ben intentó frenar a Chad.

—. A ti te encanta robar—mencionó señalando a Jay—. Y a ti, solo te importa engañar y el dinero—señaló esta vez a Evie que junto con Carlos detenían a Jay.

—. No me sorprendería que también quisieras robarle el novio a alguien—mencionó por último.

—. Mira quién lo dice Chad. Si no mal recuerdas tu te aprovechas también —preguntó Helena mirando a Chad.

—.¿De qué hablas?—preguntó Chad intentando no ponerse nervioso—. No sabes de qué hablas.

—. ¿Tu no fuiste quien robo el premio del año a Hugo? ¿O que se aprovecha con ayuda de Audrey, de las chicas para que hagan tu trabajo?—volvió a preguntar, acercándose al rubio.

Eugene que miraba todo, tenía una sonrisa de satisfacción en su rostro al ver la valentía de su pequeña, aun cuando sentía un dolor en su pecho, como si le avisara que vendría algo peor.

—. Callate Helena—dijo Audrey, llegando con la rubia—. No sabes nada.

Helena miro con una ceja alzada a la chica—. ¿O no recuerdan la vez que los encontré besándose no es nada?—preguntó.

Audrey se puso roja de la vergüenza, pero sonriendo al recordar con que podía contraatacar a la chica—. ¿Y no fue de la misma forma en que encontraste a Nolan besandose a alguien más? O cierto.. Fue de otra forma..más vulgar.

Los jadeos y murmullos de sorpresa no se hicieron esperar, Helena solo pudo apretar sus puños aguantando las ganas de irse a los golpes.

—¡Cierto! No lo recordaba, ¿Con quien había sido? ¡Con Arianne!—exclamó con falsa sorpresa Chad, riéndose de la chica.

Todos seguían mirando el siguiente movimiento de algún otro, mientras que Ben tenía a Mal con él, siendo retenido por esta para no irse contra Chad.

—¿Y qué? ¿Qué harás ahora? ¿Llorar?—preguntó burlón hacia Helena.

—. Ella no hara nada, pero yo sí—hablo Hugo detrás de Chad, golpeándolo en la mandíbula ante la sorpresa del rubio.

—¡Chad!—exclamó Audrey preocupada, siendo alejada por su abuela.

Hugo en un movimiento rápido, se subió arriba de Chad, volviendo a golpearlo unas cuántas veces más, antes de ser alejado por su padre y tío.

Helena que seguía mirando todo en silencio, solo pudo ocultarse en el pecho de su madre cuando esta la rodeo con sus brazos, preocupada por lo que escuchó hace unos momentos.

Nolan que miraba todo a la lejanía, sintió sobre sí la mirada de Marcos sobre él, pero no era una mirada nada amistosa, el odio y las ganas de querer golpearlo se sentían a través de esta.

Los cuatro chicos de la isla no perdieron la oportunidad para alejarse de ahí, intentando ser detenidos por Ben pero sin poder lograrlo.

















—. Helena, mi niña... todo está bien, mamá está aquí —habló Rapunzel, teniendo a la chica entre sus brazos.

Se habían movido de lugar hacia la sala real, solo estando ella junto a Tiana, la cual estaba en la cocina preparando un Té para la chica.

—¿Es cierto lo que dijo él?—preguntó Rapunzel con preocupación—¿Esa es la verdadera razón?

Helena asintió—. Lo odio mamá, odio todo—musitó la rubia—. Rompio sus promesas y solo me dejo por Arianne. Esa fue la razón por la que terminé mi compromiso con él— Helena seguia hablando entre sollozos.

Rapunzel siguió acariciando el cabello de la chica, sintiendo sus ojos llenarse de lágrimas al saber que su niña había pasado por algo asi.

La mujer se sentía mal por haber confiado en la respuesta que Helena le dio cuando supo de su rompimiento con Nolan, sabía que algo más había pasado pero se confió.

Ahora entendía el enojo de Hugo, su ahijado después de la noticia, el cómo reaccionaba hacia el hijo de Peter y el cómo se volvía más protector con Helena.

—. Lo siento, se que no debí ocultarlo, pero no quería arruinar las cosas con los demás —hablo Helena, alzando su cabeza del pecho de su madre.

—. Y no lo arruinarias mi niña, pasaste por eso tu sola, perdóname a mi por no haber estado ahí—dijo Rapunzel, limpiando las lágrimas del rostro de su hija.

Helena asintió, volviendo a abrazar a su madre, sintiendo como esta dejaba besos en su coronilla.

Tiana llegó a la sala con una bandeja y tres tazas de Té en esta—. Ten querida, esto te ayudará a sentirte mejor.

Helena sonrió cuando tuvo la taza en sus manos, su garganta sintiéndose mejor cuando el líquido entró en contacto con su paladar.

La chica se sentía mejor en compañía de ambas mujeres, aunque la preocupación de que había pasado con Ben seguía ahí.

La puerta siendo abierta la sacó de sus pensamientos y al ver a su padre entrar, no la detuvo para ir hacia él, corriendo hacia sus brazos.

Eugene sintió como el enojo salía de su cuerpo al sentir como su hija iba en busca de sus brazos.

El aroma a rosas del champú que la chica usaba llegó a su nariz—. Papá está aquí, princesita, nada malo te pasara—susurró Eugene.

Marcos decidió acercarse a su madre, recostando su cuerpo en el sillón y dejando su cabeza en el regazo de esta.

Tiana le dio una última mirada a Rapunzel, decidiendo darle espacio a la familia y saliendo en busca de la suya.

Eugene alzó su mirada, conectandola con su esposa y con un asentimiento, le aseguro que ya había arreglado todo.

Nada ni nadie, volvería a lastimar a su rayito de luz.

[...]

—¡Ay mamá!—exclamó Hugo, intentando alejarse de Tiana, la cual tenía en sus manos un algodón con alcohol.

—. Si te dejaras de mover, no te dolería—dijo Tiana, sonriendo al ver a su hijo sufrir.

—. Disfrutas mi sufrir—comentó Hugo, dejándose caer contra el respaldo del sillón y haciendo reír a Helena, que seguía en los brazos de su padre.

—. Sí cariño, como tu digas.
—respondió Tiana, haciendo reír a los demás, Hugo solo pudo bufar ante la respuesta de su madre con una pequeña sonrisa.


★;; cambie algunas cosas, muak.
Funa a Nolan, Arriba Hugo.
Yo si queria que Marcos le diera putazos a Nolan pero primero los modales JAJSJ
B

arbs.

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