━FESTEJO━

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──Estoy realmente orgulloso de ustedes. ─escuche las palabras de Gai-sensei. ──. Ahora que son chunin las misiones serán cada vez más difíciles.

──No se confíen del todo solo por ser chunin. ─esta vez fue Asuma quien hablo. ──. Tendrá que seguir entrenando para ser más fuertes. 

──No olviden que pase lo que pase, tienen que confiar en sus camaradas. Ayudarse mutuamente los ayudará en todo sentido. ─cerré mis ojos al escuchar a Kurenai. 

Después de que todos se enteraran que sus pupilos se convirtieron en chunin, exceptuando al Hyuga y a mi que somos Jounin. Nuestros queridos sensei's nos trajeron al BBQ para celebrarlo todos juntos. ─al BBQ a petición de Chouji y sus lloriqueos de que necesitaba comer─

──¿Algunas palabras que quieras dar, Kakashi? ─le preguntó Gai mirando al platinado. 

Él estaba sumergido en su lectura sin prestar mucha atención a lo que sucedía a su alrededor. No lo culpo, yo también me he sumergido en la lectura cuando nadie me presta atención.

──Humh. Bien hecho, chicos. ─balbuceo sumergido en su lectura.

──Cuando está en su lectura nada le importa a su alrededor. ─susurró Sakura conociendo a su sensei. ──. Aún así. Estoy muy orgullosa de mi misma y me alegro que todos hayamos pasado el examen. 

──Yo aún no puedo creerlo. ─dijo Ino. ──. Realmente soy un chunin. Ya estamos a tu par, ¿eh Shikamaru?

──Qué fastidio. ─recargo su rostro en la palma de su mano. 

──¡¡Comida!! ─Choji solo se enfocaba en la carne en la parrilla. 

──Lo bueno es que nosotros no pagamos. ─murmuró Tenten al verlo mientras todos los adultos revisaban su billetera, en especial Asuma. 

──Aun así. Es sorprendente que Neji sea el único en convertirse en Jounin sin necesidad de ser chunin. ─comentó Ino. 

──Por algo fue el mejor de su generación. ─dijo Sakura con su mirada en su comida.

──Hmp. ─el Hyuga solo le daba igual lo que decían.

──Y-yumei también es Jounin. ─dijo Hinata jugando con sus dedos. ──. Y la única mujer en serlo de nuestra generación. 

──Eso es cierto. ─afirmó Sakura. 

Yo solo estaba cruzada de brazos mirando mi plato lleno, no tenía apetito alguno. 

──Oye, Yumei. Di algo, no seas tan callada. ─miré a Kiba quien fue el que me habló. 

──Qué estupidez. ─regresé mi vista al plato.

──Bueno. De cierta forma me preocupaba un poco que dijera algo que no fuera eso. ─dijo Tenten con una gota en su cien.

──Sé que eres muy antipática, Yumei. ─solo me limite a cerrar mis ojos al escuchar a Ino. ──. Y todos respetamos eso. Pero por lo menos muestra un poco de felicidad por tus compañeros vivos que lograron ascender. ¿Acaso no estuvieras feliz si Kenzo o Suki lo hicieran? 

Abrí mi ojo mirando a la rubia fríamente. Ella pasó saliva al darse cuenta de lo que dijo. 

Lo único que se sentía era el ambiente tenso que se creó por sus estúpidas palabras. Ni siquiera los sensei's hallaba la forma para que dejara de matar con la mirada a la chica, incluso Chouji dejó de comer por miedo al ambiente y el Hatake guardo su libro mirando a los demás, en especial a Gai para que interviniera.

──Y-yo no quise decir eso. ─dijo nerviosa y asustada. ──. Perdóname. Fui muy lejos esta vez, Yumei.

──Pero lo dijiste, Yamanaka. ─mi voz fría la hizo estremecer. ──. Y no tengo necesidad de ello. Ellos saben que estoy feliz por su ascenso. ─dije secamente sin quitar mi mirada de encima, nadie sabía cómo hacer que el ambiente cálido regresara. ──. Y no es que sea antipática, es simplemente que no me...

──¡Yumei! ─me quedé callada al escuchar una voz a mi espalda sintiendo una mano despeinar mi cabello. ──. ¡La pequeña antipática! 

──Tu cállate, maldito tomate. ─dije quitando la mano de Banri. ──. ¿Qué haces aquí? 

──Solo pasaba por aquí y te vi aquí apunto de matar a alguien. Así que pensé que no estaría mal saludar a la pequeña Yumei. ─lo mire mal, pero lo que si note fue como las personas se relajaban volviendo a su ambiente cálido.

──Como si a mi me importara verte. ─dije mirando a otro lado más relajada.

──Claro que te importa verme. ¿Quién no moriría por ver este hermoso rostro? ─rodé mis ojos. ──. Por cierto. Hola chicos. ─saludo a los presentes. ──. Felicidades por su ascenso. ─dijo mirando a los chicos. 

──Gracias, Banri-sensei. 

──¿Te quedas? ─preguntó Asuma en un intento por mantenerme a raya y no matar a su pupilo.

──No. Tengo algunas cosas que hacer. ─dijo despeinando mi cabello. ──. De igual modo me hubiese encantado acompañarlos. ─entre cerré mis ojos mirándolo. ──. Los veo después. ─me miró. ──. Y tú deja de ser tan antipática. ─pellizco mi nariz. 

──Ya lárgate odioso. ─le di un manotazo para que dejara mi nariz en paz. 

──Por dentro se que me amas. 

──Sí, ajá, lo que digas. ─mire a otro lado, él sonrió alejándose de nosotros. Lo mire desaparecer por la puerta y no pude más. ──. Maldito idiota. ─dije levantándome del lugar, sabía que solo vino para que lo siguiera. 

──Yumei, ¿a dónde vas? ─ignore a Tenten.

──Déjala. ─escuche la voz de Asuma. ──. Solo Banri es el único que puede tratar con ella.

──Y pensar que Yumei lo odiaba. ─dijo Kurenai siendo lo último que escuche antes de salir del local.

Sabía a donde tenía que ir para buscarlo y no me costó mucho llegar a el lugar donde hicimos la prueba de los cascabeles. 

──Así que viniste, ¿eh? ─dijo sentando debajo del árbol donde siempre estaba cuando nos entrenaba. ──. Sabía que no me ibas a abandonar.

──Solo vine porque no quería estar con todos ellos. ─aclaré sentándome a su lado. ──. No te creas importante. 

──Sabes muy bien que eso no es cierto. Tuve que intervenir antes de que mataras a Ino. ─lo mire de reojo. ──. Además, no quieres estar en el mismo lugar que el Nara.

──No sé a qué te refieres con eso. ─evadió su mirada mirando el sol estar por esconderse. ──. Y hubiera sido mejor no haber interrumpido mi matanza.

Él soltó una risita.

──¿En serio crees que tu hermoso ex sensei no lo notaría? Crees que no notaría la falta de tu brillo en tu ojo. ─baje mi cabeza un poco. ──. Me dirás que sucedió entre los dos. 

Me quedé en silencio por unos minutos, esperando a que mi boca se abriera y soltara todo lo que he estado retenido en mi pecho. Necesitaba hablar con alguien y no si él era la mejor opción, pero es lo único que tengo ahora.

──Yo... me declaré al Nara hace unos días. ─solté sintiendo el nudo en mi pecho deshacerse. ──. Él me dijo que estaba confundido. Que le atraía Temari. 

──Pero te dijo que la amaba o le gustaba. ─negué con la cabeza. ──. Solo te dijo que le atraía o que le estaba comenzando a atraer.

──Dijo que creía que le comenzaba atraer. ─dije mirando a Banri. ──
 ¿Pero eso qué tiene que ver? Al fin de cuenta, solo me rechazo. 

──No, cariño. Él no te rechazó. ─entre cerré mis ojos ante eso. ──. O él te dijo "no correspondo tus sentimientos" o simplemente te dijo "No". ─me quedé callada sin saber qué decir. ──. Él simplemente estaba confundido porque tú te le declaraste de la noche a la mañana sacándolo de onda al conocer tu actitud. Cualquiera en su lugar estaría confundido y más si comienza a conocer a mujeres que son más habladoras. Para él fue muy repentino todo eso y más si le arruinas todo su plan. 

──¿Plan? ¿De qué hablas? ¿A qué te refieres con eso? ─pregunté con mucha confusión en mi cabeza. 

──No debería decirte esto, pero... Shikamaru vino conmigo para pedirme autorización para poder declarar sus sentimientos hacia a ti. ─abrí mis ojos sorprendido de ello. ──. No solo a mí, sino también a tu hermano. Él quería decírtelo después de los exámenes y el que tú te lo avientes tan repentino lo dejo en un estado de confusión. 

──Entonces porque dijo que le atrae Temari. Porque no solo correspondió mis sentimientos. ¿Por qué me mintió? ─murmure lo último sin tener certeza de que eso sea real. 

──Te lo digo por experiencia propia. Que cuando la mujer que te gusta es muy antipática, haces todo por enamorarla. Y sabes que ella por dentro comienza a sentir algo por ti, pero no lo demuestra mucho. ¿Sabes cual confuso es que ella de una noche a la mañana se te declare? Obviamente es mucha, porque la imagen que tienes de ella es completamente distinta a la que mostraba. En toda esa confusión tu cabeza se pregunta, ¿esa es mi chica? ¿Dónde quedó mi pequeña antipatía? Y como lo he vivido en carne propia, la confusión en ocasiones es tanta que no se puede procesar todas las palabras que dijo en ese preciso momento y la única solución par salir y pensar con claridad es mentir. En este caso él dijo lo primero que se le le vino a la mente. 

──Y si hubiera sido al revés. ¿No crees que yo sería la que estuviera en shock? ─pregunté negando creer esas palabras.

──No. Definitivamente no. ─dijo con una sonrisa. ──. Porque tú ya estabas acostumbrada a escuchar todos los días sus palabras y sus muestras de afecto. Para ti, una chica antipática, eso solo sería como algo de todos los días. 

Me quedé en silencio al saber que tenía razón. Ya estaba acostumbrada a los besos, abrazos y palabras cursis que el vago me decía, incluso todos pensaban que eramos novios y eso a mi me daba igual. Tal vez para él, eso no le daba igual y quería hacerlo oficial de una forma que pensaba que sería especial, pero yo llegue de la nada diciendo palabras que jamás en su vida se imagino que diría. Si estuviera en su lugar también diría algo como eso. 

También fui una estúpida que no paró a pensar con claridad las cosas. Yo sabía que él jamás le atraería a otra chica, porque siempre estamos juntos las veces que nos separamos es para estar con nuestros equipos y el que estaba hablando con Temari era solo por los exámenes o simplemente no me importaría lo que hablarán porque yo hablo con el Hyuga y eso no significa que me guste. 

Porque ambos sabemos que jamás estaríamos o miramos a otras personas de distinta manera. Por el simple hecho de que nos tenemos el uno con el otro. 

──Creo que tienes razón. ─solté abrazando mis piernas mirando el atardecer. ──. Creo que exagere las cosas en todos los sentidos posibles. 

──O simplemente esa es tu manera de reaccionar ante eso. ─lo mire de reojo. 

──Cuando dijiste que lo has vivido en carne propia, ¿a qué te refieres con eso? ─él soltó una risa.

──Pues, veras. ─soltó una risita. ──. Siempre fui muy encantador con las mujeres, pero había una a la cual nunca le interese. Tú y ella poseen la misma personalidad y al paso del tiempo sin darme cuenta me enamore de ella, y ella de mis estupideces. Y cuando menos lo imagine ella se me declaró. Me quedé confuso y solo dije "tengo hambre" y me fui. Claramente me dio una golpiza y cuando me di cuenta de que la amaba me fue difícil reconquistarla. ─en todo ese tiempo mantuvo su sonrisa de estúpido. ──. Pero mira como son las cosas hoy en día. Ella ahora es mi esposa. 

──Aún no entiendo qué es lo que Kata te vio. ─él me miró.

──Eso me lo pregunto diariamente. Cada vez que miro sus ojos. ¿Cómo ella pudo ver algo en mi? ─soltó un leve suspiro. ──. Pero ahora estoy felizmente casado. Y nos reímos de aquellos tiempos.

──Sonaste como un abuelo. ─dije mirando el sol esconderse. 

──¡Oye, hieres mis sentimientos! ─me despeinó mi cabello.

──Que tu cabello sea un espantapájaros con columpios no significa que yo quiero lo mismo. ─intenté separarme, pero me atrapo en sus brazos con fuerza. ──. Tienes tres segundos para soltarme.

──Te echaba de menos, Yumei. ─deje de forcejear al escuchar su suave voz. ──. Los echo de menos. ─susurró apoyando su cabeza con la mía.

Mi ojo se entrecerró y sin pensarlo lo abracé. Realmente no soy la única que sufre por todo.

Pero el lo escondía detrás de su sonrisa.

Ahora no hacía nada más que observar toda la aldea encima de los rostros Hokages. 

La fresca brisa que el viento me brindaba me despeinaba mis largos cabellos azabache como la noche, justo como esta noche. La luna brilla encima nuestro mirando a los pocos aldeanos irse a sus casas o algunos shinobis llegar de alguna misión. 

El sueño no había tenido indicios de pegarme, cosa que agradezco porque prefería quedarme aquí disfrutando de la linda noche. 

Cerré mis ojos al sentir el chakra de cierta persona llegar a un lado mío, justamente a mi espalda. Por más que he intentado evitarlo por estos días él se empeña en buscar la manera de encontrarme para poder hablar. 

──Por fin te encuentro, problemática. ─lo escuche. ──. Después de no verte por estos cuatro días, al fin estamos solos. Y así podemos platicar.

──Shikamaru. ─me levanté de donde me encontraba sentada. ──. Ahora no, ¿quieres? 

──Si no es ahora, ¿cuándo será? Crees que no he notado como me evades todo el tiempo. Se que fui un idiota por lo de hace semanas, pero entiende Yumei... entiende que necesito hablar y aclarar todo. ─me sorprendí de ante mano su forma y tono de voz al hablarme. 

──Y yo te estoy diciendo que no necesitas decirme nada. ─lo mire a los ojos. ──. Realmente, Shikamaru. No necesitas gastar saliva en palabras que ya se. 

──¿A qué te refieres? 

──Sé que mentiste ese día. Se que te quedaste confundido por mi actitud y palabras. Se que la mejor forma de salir de esa situación fue decir eso, una mentira. ─su mirada era se sorpresa pura ante mis palabras, pues eran ciertas. ──. Si quieres odiarme por todo el tiempo que te he ignorado, adelante, hazlo. Supongo que lo merezco.

──No puedo odiarte. No a ti. ─esbozó una pequeña sonrisa. ──. Y ahora se que tendré que hacer lo necesario para volver a enamorar a la chica antipática, ¿no? 

──No recuerdo que me hayas enamorado. Según lo que tengo entendido fui yo la que te enamoro, ¿no? ─él soltó una leve sonrisa. ──. Tal vez las cosas no serán igual que antes o tal vez sí lo sean. No lo sé con certeza. ─gire mi cabeza mirando la aldea. ──. Solo dale tiempo al tiempo. 

──Significa que estamos bien, ¿no? 

──Significa que tienes prohibido hacer algo que nunca antes hayas hecho, Nara. ─lo mire a los ojos. 

Él sonrió de medio lado. 

──Entonces significa que puedo hacer esto. 

──¿Qué quieres deci–...? ─antes siquiera de terminar de formular mi pregunta fui callada por sus labios haciendo presión con los míos. 

Podía sentir su necesidad por hacer eso, su manera lenta y suave de mover sus labios con los míos era simplemente el paraíso para mi. Tardé en darme cuenta unos segundos que le he correspondido de la misma manera. 

Nuestros pulmones nos pedían oxígeno haciendo separar nuestros labios. Inhale el aire que me hacía falta mientras no le quitaba la mirada de encima.

──Suerte para mi que antes ya había probado tus labios. ─murmuró a unos centímetros de los míos.

──No creas que con esto ya estamos bien. ─dije mirando a otro lado. ──. Esto solo te lo dejo pasar porque me tomaste de sorpresa. 

──Sorpresa o no. Pudiste apartarme, problemática. ─lo sentí recargar su cabeza en mi cuello. ──. Me gusta estar así de nuevo. 

──Ya, ¿y?. ─solté cruzando mis brazos. ──. Si aprecias tu vida apártate.

──Eres un maldito fastidio, ¿lo sabes? ─lo sentí sonreí en mi cuello abrazando mi cintura. ──. No. Eres mi mejor fastidio. 

Y sin tener razón alguna... sonreí.

Por cierto.

Les presumo esta cosa hermosa que fue hecha por nocturnosss Gracias por esto, linda.

Dejaré esto y me ire lentamente xDxd

Los amo... 😉