Habían pasado un par de días y todos iban bien o casi todos ya que el ahora verdadero tío de Rin , cada día era una tortura diferente y lo peor es que había un doctor que curaba todas las heridas hechas por la joven.

Recibía palizas y después venía el doctor a curarlo como si nada , estaba peor que mal y ya no soportaba siquiera su vida , solo pedía morir y ni eso le dejaban , era como el saco de boxeo pero lo peor de todo era lo que venía el día de hoy.

La chica que una vez pensó que era su hija y alzó entre sus brazos cuando era una bebé , le había preguntado cómo había matado a su ex esposa y el le respondió ya que su cuerpo no podía soportar más golpes , sentía que si solo le tocaban se iba a morir.

Le contó que le había matado de un disparo y ella solamente se molestó en preguntar con qué mano y el respondió "con la derecha" eso fue todo , se giró pero antes de salir le comunicó lo siguiente.

- Pues ya puedes despedirte de esa derecha porque cuando vuelva , voy a cortartela... - fue así que se fue cerrando la puerta detrás de ella y el hombre no tardó en empezar a llorar , empezó a forcejear para liberarse pero era inútil , era literalmente imposible desatarse y aunque lograra hacerlo , habían guardias por todas partes y aunque también escapara de la mansión , sabía que Rin lo encontraría tarde o temprano y lo mataría sin ninguna pizca de compasión.

- Rin , ¿Puedo hablar contigo? - preguntó y ella se giró para mirarlo sin ninguna expresión en su rostro.

- ¿Como padre e hija? - preguntó con sarcasmo y el agachó la cabeza pero después la volvió a alzar.

- por favor - pidió y ella desvió la mirada empezando a caminar hacia su escritorio, de todas formas ya había escuchado la verdadera historia y sabía que se amaban y el único loco era su padre que estaba luchando por un amor imposible , ella no lo amaba y por no dejarla ir , decidió matarla.

El motivo por el cual no le había dicho nada en todos estos años es porque Lo mantenía amenazado , siempre le decía que si ella se llegaba a enterar que seguía vivo le mataría y su padre por miedo a perder su hija decidió callar por todos estos años , ya había perdido a una persona muy importante y por la misma persona por lo que decidió callar y obedecer todas las órdenes de su hermano...

Hablaron por algunos minutos y Rin estaba entre empezar a llorar o empezar a gritar , pero solo decidió pedir que se retirara y su padre así lo hizo ya que sabía que todo lo que estaba pasando su hija era mucho para ella , le daría su tiempo y esperaría el tiempo que haga falta.

- ¿Puedo pasar? - preguntó Sesshomaru asomándose y ella asintió.

- ¿Qué debo hacer? - preguntó agarrando la mano de su novio y lo jaló hasta llevarlo al sofá de color morado y dejarlo sentarse y ella se tumbó recostando su cabeza en su regozo dejando que el le acariciara su cabello con cariño , dejó que sus ojos se cerraran dejándose llevar.

- Creo que debes darle una oportunidad - respondió - viste lo dolido que estaba y siempre estuvo bajo amenazas , nunca te dejó sola y siempre estuvo allí para ti , no como padre pero estuvo dándote el amor de un padre sin que tú te dieras cuenta.

- Me siento como en una montaña rusa de verdad - dijo ella volviendo a levantarse y el hizo lo mismo abrazándole por la espalda.

- Creo que debes pensarlo bien y con calma , estoy contigo y juntos podremos pensar en soluciones para todo , todo tiene solución menos la muerte.

- todo tiene solución menos la verdad - repitió ella esbozando una sonrisa - me gusta.

- es la verdad , tanto que me quieres y no sabes que soy un genio - se halagó a si mismo y ella giró para mirarlo y cruzarse de brazos.

- ¿Quién dijo que yo te quiero? - preguntó ella.

- Hay dos cosas que no se pueden ocultar - le dijo el acariciando su mejilla con suavidad - El humo y el amor...

- Creo que tienes razón - respondió ella poniéndose de puntillas para poder besarlo y Sesshomaru le ayudó inclinándose y dejando que ella lo besara como quisiera , un beso lento y suave.

La puerta fue tocada y Sango apareció en el campo de visión de los dos novios.

- El hombre no para de gritar , creo que se está volviendo loco - le avisó y Rin asintió empezando a caminar hacia la puerta saliendo de ella y acercándose a la habitación en donde estaba , todos estaban en la habitación y los últimos en entrar fueron Sesshomaru y Sango y esta última cerró la puerta detrás de ella.

- Tienes prisa por morir - le dijo ella acercándose a la espada y la desenvainó.

- ¡Mátame de una vez! - gritó el moviéndose aunque sólo en su sitio ya que estaba atado de pies y manos.

- Te dije ese día en el bosque que si no me matabas , te iba a dejar desear la muerte y no te la daría , aún falta mucho y ahora... - miró a Miroku - desatale la mano derecha y ponla encima de la mesa.

- ¡No! - gritó - ¡No lo hagas! , ¡Por favor! - pidió sintiéndose indefenso y sin saber que más hacer - ¡Tú tampoco eres una santa!

- Cierra la boca.

- ¿Piensas que no te vi cuando os besasteis? - preguntó refiriéndose a ella y Sesshomaru y tenía razón , una de las tantas veces que había perdido la cabeza , Sesshomaru entró y le pidió que parara ya que iba a matarlo y después de calmarla le besó.

- maldición - susurró InuYasha , Aome y los demás estaban boquiabiertos por la noticia.

- ¿Porqué no le dices a tu amante que estás casada? - preguntó empezando a reír , la cara de Rin era todo un poema y más cuando giró para mirar a Sesshomaru.

El más alto solo la observaba esperando a que negara lo que había escuchado pero ella no dijo nada.

Solo vio como Sesshomaru empezaba a acercarse a ella.

- ¿Eso es verdad? - preguntó señalando a su tío y ella asintió.

- si...

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