Chapter 19:-

Cuatro días después ...

Hospital central de Seul

-Bien Lisa, el bebé está bien posicionado y ha crecido en perfectas condiciones, desde tu ultima visita.-dijo la obstetra mientras veía la pantalla negra a su costado.-¿te has estado alimentado correctamente? .-pregunto, a lo que la embarazada asintió levemente.-también me he dado cuenta que sufres de un escenario de estrés, debes cuidarte en este tiempo, ya que has entrado en la etapa del segundo trimestre.-le decía mientras escribía la próxima cita en la libreta de apuntes.

-¿Cuándo podre saber si es niño o niña? .-se atrevió a preguntar ya completamente vestida.

-Creo que aún es muy pronto, y el bebé tampoco se ha dejado ver por completo.-comento viendo la ecografía recién impresa.-talvez en dos o tres semanas, y ya que es un momento especial, me gustaría conocer al padre de esta linda criaturita.-sonrío entregándole la fotografía.-espero que en la siguiente consulta puedas venir con él, siempre asistes sola a los controles, podría ser que eso te afecte, ¿no es así?

-Quizás ... .-musito, sin dejar de mirar la imagen entregada.

Luego de salir del hospital, marco al numero de Jungkook, pero este nunca atendió a la llamada. Insatisfecha, fue de camino a la cafetería más cercana que había para poder comer algo y pensar en qué haría cuando todos se enteraran de su estado, ya que por ahora, el bebé se había estado ocultando bien y aún conservaba un vientre relativamente delgado, pero solo seria hasta que el bebé se hiciera notar como normalmente lo haría.

Una vez eligió una mesa e hizo el pedido, observo distraída la calle del frente, pero gracias al gran ventanal del lugar, pudo ver claramente como Jungkook y Rosé caminaban tomados de la mano mientras reían altaneramente siendo ajenos a la mirada de la Tailandesa, quien solo los veía en silencio hasta haberlos perdido en la siguiente cuadra.

Por esa razón no respondías mis llamadas, estabas con... ella

-Jimin y yo también éramos así, antes de que me dejara por otra.-pronuncio una voz, trayéndola a la realidad.

Frente a ella estaba Seulgi, quien no tenia una buena cara para ser escasamente el mediodía.

-¿Por qué me dices eso? .-pregunto sin entenderla.

-Porque otra cosa seria, se nota en tu mirada lo que sientes por Jeon.-le dijo sorprendiéndola.

-¿De qué estás hablando?, claro que no.-negó con nerviosismo.-somos amigos, nada más. No imagines cosas que no son.

-Muchas personas dicen lo mismo, es solo amistad, pero saben muy bien que en el fondo, que es más, mucho más que una simple amistad entre un hombre y una mujer.-termino de decir incorporándose de la silla que utilizaba.-cuídate, Lalisa, que en tu estado, no puedes hacer mucho. Adiós.-se despidió saliendo de la cafetería haciendo soñar la campañilla del local.

Cuando se marchó, Lisa sintió un dolor abdominal horrible que la dejo sin aliento por unos cuantos segundos. Algunos empleados del lugar se alarmaron al verla en ese estado, y mucho más cuando notaron que entre las piernas de la fémina corría sangre, llamando de inmediato a emergencias.

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Esa misma noche dieron de alta a Manoban, la cual fue recibida y visitada por sus amigos y más cercanos ante su descompensación.

-Lis, ¿ya estás mejor? .-pregunto Jisoo a un lado de la menor. La de cabellos cortos asintió con una sonrisa leve.

-Sí, solo quiero dormir, no necesito nada más.-comento, cubriendo sus piernas con la manta del sofá.

-Lo más importante, es que al bebé no le pasó nada y está fuera de peligro.-dijo Jennie tomádnosle la mano con delicadeza, dándole apoyo, ya que era la única que en su momento sabia de su estado.

-Les agradezco que hayan podido venir todos a verme.-les decía, mirando a cada uno en la habitación.-y, también me quería disculpar por mantener mi embarazo en secreto.-musito colocando ambas manos en su vientre.-todavía no me sentía preparada para decirles de esto, por eso... lo mantuve en secreto, lo siento.

-Lili, lo primordial es saber que ambos están saludables y no pasó a mayores.-indicó Rosé sonriéndole tiernamente.

-Ro tiene razón.-le dio la palabra Jeon, posicionando una de sus manos sobre el hombro izquierda de la pelinegra.-en estos momentos deberías estar en cama, descansando y nosotros estamos aquí molestando.

-Kookie, no te preocupes.-le resto haciendo un ademán.-me gusta que estén aquí, te lo aseguró.-asintió, colocando su mano libre sobre la del hombre.-me siento protegida con su compañía.-afirmó, haciendo presión ante el contacto masculino.

-¿ Cuánto tiempo te dieron de reposo? .-cuestionó Taehyung, después de unos cuantos segundos en silencio.

-Ah, eso.-recordó.-una semana, pero ustedes saben que no me gusta quedarme quieta.

-Creó que te será imposible hacerle caso al medico.-comentó Yoongi, haciendo que la gran mayoría soltara una carcajada audible.

Un minuto después, tocaron al timbre, llamando la atención de todos los invitados.

Namjoon fue quien abrió, encontrándose de frente con un malhumorado Park Jimin.

-Necesito hablar con Lisa, es urgente.-mascullo, haciendo notar su enojo.

El moreno trató de calmarlo antes de que entrara, pero él Park fue más rápido y entró sin siquiera saludar correctamente.

-¿Jimin-ssi? .-pronuncio la de cabellos negros.-usted, que ...

-Por qué no nos dijiste que Seulgi estuvo contigo.-atacó, sorprendiendo hasta a la misma Rosé.

Quien venía con una bandeja en mano junto a refrescos, haciendo que las soltara e hiciera un estruendo a su alrededor.

-Ji-jimin ... .-dijo casi con miedo. Ganándose las miradas interrogantes del resto, sobre todo de Taehyung y Jin, quienes ya sabían el motivo de su actitud.

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-¡Qué estás haciendo aquí! .-gritó por lo bajo.

Jimin se paseó por la cocina, tomando de paso una cerveza del refrigerado, burlándose de ella.

-No estoy jugando.-dujo entre dientes.-¡responde de una vez, quieres!

-Para qué quieres que te lo diga, sí ya sabes mi respuesta.-Rosé negó reprochándole.

-Eres tan ...

-Vine, porque quería saber como estaba Lisa, ¿si? .-se defendió dándole un sorbo al amargo trago.

-No te creo, y sabes por qué... Porque eres pésimo mintiendo.-señalo frustrada.

-¿Cómo tú? .-dejo caer mirándola fijamente.-claro, ahora Roseanne Park es la gran estrella de Hollywood. Finge ser feliz al lado de su novio de la universidad para casarse y formar una linda familia, cuando en realidad, tiene una aventura con el mejor amigo de este.-decía sin pudor alguno.-¿no crees que es muy de películas? Un triángulo amoroso y clandestino.

-¡Cállate, eso nunca pasó! .-protesto al borde de las lágrimas.-solo vete y no regreses, mucho menos, te acerques a mí.

-Sinceramente.-suspiró cuando ella le dio la espalda.-quería saber de ti. De cómo estabas, si te has alimentado correctamente y también, necesitaba verte.

-Bien. Estoy bien, en perfectas condiciones, ¿acaso no lo notas? .-le decía señalando su cuerpo.-ahora, di una mentira y lárgate.

-Entonces, así serán las cosas desde ahora en adelante. Fingirás que nada sucedió entre nosotros.

-No es fingir, porque nada pasó entre nosotros.-declaro cruzada de brazos.

-Realmente, a veces actúas como una maldita bruja.

Rosé levantó su mano para abofetearlo, pero ese golpe nunca llegó. Ya que el castaño alcanzó a detenerla y la acercó a su cuerpo, sintiendo su respirar agitado.

-Sabes perfectamente que para mí no eres eso, sino, un bello ángel que me sacó de un horrible lugar.-dijo, para después acariciarle los dorados cabellos con su mano libre -tras haber dejando la cerveza en la encimera cercana-.

-N-no, no Jimin.-negó dando un paso atrás.-por favor, mantiene la distancia.-pedía afligida.-¿por qué me haces esto?

-Porque, por mí, correría un maratón solo para estar contigo y verte.-le decía acariciándole las abultadas mejillas.-porque sino puedo verte ni acariciarte, me vuelvo loco. Ro, ¿qué tengo que hacer para que me creas?

-Nada, no tienes que hacer nada. Ya has hecho suficiente, ahora, solo vete, por favor.-suplicó al borde del colapso.

Jimin asintió rendido, pero antes de que saliera por completo de la habitación, se acercó a la menor y la abrazo cálidamente.

Por él lado de Rosé, cerró sus ojos con fuerza al verse en esa situación y sentirse una estúpida adolescente de quince años, ante él chico que le gustaba.

-Me es tan difícil sacarte de mi cabeza, bonita.-dijo haciendo presión en el gesto.-que estoy tratando de no hacer una locura.

Ante lo último, Rosé se giro y en un rápido movimiento, lo besó.

Jimin le correspondió al mismo tiempo, con pasión y anhelo. La tomó del cuello, profundizando aún más el besó, al mismo tiempo en fue ella colocaba sus delgadas manos sobre su pecho.

Él besó iba subiendo de intensidad, cuando de un segundo a otro, Jisoo entro a la cocina encontrándose con tal escena, obligándolos a separarse del miedo.

-¡Mierda! .-exclamó, llevándose las manos al rostro.-Rosé, qué significa esto.-quiso saber mirándola con acusaciones.

-... Na-nada.-negaba moviendo su cabeza nerviosa.-nosotros, n-no...

-¿Nada?

-Sí, ella tiene razón.-le dio la palabra a la rubia.-yo estaba tomándome una cerveza, cuando a Rosé le entro una pestaña o una basura al ojo, y me pidió que la ayudará.-término de decir, cosa que la mayor de la habitación no se creyó.

-Miren, no tienen porque darme explicaciones.-comenzó a decir Kim.-bueno, sí. Sí, no ..., la verdad es que... .-dejo caer la mirada en la fémina contraria y negó desilusionada antes de irse.

-Espera, unnie ... No.-se llevó las manos a los largos cabellos desordenándolos con desesperación.-mierda, qué hago, que voy hacer.-decía casi sin aire. Jimin trató de acercársele, pero ella se negó con recelo.-¡No!, no te acerques.-señalo, para después imitar a la mayor de ambos.

Jimin maldijo golpeando uno de los muebles y desordenó sus castaños cabellos con frustración y miedo, tenia muchos sentimientos mezclados en ese momento.

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-Unnie, unnie.-la llamaba intentando detenerla.

Cuando logro hacerlo, la sostuvo de brazo al mismo tiempo que la mayor pedía él ascensor para irse.

-¿Qué te sucede? .-de quejó soltándose del agarre.

-Déjame que te explique.-le pedía angustiada.-todo lo que viste, tiene una explicación.

-Tú y Jimin, ¿es enserio? .-pronuncio sin creerlo.

-No es lo que tu imaginas.

-No, tú escúchame.-la hizo callar como si de una madre se tratara.-lo que ustedes dos tienen...

-¡Nada!, no significa nada.

-¿No? .-dijo casi con burla.-perdóname, pero lo que yo acabó de ver en la cocina, es todo lo contrario.

-Sí, pero ... N-no es lo que tu crees.

-No, yo no creo nada. Los acabo de ver en la cocina dándose un beso, y no uno cualquiera.

-Por favor unnie, escúchame y mírame.-suplicó tomándole las manos mientras temblaba.-te juro que todo tiene una explicación, pero, este no es el momento ni lugar. Yo te juro que lo explicaré todo.

-¿Y esto tiene una explicación? .-exigió saber con el ceño fruncido.

-Sí, te juro que sí.-asintió con un nudo en la garganta.-sólo necesito que me prometas, que no le dirás a nadie, por favor.-pidió sintiéndose miserable.-no puedes decirle a nadie lo que viste.

Suplicó con los ojos cristalinos. Jisoo la observaba mientras pensaba, hasta que el sonido del elevador la hizo tomar una decisión.

-Rosé, esto ... .-suspiro negando.-¡demonios!, no sé que hacer.

-Unnie, por favor. Júrame, que no se lo dirás a nadie, ni siquiera a Jin. Te lo suplico.

-Mañana ve al departamento.-dijo mientras entraba a la caja metálica.-Taehyung debe estar en el estudio tempano, ahí vamos a poder hablar con tranquilidad.-termino se decirle en cuanto las compuertas se cerraron en su cara.

Para cuando Rosé se quedo sola en el corredor, se dejo caer sobre la pared contigua hasta llegar al frío suelo. En esos momentos lo único que quería, era que un camión la atropellara o le cayera un meteorito encima.

-Estoy muerta.

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Departamento de Jungkook y Rosé

Eran cerca de las cuatro de la madrugada, y ella aún no podía conciliar él sueño.

Por otro lado, Jungkook roncaba siendo omiso a sus preocupaciones.

Se giró quedando de frente al azabache, mirándolo con intensidad y sintiéndose culpable.

-No se merece lo que estoy haciendo.-susurro acariciándole la tierna cicatriz de su mejilla.-pero, la decisión ya está más que tomada.-dijo con seguridad.

Espero el momento justo, y poco a poco fue despertando al Jeon. Quien entre quejas abrió sus marrones ojos todavía con sueño.

-Chae, qué ... .-tomó el reloj del buró y la miro con molestia.-Ro, son las cuatro de la madrugada, ¿qué haces despierta?

-Debo decirte algo importante.-musitó cohibida.

-¿Qué es tan importante? Que tuviste que despertarme. Sabes que tenia una reunión temprano, ¿por qué me haces esto?

-Lo siento, pero, ya no puedo retenerlo más.-pronuncio, ganándose la mirada confusa del hombre.

-¿Qué sucede? ¿te duele algo? ¿quieres que llame al hospital? .-ella negó reiteradas veces.-¿entonces ... ?

-Sí, Jungkook.-afirmó haciendo puños sus pequeñas manos.-casémonos en dos semanas, quiero ser tu mujer. No quiero esperar más, adelantemos la boda para dos semanas, ¿qué dices?

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Ese mismo día ...

Cuando Rosé llegó al departamento del periodista, se encontró de frente con él, ya que iba de salida.

Taehyung se despidió rápido de ella y se perdió entre los corredores del edificio donde vivía. Sin esperar mucho, ingreso al hogar y fue directo a la oficina donde Jisoo siempre estaba.

Antes de abrir la puerta inhaló dándose coraje, y poder contar la verdad.

Toco a la puerta y espero una afirmativa. Desde él otro lado, la dulce voz de Jisoo la aceptó sin mucha prisa.

-Unnie.-pronuncio haciéndose notar, mostrándose poco a poco.

-Hola.-saludo invitándola a pasar.

La menor mantuvo distancia al verla en esa postura, era una que nunca había visto en ella.

-¿Tienes un minuto? .-preguntó, al ver que tenia algunas hojas sobre el escritorio.

-Sí, claro, tengo varios.-tomo aquellos documentos que no eran relevantes y los guardo, para después mirarla fijamente.

-Creo, que tenemos que conversar.-decía ocultando sus nervios.

-Yo también opino lo mismo, así que, por favor pasa y siéntate.-señalo la silla frente al escritorio.

Una vez la rubia estuvo frente a ella, suspiro y le enseñó la invitación que le había llegado apenas hace una hora atrás.

-Bueno, esto me cayó del cielo.-dijo sarcástica.-anoche te estabas besando con Jimin, y ahora, nos informan que adelantaron la boda para dos semanas, ¿qué mierda te sucede? ¿estás loca?

-Yo, lo único que quero pedirte es que, por favor, escuches lo que tengo que decir.

-Bien, te escucho.-le dio la palabra.

-Entre Jimin y yo, sí pasaron cosas.-asintió haciendo puños sus manos sobre el vaquero.

-Eso pude notarlo.-declaro entendiendo a la perfección.-¿ustedes ya se conocían? Tal vez, cuando visitabas a tus suegros se vieron y ...

-No, no fue así.-negó mordiéndose él labio inferior.-cuando él llegó a vivir con nosotros, todo cambió. Con Jungkook ya nada era lo mismo, no estábamos bien juntos y cuando hacíamos el amor, no sentía lo mismo que antes. Pero, cuando Jimin me tocaba, era lindo, tierno, cálido, y ya no me sentía sola.

-Es decir, que todo comenzó cuando Jimin-ssi llegó a vivir con ustedes. Entonces, puedo entender que ese misterioso hombre, que te mantenía confusa y veías a escondidas para tener una noche, era ...

-Sí.-asintió cerrando sus ojos fuertemente.

-Y, la llave que encontré durante el viaje a las cabañas, ¿es de algún lugar especial donde se encontraban?

-Ya no.

-Ya no, pero siguen juntos.-señalo sin entender.

-Sí, no, ... Sí, pero no.

-¿Cómo es eso? Es un sí rotundo, o qué.-la rubia bajo la mirada culpable.-Ro, dime una cosa. Hace algunas semanas Jennie se encontró con la exnovia de Jimin, dijo que lo vio besarse con una chica afuera de tu cafetería, esa mujer, ¿eras tú?

-Sí, era yo, pero, estaba cubierta por la impermeable, así que, no pudo reconocerme. Solo vio a Jimin, a mí no.-confesó, formando un silencio largo entre ambas.-debes estar pensando que soy de lo peor, ¿no es así?

-No, claro que no. Ni siquiera alcanzó a pensar eso si fuera, es que, no puedo entender lo que estoy escuchando y me cuesta digerirlo.-explicaba sutilmente.-no te quiero juzgar porque, quién soy yo para hacerlo.-se señalo con gracia.-pero, es Jungkook, él es tu novio desde la universidad y Jimin es su mejor amigo de la infancia.

-Lo sé, lo sé, pero... Maldición, esto es más fuerte que yo.-sollozó.-yo te juró que lo intente, pero no pude. Tú sabes lo que es esto ...

-Sí, lo sé; y lo entiendo, créeme que sí. ¡Pero es tu prometido y su casi hermano!

-Por favor, ya no me lo repitas. Te lo suplico.-pidió entre lágrimas.

-Y Jungkook, ¿qué tiene que ver él en todo esto? .-preguntó intentando apaciguar la situación.

-Él es muy bueno conmigo, y yo lo quiero.-decía firme.-y siento que sí me caso con él, todo lo sucedido con Jimin quedará en el pasado y lograré olvidarlo.-termino de decir junto a un débil sollozo.

-Ay bonita, mi Rosita.-se incorporó de su silla y fue hasta la menor, dándole un tierno abrazo.-te conozco desde los doce años, y sé que esto no lo hiciste por un capricho. Tú no harías una cosa así por una simple calentura, sino, por algo mucho más importante y valioso.-le quito las marcas de lágrimas haciendo que la mirara a los ojos.-¿estás enamorada de Jimin? Dime.-pidió que respondiera.-Rosie, dímelo con sinceridad, ¿estás enamorada de él? .-Park soltó un quejido y asintió en varias ocasiones mientras sentía más lágrimas correr por sus mejillas.

-T-te juro que yo no quería.-negaba mientras la mayor le daba caricias en sus dorados cabellos.-¡maldita sea!, yo no quería que esto pasara, ... Pero sí, estoy enamorada de Jimin.-Jisoo soltó una risa nasal ante su confesión.-perdóname, te he fallado.

-No, no digas esas cosas.-tomó el rostro femenino entre sus manos mirándola fijamente.-nadie puede controlar lo que tu corazón indica, así que, no pienses eso.

-Lo siento.-dijo correspondiéndole al abrazo.

-¿Alguien más sabe de esto? .-preguntó rápido.

-Taehyung y Jin.-soltó sorprendiéndola.-pero, por Jin no tengo certeza de ello, algo intuye.

-A mí no me han dicho nada.

-Y se los agradezco.

-¿Crees olvidar a Jimin con tu decisión? .-cuestionó tras segundos de silencio.

-Tengo qué. Aún que me duela, tengo que olvidarlo.

Por el bien de los dos

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Momo 🍑💕