ocho.

VIII:
UN CORAZÓN
ROTO


VENUS SINTIÓ COMO SU CORAZÓN LITERALMENTE CAÍA hasta sus pies rompiéndose en miles de pedazos. Como si hubiera dejado caer un vaso de cristal, tanto que creyó sentir el ruido de un vidrio haciéndose añicos.

Ahí estaba el chico al que le había regalado sus últimos meses, el chico con el que se escabullia de vez en cuando, ese que le sacó tantas sonrisas, su primer beso, su primer amor. Ese con el que creyó haber conocido el significado de amor.

Por su mente pasaron todos sus momentos felices, por su mente pasó todo lo que vivieron. Las veces que él le expresó que eran del otro, los planes a futuro...

Ahora ese mismo chico estaba ahí parado arruinando todo eso de lo que ella alguna vez se enamoró.

Atanas Karkarov acaba de romper su corazón, y a ella también.

—¡Atanas Karkarov!-exclamó con la poca voz que le quedaba-. No puedo creerlo...

—¡Venera! ¿Qué haces aquí?—respondió el rubio soltando a la castaña que tenía entres sus brazos—. Tu nunca caminas por ahí so...

¿Tova izvinenie li e da doĭdesh da se tselunesh s...Agata? *¿eso es acaso una excusa para que vengas a besarte con...Agatha?—preguntó, sorprendiendose cuando la castaña se dio la vuelta y era aquella chica con la que Viktor se había estado viendo.

Payak, pozvolete mi da obyasnya *arañita, déjame explicarte por favor*—le pidió el chico, Venus no podía creer su descaro.

—¿Payak? ¡No me vuelvas a decir así en tu vida! desde este instante no soy nada tuyo—le gritó.

La castaña al lado de Atanas es rusa, por lo que muy poco entendía el búlgaro, idioma en el que la pareja estaba peleando, pero ella sabía que lo harían, era parte de su plan.

—Oh la pequeña Venera no fue lo suficientemente madura para Ats y él tuvo que buscar a alguien más—dijo Agatha con voz venenosa y burlona, haciendo un puchero.

—¿Fue por eso? ¿Por eso me dejaste justo hoy? Denyat, v koĭto mi kaza, che se sreshtame i che vinagi si me vizhdal takŭv...ne izglezhda *El dia que me dijiste que eramos novios y que siempre me viste como tal...no parece*—Venus tenía la voz entrecortada y se estaba aguantando las ganas de llorar.

Pero a ella nadie la vería llorar.

—S...¡No! ¡Claro que no, payak!—le respondió acercándose, intentando tomar su mano pero Venus lo alejó—. Ne e tova, koeto si mislite, molya, izslushaĭte me *No es lo que crees, por favor escuchame*.

—Yo no tengo nada que hablar contigo Atanas, ya lo vi todo—espetó entrecerrando los ojos, luego dirige su mirada a Agatha—, ¿y tú? ¿no salías con Viktor?

—Me cansé de él, obviamente se lo hice saber—respondio la castaña—, pobre idiota, YA ustal ot togo, chto ne mog perestat' smotret' na nekotorykh glupykh devchonok *estaba cansada que no pudiera dejar de mirar a ciertas niñitas tontas*.

—Así que fue por eso...¿estabas celosa de mi?—dijo Venus riendo secamente—. Vŭrvi Atanas, mislya, che tozi kloun te izpolzva kato marionetka *Vaya Atanas, creo que esta payasa te utilizo como a un títere*...no sé quien de los dos es mas idiota.

Agatha abrió la boca sorprendida, Venus le había entendido el ruso, ella no tenía idea de que podía hablarlo. Oh, si supiera cuantos mas podia hablar.

—Como sea, Viktor ya no me gusta y por eso vine con Atanas, el si sabe tratarme y supo elegir entre una niñita y una mujer—espetó la rusa—, porque no mejor te vas por tu querido Viktor y nos dejas en paz.

—Hablemos de esto con calma payak, ¿si?—le pidió de nuevo acercándose—. Podemos ir a nuestro lugar...

—No hay un "nuestro", porque tú y yo no somos nada desde el momento en que viste por...esta—le respondió con furia, el nudo en su garganta se había ido y ahora solo tenía veneno para soltar—, si fuera por mi en este momento me largo de este lugar solo para no verte mas nunca.

Payak...nos quedan años de escuela ¿ne iskash da se karame, nali? *¿no querrás que estemos peleados, verdad?* Esto solo fue un error, te juro que...—Venus dio gracias a la interrupción, por un momento sintió que flaqueaba, y caía en los encantos del rubio.

—Un error que estabas disfrutando, pronto te cansarás de las niñerias de Lestrange—intervino Agatha con malicia—, mientras te esperare cariño.

Le dio un beso en la mejilla y se fue, dejando a la (ex) pareja con una tensión que podría cortarse con un cuchillo.

—No estaremos peleados porque tú simplemente ya no existes para mí—sentenció la pelinegra—, Merlín ¿cómo fui tan tonta de creer que me esperarías? ¿cómo fui tan tonta de creer que un chico como tú se había enamorado de mi inocencia?

—Y asi fue payak...lo juro—Atanas se estaba arrodillando—, daĭte mi samo oshte edin shans *dame solo una oportunidad más*.

—¡Basta de ruegos! Llevavamos unos meses, podras vivir sin mi te lo aseguro—le dijo mirandolo fijamente—. A sega stavaĭ *ahora levántate*, esto no es un hasta luego, ni un hasta pronto, es un hasta nunca.

Venus tomó la dignidad que tenía y los trozos de su corazón, metafóricamente. Sin más se giró sobre sus talones y salió de ese lugar.

—¡Payak!

La llamó por ese apodo que antes le parecía tierno pero ahora solo le repugnaba.

—¡Venera!

La llamó por su nombre en ese idioma que se dijeron tantas cosas bonitas, ahora solo esperaba que él no la mencionara más nunca.

—¡Amor!

¿Amor? ¡No! Así le dices a la persona a la que le entregas tu corazón, asi le dices a alguien que quieres tanto que jamas seria capaz de lastimar.

Atanas gritó tantas veces lo anterior que Venus perdió la cuenta, estuvo a punto de ir y abrazarlo cuando la voz del chico rubio que le robó tantas sonrisas flaqueo y se volvió más amarga como si quisiera llorar, pero no podía hacerlo.

Se abrazaba a sí misma y las lágrimas rodaban por sus mejillas, pero ella no se dio vuelta.

—Anton...—dijo cuando se encontró con uno de sus amigos, limpio rápidamente sus lágrimas para que no hiciera preguntas—. Podrías decirle a los demás que me siento un poco indispuesta y me iré a dormir.

—¿Estas bien Veka?—le pregunto al ver el estado de su amiga, ella asintió—. No te creo, pero si no quieres hablarlo esta bien, yo les aviso.

—Gracias Anton...nos vemos mañana—iba a irse pero el brazo de su amigo la detuvo.

—¿No quieres que te acompañe? Sabes cómo son algunos chicos aquí.

—Estaré bien, todos están aquí o durmiendo—le respondió intentando tranquilizarlo—, no te preocupes.

El chico no muy convencido asintió y la dejó ir.

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Venus caminaba por los duros caminos que conducían al castillo, el hechizo de calefaccion habia alcanzado su limite y podia sentir como el viento helado congelaba sus lagrimas.

Entró al imponente lugar y revisando cada rincón para asegurarse no ser vista por ningún profesor, como pudo llegó hasta las torres de chicas. Corrió hasta su dormitorio.

Entro a la ducha y para ella fue inevitable dejarse caer en la tina que esta tenía, Venus ahora estaba sentada en el suelo, mientras sus lágrimas se confundían con el agua que caiga sobre ella. Se sentía tan horrible.

Aunque no quería, fue imposible evitar los recuerdos con Atanas. Desde el dia que se conocieron hasta ese dia.

31 de Octubre de 1989 - Primer año.
—Oye Krum, ¿quién es la amiga de tu hermana?
—Ah, ella es Venus Lestrange, pero mi hermana le dice Veka.

—Mucho gusto soy Atanas Karkarov.
—Oh, el gusto es mío—Venus sonrió y al rubio se le iluminaron los ojos—, Venus Lestrange, pero todos me dicen Veka.

23 de Diciembre de 1989 - Primer Año.
—¡Venera!—sintió que la llamaban y se dio la vuelta para buscar entre la gente del muelle.
—Ay, hola Atanas—saludó al rubio que se acercaba.

—Solo quería desearte feliz navidad...
—Que tu también tengas una feliz navidad, Atanas.

28 de Mayo de 1989 - Primer Año.
—Tocas hermoso—una voz hizo que Venus detuviera la canción en su arpa.
—Mu-Muchas gracias, Atanas—dijo viéndolo—, estoy practicando para el Durmstrang Day.

—Estoy segura que serás la mejor—le dijo para luego sentarse en una silla frente a ella— ¿Podrías tocar algo para mi?
—¡Claro! ¿Algun pedido en especifico?

—Lo que sea está bien, me gusta verte tocar y seguro cualquier melodía será hermosa.

Venus tenía mil mariposas en el estómago, tomó aire y empezó a tocar bajo la mirada del rubio que detallaba todos los movimientos de la pelinegra.

1 de Septiembre de 1989 - Segundo Año.
—Hola Venera—la saludó un rubio que ya conocía muy bien—¿Recibiste mis cartas?
—Sabes que si lo hice, te las conteste todas.

—Y eso hizo mi verano aun mas feliz, aunque nada se compara a verte.
—Yo también quería verte.

2 de Noviembre de 1989 - Segundo Año.
—Eres la niña mas bonita de Durmstrang-se acercó un poco más a ella, el patio estaba casi vacío y los presentes miraban cada quien sus asuntos.

—¿Tu crees?—dijo Venus intentando esconder lo rojas que se habían puesto sus mejillas.
—Estoy seguro.

16 de Diciembre de 1989 - Segundo Año.
—Mira, te prometo ayudarte en artes oscuras, si tu me ayudas astronomía.
—Esta bien, pero solo si me llevas por un café al pueblo.

—Lo que quiera mi payak *arañita*.
—¿Payak?
—Si, ese será tu nuevo apodo—le dijo y la tomó de la mano—, pero solo yo podré decirte así.

23 de Diciembre de 1989 - Segundo Año.
—Venera, quiero hablar contigo...a solas, antes de que te vayas—le dijo Atanas a la pelinegra que se encontraba en el patio sentada con dos de sus amigos—. ¿Se puede?
—No tengo ningún problema—dijo poniéndose de pie y aceptando la mano del rubio.

Caminaron hasta uno de los muchos balcones que tenía el colegio, el sol se estaba poniendo y eran los únicos ahí.

—Hace tiempo quería confesarte mis sentimientos—hablo Atanas acercándose a la Lestrange-,- me gustas Venera, pero no sé si sientes lo mismo.
—¿Por qué no me lo preguntas?-le respondió Venus.

—¿Sientes algo con mi?—los ojos del rubio brillaban y tomó las manos de la menor.
—Y-yo...si, hace tiempo—respondió con las mejillas tan rojas como un tomate.

6 de Enero de 1990 - Segundo Año
—No sabes cuanto quería verte, payak—dijo el rubio abrazándola, habían ido al mismo lugar donde se confesaron sus sentimientos, pero ahora era de noche.
—Lo mejor de mis vacaciones fueron tus cartas, amo leerte—comentó Venus.

—Pero es mejor estar así ¿no?, juntos—dijo Atanas acercándose a ella, estaban sentados en el piso y podía sentir como sus respiraciones rozaban.
—Si...te extrañe—Venus lo miraba a sus ojos azules, mientras que la mirada de Atanas divagaba entres sus ojos y sus labios.

—¿Puedo besarte?
—Sería mi primer beso...me agrada que sea contigo—le dijo y el sin mas rodeos la beso.

Fue el primer beso de Venus.

14 de Febrero de 1990 - Segundo Año.
—¿Enserio Atanas? 5 cartas, 20 chocolates y helado de menta—le dijo cuando se encontró al rubio, él le había dejado todos esos regalos.
—Tenía que hacer de este tu mejor san valentín—le respondió abrazándola—, además se que es tu favorito.

—Claro...—el helado favorito de Venus era el de fresa pero no le importaba—. Muchas gracias Atanas, no tenías que...
El rubio la callo con un beso en los labios, él era tan tierno con ella.
—No digas eso, siempre te daré lo mejor.

7 de Abril de 1990 - Segundo Año.
—A veces me gusta imaginar que esto durara mucho tiempo—dijo Venus mientras estaban acostados viendo las estrellas.
—¿Esto?
—Si...ya sabes, nosotros.

—¿Lo dudas? Yo estoy demasiado enamorado de ti Venera, ya nos vi en la graduación del otro y luego llevando a nuestro hijos al puerto.
—¿Hijos? Wow...—se sorprendió con los planes a futuro del rubio, pero en el fondo quería lo mismo—. Bueno si tenemos hijos me gustaría que fuera a Hogwarts.
—Como tú quieras, payak.

13 de Mayo de 1990 - Segundo Año.
—¡Feliz Cumpleaños Payak!—exclamó un rubí corriendo hacia su amada con un ramo de rosas rojas, Venus le había dicho que sus favoritas eran los claveles blancos, pero de nuevo no le importaba, venía de él y eso era suficiente—. Una flor, para otra flor.
—Son hermosas amor, muchas gracias—respondió recibiendolas.

—¿Me dijiste amor?—pregunto con algo de sorpresa.
—¿No te gusta? Si quier...—Venus fue callada con un beso.
—Me encanta, mas aun viniendo de ti.

—Te quiero, Atanas.
—Yo te quiero más, Venera.

Fue el primer amor de Venus.

1 de Junio de 1990 - Segundo Año.
—Me contaste que tu hermano cumplio 11, ¿cierto?
—¡Si!—respondió emocionada, extrañaba a Pólux—. Ya quiero que venga y lo conozcas, le he hablado de ti.

—Me alegra eso, le enseñaré todo lo que sé y jugará en los Osos como yo.
—Viktor ya le ha lavado el cerebro, dice que debe quedar en los Halcones.

—¿Por qué Viktor parece querer estar siempre un paso por delante de mí contigo?
—No seas tonto, Atanas—dijo tomando su mejilla—. Lo único que quiero es a ti.

Y era cierto...Venus le dio un beso lleno de amor y cariño, jamas penso que seria el ultimo.

Así todos esos momentos pasaban una y otra vez por su mente como si una película romántica con un final tristemente barato estuviera rodando en su cabeza.

¿Amor? ¡Por favor! ¿Por qué no le hice caso a la abuela?

El amor te hace débil...La voz de Druella Black-Rosier resonaba en su cabeza, era cierto, en otra situación ella jamás se hubiera encontrado así y ahora estaba en su ducha llorando como una tonta.

Su abuela estaría tan decepcionada de ella, ¿cómo se le había ocurrido abrir su corazón? Si simplemente hubiera escuchado un poco más a la encargada de su crianza todo seria diferente, no estuviera sufriendo.

Venus pensaba en sus tíos Narcissa y Lucius, ellos se veían tan enamorados. ¡Ella quería algo así! Pero al parecer eso viene después de casarte con alguien que no amas, que aprendes a amar, ella no aprendió a amar a Atanas, ella solo le entrego todo de ella y él lo hizo añicos.

Salió de la ducha y se tiró sobre su cama, llorando.

—¿Es que acaso todo fue una mentira?—se preguntaba así misma—. ¿Es que no fui suficiente?

—Seguro no soy lo suficientemente bonita, o lo suficientemente mujer...—sollozaba y sentía como su cara estaba empapada, se sentía se sentía terrible—. ¡No lo entiendo!

Cuando fue a cambiar de posición para estar más cómoda en medio de su llanto sintió algo en su cama y un sonido de papel arrugado.

Con la mano busco entre el desorden de sábanas que había hecho durante su llanto y encontró una carta, no una cualquiera.

Tenía el símbolo del ministerio y de Azkaban, era de sus padres.

Quería leerla pero sabía que si lo hacía ahora no tendría cabeza para responder y lo olvidaría así que la guardo.

—Creo que debo salir a caminar, la escuela está sola al fin y al cabo—dijo mirándose al espejo.

Se puso unos pantalones de licra negros y un sueter tejido verde oscuro que tenia bordado el escudo de los Lestrange en el lado izquierdo, unos zapatos comodos y salio de la torre de las chicas.

Las lágrimas había parado de caer por sus mejillas, o tal vez era el viento frio que se deshacía de ellas.

Venus llegó hasta el pasillo del tercer piso y se sentó en uno de los ventanales, desde donde estaba podía ver el lugar donde se escondía la carpa de la fiesta, eso solo trae amargos recuerdos.

Así que las lágrimas empezaron a caer de nuevo, Venus subió sus rodillas a su pecho y metió su cabeza entre ellas.

Estaba rota, no solo su corazón, ella también. Se sentía poca cosa, tal vez Atanas si tenía que mirar a otras, ella no era suficiente.

Creyó que todas las veces que se sintió la reina del mundo fue sólo su ego vestido de una ilusión, si no podía hacer feliz al chico que supuestamente estaba enamorado de ella, ¿podría hacer feliz a los demás?

—Quiero irme de aquí y no volver jamás—se decía a sí misma—. No quiero verlo nunca más.

—¿Veka?—sintió una voz gruesa que la hizo alzar la cabeza, era Viktor—. ¡Por Gregorovich! ¿Estas bien?

—Yo...

—Claro que no lo estas...—se sentó frente a ella-.- Anton me dijo que te vio extraña, así que investigue.

—Entonces ya lo sabes—dijo secándose algunas lágrimas.

—Si lo sé, y creeme que estoy a punto de darle una paliza—la rabia se notaba en cada palabra de Viktor.

—No hagas eso—Venus puso una mano sobre su hombro—, no quiero que te expulsen por golpear al hijo del director.

—Siento que es mi culpa, Veka—dijo el búlgaro avergonzado—. Ako ne byakh kazal na Agata, che nyakoga sŭm chuvstval neshtata kŭm teb, tova nyamashe da se sluchi *Si yo no le hubiera dicho a Agatha que una vez sentí cosas por ti esto no hubiera pasado*.

—No es tu culpa, Vik—apretó un poco la mano que ya estaba en su hombro—. Siguren sŭm, che Agata ne e prinudila Atanas da napravi tova, koeto e napravila *estoy segura que Agata no obligo a Atenas a hacer lo que hizo*.

—Pero Veka yo...—iba a hablar pero ella lo interrumpió.

—Pero nada, ¿ok?—lo tranquilizo—. Si de alguien es la culpa es mía, yo no fui suficiente.

—¿No fuiste suficiente? ¡Venus si fueras mayor tendrías a toda la escuela a tus pies!—exclamó el Kum—. Eres bonita, inteligente...

—Pero no fui suficiente mujer, se supone que tengo trece y ya debo ser una chica madura—hablo con decepción.

—Oh...entiendo—Viktor estaba uniendo cabos.

Agatha tenía catorce años, pero si en Durmstrang todos "crecen" bastante rápido, la castaña lo hacía en velocidad turbo, con él había sido bastante habilidosa en ciertas cosas, él no la juzgaba, tampoco le molestaba pero ahora hacía parte del sufrimiento de Venus y no podía aceptar eso.

—No piensas nunca asi de ti, ¿si?—le dijo Viktor—. Tu no tienes que ser suficiente para nadie, los demás son los que deben buscar ser suficientes para ti.

—Gracias Viktor, eres de los mejores amigos que pude desear—lo abrazó y el bulgaro sintió un escalofrío por su espalda—, te quiero.

—Yo también te quiero, Veka—apretó el abrazo.

—¡Eso era lo que querías, ¿verdad Krum?!—una voz rompió el abrazo era Atanas que venía rojo de la furia—. ¡Mandaste a Agatha a provocarme para ir corriendo hasta Venus!

Ne padam tolkova nisko kato teb, Karkarov *Yo no caigo tan bajo como tu, Karkarov*—siseo Krum volteandose para verlo a la cara—. ¿Por que no te vas de aquí y la dejas en paz? Creo que ya hiciste suficiente.

Ne bŭrkate *tu no te metas*, no me importa que seas el otro protegido de mi padre te haré añicos la cara—lo desafió el rubio.

—¡Bueno ya!—gritó Venus poniéndose en medio de ambos—. Aquí nadie va a pelear con nadie.

Venera, payak, Venus...por favor tenemos que hablar, lo que vist...

—Yo vi lo suficiente como para tomar la decisión que tome, ¿si? déjame en paz.

—Ahora estás molesta, esta bien no hablaré contigo asi y menos con...este cerca—Atanas miró a Viktor con desprecio y siguió hablando—, pero te voy a reconquistar, lo prometo.

Venus no quería mirarlo a los ojos, se terminaría perdiendo en el azul de esos y caería.

—Haz lo que quieras Atanas-se limitó a responder.

—Y tu Krum, alejate de mi chica—dijo señalando con el dedo.

—Ella no te pertenece, Karkarov—espetó el bulgaro.

Kakto i da e, makhni se ot neya *Como sea, alejate de ella* ¿crees que no se que siempre te ha gustado Venus? Ochakvashe tozi moment da napravish kŭrpichka i da ya zavladeesh *Estabas esperando este momento para hacer de pañuelo y conquistarla*...¡pero ni creas que te lo permitiré!

—¡Viktor es mi amigo! Así que deja de amenazarlo y largate de aquí—Venus se agarraba el puente de la nariz con una mano, cerraba los ojos y respiraba hondo--. Yo ya me voy a mi habitación.

Se despidió de Viktor con un abrazo, causando que Atanas soltara un gruñido. A el solo le dedico una mirada asesina y volvió a su torre. Ya Bárbara dormía así que decidió contarle todo mañana.

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A la mañana siguiente Venus y Bárbara ya habían empacado todo en sus baúles, todo estaba listo para sus anheladas vacaciones, en especial para la pelinegra que desearía no tener que volver a ese castillo.

Saludo a sus amigos que las estaban esperando fuera de la puerta de la torre de las chicas para ir al muelle a tomar el gran barco que los devolvería a casa.

Dobro utro payak *Buenos dias arañita*—dijo el despreciable rubio llegando a su lado, con un hechizo sacó una flor de su varita y se la tendió—, una flor para otra flor.

Venus lo ignoro olímpicamente. Para nadie pasó desapercibido en realidad, todos quedaron boquiabiertos, es decir ayer los habían visto juntos todo en Durmstrang Day y bailando en la fiesta.

Ahora todos querían saber porque Venus Lestrange había despreciado a Atanas Karkarov.

—¿Que...

—...fue...

—...eso?—dijeron Barbara y Dimitriv al tiempo. Ellos estaban acostumbrados a las muestras de cariño de la pareja.

—¿Qué pasó anoche?—preguntó la rubia.

—Más bien, ¿qué pasó cuando te fuiste de la fiesta?—añadió Dimitriv.

Venus agarró a sus amigos atrayendolos hacia ella.

—Tenemos que hablar—les dijo y luego habló en alemán con la esperanza de que las personas cerca a ellos no entendieran—. Gestern ist etwas passiert, zu viele Dinge sind passiert, wir müssen uns allein in einem Wagen fühlen. *Ayer pasó algo, pasaron demasiadas cosas, necesito que nos sentemos solos en un vagón*.

—Lo que tu digas.

Los tres se sentaron en un compartimiento y Venus les contó todo. Sus amigos estaban furiosos y cuando el barco zarpó y todos se despidieron, los demás no dudaron en lanzar malas miradas al rubio sin importarles que era el hijo del director.

Venera...-era el de nuevo, Venus se dio la vuelta pero mantuvo la distancia.

—¿Qué quieres ahora?—espetó.

—Solo quería despedirme—dio un paso para acercarse pero Venus dio uno atrás—, te escribiré...lo que paso no significa que no quiera saber de ti.

—Me escribirás para nada porque no te responderé.

Con eso dicho Venus se fue detrás de sus abuelos y su hermano a los cuales ya había visto.

—¡Drella!—exclamó su hermano menor corriendo a abrazarla.

—Acturus...te extrañé tanto—dijo apretandolo mas contra ella—. Hola abuelos.

—Hola querida...

—¡Drella! ¡Drella! ¿Leíste la carta de madre, verdad?—su hermano la jalaba del brazo y daba brincos de felicidad.

—E-eh si...—mintió.

—¿Y no te emociona?—le preguntó su abuelo.

—¡Claro que sí! Digo...es algo que siempre quise, ¿no?—dijo desconfiada y con una falsa sonrisa, no tenía ni idea de lo que hablaba.

—Nosotros estamos muy felices, tu hermano ni se diga—añadió su abuela.

—Cuando llegues a casa te lo enseñare todo, Draco y Cissa también están muy emocionados—decía el menor con alegría.

Venus le sonrió a su familia y dio un último adiós con la mano hacia sus amigos.

Empezaron a caminar al Ministerio Búlgaro para volver a Inglaterra por la Red Flu Internacional.

La pelinegra solo tenía una cosa en la cabeza; ¿Que tenía esa carta y por que todos en especial mi hermano se veían tan emocionados?

Apenas llegara a su casa iba leer esa carta.

§
¡Triple Capítulo!

Si y no. El anterior ya lo había publicado pero lo envié a borradores por temas de errores en las líneas temporales, pero ya.

Espero los hayan disfrutado! En ELECTRIC LOVE también les dejé doble capítulo.

Gracias por el apoyo a este fic, va más lento que el primero, pero amo escribirlo.

Voten, comenten y su game aquí y en mi bello Instagram: @/ela.moony.13

Xoxo, Ela.
§

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