En este One-shot Jim y Krel serán solo humanos. ¡¡Ahora si comencemos!!

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Verano, esa estación del año que todos esperamos que venga, cuando la escuela se termina y al fin poder descansar.

La feria anual de Verano en Arcadia se pondría esa semana, todos los habitantes estaban ansiosos de que terminarán de poner los juegos, puestos de comida, luces y música para poder ir todo esa semana ha divertirse en las vacaciones.

Y eso harían la joven pareja, Jim y Krel, al principio el latino no estaba muy seguro de ir.
- No lo sé Jim, sabes que no me gusta ir a lugares con mucha gente y las ferias siempre son ruidosas y todo esta sucio...- y así siguió por tres largos días diciéndole a Jim muchas razones por las cuales no ir

Pero, Krel no se pudo resistir a las súplicas, y besos, de Jim.
La semana había llegado, la feria era más grande que otros años, ocupaba casi todo el espacio del centro de la ciudad; familias, niños, adolescentes, parejas, incluso personas de la tercera edad empezaron a entrar a la feria, para poder ser los primeros en las largas filas que se harían para poder subirse a los juegos mecánicos.

La música estaba a todo volumen, los juegos se veían desde muy lejos por todas las luces que tenían, todos se estaban diviertiendo, excepto tal vez un latino.
- Me esta diciendo que como nada más tiré cinco globos, ¿Solo puedo elegir entre unos malditos plumones qué se que después de usarlos por tres minutos ya no servirán o una miserable muñeca?- preguntó enojado Krel viendo al vendedor

Jim solo tapó un momento su rostro por la vergüenza, vió al vendedor y le susurró un “Lo siento" y tomó el hombro de su novio.
- Krel, ¿Qué te parece si vamos a otro puesto?- dijo tranquilo
- Bien...- dijo serio cruzándose de brazos- mejore los premios que da- fue lo último que le dijo al vendedor lléndonse de ese puesto

Los dos iban tomados de la mano, viendo a que puesto ir ahora.
- Aún no se como me convenciste de venir- dijo Krel viendo ver correr a los niños riéndose y pasandosela bien
- Solo debes darle una oportunidad a las ferias, pueden ser divertidas
- Si tú lo dices- dijo Krel viendo los puestos y los juegos mecánicos

Iban caminando sin rumbo fijo, Krel iba viendo los juegos y entonces vió uno que le llamó completamente la atención.
- ¿Qué tal ese?- preguntó señalando el juego
- ¿Carritos chocones?- preguntó Jim desconcertado, no sabía que le gustaría ese tipo de juegos a su novio
- Si, porque no, puede ser divertido- dijo viendo a su novio refiriéndose a lo que le habló hace rato
Jim rodó los ojos divertido- Esta bien, vamos
Krel le dió un beso rápido en la mejilla y los dos se fueron a formar.

Su turno había llegado, pagaron por estar 20 minutos, los dos se subieron a un carro morado, el chico que vigilaba el juego dió unas cuantas instrucciones y encendió el juego.
Al volante estaba Jim quien empezó a manejar el carrito.
- Hace mucho que no me subía a uno de estos- dijo Jim tratando de controlar el volante
- Yo también- dijo Krel viendo como varios niños también batallaban con el carrito

Entonces sintieron como alguien los había golpeado en la parte de atrás.
- ¿Steve?- preguntaron al unisono la pareja
- Que pasa perdedores, ¿No pueden controlar el carro?- preguntó divertido
- Oh claro que podemos- dijo de repente Jim dandole vuelta al carro rápidamente y estrellandolo contra el del rubio

Krel se quedó sorprendido un momento, al fin y al cabo Jim si pudo controlar el carro.
- O las vas a pagar Lake- dijo Steve trabando de alejarse de ahí, pero su carrito no avanzó- vamos...- dijo desesperado jalando fuertemente el volante, el cual por inercia se rompió- demonios- dijo enojado- ¡Hey chico!- llamó sin éxito al encargado, ya que este estaba coqueteando con una de las chicas de la fila

La joven pareja reía por esa escena tan divertida, Steve se quedó varado ahí, hasta que más niños en carritos empezaron a rodear a Steve listos para chocar sus autos contra el de él.
- Oh no- dijo antes de que más de cinco carros chocarán contra él
Jim y Krel salieron de esa zona y empezaron a aprovechar lo que les quedaba de sus 20 minutos.

Al salir, no podían dejar de reír.
- Jim tenías razón, fue muy divertido- dijo Krel viendo a su novio y tomando su mano nuevamente
- Que bueno que te gusto- dijo acercándose a Krel y dándole un rápido beso en los labios
- Tengo hambre, ¿Podemos ir por algo de comer?
- Pero, dijiste que la comida de feria era pésima y que transmitía enfermedades- recordó Jim una de las razones que le había dicho su novio para no ir
- Ok, tienes razón, pero en serio tengo hambre

Jim sonrió, al fin su novio se estaba divirtiendo.
- ¿Te parece si vamos por unas banderillas?
- Me encantaría- dijo Krel arrastrando a su novio al puesto más cercano de comida

Los dos compraron su comida y siguieron paseando por la feria.
- ¿Te estás divirtiendo?- preguntó Jim
- Sorprendentemente sí, pero nada más por lo que pasó con Palchuk
- Tienes razón, eso fue muy divertido- dijo Jim

Acabaron su comida, y siguieron jugando en los puestos; fueron al puesto de canicas.
- Ganaste 30 puntos- le dijo el vendedor a Jim- puedes escoger entre ese amuleto o el perro de peluche
- Yo se que quieres el perro- dijo sarcástico Krel
- Jaja, que gracioso- dijo Jim viendo el amuleto, este era de un azul celeste con varios detalles, y decía una frase que le pareció bastante interesante a Jim

“Por la gloria de Merlín, la luz del día está bajo mi mando"

- Quiero el amuleto, por favor- el vendedor tomó el amuleto y se lo dió al ojiazul
Los chicos siguieron su camino, Krel tomó el amuleto y lo empezó a ver.
- Es bastante bonito, aunque hubiese preferido el peluche- lo molestó el latino
- A mi me pareció genial- dijo Jim tomando el amuleto y guardandolo

También fueron a un puesto donde tenías que lanzar aros hacía varias botellas, Krel vió el puesto y entonces vió un premio que si le llamo la atención.
- O por dios- dijo Krel deteniéndose
- ¿Qué pasa?- dijo Jim, pero apenas volteó, sabia porque su novio se había detenido
En la pared de los premios del puesto había una sección donde nada más había pósters, y uno de los que estaban ahí era
- ¡Es el póster de Akiridion 5!- gritó emocionado Krel

Y es que Akiridion 5, era uno de los videojuegos de los 80's favoritos de Krel, estaba obsesionado con ese juego, ya lo había pasado mas de 20 veces, tenía casi todo de él, figuras de acción de los personajes, playeras, hasta un CD con la banda sonora del videojuego, lo único que nunca había podido encontrar era un póster, había buscado en Internet, en tiendas donde vendían cosas viejas, pero nada, no había encontrado un miserable póster que poner en su habitación, hasta ahora.
- Tenemos que ganar ese póster- le dijo Krel decidido a su novio tomándolo del brazo y llendo directo al puesto

- ¿Cuánto para ganar el póster de Akiridion 5?- preguntó el latino al vendedor
Este solo empezó a reír confundiendo a la joven pareja.
- Por lo menos 40 puntos, es imposible llegar a tanto- dijo riendo otra vez
Krel tomó a Jim un poco apartado del puesto para hablar con él.
- Krel se que quieres ese póster
- Como no tienes idea- lo interrumpió Krel
- Pero sabes que esos juegos están hechos para nunca ganar, como dijo el chico es imposible obtener tantos puntos
- Vamos Jim, tú tienes excelente puntería, se que podrías ganarlo, ¿Por mí?- dijo poniendo una cara de súplica, que su novio no pudo resistir
Jim suspiró y vió a su novio con una sonrisa- Esta bien
Krel lo abrazó y le dió un beso rápido en los labios.
- Entonces vamos a ganar ese póster- dijo Krel llendo con su novio nuevamente al puesto

Cuando fueron al puesto a decirle al chico que jugarían, les explico que había cuatro filas de botellas; las primeras valían 5, las segundas 10, las terceras 15 y las cuartas 20.
Le dió a Jim cuatro aros y le dijo un “Buena suerte" que se escuchaba como si supiera que nunca obtendría los 40 puntos.
Jim tiró el primer aro, el cual no cayó en ninguna botella, se estaba poniendo nervioso, quería que su novio tuviese su anhelado póster. Respiró profundo y lanzó el segundo el cuál cayó en la segunda fila, su novio lo felicito dándole un beso en la mejilla.

Tiró el tercero, y este sorprendentemente llegó a la cuarta fila, ya solo le quedaba un aro, tenía que lograrlo.
- Tu puedes Jim, creo en tí- dijo Krel animando a su novio
Jim lo vió y le dedicó una sonrisa, luego vió el aro y al final a la botella, cerró los ojos un momento y respiró tranquilizandose, abrió los ojos y lanzó el cuarto y último aro, y este cayó en la segunda fila, habían conseguido los 40 puntos.
Krel empezó a gritar de emoción y abrazando a Jim quien también estaba emocionado.
- ¿No qué era imposible?- le dijo Jim viendo al vendedor que estaba sorprendido y a la vez enojado enrollando el póster
- Felicidades, aquí tienes- dijo el vendedor dándole el póster a Krel quien lo tomó muy feliz

Los dos se fueron del puesto y Krel siguió abrazando a su novio.
- En serio muchas gracias- dijo Krel
- No hay problema, lo que sea para ti lindo- le dijo Jim dándole un beso en los labios, que Krel aceptó gustoso- ¿Quieres seguir paseando?
- Claro- tomó la mano de su novio y siguieron caminando

Ya habían estado en la feria por más de 2 horas y media, decir que Krel estaba feliz sería decir poco, Jim lo veía y juraba que sus ojos brillaban de lo contento que estaba, aunque algo más brillante captó la atención de Jim, dirigió su mirada arriba y vió una rueda de la fortuna, ya no había tanta gente en la fila por la hora, Jim paró de caminar y vió a su novio.
- ¿Quieres ir a la rueda de la fortuna?
Krel la vió, era bastante grande, y cuando habían dicho que habría nuevas atracciones no pensó que se refieresen a poner una rueda de la fortuna, pero aún así no había tanta gente y sería divertido.
- Claro, vamos- dijo Krel con una sonrisa

No tuvieron que esperar mucho tiempo en la fila, eran de las pocas personas que querían subirse, al llegar con la encargada le pagaron la entrada y se subieron a una de las cabinas, la chica cerró la puerta y les dió unas cuantas instrucciones.

Después de esperar a que subiera a otras personas en las demás cabinas, la rueda se empezó a mover, Jim y Krel iban sentados juntos viendo por una de las ventanas la feria, se alcanzaba a ver todo; las personas, los puestos, las luces.
- Se ve muy hermoso- dijo Krel
- No tanto como tú- dijo Jim tomando su mano y dándole un beso, el cual el latino aceptó
Se separaron con una sonrisa regresando su vista a la feria.
- Tenías razón, fue divertido- dijo de repente Krel
- Te lo dije- dijo Jim feliz al ver que su novio se había divertido

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Espero que les haya gustado este One-shot, iba en un taxi y entonces ví una feria y pensé “Hey, no sería mala idea hacer un One-shot de esto" y bueno, pues aquí está.

Recuerden, cualquier idea para One-shots la tendré en cuenta.

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