ii. Friends




ii. Amigos

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En cuanto la cena se dio por terminada, los prefectos se encargaron de guiar a los de primer año a la sala común, mientras salían, Phoebe alzó su cuello para poder ver si alcanzaba a ver a Theo, pero estaba segura de que no se lo toparía puesto que su primo Roan le había dicho que la sala común de los Slytherin se encuentra en las mazmorras, y ella como Gryffindor se está dirigiendo al séptimo piso, la cual es muy acogedora, cuenta con mesas, armarios, sillones y un gran tablero para colgar anuncios.

Percy Weasley (un prefecto y aparentemente hermano de los gemelos y Ron) les indico que el dormitorio de las niñas se encuentra por la izquierda mientras que el de los hombres a la derecha, así que después de echar un vistazo a la sala común Phoebe subió dando brincos por las escaleras hasta la puerta con la placa en donde indicaba su nombre y el de cuatro niñas más: Lavender Brown, Hermione Granger, Amber Noel y Parvati Patil.

Al entrar, ladeo una sonrisa al ver su habitación, Lavender y Parvati ya están hablando y lo hacen con demasiado entusiasmo, tanto que a Phoebe le mareó un poco. Arrugó su nariz sin poder evitarlo y camino a la cama donde estaban sus pertenencias para ver a Amber quien mueve sus manos nerviosa.

—Amber, ¿no hablas? —preguntó en voz baja Phoebe a la rubia, puesto que incluso en la cena se había mantenido sin hablar y solo había movido su cabeza.

—Si lo hago —dijo con una voz aguda y algo baja, se inclinó sobre su baúl para sacar su pijama y Phoebe la miro mientras se mueve de un lado a otro en su cama—. Es solo que... me da pena —murmuró ligeramente sonrojada.

Phoebe ladeo una sonrisa—. Oh, descuida, a veces me pasa —admitió.

Pero es mentira, Phoebe en realidad no es una persona penosa.

—Bueno, seremos compañeras por siete años, podemos ser amigas —propuso con una pequeña sonrisa.

—Sería genial —admitió con una sonrisa.

La puerta del baño se abrió y Hermione salió con su pijama ya puesta, la niña se camino a la cama frente a la de Phoebe y después de dejar su pijama se sentó en su cama viendo a sus compañeras, como si quisiera decirles algo.

—Hum, mañana tenemos que estar en el comedor temprano por la clases comienzan a las nueve —dijo por fin Hermione.

—Ya lo sabemos —respondió Lavender con voz chillona.

—Simplemente se los estoy recordando —repuso Hermione.

—Pues no lo hagas —pidió Parvati.

Phoebe frunció el ceño ligeramente molesta.

—Oigan, no sean groseras con Hermione, ella trata de ayudarnos —dijo cruzándose de brazos. Ambas levantaron su cuello y se fueron a acostar, Hermione bajó su cabeza un tanto apenada—. Oye Herms, ¿te puedo llamar así? —asintió un poco confundida—. ¿Crees poder ayudar a levantarme por la mañana? —una sonrisa se formó en su labio y asintió.

—Claro.

—Genial —Phoebe rápidamente saco su pijama la cual consta de un camisón (que pertenecía a su primo Edmund) para correr al baño junto donde lavo sus dientes y se cambio. Salió dando brincos y se aventó en su cama para dar un par de vueltas y encontrar la posición en la que dormiría. Poco a poco, las velas se apagaron y Phoebe soltó un bostezo para después hablar. Descansen.

—Buenas noches.

Y sin más, Phoebe cerró sus ojos cayendo en un profundo sueño.

Los párpados de Phoebe temblaron un par de veces, escuchaba su nombre decir a los lejos pero el sueño era tan profundo que le pesaba despertarse, aparte, estaba devorando unas galletas con chispas de chocolate, y aunque todo parecía ir perfecto, un chorro de agua le mojo por completo el rostro logrando que despertara.

Se levantó asustada y su corazón latiendo con rapidez, llevó una mano a su pecho viendo a Hermione (quien tiene su varita afuera) y a Amber, quien está soltando risas. .

—¿Qué les pasa? —preguntó asustada.

—Llevo veinte minutos así. ¿Cómo es que tu mamá te levanta? —indago soltando un suspiro.

—Hum, no lo hace —respondió limpiando su rostro con su sábana—. No tengo mamá —tanto Amber y Herms se miraron incómodas.

—Oh, yo, yo lo siento —se inquietó.

—Oh descuida, no está muerta. Bueno, a este punto no lo sé —murmuró con el ceño fruncido—, simplemente nos abandonó. Pero en realidad, es una buena pregunta , sigo sin saber cómo es que mi padre me levanta, gracias por el chapuzón, creo que me dio energía —trato de cambiar el tema con rapidez y al parecer, eso también las alivio a ellas—. Tomaré una ducha rapidísima, estoy lista en diez minutos.

—Bien, apúrate que Amber tiene hambre —dijo Hermione, Amber asintió haciendo un puchero.

Tomó una toalla y metió su uniforme al baño, entro a un cubículo, se deshizo del pijama y comenzó a bañarse lo más rápido posible, no tardó ni diez minutos. Al salir se secó y vistió con rapidez, coloque un poco de fragancia y trató de secar su cabello con la toalla, mas aun así quedo un poco húmedo.

—¿Alguien sabe peinar? —preguntó saliendo con un cepillo en la mano, Hermione soltó un suspiro y le pidió sentarse.

—¿No lo sabes hacer? —preguntó Amber colgándose su bolso.

—Nop, mi cabello siempre es muy rebelde —admitió con una mueca.

—Descuida, el mío también —dijo Hermione con una sonrisa—. Es solo que hacer un peinado se me es difícil por mis chinos.

Logró hacer una cola alta en el cabello de Phoebe, dejando algunos mechones por los costados de su frente, por lo que Phoebe se encargó de hacer aún más largo su cabello para que la coleta resaltará y cómo siempre mantuvo su cabello plateado con algunos destellos lilas.

—Listo, ya quedo —se miro en el espejo y sonrió.

—Vaya, gracias Herms, me veo bellisima —dijo moviendo su coleta de un lado a otro, haciendo que Hermione y Amber soltarán risitas.

—No es nada, Phoebs –sonreí ante el nuevo apodo.

—¿Nos podemos ir? Tengo hambre —recordó Amber.

—Andando.

Bajaron con sus bolsos colgando de sus hombros, llenos de libros, plumas y tintas para el resto del día. Phoebe daba brincos por la gran escalera mientras Amber señalaba los cuadros y Hermione procuraba que ninguna de las dos terminará cayendo y lastimándose.

—Hermione, serás mi guía —dijo Amber sentándose frente a Phoebe—, se ve que tienes buena memoria.

Phoebe vio la mesa llena de comida y no tardó en comenzar a llenar su plato porque recordó las palabras de su padre diciéndole que tiene que comer bien para poder aprender mejor, por lo que tomo tostadas las cuales unto con mermelada y les puso banana, se sirvió jugo de manzana y como vio un plato repleto de waffles no dudo en colocar dos en su plato al igual que diversas tiras de tocino.

Hermione y Amber la miraron con los ojos abiertos.

—Coman mucho niñas, el desayuno es la comida más importante del día —les dijo cual madre preocupada de sus hijas.

Dio una mordida a su tostada mirando la puerta al Gran Comedor, logrando ver el momento en donde Theo entraba detrás de Draco Malfoy y dos niños más (a los que Phoebe le recordaba a gorilas). Theo quien iba con expresión seria abrió sus ojos viendo a Phoebe con ligera emoción, alzó su mano para saludarla con una sonrisa.

—¿Es tu novio? —pregunto burlona Amber.

—Es mi amigo —corrigió.

—Ih, tu novio —a su lado, los gemelos Weasley tomaron asiento, Fred fue quien estiró su mano para tomar una tira de tocino del plato de Phoebe, pero ella le dio un manotazo impidiendo tomarlo—. Ay, mi manita —se quejó.

—No es mi novio, no toques mi tocino —le advirtió con molestia mientras su cabello tomaba un ligero color rojo.

—¡Tu cabello se ha puesto como el fuego! Respira mujer —bromeó Fred, Phoebe se cruzó de brazos molesta, vio al gemelo del lunar reconociendolo como George, por lo que muy segura habló.

—Basta ya, Fred.

—¡Woo! ¿Cómo supiste que soy Fred? —preguntó ligeramente sorprendido.

—Tú eres más agradable —George la miro ligeramente molesto.

—¿Cómo sabes quién es más agradable? Ni siquiera me conoces —pusó los ojos en blanco ante su forma de hablar.

Literal, los puso en blanco.

—Bueno, tú no eres tan agradable conmigo como lo es Fred.

—Cierto, cierto, yo soy una amor, ¿o no niñas? —preguntó a Hermione y Amber, ambas se miraron y bebieron jugo—. ¿Eso fue un sí? —la profesor McGonagall apareció dejando los horarios y Fred tomó el de Phoebe—. Uh, transformación y luego pociones con Slytherin, que suerte, ¿no? Verás a tu novio.

—¡Que no es mi novio carajo! —rápidamente cubrí mi boca y Fred comenzó a reír—. Lo siento, no debí decir eso, es solo que me hiciste enojar.

—Lo sé, tus mejillas se han inflado como globo.

—Mira Giles, tu novio viene para acá —señaló George a lo que se ganó una mirada de odio por parte de Phoebe.

—Nos vemos en clase —dijo a las niñas que asintieron sonriendo. Se paró tomando su bolsa y caminó hacia Theo—. Hola, ¿ya desayunaste? —preguntó cuál madre preocupada.

—Comí una tostada y jugo —respondió ligeramente divertido—, ¿vamos al patio? —Phoebe asintió sonriendo—. ¿Qué tal tu sala común? —al salir, unos chicos de Hufflepuff que entraban, al gran comedor les miraron ligeramente sorprendidos, uno de ellos incluso se asomó para ver el uniforme y sorprenderse aún más.

—Es linda —confesó sin importar a los chicos que le miran raro—. Es acogedora y cálida. ¿Qué tal la de Slytherin?

—Es muy fría y oscura —admitió sonriendo—. Qué diferencia.

—Lo sé —ambos soltaron risitas—. ¿Te llevas con Malfoy, eh? —él asintió con una mueca.

—No te conté, pero su padre y mi padre se llevan muy bien —levanté mis cejas y este hizo una mueca—. De hecho... —Theo pareció meditarlo.

—¿Qué? —preguntó ligeramente sorprendida.

—Oh, me vio hablando contigo.

—¿Y?

—Te reconoció como Giles, sabe quién eres —Phoebe rodó los ojos y se abrazó a sí misma para salir al patio y sentir el aire de la mañana.

—¿A qué te refieres?

—Bueno, eres sangre pura —asintió lentamente con su cabeza—, ya sabes, tu papá siempre se mantuvo al margen, pero tu mamá...

—Sí, lo sé, está loca —musitó a lo que Theo hizo una mueca.

—En realidad, no me importo, tú me agradas.

—Gracias, también me agradas.

Disfrutaron del tiempo en lo que iniciaban las clases hablando de sus compañeros de cuarto, resulta que los dos gorilas en realidad son niños y se llaman Vincent Crabbe y Gregory Goyle, y por lo que Theo le dijo son como los perros de Malfoy ya que lo siguen a todos lados. Phoebe se encargó de contarle de Brown y Patil haciendole saber como eran tan maleducadas y a Theo no pareció sorprenderle.

Faltando quince minutos para que las clases inicien, ambos se pararon y comenzaron a caminar en dirección al tercer piso, donde unos chicos de Ravenclaw les indicaron que se encuentra el aula de transformaciones.

—Estamos perdidos, admitelo —dijo con diversión Theo.

—¡No! Aún tenemos cinco minutos —reconoció Phoebe al ver su reloj.

Y cuando vio como unos pelirrojos salían de un aula soltando risitas, Phoebe tomo de la mano a Theo para correr hacia ellos.

—¡Fred! ¡Hey! —ambos giraron y pare en seco, Theo acomodo su uniforme.

—Mira hermano, si es Phoebe... —habló George sonriente.

«¿Es bipolar acaso?»

—...y tú —dijo mirando con repugnancia a Theo, quien también le regreso la misma mirada.

—¿Dónde es el aula de transformaciones, Fred? —Phoebe recalcó el nombre del gemelo al que se estaba dirigiendo y George se cruzó de brazos.

—A la vuelta, segunda puerta en la esquina.

—Gracias, vamos Theo —dijo tomándolo de la mano para darse la vuelta y comenzar a caminar en silencio—. Siento eso —murmuró apenada.

—Descuida —habló rápidamente—. Estoy acostumbrado.

—No deberías... en realidad, con ese gemelo no me habló —él la miro confundido—. Es George, ayer no fue tan agradable y he decidido solo hablarle a Fred, por qué... se ve más agradable.

—No lo sé, son Weasley —Phoebe miro a Theo y él levanto los hombros—. Recuerda que nos criaron de distinta manera.

—Sí, bueno, te recomiendo seguir tus propias decisiones —respondió con simpleza. Theo la miro de reojo, pero Phoebe no lo noto ya que vio a Hermione y Amber entrando al salón.

Ambos tomaron asiento juntos en medio del aula y esperaron a que la profesora McGonagall llegará. 

—Nott —el nombrado alzó su cabeza para a ver a Draco—, dijiste que te sentaría con Goyle —dijo inspeccionando a Phoebe que se cruzó de brazos.

—Oh, lo siento, es solo que estoy con mi amiga —Theo recalco la palabra amiga y Phoebe miro a Draco con cierta burla y emoción.

—Giles, ¿uh?

—¿Se te ofrece algo, Malfoy? —preguntó cambiando el color de cabello a un tono rojizo y le dedicó una sonrisa.

Draco y uno de sus gorilas tomaron asiento en la butaca del lado derecho a la de Theo y Phoebe, mientras que el otro gorila tomó asiento en la butaca del lado izquierdo dejándolos en medio.

—Hey, tranquila, no me cambiare de lugar —susurró Theo quien tiene una sonrisa tímida—. Aparte, somos amigos y yo debo de aprender a tomar mis propias decisiones —Phoebe reprimió una sonrisa, pero en cuestión de segundos soltó una risa sin poder contenerse.

La profesora McGonagall entró al aula y la clase comenzó.











Nota de Autora:

Hola, para quienes estén empezando a leer esta historia solo quiero aclarar que yo se que Georgie es como el más "bueno" de los gemelos, pero como re obvio que a mi bebito le gusta la Phoebe pues de bueno solo va a estar él pero no va a ser bueno con Phoebe (¿tal vez si?) so... jeje salu2.

Espero les esté gustando.

Lots of love, Cici 🍪💙

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