Chapter 13:-

Era sábado por la mañana y Jimin estaba pasando el día en una casa de campo de los Kim con su familia y amigos. Roseanne, su esposa desde hace ya tres años y Ryujin su pequeña hija de dos años estaban en la piscina de la casa junto a Lalisa Manoban y su sobrino de cinco años, Taehyun.

-¿La estás pasando bien? .-le preguntó Jin mientras le ofrecía una gaseosa.

-Sí, claro, gracias por invitarnos.-le respondió el aludido recibiendo la bebida.

-Está bien, después de una larga semana de trabajo es agradable venir aquí con los niños.

-Sí, tienes razón, y hablando de eso, ¿dónde está Soobin?

-Oh, seguramente está escondido por allí, está en esa edad en la que adora intentar tirar a la gente al agua.-señaló el mayor encogiéndose de hombros. No acababa de decir esto cuando un pequeño de cabellos claros, con flotadores en los brazos y gafas de buceo llegó corriendo a toda velocidad por la piscina para envestirlo.

Sin embargo, y como era de esperarse, el niño no logró mover a su pesado padre ni un solo centímetro.

-Hablando del rey de Roma.-exclamó Jin al sentir el pequeño tambalear junto a sus piernas.

-Ah, ya veo lo que quisiste decir con "intentar".-comentó Jimin al ver al crio de la familia Kim luchar contra las piernas de su padre.

-¡Papá! no es justo.-murmuró inteligiblemente el niño desistiendo de su intento.

-¿Ah? ¿Ya te das por vencido, enanito? .-preguntó una voz masculina atrás de ellos tres. Jimin volteó inmediatamente al reconocer el tono jocoso de su mejor amigo que acababa de llegar a la reunión.

Kim Taehyung estaba usando una pantaloneta de baño y una camiseta de botones roja. Sonreía de oreja a oreja.

-¡Tío Tae! .-exclamó el pequeño corriendo a los brazos del hombre que acababa de llegar.

-¡Hola, enano! .-le saludó Kim alzando al niño en brazos.

-Es un gusto en ver al hombre que le está enseñando a mi hijo a hacer maldades.-le saludó Jin entre bromas. El aludido sonrió.

-¿Qué es de la vida de un niño sin bromas? .-se burló Taehyung y estiró la mano para apretar la del doctor y la de su mejor amigo que lo miraba con sonrisas fraternales.

-Pero tío Tae.-se quejaba el pequeño que tenía en brazos.-¡no ha funcionado!

-Eso es porque necesitas el elemento sorpresa.-dijo el castaño mirando al menor con picardía.

-¡Eso no es verdad!.-se quejaba el niño.-yo he tenido mucha sorpresa.

-¿Ah sí? .-cuestionó Kim nuevamente con una sonrisa traviesa.-¿hiciste algo cómo esto?

Dicho eso, Taehyung abrazó al pequeño Soobin hacia su cuerpo, y se lanzó con el menor corriendo a la piscina chapoteando lo suficiente como para empapar a ambos hombres que se encontraban cerca de ellos. 

Cuando los dos salieron a la superficie, el niño tosió un poco de agua y después de limpiarse los ojos con sus pequeños puños, miró a su padre y a Jimin los cuales estaban completamente empapados y sin miedo comenzó a reírse con muchas ganas.

-¿Ves, Soobin? Siempre hay una manera de conseguir lo que quieres.-se burló el castaño dejando caer al niño con los flotadores en la piscina.

El pequeño no paraba de reírse, así que no pudo contestar a eso, sin embargo no cabía duda de que estaba totalmente de acuerdo con lo que Taehyung le habia dicho. 

Tanto Jin como Jimin no pudieron más que reírse también, en ese mismo momento Taehyung salía de la piscina para quitarse las pendras húmedas, quedando únicamente con la pantaloneta de baño.

-Jennie me va a matar.-comento entre tanto colocaba la ropa mojada sobre una de las tumbonas que estaban al lado de la pileta.

-Eso es karma, amigo mío.-le dijo Park mientras vaciaba su vaso de gaseosa y agua de piscina sobre la cabeza del menor de ellos, Taehyung simplemente se río ante su acción.

-¿Y Jennie dónde está? .-le preguntó Jin echando su mezcla en una canasta para la basura.

- Aquí.-respondió la aludida que llegaba junto con Jisoo. Ambas mujeres sostenían de la mano a un niño de cuatro año, se trataba de Kim Beomgyu el primogénito de Taehyung y Jennie.

-Vaya, tu hijo ha crecido muy bien Taehyung-ah.-le dijo Jimin observando con entusiasmo al menor de la familia Kim.

-Sí, es porque come demasiado.-se burló el castaño regalándole una mirada de orgullo a su hijo. 

En ese momento, se acercaron a Rosé y Lisa con los otros dos niños que estaban en la piscina.

-Buenos días a todos.-saludó Roseanne con su hija en brazos. Los demás contestaron animadamente, mientras poco a poco se acomodaron en las tumbonas para empezar una agradable conversación sobre lo rápido que crecían los niños.

-No, no, pero eso no es lo más difícil.-atinó a decir Jisoo con divertidas carcajadas señalando a Manoban.-lo difícil es que está mujer aquí presente, le deje ponerle un nombre a tu propio hijo.

-¡Definitivamente! .-aseguraron los demás siguiendo con la risa. Entonces la pequeña Ryujin se río altaneramente como si comprendiera de lo que estaban hablando y eso fue motivo de gracia para sus padres.

-¿Y tú de qué te estás riendo? .-quiso saber la rubia mientras le hacía cosquillas en la pancita a su hija la cual se rio más y más.

Los demás niños del grupo se acercaron al bebé y la admiraron con curiosidad. Entonces Taehyun acercó la mano a la pequeña de sonrosadas mejillas, y esta le apretó dos dedos con sus manitos regordetas.

-Ryujin es muy bonita.-dijo Beomgyu mientras la pequeña trataba de alcanzar sus cabellos oscuros.

-Sí.-concordó Soobin con una amplia sonrisa en su rostro.

Los adultos contemplaron enternecidos el inocente y balbuceado reconocimiento de los pequeños. Definitivamente era cierto, Ryujin era hermosa, tenía las delicadas facciones de Rosé junto a los ojos marrones y el cabello azabache de su padre. Lo cual significaba probablemente en un futuro sería una mujer encantadora, pero ahora era eso, tan tierna como lo habían dicho los niños; una bebé bonita.

Feliz por el ambiente que la rodeaba la tercera generación de los Park, comenzó a aplaudir y entonces Beomgyu se acercó a la pequeña y le regalo un dulce beso en la inflada mejilla haciéndola sonreír. Impresionado por este acto Jimin dio un respingo al mismo tiempo que su ceño se fruncía levemente.

-Que lindo, debí haber traído mi cámara.-chilló la rubia sin darse cuenta de la reacción de su esposo.

-Yo tengo la mía.-señaló Lisa empezando a buscar en su bolso.

-¿Tú cámara especial? .-cuestionó Jisoo con rostro pensativo.

-Sí.-asintió sonriendo maravillada.-me la regalo mi hombre.-afirmo colocando su mirar en Jungkook, quien bajo la suya avergonzado mientras se rascaba la nuca mientras era molestado por sus mayores.

-Eh, pero, ¿no se la habías prestado a Yoongi-ssi en su viaje a Nueva Zelanda? .-cuestionó Jennie, y Lisa abrió sus ojos asombrada ante las palabras de Kim.

-¡Oh, Dios, Lili, no me digas que no sabías que tu propio hermano se habia ido de viaje! .-exclamo Rosé al ver la expresión en su rostro.

-¡Claro que sabía eso, lo que no sabía era que se había llevado mi cámara! .-reclamo la pelinegra incrédula.-¡más le vale que regrese con ella o deseará no haber sobrevivido a ese vuelo!

-Ojala a mí me quieras un poquito más que a tu hermano.-pronuncio Jungkook quien tenia a su hijo en brazos. 

-¡Ah, Kook! no seas infantil, cómo vas a competir con algo material. Pero aun así...  no sabe lo que le espera.-musito entrecerrando sus ojos.

Tras decir aquello, el dueño de casa se acerco al grupo con una bandeja de comida para cada uno de los invitados. Los chicos les ayudaron a servir como buenos hombres que eran para sus esposas e hijos, al cabo de armar la mesa los llamaron para que se acercaran al lugar. Pero Taehyung pudo darse cuenta que los niños seguían congregados alrededor de la pequeña Park Ryujin.

-Niños, ¿qué hacen? .-pregunto Kim colocandose en cuclillas a un lado de los hombrecillos.-¿acaso no tienen hambre?

-No es eso tío, es que, estábamos jugando con Ryujin.-respondió Taehyun colocándose tras de la bebé de grandes mejillas.

-Ryujin es una princesa, y ellos están luchando para saberla de un horrible mago.-explico Rosé, mientras veía a los niños brincar de un lado a otro con felicidad. 

-Yo la salvare y me casaré con ella.-señaló Soobin alzando sus flotadores cual músculos.

-No, yo lo haré.-repuso Taehyun cruzándose de brazos. 

-No si yo lo hago primero.-se autoproclamo Beomgyu con una sonrisa encantadora, haciendo reír a su padre.

-Taehyun-ah.-dijo Jungkook al llegar al lago de la escena del juego medieval.-tú eres primo de Ryujin, así que no puedes salvarla y casarte con ella. De manera que tú sí vienes a comer.

-No, papá, yo soy el malo.-replicó su hijo como si lo que dijese fuese de gran importancia.

- Ah, claro.-exclamo el chico conejo con una sonrisa.

-Pero ahora la princesa va a comer.-dijo la señora Park tomando en brazos a la bebita.-así que todos sus valientes caballeros también deben venir y por supuesto el malvado primo hechicero.

Animados con esa explicación los tres niños corrieron a la mesa a sentarse junto a sus familiares para almorzar y escuchar lo que los adultos comentaban entre risas y miradas de reproche.

-Eso es a lo que yo llamo usar la cabeza, cuñadita.-felicitó Jungkook mientras le daba de comer a su hijo, quien estaba sentado sobre sus piernas e intentaba coger los alimentos con sus palillos especiales.

-Para convencer a un niño hay que pensar como un niño.-volvió a decir la rubia con una dulce sonrisa.

-Mmh, pero eso de casarse con mi hija no me suena a juego de niños.-objeto Jimin al momento de dejar caer su cuerpo en el respaldo de la silla.

-¿Celos, Jimin-ssi? .-se burló su hermano del quejumbroso mayor.

-Sí, Jimin-ah.-concordó Taehyung echándole más leña al fuego.-¿estás celoso de unos niños de primaria?

-No, claro que no.-exclamó molesto el Park al sentir la mirada de su mujer sobre él.

-Mira que ser la única niña en un grupo de tres apuestos varones tiene sus consecuencias.-le picó Kim sonriente.

-Tienes toda la razón hyung.-concordó Jungkook con malicia.-además, la pequeña Ryujin apenas tiene dos añitos y ya es popular entre los hombres, puedes creerlo cuando tenga quince años, todos sus compañeros de salón y los chicos del instituto se pelearan por salir con ella.

-Lo más seguro es que al abrir la puerta de tu casa todos esos galanes estén esperándola con grandes ramos de flores en mano, ¿qué vas a hacer en esas circunstancias, eh Jimin-ssi? .-siguió Taehyung señalándolo con sus palillos, ganándose una mirada de suma molestia del mayor. 

-¡Pues no va a tener permiso de salir con ninguno de esos tipos! .-rugió Park, a lo que su hermano y mejor amigo soltaron altaneras carcajadas. Sin embargo, con tanto escándalo hicieron llorar a la pequeña Park.

-Tranquila amor, no tienes que creerle a este amargado.-calmó Rosé a su hija mientras la acunaba en sus brazos.-tú puedes salir con quien quieras.

-De eso nada.-refunfuñó el pelinegro colocando su mirar en su esposa.

-¿Ni si quiera con mi hijo? .-preguntó Jisoo haciendo que Jin diera un respingo y posara sus oscuros ojos en la mayor de las mujeres presentes.

-¿Cariño, no crees que estás poniendo a Jimin en una posición incómoda? .-trató de intervenir el doctor con diplomacia, pero su esposa no lo escuchó.

-Sí, Jimin-ah.-aprovechó Taehyung para seguir su burla.-¿nuestros hijos no son lo suficientemente buenos para salir con tu preciosa princesita?

-Yo no he dicho eso.-se enredó Park, quien en verdad no esperaba estar entre la espada y la pared.

-Ah, entonces mi si puede salir con tu hija.-se metió Jennie divertida con ver a su jefe hecho un ocho.

-Pues... .-intentó negarse el hombre.

-Ríndete, Park, no hay manera de que salgas de eso sin ofender a nadie.-se burló Lisa mientras tratada de que su pequeño hijo comiera las verduras asadas que estaban en su plato.

-Bien, la verdad falta mucho para eso.-finalizó Jimin rojo hasta las orejas.

-Está bien, entonces te haré una cita para problemas del estrés en unos doce o trece años.-atinó a decir Seokjin tentado por la oportunidad del chiste. Todos los demás se rieron.

Jimin miró con receló a la niña de cabellos negros en brazos de su bella esposa y sintió un nudo en el corazón. Tal vez si no supiera él lo fácil que era hacer sufrir a una mujer no estaría tan preocupado.

-¿El que las hace se las imagina? .-le susurró Rosé al imaginar lo que estaba pensando por su cabeza.

-No quiero.-refunfuñó su esposo por lo bajo.

Entonces la pequeña dejó de llorar y con su manito tocó lo que tenía alcance de su papá, lo cual era su largo cabello.

Jimin sintió una gran ternura y tomó a su hija en brazos para abrazarla con todo el amor que sentía por ella. Luego suspiró dejando caer su mirada avellana en su primogénita.

-Bien, lo acepto. Tienes permiso de salir con chicos cuando cumplas treinta años.-dejó salir asombrando a sus amistades.

Rosé rodó los ojos, y de pronto notó que su celular sonaba alertándola y obligándola a contestar.

-¿Hola? .-preguntó al ver que era un número desconocido. 

-¿Rosie? .-dijeron en la línea contraria. 

-¿Yoongi-ah? .-pronuncio con felicidad, pues habían pasado más de una semana sin saber de él.-¿cómo has estado? ¿le sucedió algo a Chaeyoung, ella y el bebé están bien?

-Sí, ella y nuestro hijo están bien, disfrutando del viaje, pero estoy algo intranquilo.-dijo con incomodes.-lo que sucede es que... demonios, estoy en graves problemas.-mascullo desordenando sus oscuras hebras.

-¿Eh? ¿por qué? ¿qué sucedió?, ¿tuviste un accidente grave? .-decía, lo que todas las miradas se posaron en la fémina.

-No, peor, acabo de... romper la cámara de Lisa.-confeso, pero lo que él no sabia ni se esperaba, era que Rosé habia colocado la llamada en altavoz y la dueña del aparato habia escuchado su gran secreto.

Te voy a matar, Min Yoongi 

¡Fin!

“Él alcohol es como el amor; el primer beso es mágico, el segundo es intimo y el tercero es de rutina. Después de eso, le quitas la ropa a la chica.”

«Raymond Chandler»

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Momo 🍑💕