𝐓𝐇𝐈𝐑𝐓𝐄𝐄𝐍
Aquella grandiosa cita, hizo que Sunghoon y Jake pudieran unirse más que nunca.
Los días han pasado desde la salida, ambos destinados se la pasaron pegados como chicles los días posteriores, pues sus lobos querían estar juntos todo el tiempo que se pudiera. No los culpen, estar esperando un momento así por casi tres años era desesperante y muy doloroso para los pequeños animalitos que vivían dentro de Jake y Sunghoon.
Aunque bueno, el lobo del alfa fué el más herido que el del omega. Así que tanto Sunghoon como su lobo sentían una alegría inexplicable al poder sentir finamente lo que era poder estar y sobretodo, amar a su destinado sin que éste te rechaze o trate mal.
Jake no era una excepción, pues él también anhelaba estar con Sunghoon y no se había percatado de eso al haber encerrado a su lobo y a sus sentimientos en lo más profundo de su ser solamente por el miedo de que las palabras de su padre se hicieran realidad. Pero Sunghoon, su alfa le enseñó que no todos los alfas eran como Changbin, agradecía infinitamente haber tenido el valor de poder dar el primer paso para poder estar con Sunghoon por consentimiento propio y sin obligaciones.
Y ahora que ya han pasado las semanas, las cosas iban mejor que nunca... Para ellos dos.
---¿A quien estamos esperando, Hoonie?--- preguntó Onda mirando curiosa al alto, pues ya llevaban un rato parados en la entrada de la escuela y sus piecitos comenzaban a doler por estar tanto tiempo parada.
---Estamos esperando a Yoonie, pequeña Serim--- respondió Sunghoon sonriéndole a su amiga para después volver a alzar su vista para buscar a su omega ---¡Y mira! ¡Ahí viene!--- exclamó cuando pudo ver hacia lo lejos la delicada figura de Jaeyoon.
Cuando el chico vió a Sunghoon, ambos corrieron -claramente alegres de verse- directamente hacia el otro.
---¡Yoonie! ¡Yoonie!
---¡Hoonie! ¡Hoonie!
Jake se lanzó hacia los brazos de su alfa para que este lo abrazara fuertemente, como si ambos no se hubieran visto en años cuando en realidad ayer en la noche fué la última vez que se vieron, pues Jake y Felix habían sido invitados a la casa de los Park para que cenaran.
Onda los veía desde lejos.
Por un lado ella se encontraba cansada, pues desde aquella pelea con Yiren, la chica le ha estado insistiéndo para que ella coqueteara con Sunghoon y le quite a Jake, jamás la dejaba en paz e incluso, le ha estado haciendo imposible la vida ya sea encerrándola en los salones y en los baños, o amenazarla sobre decirle a toda la escuela que estaba enamorada de Sunghoon.
¿Y adivinen qué? Nuestra buena Onda siempre le daba la misma respuesta a la malvada de Yiren: "Haz lo que quieras, no lo haré".
Es por eso que por el otro lado, se sentía tranquila. Pues prefería que ella sea quién reciba todo el mal a que Sunghoon lo recibiera, él debía ser feliz con la persona que amaba.
Ella sería el Ángel guardián de esa relación. Ella no tenía un destinado... Pero eso no significaba que dejaría que Sunghoon perdiera al suyo.
---¡Serim!--- saludó Jake a la omega con una sonrisa, desde que empezó a relacionarse más con Sunghoon, llegó a conocer a sus dos mejores amigas, aunque si debía ser sincero, Onda le caía mejor que Yiren.
Yiren era... Un poco seria con él.
---¡Jakey! Sabes que puedes llamarme Onda también, si eres alguien especial para Hoon significa que también eres especial para mi--- dijo la omega con una sonrisa.
---Bien, pero Serim es un lindo nombre también--- comentó Jake y los dos chicos presentes rieron también.
---Lo sé, lo sé. Serim es el nombre de bellezas--- presumió la menor modelando de forma graciosa para ambos chicos. Estos rieron enternecidos.
---¿Segura que es nombre de bellezas?--- preguntó en forma de broma el alfa.
---¡¡Sunghoon qué cruel eres!!--- se quejó Onda dándole un -no muy fuerte- golpe en el pecho al chico.
Jake reía bastante divertido, estos dos chicos eran todo un caso. Le gustaba la amistad que ambos tenían.
Ambos entraron a la escuela y cada quien se fué por su rumbo, por un lado Sunghoon acompañando a Jake hasta su salón de clases y por el otro a Onda cambiando hacia el suyo, sin notar que los alumnos murmurban cosas cuando la veían pasar por los pasillos.
---Ten un buen dia hoy Yoonie, ¿Nos vemos a la hora del almuerzo?
---Sabes que si, Hoonie
Sunghoon y Jake siempre solían despedirse dándose tiernos y tímidos abrazos, pero esta vez Sunghoon se animó a dejar un pequeño besito en la nariz del australiano, sonriendo orgulloso cuando vió al contrario sonrojarse.
Y claro, una carcajada salió cuando luego de eso Jake salió corriendo avergonzado hacia el interior de su salón.
Ah, Shim Jaeyoon le gustaba tanto.
Comenzó a caminar tranquilo hacia su aula de clases, tarareando una canción que últimamente ha estado escuchado mucho.
I'll be your boyfriend~
La letra y el ritmo eran muy pegajosas, y si era sincero, esa canción le recordaba a Jake.
Tal vez deba dedicarsela el día que sean novios, en algún futuro, porque en estos momentos Jake estaba chiquito para tener novio.
Cuando dobló hacia otro pasillo de casualidad se encontró con Yiren saliendo del cuarto del intendente.
---¿Yiren? ¿Qué hacías ahí?--- le cuestionó extrañado a su amiga, pues era un área donde no tenían permitido entrar los alumnos.
De todas formas, ninguno quería entrar, se rumoreaba que en ese cuarto habían monstruos que se comían a los niños que entraban allí.
---Oh, es que... La profesora me mandó a que buscara un... una... ¡Una escoba! Si eso, es que había, no... los alumnos tiraron material que estabamos usando al suelo--- respondió Yiren, intentando sonar lo más creíble posible ---Pero bueno, no encontré así que ya me iba...
Yiren comenzó a caminar pero rápidamente se detuvo y giró su cuerpo para mirar al alfa.
---¿Tu piensas que Onda es linda?--- cuestionó de repente
Aquella pregunta desconsertó un poco al alfa. Pero no le tomó importancia y respondió de todos modos.
---Claro, Onda es muy linda--- respondió inocentemente con una sonrisa.
Yiren solo sonrió satisfecha y se fué de ahí, Sunghoon retomó su camino y también se alejó del lugar.
Onda que había escuchado todo desde adentro del cuarto del intendente, sólo sintió enojo, Yiren jugaba con la inocencia del pobre Sunghoon para lastimarla a ella, porque claro que le dolió que Sunghoon le haya dicho que era una chica linda, esas palabras no hacían nada más que su corazón latiera rápido y que la lobita que llevaba dentro se sintiera más feliz y querida por Sunghoon.
---¿Porqué nos haces esto? Te estás haciendo ilusiones falsas...--- regañó la omega a su instinto.
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ahora estoy usando "---" para los guiones largos, porque no sé que le pasa a wattpad que cada que subo el capítulo, en vez de poner el guión largo me lo cambia a "-".
me imagino que ya notaron que onda será alguien muy importante en la historia.
¿ustedes que opinan sobre lo que le hace yiren? yo digo q le quiero pegar👩🏻🦯
capítulo de relleno pq si, en el próximo tal vez se venga lo interesante.
cuídense mucho, y recuerden que les tqm<33
nos leemos luego~
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