- Riki se alejó lentamente del alfa, manteniendo una sonrisa pequeña mientras esperaba la reacción de su novio. SungHoon por su parte continuaba impactado ante las palabras que había susurrado el omega, sintió sus orejas calentarse y tosió cuando se atoró su saliva del asombro. 

ㅡ ¿Es enserio? ㅡ Preguntó el alfa mirándolo a los ojos en medio de la oscuridad del cine. 

Ni-Ki asintió con cautela. ㅡ Si, después de todas las sesiones que tuve con los doctores, ya puedo soportar el olor a durazno. 

SungHoon sonrió en grande. ㅡ ¡Eso es genial, Ni-Ki!. 

El alfa lo abrazó, metiendo su nariz en el cuello del omega peli rubio, quien asintió entre medio de risas por las cosquillas que le provocaba SungHoon. 

ㅡ Perdóname. ㅡ Susurró Ni-Ki.

SungHoon se alejó lentamente para mirarlo con confusión. ㅡ ¿Por qué te disculpas?

ㅡ Por hacer que utilizaras el neutralizador, por hacerte sentir mal y por haber sido descortés contigo la primera vez que nos conocimos. 

El alfa sonrió, acariciando con ternura la mejilla de su omega. ㅡ No tienes que disculparte, no era tu culpa no poder tolerar el olor a duraznos. 

ㅡ Aún así...ㅡ

ㅡ Ni-Ki ㅡ SungHoon tomó entre sus manos la cara del mencionado, provocando que los labios de este se abultaran. ㅡ esperaría toda mi vida sin ningún problema hasta que estuvieras bien, hasta que te sintieras cómodo conmigo. 

Los ojos de Nishimura se llenaron de lágrimas al escuchar las palabras del alfa, se preguntaba cómo es que podía existir un hombre así de tierno y amoroso, sintiendo cómo su lobo corría alrededor mientras su colita se menaba de un lado a otro al sentirse tan amados. 

ㅡ Gracias, ㅡ Ni-Ki lo abrazó fuertemente. ㅡ Te amo. 

El alfa sonrió pegándolo más hacia sí mismo. ㅡ También te amo. 

SungHoon esperaba fuera del salón de Ni-Ki en el último edificio de la universidad, con un gran ramo de girasoles entre sus manos y suspirando constantemente mirando su reloj, esperando que dieran las 2 de la tarde, la hora en la que las clases de Ni-Ki terminaban. Se escuchó la voz del profesor despedirse de los alumnos, poco después, el alfa vio la puerta abrirse e instintivamente buscó con la mirada aquella cabellera clara que lo traía en las nubes todo el tiempo. 

Ni-Ki se acercó a SungHoon con una linda sonrisa al verlo sostener un ramo de girasoles. 

ㅡ Para el único omega en mi vida. ㅡ Dijo el alfa extendiéndole el ramo y guiñándole un ojo, provocando risas en Ni-Ki.

ㅡ Que afortunado es ese omega. ㅡ Ni-Ki habló oliendo los girasoles. ㅡ Gracias por el detalle.

ㅡ No es nada, ¿a dónde quieres ir hoy? ㅡ Cuestionó SungHoon cargando la mochila del omega en uno de sus hombros y tomando la mano del mismo. 

ㅡ ¿Podemos ir a tu casa? No tengo muchas ganas de salir hoy. ㅡ Dijo Ni-Ki con un pequeño puchero en sus labios mientras apretaba la mano del alfa y recargaba su cabeza en el hombro del azabache, caminando así hasta que llegaron a la salida. 

SungHoon asintió. ㅡ Claro, no hay problema.

Ni-Ki festejó emocionado, dando pequeños brincos mientras caminaba, pero paró de pronto al sentir un cruel mareo. 

ㅡ ¿Te encuentras bien? ㅡ SungHoon le preguntó preocupado. 

ㅡ Si, si. ㅡ Ni-Ki asintió colocando su mano en su cabeza, intentando estabilizarse. 

ㅡ ¿Seguro? Podemos ir al hospital si es necesario. ㅡ Dijo SungHoon sosteniéndolo fuertemente para evitar que se cayera. 

Se quedaron de pie en medio de la acera de la calle por un par de minutos, en silencio mientras Ni-Ki volvía a sus cinco sentidos. 

ㅡ Ya está todo bien, Hoonnie. ㅡ Dijo el omega con una sonrisa, caminando de nuevo hacia la casa del mencionado. 

SungHoon asintió no muy convencido, preocupado aún pero le tranquilizaba el hecho de que durante todo el camino hacia la casa del alfa, Ni-Ki no volvió a sentirse mal. 

La madre de SungHoon no se encontraba debido al trabajo, por lo que el alfa tuvo que llamarla para avisar que se encontraba en el hogar junto a su omega. 

ㅡ Es una lástima que esté trabajando, en serio quería ver a Ni-Ki. ㅡ Dijo su madre desde el otro lado de la línea.

ㅡ Yo también quería verla. ㅡ Respondió Ni-Ki con un puchero.

ㅡ Disfruten de la tarde, hay comida en la nevera y Ni-Ki, estás en tu casa. ㅡ La madre del azabache se despidió de ellos con un "suerte" al final. 

Comieron un poco de lo que había en la casa y subieron a la habitación de SungHoon. Ni-Ki paseo por la habitación del azabache viendo todo lo que tenía, sorprendiéndose por cada artículo que veía. 

El omega peli rubio abrió de golpe el armario de SungHoon, sintiéndose mareado de nuevo. El alfa prácticamente corrió hasta él, sosteniéndolo entre sus brazos para evitar que cayera. 

ㅡ Ni-Ki, tenemos que ir al hospital.

Nishimura negó con la cabeza. ㅡ Estoy completamente bien. 

SungHoon alzó una ceja, escéptico ante las palabras del omega. ㅡ ¿Entonces que sucede? Me preocupas.

Ni-Ki se abrazó al cuello de SungHoon, frotando su nariz cerca de la oreja del alfa mientras mantenía sus ojos cerrados esperando a que el mareo pasara. 

ㅡ ¿Siempre has olido así de bien? ㅡ Preguntó quedito, soltando un leve gemido de gusto.

ㅡ Ni-Ki...ㅡ SungHoon hizo el amago de separarse del omega, pero este chilló en cuanto sintió al alfa alejarse. 

ㅡ N-no te vayas, alfa. ㅡ Pidió aferrándose al azabache. 

ㅡ Tranquilo, Ni-Ki. ㅡ SungHoon palmeó lentamente la espalda del peli rubio mientras pensaba en qué hacer.

Necesitaba mantener la cabeza fría pero su omega no lo estaba ayudando; tenía que alejarlo para evitar que sucediera algo de lo que Ni-Ki podría arrepentirse, pues aún no era consciente de que SungHoon era realmente su alfa. 

ㅡ Cariño, necesitamos hablar. ㅡ Rogó respirando fuerte al sentir los labios de Ni-Ki moverse en su cuello cuando habló.

ㅡ No quiero hablar, alfa. 

ㅡ Riki...ㅡ SungHoon advirtió pasando sus manos a la cintura del mencionado, separándolo con cuidado de él. ㅡ En serio necesitamos hablar, parece que tu celo está comenzando o no tardará en presentarse. 

El omega se volvió a balancear al sentirse abrumado, por lo que SungHoon lo llevó hasta una silla para evitar que se cayera. Esperó por largos minutos a que Ni-Ki se recuperara. 

ㅡ L-lo siento, SungHoon. Se supone que mi celo llega dentro de tres semanas. ㅡ Dijo Nishimura avergonzado. 

El alfa le sonrió comprensivo, acariciando con delicadeza su cabello. ㅡ ¿Recuerdas la vez que nos conocimos y salí corriendo?

Ni-Ki asintió. ㅡ JungWon me dijo que no estuviste en las clases por una semana. 

SungHoon suspiró. ㅡ Bien, ese día entré en celo.

Ni-Ki lo miró sin entender a que iba con eso, pues era normal ausentarse en esos días.

ㅡ Llegué a casa y busqué como loco en internet las razones por las que podría entrar en celo cuando aún no me tocaba. 

Ni-Ki abrió su boca sorprendido. ㅡ Justo como me está sucediendo. 

SungHoon asintió. ㅡ Una de las razones es por que algún omega estaba en celo y se desató el mío. Pero la razón que me hizo entender de qué íbamos es... ㅡ SungHoon tomó la mano de Ni-Ki entre las suyas. ㅡ Entramos en celo cuando conocemos a nuestra pareja destinada, en casos donde uno no puede oler al otro, por ejemplo. 

Ni-Ki parpadeó aturdido, tragando saliva pesado, sintió su vista nublarse por las lágrimas que amenazaban con salir. Ahora todo tenía sentido; el por qué quería estar con el alfa todo el tiempo, o por qué su lobo aullaba de felicidad cada que lo abrazaba. 

ㅡ ¿E-estás diciendo que tú y yo...?ㅡ Preguntó Nishimura sin finalizar la oración. 

ㅡ Si, somos pareja predestinada, Ni-Ki. ㅡ SungHoon sonrió con cariño al ver al omega sonreír a través de sus lágrimas.

Ni-Ki se levantó de su asiento como pudo y abrazó fuertemente al alfa, quedando sentado en el regazo de este mientras se mecían de un lado a otro. 

Eran pareja predestinada, una pareja hecha con total dedicación y amor por la madre luna, quien los había unido para siempre.