ᴄᴀᴘɪ́ᴛᴜʟᴏ 9: ғᴀᴍɪʟɪᴀ.
Luego de una ducha caliente, y una deliciosa cena, llegaba la hora de hablar, Izuki estaba nerviosa, no sabía como dirigirse al crío y preguntarle por el tema sin hacerlo sentir mal.
Dió unos cuantos suspiros, y se preparó.
—Bien. Kota...¿Puedes decirme todo acerca de ti?...¯se había sentado frente al niño con una taza de té verde, mientras el niño bebía chocolate caliente. —Anda. Puedes confiar en mi.—le dirigió una radiante sonrisa.
El menor miraba su bebida, nervioso.
Confiaba totalmente en la verdosa dama, su radiante sonrisa y su amabilidad hacia que cualquiera le confiase la vida.
—Water Hose...m—mis padres, eran bomberos voluntarios, les encantaba su trabajo, se hacían llamar el equipo "Water Hose". El año pasado, un incendio fue provocado a proposito por un criminal apodado "Muscular". Al parecer era hacia una persona que él deseaba eliminar, pero mis padres se interpusieron y dijeron que el incendio mataría a inocentes, sin contar los intoxicados, pero a él le dio igual, nuevamente intentaron apagar el incendio....p—pero...ese gran idiota...los mato...—las lágrimas amenazaban con salir.—l—los mato...por que intentaban salvar las vidas de las personas!, salvar a inocentes que luchaban dia a dia por vivir...ellos...ellos No se merecían eso...—se arrojó a los brazos de la pecosa, quien lo abrazó de inmediato.
—Oí, de ese incidente. Eiji—Kun lo mencionó hace un par de meses...— susurro para si misma.—eh, Kota— el niño la miró. —Sé que no quieres hablar de ello, pero necesito saber como llegaste hasta aquí. —le acarició la mejilla y limpio su lágrimas.
El pequeño asintió.
—Caí bajo la tutela de mi tía Shino. Pertenecía a una pandilla o algo así, el nombre siquiera daba miedo: "Wild Wild Pussycats —pronunció el nombre burlonamente en tanto hacia una mueca. —pero, no tenía tiempo para mi y, me dejo a mi suerte en la esquina de tu café...—bufó cabizbajo.
—¿Qué edad tienes, Izumi?...
—seis...—murmuró.
—Mira que que abandonar un crío de esa edad, que poco humano...— refunfuño arrugado su nariz bañada en pequitas.
—pero, ahora tu me cuidarlas, ¿cierto?, Izuki me trata muy bien!, quiero que sea mi familia! —alegó animado. Pero la única respuesta consiguió fue una mirada esmeralda triste. —¿Q—que?..¿No lo harás?...prometo que me comportaré...
—Kouta...eres un niño increíble y Siempre quise un hermanito. Pero...— no termino la frase, vio la carita del menor.
Lloraba, esas pequeñas lágrimas por su rostro con uno que otro rasguño, era cierto lo habían acosado mucho, parecía un ángel caido.
¿Cuidar y criar a un niño?, era una carga demasiado grande. Todo un reto. Pero...
salvaste mi vida....
Señorita por favor ayúdame!
Nee-Chan...
Frunció el seño, y recapacitó. ¿Por qué no quedarse con él?...el café ganaba buen dinero, la casa tenía una habitación de más que ninguna ocupaba, ella era mayor de edad y estaba segura de que a Uraraka no le importaría que alguien más viviese con ellas.
—¿Estarías dispuesto a ayudarme con el café?...—pregunta levantando una ceja mientras se cruzaba de brazos.
El pequeño asintió alegre.
—Bien...entonces: ¡BIENVENIDO!— grito abriendo los brazos, el pequeño se lanzó a ella. —Mañana iremos con Sho-Kun para ver los papeleos, ¿Si?...
—¡esta bien!—respondió enérgico.
Los dos terminaron durmiendo en la sala mientras veían una película, tapados con una cobija, tranquilos.
Al día siguiente.
El sol entró por la ventana calentandolos, se estiró, le dolía todo, dormir en el suelo no era lo más cómodo del mundo.
—Kota. Eh, vamos...—movió al menor que yacía durmiendo plácidamente.
El pequeño ni se inmutó, asi que decidió despertarlo más tarde, cuando este el desayuno listo.
—¿Iremos al café?...—preguntó el azabache.
—¡No!, iremos de compras, y luego a la oficina de Sho-Kun!— caminaba alegre mientras sostenía la mano del pequeño.
—¿Sho-San es tu novio?...—las constelaciones de la pecosa ya no eran visibles debido a que el color carmesí las opacaba, fácilmente Izuki podia competir con un tomate, y ella ganaría.
Negando exageradamente con la cabeza repitió incansablemente la palabra "NO".
— ¿Segura?...Te pones feliz cuando lo nombras...—nuevamente negó, y negó.
—Sho-Kun sólo es mi amigo, nos conocemos de hace mucho. —dijo serenamente.
No pudo evitar mirar el meñique del pequeño, si bien no lo podía tocar le hecho un vistazo por simple curiosidad.
—Jaja, lo sabía— canturreo en voz alta.
Pov's Izuki.
Cuando somos pequeños nuestros hilos tienen una tonalidad rosada en lugar de rojo pasión como es usual.
Esto es debido a que no conocemos el amor, es decir, aún no nos enamoramos. El hilo puede tener un tono rojo prematuro si caiste flechada/o de niño o cuando cumples 13 el hilo cambia de tono automáticamente.
—¿Compraremos?...— preguntó dejando el tema de lado, puesto que no le interesaba en lo absoluto.
—Ropa, zapatos, tu nueva cama...— repasaba la lista que mentalmente se había armado. —Gracias a mis ahorros compraré todo lo que necesitas!— exclamó entusiasmada.
El menor río a veces ella se comportaba como niña.
—¿Iremos por helado!?...—grito dando saltitos.
—Mejor aún, chocolates!—la peliverde imitó al niño.
Luego, en las oficinas Todoroki.
-el padre de Todoroki es un abogado muy importante, apodado "Endeavor"-
—He oído su nombre en la tele. —aclaró el menor.
—En tanto yo hablo con él, tu juega allí, ¿Si?...—señaló un pequeño rincón de la recepción donde había juguetes para críos.
El pelinegro asintió, e hizo caso a lo dicho retirándose a jugar con una niña de cabello blanco y ojos carmesí que se hallaba en aquel lugar también.
La pecosa sonrió.
— Tu otro extremo del hilo, Kota, lo encontraste...— miro el meñique de la niña y el su nuevo hermano, sus hilos aun eran de tonalidades rosadas, pero aún así estaban unidos.
Espero a ser llamada, y se dirigió a la oficina asignada.
Cuando entró pudo notar una mirada bicolor cansada.
Todoroki-Kun, no es feliz en su trabajo...pensó, era cierto, eligió ese oficio por el simple hecho de que su padre lo atosigaba constantemente.
—Hola, Izuki—departió tecleando en su en su computadora sin dirigirle la mirada. —¿Qué te trae por aquí?.
—Buenos días, Sho-Kun. Quería solicitar unos papeles de adopción. — mencionó entusiasmada tomando asiento frente al abogado.
Todoroki la miró sorprendido.
—¿Papeles de adopción?, ¿qué?...— confundido desvío la mirada del aparato.
—Si, lo que oiste. Quiero adoptar a un pequeño que encontré en la calle, pensé en dejarlo en un hogar para niños, pero...—suspiro.—no quiero que alguien desconocido lo trate. Todoroki, lo cuestione miles de veces en mi mente, pero todo llegaba a una conclusión: "Quiero que Kouta Izumi sea mi familia". —embozo una sonrisa, estaba decidida y nada la haría cambiar de opinión.
El semialbino estaba pálido.
—Eres demasiado joven, Midoriya.
—Lo se. Sólo tengo 19 años, pero piensa, si hubiese tenido un hermano biológico, hubiese tenido que cuidarlo cuando mamá murió—punto para Izuki.—Además...—rasco su nuca. — Tu no me harás cambiar de opinión, no tienes nada que ver aquí...—se le ha hecho extraño el hecho de tratar a Shoto así, pero ¿qué más haría?, esa desicion era suya.
—Como quieras...— cedió.
—¿recuerdas el incidente de los bomberos asesinados hace unos meses?...—preguntó la peliverde. —del que Momo se ocupo.
—Si.
—Resulta que, aquellos bomberos tenían un hijo. Ese niño...anoche pedia ayuda en la esquina del café, estaba congelado y hambriento...- si mirada sé entristeció. —Lo lleve a casa, y cuando vi esos ojos...lo decidí, salvaría su vida. Es lo que siempre quise hacer. Le daré a Kouta lo que todo niño merece. —golpeó la mesa con el seño fruncido.
El heterocromático no pudo evitar sonreír.
—Terca como mula...— susurro. ¯Izuki. Te ayudare, haré que todo sea un poco más rápido, ¿de acuerdo?...—la pecosa asintió alegremente.
Izuki Midoriya, quien había perdido toda familia en aquel mundo, e Izumi Kouta quien corrió la misma suerte, ahora se habían unido para formar una parentela.
Wueno...No me pude resistir...tenia que hacer que esos dos sean familia!, si bien no hubo salseo Katsudeku hubo mucho amor :"3.
Sin más que decir:
Nos vemos :3
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top