04
Callejón Diagon
(Londres)
Madame Malkin, Tunicas
Perseus
- Quedense aquí, su padre y yo nos dividiremos para ahorrar tiempo.
- ¿No que ibamos a ir todos juntos? -pregunte confuso por el cambio de planes-
- Ha surgido algo en el Ministerio... -respondio Lucius- Iremos a casa y luego me iré al Ministerio.
Yo y Draco simplemente nos dedicamos a asentir. Con eso, ambos se fueron por el callejón, mezclándose con la multitud. No entendía porque él ahora se quedaba más en el ministerio que en la mansión. Es decir, tampoco era como su trabajo.
- Vamos, entremos.
- Seh.
Entramos al local y nos atendió una anciana regordeta, con bastante maquillaje en el rostro. Tenia puesto unos anteojos grandes y un vestido color lila que le llegaba a las rodillas. Después de un rato nos hizo pararnos sobre un taburete de madera para tomar las medidas luego de que le dijeramos que queríamos unas túnicas para Hogwarts.
Aparte de nosotros dos también había un azabache, tal vez de nuestra misma edad, tenia anteojos redondos. Con él que Draco no paraba de hablar, aunque más hablaba de él mismo que en cualquier otro tema.
- No se porque los de primer año no pueden tener una propia... -Menciono Draco rodando los ojos- Pienso que voy a fastidiar a mi papá hasta que me compre una y la meteré a contrabando de alguna manera.
- Si consigues una escoba, yo tambien.
- Entonces digámosle a papá juntos. -Me respondió con una sonrisa- Oye, ¿Tú tienes escoba propia? -le pregunto al otro niño-
- No.
- ¿Juegas al menos Quiddich?
- No.
- Yo si, papá dice que se equivocarían por no elegirme en jugar para mi casa -Menciono mientras yo simplemente hablaba con la señora sobre las medidas- ¿Tú ya sabes en que casa vas a estar?
- No.
- Bueno nadie lo va a saber realmente hasta que estemos ahi, pero yo sé que seré de Slytherin. Porque toda mi familia fue ahi.
Al final después de un rato la Madame Malkin acabo con mis medidas y con las de Draco y el otro niño, aún no sabía su nombre pero parece que ese chico no sabe nada más que decir si o no.
Mientras ellos seguían "charlando" o mejor dicho, mientras que Draco hablaba y el otro simplemente lo escuchaba, yo fui detras de la señora.
- Disculpe, ¿Cuánto tiempo tomará?
- Tal vez a media hora, cielito.
- Entonces cuando termine se las da ambas túnicas a mi hermano, el rubio -especifique y le pagué de antemano-
La señora simplemente asintió y fue a una habitación. Yo salí de la tienda y caminé hacía un bar que antes habiamos pasado. No es que quiera beber, aunque si, para probar. Pero obviamente no me dejarían por mi apariencia de un tonto niño.
Entre a la taberna, al pasar caminando por la barra senti varias miradas en mi, por supuesto, me puse una capucha para que no me vean al menos mi rostro, al ser un Malfoy podría llamar la atención y hacer que mis padres se enteren y malentiendan lo ocurrido. Además, de que podría dañar mi futura imagen.
- ¿Qué hace un niño, aqui?
- Tal vez sea un enano...
Escucha mas susurros perk simplemente los ignore, aunque también casi me echan antes, si no tuviera el dinero, lo habrían hecho.
- ¿Tú eres Charles? -Pregunte a un señor que estaba cubierto por una túnica-
- Tú eres... ¡Un mocoso! -Respodio al mirarme- No hago trabajos para chucherías, niño.
Lo mire con el ceño fruncido y suspire, tirándole una bolsa de galeones, levanté una ceja cuando volvio a su asiento después de que haya abrido la bolsa.
- ¿De que familia vienes?
- Eso no importa, yo hago la preguntas aquí. -Le sonreí- Y dame lo que te pedí.
Él simplemente gruño y me paso una bolsa con varios libros de historia, acerca de la guerra mágica que hubo hace años, bajas y familias que fueron aniquiladas.
- ¿Eres un mortifago, cierto? Investigue un poco de tí. -Mencione, haciendo que me mire sorprendido-
- Eres un niño astuto... ¿Qué quieres saber? ¿Una historia sobre el bando del Señor Oscuro? -Lo último lo dijo en un tono de broma-
- Dime lo que sabes sobre Regulus Black.
El hombre mayor frunció el ceño, luego penso sus palabras y vió el dinero. Suspiro y comenzó a hablar.
- Lo último que se supo de él fue que desapareció, por una misión que le dejo Elquenodebesernombrado.
- ¿Cuál misión?
- Nadie lo sabe, ni siquiera los demás mortifagos de rango más alto que yo. Pero deben estar encerrados en Azkaban.
Azkaban, la prisión más segura del mundo, de la que ningún preso ha escapado jamás. Ni siquiera en mis años de mi vida pasada escuche que alguien haya escapado de ese lugar, en el cuál es de máxima seguridad por los dementores que habitan allí. Le succionan su alma y terminan más locos de lo que estaban antes.
- Ah, y tambien... -Comenzo a hablar- Se sabe que tuvo un hijo o hija. Nadie sabe nada del bebé. Ni con quien lo tuvo. No se caso jamás.
- ¿Esta desaparecido?
- Asi es... Eso es lo único que se sabe sobre el bebé. -Suspiro, mientras daba un sorbo a su vaso lleno de Whisky de Fuego- Es un caso misterioso, al igual que el niño que vivió. Harry Potter.
>> Como sea, lo demás que quieras acerca de los mortifagos, estan en los libros. Hay varios documentos... -Hizo un ademán con su mano- No entiendo porque un niño quería esto...
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top