❬⸙: ✰❛𝖀𝖓 𝖉𝖚𝖑𝖈𝖊 𝖞 𝖆𝖒𝖆𝖗𝖌𝖔 𝖉𝖎́𝖆❀❜❭

Narradora

Al día siguiente…
Las clases transito con regularidad hasta que sonó la campana que indicaba el final de clases.
En tanto, ____ aprovecho a preparar un bizcochuelo de nuez para Ray, pero al concluir y encaminarse hacia la recámara del vampiro, tocó la puerta y acató como respondía su llamado.

— ¡¿Quién?!

—Ray, soy yo ____.

La puerta se abrió y este se asomó, mientras la observaba con molestia.

—¿Qué necesitas?

—Prepare un bizcocho de nuez y quería dártelo como agradecimiento por lo de ayer.

—¿Ayer? -se notaba confundido-

—Ayer me ayudaste a hacer la tarea.

—Oh… te refieres a eso. -Se mantiene serio- No era necesario.

—Acaso siempre dices no a todo.

—Es la ventaja de tener las cosas claras. -Sonrió- llévatelas, adiós. -Se alejo y procedió a cerrar la puerta-

Narra ____

Me abstuve de lanzarle el bizcochuelo e intente mantenerme positiva, ya que conocía su actitud y sabia que si renunciaba no conseguiría nada, por eso coloque mí pie y evité que cerrara la puerta.

—¡No puedes cerrarme la puerta en la cara! -lo miré molesta-

—¿Qué haces? De verdad me das problemas.

—¿No crees que es descortés rechazar un obsequio así?

—No, no lo creo. -Se mantuvo calmada- ¿Tú no crees que sea de mala educación obligar a alguien a aceptar algo que no quiere?

—Jajaja… Que simpático que eres, parece que realmente no te enseñaron muy bien la etiqueta. -La sangre me hervía-

—¡Tú!

—¡No hemos terminado de hablar! -Contemplé con severidad-

—Tks… ¿Qué más quieres?

—Debes probarlo, porque está delicioso.

—Es más que seguro que usaste ingredientes baratos, ¿No? -Observa con disgusto- No me gustara.

—(Dios dame paciencia con este ser.) -Pensé bastante molesta- Eso ni siquiera lo sabes.

—¿Qué dices?... Tú… -Al estar enojado levantaría su voz-

Me examino de manera amenazante, sin embargo no me atemorizó y no echaría mí brazo a torcer.

—Trata de probar un bocado al menos. -Mantuve mí expresión serena- Si no te gusta, puedes tirarlo… total no volveré a hacerte esto nunca más.

—Eres muy persistente.

—Créeme que a veces me causas dolor de cabeza. -Suspiro y se lo entregó- Dime si te gusto, ¿Ok?

Me dispuse a marcharme, aunque llegue a oír su vos y me detengo, volteando ligeramente para observarlo.

—Eres verdaderamente… -Suspira-

—(¿Qué habrá querido decir?)

—Puedes pasar a mí habitación.

—¿Que? -Estuve muy desconcertada-

—Puedo prepararte una taza de té, al menos.

—No gracias, la verdad ya no tengo ganas de seguir viéndote. -Se notaba que mí sonrisa era falsa- Ya aguanto suficiente estando a tu lado.

—¡¿Cómo te atreves a rechazarme?!

—Ray. -Mi expresión se frunció y mantuvo silencio- ¡Cómo carajos esperas que acepté! Me has hecho pasar un mal momento a pesar de haberte entregado un regalo. -Lo confronte-

Hubiera estado conforme con que aceptara y lo probara, sin embargo sus palabras causaron que mis ánimos se vinieran a bajo.

—Lo siento…

—¿Eh? -Me asombro su disculpa-

—Por favor, acepta mí invitación como forma de pago por tu obsequio.

—Bien… -Acepte sin ganas y se hizo aún lado-

Era la segunda vez que estaba en su habitación, así que no me sorprendió tanto como la primera vez y me senté en el sofá sin ganas.

—No es la primer vez que estás en mí habitación. -Menciono-

—No sé que estás insinuando, pero esa vez me atacaste y tuve que defenderme. -Conteste calmada, pero no pude evitar sonreír por lo sucedido-

—Ah… si, me acuerdo. -Sonrió teniendo una gotita en la cien-

—Oye Ray, ¿Has traído a otras chicas aquí? -Interrogo-

—Si, demasiadas para llevar la cuenta.

—Ah mira vos… -Mi expresión reflejo disgusto-

—¡…! -Lo nota y comienza a preparar el té- Aunque no las invitara, aún así vendrían. -Suspira- La mayoría de las chicas están locas por mí.

—Que confianza… -Digo con aburrimiento-

—Solo digo la verdad. -Me observa por un momento- La mayoría de ellas conocen mí clase, familia, apariencia, notas y las cualidades que tengo. -Se podía notar que su sonrisa parecía demostrar el disgusto por tener que soportarlas- Por esa razón, seleccionó a las más hermosas para satisfacer mis deseos.

Lo escuché en silencio y preferí no comentarle nada más.

—Es necesario alimentarme de su sangre, por eso lo tomo como un paso necesario.

—Es justamente lo que hiciste conmigo. -Fruncí un poco mis cejas-

—____ eres diferente a ellas, así que no te compares. -Me observó serio-

—(¿Qué habrá querido decir?)

—No nominaría a cualquiera como mi compañera. -Su expresión parecía fruncirse- No quiero la compañía de nadie que pueda asesinarme mientras duermo.

—(Ahora comprendo, porque es tan cuidadoso en sus elecciones.) -Admito que me preocupa un poco este tarado-

—Las uso mientras me son útiles. Ellas también tienen las mismas expectativas.

—Eso suena demasiado cruel, pero ambos se benefician mutuamente… ¿Es así?

—Exactamente. -Sonríe- Que bueno que lo entiendas, pero solo tu me causas curiosidad.

—¿Yo? -Me señaló-

Mí compañero asiente y termina con la preparación, dejándome el té en la mesa.

—A diferencia de otras, tu no esperas nada de mí. -Deja expuesto mí cuello y lo acaricia- Desde que te conocí, fuiste la única que me trató como una persona normal y sin tener en cuenta mí raza, prestigio o poder. -Sonríe- Por eso llamaste mí atención aún más.

Permanecí en silencio, estremeciéndome ante su tacto y sintiendo como me sonrojaba, por lo que tome su muñeca.

—¡Aún sigo molesta! -Fingí molestia- Déjame tomar el té.

—Está bien, puedes tomarlo tranquila. -Se aleja y toma con cuchillo para cortar el bizcochuelo- Tendrá mal sabor si se enfría el Té.

—Gracias. -Agradezco su gesto-

Cuando lo tome, sentí como el sabor era suave y me hizo pensar acerca de la personalidad real de Ray, sintiendo más curiosidad por consultarle algo.

—Ray… -Me observó- ¿Me consideras tu objeto?

—Que estupidez… -Me observa sorprendido-

—Seamos realistas. -Seria- Mí sangre es útil para ti y cada cierto tiempo te alimentas… además, has dicho que soy hermosa así que cumpliría todos esos requisitos que buscas en las demás.

Ray permaneció en silencio y supuse que respuesta era clara, pero quería asegurarme de que fuera directo conmigo.

—No. -Suspira- Ya te dije que no te compares con las demás. -Me observa fastidiado- No te veo como mí objetó, más bien… -Se quedó pensativo y me examinó-

—¿Más bien que…? -Trate de hacer que concluyera su oración-

—¡Solo no te considero un objeto! -Contesto molestó y trato de calmarse- No quiero tener que volver a repetirlo, ¿Ok?

No pude evitar sonreír ante su reacción, así que bebí otro sorbo de te.

—Está bien. -Afirmo-

Narra Ray

Justo después de asegurarme que no volveríamos a tocar el tema, probé un bocado de bizcochuelo y mí sorpresa se hizo notar, pero era provocado por la delicia de su sabor.

—¿Te gusto? -Me preguntó-

—Si, me gustó. -Admito derrotado y tomo algo de té-

—Es bueno oírlo a pesar de que son “productos baratos”.

—(¿Lo dice solo para sentirme mal?) -Apareció una gota en la cien y la observó- Retracto mis palabras.

—Jajaja

Algún tiempo después de compartir una agradable práctica, ____ tenía que regresar a su habitación y no opuse resistencia, ya que sabía que pronto seria el toque de queda.

—Hoy estás muy raro. -Me miro a mi- Normalmente no me invitarías a pasar y ni siquiera te molestarías en preparar un té, pero aún así gracias por lo de hoy. -Sonrió con sinceridad-

—De nada.

Se marchó de mí cuarto y reflexionó la posibilidad de seguir invitándola a tomar el té, ya que pase una velada agradable a su lado.

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Continuará.
¡Hey, hey, hey!

Espero que estén bien y hayan leído los capítulos y no se olviden de votar queme ayude un poco. ✨