제11장

Jungkook estaba aburrido, agradecía los diez días que había estado fuera del ojo de la prensa, de las responsabilidades y los ensayos. Pero una semana era demasiado para estar encerrado, quería salir y caminar tranquilamente, sin miedo a ser perseguido.

Si tan sólo la vida fuera tan fácil.

Jimin había sido tan amable al darle hospedaje en su hogar. Era agradable hablar con él por las tarde después de que volvía del colegio. En realidad se habían vuelto cercanos, Jimin le había mostrado fotografías de su infancia y a sus padres. Ahora sabía que el rubio de su cabello había sido heredado de su “eomma Jin”, al igual que la piel blanca y tersa. Mientras que la sonrisa deslumbrante y de ojos cerrados era de su padre Namjoon.

En pocas palabras sus padres eran bastante atractivos y sofisticados cosa que había resultado en la combinación perfecta que había dado como resultado el hermoso ser que era Jimin. Con sus bonitos ojos rasgados, sus hermosas mejillas regordetas que se teñían de rojo cada vez que estaban demasiado cerca o esa blanca paleta chueca que sólo acentuaba la hermosura de su sonrisa.

ㅡJoven Jeon ¿Va a comer algo? Jimin no tardará en llegar de la escuela. 

ㅡGracias Nana pero no tengo hambre, agradezco su atención conmigo.

ㅡ No es nada. Espero no incomodar pero, ¿Ya pensó en lo que le dije?.

ㅡSi, tiene razón.ㅡ La Nana de Jimin le había propuesto que hablara con sus padres o su manager para no provocar más problemas de los que ya había en esos últimos días.ㅡ ¿Puedo marcar desde aquí?.

ㅡClaro Joven.

Ambos bajaron a la sala, Jungkook tomó el teléfono y debatió a quien marcarle hasta decidir que era mejor hablar con su manager. 

ㅡ¿Hola?¿Quién habla?

ㅡSeñor Song

ㅡ¿Jungkook? ¿Dónde estás? ¿Estás bien? ¡Por qué marcas hasta ahora, sabes el problema que has causado por irte sin avisar! Casi me da un paro cardíaco. Dime ¿dónde estás? iré por ti ya fue suficiente este berrinche.

ㅡPrimero que nada, estoy bien y no, no voy a volver hasta que me sienta lo suficientemente bien.

ㅡ¿Sabes la preocupación que nos diste?.

ㅡSi lo sé. Pero si yo hubiera pedido un descanso ustedes no me lo darían ¿O si?.

Del otro lado de la línea no se escuchó nada. Jungkook tenía razón, a ellos no les importaba su salud o lo que sintiera eso lo hizo enfurecer y descartar él sentimiento de culpa que había tenido por un breve momento al pensar en los “problemas” que estaba causando.

ㅡ ¡Lo ve! Regresaré cuando yo lo diga.

Fue lo último que dijo antes de colgar. Estaba molesto, sus ojos picaban como cada vez que no podía decir todo lo que sentía. Nana daba suaves palmaditas en su espalda tratando de consolarlo de alguna manera. 

ㅡNana ¡Ya llegué!.ㅡJimin se veía pálido y cerró la puerta con rapidez, corrió directo a donde estaba Jungkook.ㅡ Por favor sube a mi cuarto y no salgas, se me olvidó decírtelo anoche.

ㅡJimin ¿Estamos jugando pesado? Si me dolió el portazo ahora abre la puerta.

La voz de Taehyung sonó amortiguada por la puerta que Jimin le había prácticamente lanzado a la cara.

Su Nana  se dirigió a abrirle al amigo de Jimin mientras veía como Jimin jalaba del brazo a Jungkook escaleras arriba. Taehyung había vuelto a quedar con él para reunirse en su casa. La semana pasada que había sucedido Jimin logró hablar con Nana y le pidió que escondiera a Jungkook, pero está vez las cosas no habían salido tan bien.

ㅡJoven Taehyung, cuánto tiempo sin verlo.

Nana lo hizo pasar, estaba nerviosa. Sabía que Jimin no quería decirle a Taehyung que Jungkook se encontraba como “invitado” en su casa.

ㅡ Nana usted está tan radiante como siempre. 

ㅡPasa mi niño, siéntate en el sofá y te traeré unas galletas riquísimas que acabo de preparar. En un momento viene mi niño Jimin.

ㅡClaro.

Taehyung camino a la sala, iba a tomar asiento pero decidió subir con su amigo. Se había estado comportando de manera extraña en los últimos días y eso de cerrarle la puerta en la cara era definitivamente algo que Jimin jamás había hecho.

Subió las escaleras de dos en dos, cuando llegó a la habitación de su amigo abrió la puerta sin pedir permiso y dio un paso dentro totalmente decidido a preguntarle a Jimin que era lo que andaba mal en esa última semana. 

Por supuesto que nada lo preparó para la escena que se reproducía frente a él. Jeon Jungkook tomaba del brazo de su amigo mientras este le decía cosas y lo empujaba rápidamente tratando de meterlo en el closet. 

Jungkook se quedó paralizado y dejó de quejarse mirando fijamente a la persona que acababa de entrar a la habitación. Jimin miró hacía atrás, con el rostro pálido. Taehyung lo había descubierto.

ㅡPero…

ㅡTae, tranquilízate.

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