ⓕucked up ッ 12
|Narra Jimin|
He estado observando al menor desde hace ya unos días. Le veía sin comer, desalineado –sin ser cuando actuábamos en el escenario-, y con cara de alma en pena.
Sonrisas forzadas, frases acotadas, aislamiento en su habitación de hotel.
Habíamos abandonado España y ahora nos encontrábamos en Rusia, con el detalle de que Kim Hye no se había unido a nuestro viaje para acompañar a Jungkook como estaba estipulado. El chico no dio muchas explicaciones más que un "No funcionó".
Me dolía verlo aquella manera aunque significara que se hubiese librado de esa sanguijuela. No era el mismo Jungkook travieso y risueño que me molestaba y perseguía. La versión dócil y callada de Jeon me asustaba. Es por ello que en estos momentos, me encontraba golpeando la puerta metálica que le resguardaba de los silenciosos pasillos del hotel.
Toqué la puerta reiteradamente sin respuesta alguna. Continué sin que me importara menos, él estaba allí dentro. Iba a abrirme si quería que parara.
La puerta se abrió estruendosamente dejando ver a un despeinado y refunfuñón Kookie. − ¿Qué demonios quieres?
Me petrifiqué en mi sitio. Él nunca me hablaba así. Le miré tranquilizadoramente, con una pequeña sonrisa. − ¿Puedo pasar?-Solicité en modo de súplica. Aguardó en silencio por unos momentos como si se lo estuviera pensando antes de hacerse a un lado y dejarme pasar.
Me desplacé en el interior rápidamente antes de que se arrepintiera de ello. Escuché detrás de mi cuerpo la puerta cerrándose generando que esta se trancara automáticamente. Sus pasos se amortiguaban por la moquette negra que recubría el suelo en que nos encontrábamos de pie.
− Me gustaría hablar contigo.-Sentencié haciendo ademanes hacia su colchón para que tomara siento. Obedeció duditativo mientras arrastraba sus pies en dirección al mismo. Se dejó caer observándome desde abajo, con su adorable ceño fruncido.
− ¿Qué quieres?-Escupió intentando acelerar la conversación.
− ¿Qué te pasa?-Contesté comenzando a agotar mi paciencia. − ¿Es por tu novia o algo más pasa aquí?
Se encogió de hombros apartando su mirada de la mía tímidamente. El ambiente comenzaba a adquirir una atmósfera mucho más densa e incómoda con los segundos. − Tú mismo lo has dicho, rompí con mi novia. Me gustaba mucho, Jimin, ¿Esa era la explicación que buscabas?- Sus ojos negros cristalizados me penetraron fieramente, a punto de llorar. Mi corazón se rompió en miles de pedacitos en el momento que una pequeña lágrima trazó un camino acuático hasta su barbilla. Su labio inferior temblaba irregularmente al igual que sus respiraciones.
Me dejé caer junto a él, envolviéndole en mis brazos estrechamente. No se resistió a aquel contacto, permaneciendo cabizbaja con mi rostro enterrado en la curva de su cuello. Su cuerpo temblaba a causa de sus sollozos silenciosos. − Le quería... y ella...ella...-Su voz se quebró abruptamente, el ruido de él sorbiendo sus mocos se escucharon en aquellas cuatro paredes. Tracé pequeños círculos en su espalda intentando transmitirle algo de paz. − Ella dice que la agobio, que necesita espacio, y que la aburro...-Soltó en un susurro sollozante con su espalda encorvada. − Parece menos tiempo, pero hace bastante que hemos estado saliendo, Jimin. Pensé que... Pensé que era serio...-Asentí en comprensión, sintiéndome cada vez peor con cada minuto que le escuchaba hablar. − Pero no es solo ese el problema. Yo soy consciente de que soy aburrido con las chicas, parece que ni tenga personalidad...-Levantó su rostro observando el mío, lágrimas derrapaban ferozmente por sus mejillas. − El problema soy yo, y esto seguirá sucediendo por mi forma de ser... Sin importar con quién salga.
Le miré con el entrecejo fruncido. Tomé su rostro entre mis manos buscando que me prestara atención. − Deja de decir esas cosas Jungkook...-Susurré con incredulidad. Sus grandes orbes negras me observaron con puro detenimiento. − Tú sabes lo mucho que significas para nosotros, para tus fans... para mí...-Susurré, los cabellos de su frente revoloteaban contra la mía por la cercanía. Sus respiraciones ahora más calmadas impactaban contra mis labios, incitándome a hacer algo que no debía.
− Jimin hyung... tú eres muy bueno conmigo...-Sonrió tímidamente. La culpa me carcomía.
No soy bueno, no lo suficiente como para ti Kookie.
Tragué saliva detallando sus finos labios aún cerca de los míos, sin tapujos, sin sospecha alguna de mis reales intenciones con él. − Perdón por haberte tratado mal...-Se disculpó observándome como un cachorro bajo la lluvia.
− No tienes nada de qué disculparte.-Susurré cerca de sus labios rosados, los míos se entreabrieron automáticamente.
− Sí... yo te he tratado muy mal estos días...-Miró hacia abajo avergonzado por su comportamiento. Negué con la cabeza intentando que hiciera contacto visual conmigo, aún sosteniendo su rostro entre las manos. − Sí... perdón... yo intentaré ser mejor... intentaré respetarte más, como tú siempre haces...
− Jungkook...-Le interrumpí en advertencia una vez más.
− Jimin... por favor, solo dime que me perdonas, dime que...
Uní nuestros labios sin aviso previo, sin presagio alguno que hubiese advertido a Jungkook acerca de lo que sucedería a continuación.
Totalmente pasmado en su sitio, con la respiración entrecortada, entreabrió sus labios sorpresivamente. Me incliné sobre él, como si me hubiese dado algún tipo de permiso en mi imaginación. Envolví mis brazos alrededor de su torso, buscando acercarlo a mí aún más. Jadeó sorpresivo cuando sintió mi mano sobre la piel de su espalda debajo de la sudadera. Su aroma a vainilla ingresaba por mis fosas nasales, su suave cabello chocaba contra mi rostro dificultando la tarea de separarme de aquel cálido cuerpo.
Colocando sus manos sobre mi pecho, se apartó poniéndose de pie con la respiración entrecortada. Sus ojos abiertos como platos reflejaban sorpresa y confusión.
− Jungkook... yo...-Intenté buscar alguna explicación que tuviese sentido para el pelinegro.
− ¿Tú qué, Jimin?- Espetó secamente, sus ojos confundidos sumidos en ira.
− Simplemente no me gusta verte así...-Susurré levantándome del colchón para acercármele nuevamente. –Pensaba que si hacía algo como esto, que te hiciera enojar... pues...-Llevé la mano a mi nuca rascándola nerviosamente. No me dignaba a verle a los ojos en ese momento. − Si te enojabas por mi beso o algo te olvidarías de esa tipa...
Le escuché suspirar audiblemente mientras comenzaba a caminar en círculos en la habitación en puro nervisismo. − ¿Eres consciente de lo que acabas de hacer?
− Jeon...-Murmuré subiendo la mirada a sus ojos vidriados.
− Es que joder, Jimin...-Negó con enojo y angustia. − ¿Te das cuenta lo que haces? Te aprovechas que estoy vulnerable, y me atacas así...-Susurró con puro dolor.
− Yo nunca me aprovecharía de ti...-Le miré en suplicio, murmurando en voz casi inaudible. − Iba a dejarlo, porque fue un impulso. Pero tú... tú me lo seguiste, ¿O me equivoco?-Le increpé encontrando una ventaja sobre él.
Miró sus zapatos por unos segundos buscando una respuesta que posiblemente ni él sabía. − Es que cuando finalmente mi cuerpo reaccionó pensé que... pensé que así podía olvidarla... pero...-Se interrumpió sacudiendo su cabeza angustiadamente. − Has empeorado todo, Jimin.- Mis ojos comenzaron a arder al contemplar cómo la había cagado a semejante grado.
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top