Se escapó de sus manos antes de darse cuenta.

Sencillamente sucedió y, a este punto, cuando se descubrió a sí mismo muy despierto y enérgico a plenas tres veinte de la mañana realizando algunos quehaceres para utilizar de modo correcto el tiempo noto que ya había caído en algo sin retorno.

Sus movimientos fluidos como si a penas despertará de, como mínimo, catorce horas de sueño y estuviera con la energía recargada al cien se detuvieron en seco al ver el reloj.

¿ Cuando demonios pasó tanto tiempo ? ¡ Sí a penas y eran las seis de la tarde cuando terminó sus tareas !

Volteo a ver a la cocina al notarse con un mandil rosado que Yashiro dejó en su casa la vez que hicieron pijamada junto a cierta fémina de cabellos púrpuras, lo primero que se encontró fue una taza de lecha chocolada junto a una comida ligera para la noche.

Aparentemente lo hizo en piloto automático pues recién notaba esto. Además, al acercarse, en una silla diviso un kit de primeros auxilios. Y aquello, por más obvio que hubiera sido, le cayó como balde de agua fría ya que su relación en la Academia no era la mejor con la persona que espera.

Desato el mandil para guardarlo en alguna parte de la cocina recordando que la última semana siempre parecía estar en trance hasta la misma hora.

Solo quedan cuatro minutos y Teru va a llegar.

O caer desde la ventana hasta su habitación como si fuera casa suya, pero es el desvergonzado del Minamoto mayor del cual espera de todo porque bueno. . . es capaz de todo.

Sabe que esta esperando a Teru ya preparado para ayudarlo, por ello sube a su habitación sin animos de despertar a sus padres por lo que permanece con la luz apagada y preocurando ser lo más silencioso posible.

Lo ha vuelto rutina en una simple semana.

──A este punto, ya deben creer cosas que no son, Minamoto-kaichou. . . ──. Refunfuña en presencia de como la tranquila noche es comprometida por el crujido de la ventana abrirse.

Antes de que la figura caiga desplomado al suelo, el joven representante del Guardián del presente atrapa a Teru y lo ayuda a dejarse caer sobre las suaves sábanas.

Luego se ocuparía de las explicaciones de la sangre y suciedad en sus sábanas.

El presidente está malherido, algunos cortes sangrando y terriblemente agotado así que desde el primer día, él se encarga de su cuidado.

──Quizás, pero no se atreven a notarse en nuestras vidas, Akane.

──Seh, tan solo no te mueras en mi cama. ──. La sonrisa burlona lo hace gruñir por lo bajo. ──Sería incómodo explicar como acabaste muerto en mi cama.

Escabullendose a la cocina otra vez, permite bajar la guardia, mantener sus ojos cerrados y reposar un momento, centrarse en actuar como un niño normal tras un pleito —aún si fue de todo, menos eso—.

Es un momento en el que sabe que está completamente seguro en manos de Akane.

──Abajo hay comida, necesitas reponer fuerzas, también te prepare un baño a la temperatura que te gusta.

──Awww~, te preocupas mucho por mi entonces.

──Cállate. ──. De alguna forma, el rubio obedece, al mismo tiempo que él revisa la herida más grave para limpiarla y vendarla.

Repite esta acción con cada herida, limpia con alcohol, luego pone parches o gasas, queriendo mantenerlo sin ninguna infección en las heridas.

──¿ Y tus padres ?

──Durmiendo, tienen el sueño pesado. ──. Esta mintiendo, por cuidar de Teru adecuadamente, pone somníferos en la cena de sus padres.

──Gracias, Akane, a veces no se que haría sin ti.

Akane suspira con diversión. ──Tener a tus hermanos muy preocupados.

──Touché.

Antes de bajar —además de revisar la temperatura del agua de la bañera— indica donde está el uniforme que se trajo de casa de los Minamoto para cuando el hermano mayor de la familia se queda.

Últimamente va a buscar mudas del uniforme o las trae el propio presidente.

A los minutos, mientras uno se baña y el otro pone alguna película en la TV, se cuestionan cuando comenzaron a ansiar ese momento en el que ponen mayor confianza en el otro.

Una confianza que no ponen en nadie más.

¿ Que era la confianza para ellos ?

Darse mutuamente el poder de destruir al otro. Porque confian que no lo harán.

──Ao-chan. . . ¿ Qué haría ella en mi lugar ? ──. En su cabeza, ella y el presidente se llevan de maravilla.

Vaya mentira, se odian aunque nunca lo digan.

Perdido en su imaginación cedió a perder la nocion del tiempo, realmente se interrogada muchísimo a sí mismo con respecto a la extraña relación con el exorcista heredero del linaje Minamoto, el concepto de amigos no aplica con ellos pero tampoco son solo conocidos, su confianza no daba al concepto de conocidos o siquiera compañeros.

¿ Entonces ? ¿ Que son ?

Es complicado de decir, ni siquiera podría decir que se sienten como familia ya que, sin saber porqué, ese pensamiento le revuelve el estómago dejándolo severamente asqueado.

Continuar dando vueltas al asunto solamente le otorga dolores de cabeza severos de los que no era capaz de escapar, su mente sigue preguntando que carajos son en realidad.

No fue hasta que sintió un pequeño beso en su cuello que se dio cuenta que hasta terminó la película en la TV.

──Parecías muerto, my love.

──Te gustaría, así te puedes deshacer de mi y llevarte el crédito de borrar un misterio, narcisista. ──. Se echan en cara cosas con tanta confianza.

──Es adorable~. ¿ En serio crees que la muerte te librará de mi ?

──Ya lo desearía, cute blonde.

Teru empieza a reírse suavemente dando otra vez un beso al cuello de Akane, el menor está apoyado en el reposabrazos dejando su cuello expuesto para que el presidente dejará cuantos besos deseara.

El exorcista está detrás suyo con una sonrisa socarrona, depositando besos calurosos y picantes en busca de tenerlo como suyo, peino un ratito los cabellos rojizos del vicepresidente buscando relajarlo lo suficiente para tener su objetivo, cuando lo vio calmarse del todo entrelazo sus manos y apoyando su mentón ahí, ojos entrecerrados; Una propuesta que conoce bien.

Akane sabe que se arrepentirá o sentirá la adrenalina de ser descubiertos, además de la cantidad de cafeína que deberán consumir para estar bien despiertos para mañana.

Para Akane es algo de varias noches como un trato.

Para Teru es. . . Sentir que puede tener, aunque sea mínimo, a Akane como suyo.

Que tiene una oportunidad de tener su corazón, es de esperarse que al amanecer esa oportunidad se verá perdida cuando se crucen con Aoi, la eterna enamorada de Akane, esa princesa que le arrebata sin piedad su corazón al quitárselo.

Pero eso, se queda solo para él. Porque no merece a su amado Guardián del reloj que gobierna el presente.

Filtrándose por la ventana con cortinas abiertas, los estímulos luminosos despiertan al Minamoto en cama del joven Aoi abrazado a él; Otra vez el oro y rubí se fundieron entre sí.

Eran las siete y treinta de la mañana dando a entender que llegan tarde, algo no común para ellos pero Kou sabe bien que a veces va a casa de la familia Aoi.

Seguramente los adultos de la casa creyeron que Akane ya se había ido a la Academia solo por temas del consejo estudiantil pues hoy sus clases no eran normales, era la preparación del festival escolar por lo cual podían permitirse llegar tarde así que a los diez minutos despertó al vicepresidente para prepararse.

Un grito pronunciando el nombre del joven a su lado lo hizo enfurecer.

Sí, el gran príncipe de la academia Minamoto Teru, celoso de la "princesa" Akane Aoi por el vicepresidente Aoi Akane, el hueco en su estómago se hizo presente así como fuertes punzadas como pequeñas agujas en su cuerpo.

Aoi los espera, un tormento más para el pobre Teru gracias a su enamoramiento no correspondido a Akane.

Apago la luz y salió de casa.

Teru contemplo a Aoi coquetear para después rechazar las declaraciones de Akane.

En cuestión de segundos sus miradas chocaron con odio mal disimulado, salvados de ser interrogados porque el pelirrojo fue a comprar unas bebidas para el camino.

Al alcanzarla mirándose de reojo no permitieron flaquear, su odio se esparció en el ambiente, realmente esto no sólo es por estar enamorados de la misma persona, odian la falsa personalidad del otro por como se reflejan con su baja autoestima que los hace odiar a quien hacen lo mismo que ellos.

Los colores calientes bañaban a ambos, un filtro rojizo, naranja y amarillo dorado a los dos embellece sus figuras.

Y Aoi no dudo en imponerse. ──No eres yo, presidente, no tendrás nunca a Akane-kun.

Incluso si ella tampoco lo tenía, aquel hipócrita era la prioridad de detener.

──Lo sé. . . ──. Mucho más de lo que Aoi sabe, porque ambos son unos hipócritas enfermos. ──Pero. . . Eso no evita el monstruo que eres y como lo dañas.

──Ni él que tu eres, casi eliminas al mejor amigo de tu hermano y novio de mi mejor amiga; Hanako-san.

──Casi lo matas, a él y Yashiro-san.

──Ambos somos unos hipócritas, pero yo al menos, tengo el perdón suyo.

Él también. ¿ No ?

Utiliza una cruel carta.

──Además, no soy una segunda opción solo para tener sexo. Yo si tengo su corazón.

Para, deja de caminar mientras la ve alejarse en dirección al enamorado de los dos.

El hueco en su estómago crece fervientemente, sus manos como puños como si quisiera golpearse, traga en seco y muerde su labio inferior hasta sacar sangre muy consciente que ella tiene la razón absoluta, ella tiene más posibilidades pero ni el uno ni el otro son dignos.

La conversación rutinaria de siempre. No será la primera ni la última, la sonrisa forzada y rota en sus labios expresa todo.

Es gracioso como puede sentirse mal por querer exorcizar un espectro. O más de uno. Primero Akane y luego Hanako solo por amor, enamorarae de Akane y querer ver feliz a su hermanito, para peor se ha acostado con Akane, un semi-aparición, tantas veces que vuelve el estado de su posición ridícula.

Porque Akane es inalcanzable para él, porque él nunca podrá esperarse, porque es una rutina que salió de control hace tanto.

El cazador es una presa cuando expone su corazón, y francamente es muy gracioso ver como parece un efecto de contrariar su propósito.

Una lastima que a Teru no le hiciera ninguna gracia ser la presa de una cazadora tan peligrosa por amor.

Jsjajjsjs
Son la wea más tóxica de la vida.

Tanto Aoi como Teru son tremendas
red flags, admito que los dos ships
son tóxicos pero amo mi
Terukane y nadie
me lo quita.

─ׂ───꯭ׂ─꯭─꯭─❅─꯭─꯭─꯭ׂ───ׂ──

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©Kαgαყαkι--Hιkαrι-Nყx , 20𝟮𝟯