↬ Prólogo.
─Corría. Corría lo más que podía en aquel frío e invernal bosque. Estaba nevando, pero no lo suficiente como para ocultar sus huellas. Había dejado a sus pequeños escondidos en su hogar, esperando a que los aliados fueran tras él y no investigaran aquella casa donde se encontraban los hermanos alemanes tratando de escapar de lo inevitable─
─ ¡REICH! -Seguía los pasos del alemán, había enviado a sus hombres a capturar a las tropas alemanas restantes y a buscar al Führer mientras él mismo le daba caza a Third Reich. Traía su arma en mano y viendo al alemán correr frente a él entre los árboles, disparó al aire como advertencia para que se detuviera─ ¡MAS VALE QUE TE DETENGAS, TRAIDOR!
─El dictador se tropezó al escuchar aquel disparo pero no se cayó, solo sintió una punzada y siguió corriendo hasta que se detuvo detrás de un árbol para descansar al creer que lo había perdido. La bala que previamente había disparado el soviético lo había alcanzado, impactando en su hombro izquierdo ahora sangrante─ Hah...
─Su respiración era pesada, el euroasiático estaba muy cansado y sabía que el alemán también, habían estado luchando hacía días sin parar y finalmente habían llegado a la batalla definitiva, hoy terminaría todo. Mantenía su arma preparada, caminando a paso firme buscando con la mirada a su alrededor a aquel ser que en algún momento fue su aliado─ Mas te vale que te rindas, traidor... Estás acabado... Mis hombres fueron por Hitler... ¡Y SOLO QUEDAS TÚ REICH...! ─Estaba furioso, cansado, y claro... Muy dolido, dolía cada día después de aquella traición. ¿Cómo pudo haber caído en su estúpido juego...? ¿Cómo pudo haber caído tan bajo para que jugaran de esa forma con él...? Jamás permitiría que volvieran a verle la cara de esa manera, y no... Jamás llegaría a ver a alguien de manera sentimental de nuevo, no necesitó a nadie antes y no necesitaría a nadie nunca─ ¡REICH...!
─Un resbalón en su pie bastó para revelar su escondite, recibiendo un disparo en el mencionado. 4 contra 2 para el euroasiático, esas eran las balas que le quedaban a cada uno. En un intento desesperado de hacer retroceder al soviético lanzó un disparo en dirección a él, pero en esos momentos su vista no era muy buena, sumándole que su mano derecha y brazo izquierdo no paraban de temblar. Obviamente había fallado, le quedaba una sola bala, tenía que usarla inteligentemente─ Hitler deió de contaminar el aire hace 3 malditos meses... Tus hombres solo están perdiendo el tiempo, Unión...
─ ¡¿Y ACASO PIENSAS OUE VOY A CREERTE?! ¡HASTA QUE NO TENGA SU PUTO CADÁVER VOY A QUEDARME TRANQUILO! Y si no tengo el de él... ¡MÍNIMO ME LLEVARE EL TUYO, DESGRACIADO! ─Pequeños copos de nieve comenzaban a caer y el aire frío se hacía presente. Ya no quería seguir con aquella persecución, quería terminar todo de una vez. Recargó el arma que llevaba consigo acercándose peligrosamente al alemán, su cuerpo tenía vendajes por todas partes y dolía, pero necesitaba encarar a quien traicionó el tratado, la confianza y su corazón─ No tienes a donde ir Reich... Los aliados dieron con tus hijos... Deja de correr de una maldita vez...
─ Perdón por lo de tu ojo... ¿Cómo estás...? ─Pareciera como si estuviera bromeando con él, pero en realidad ya no tenía escapatoria, ya habían perdido y todo lo que intentara hacer sería en vano─ Hah... ¿Y para qué quieres mi cadáver...? -Otro disparo fue dado en su pierna izquierda, impidiéndole cualquier forma de escapar al europeo─ S-sólo ve que no les hagan nada a mis hijos... Ellos no tienen ninguna culpa de todo de lo que está pasando...
─ ¿Acaso es una puta broma...? Dudo que te importe como me siento, y tu cadáver servirá para ponerle fin a todo esto... ─Se acerco a él, viéndolo en el suelo sobre la fría y blanca nieve, nieve que poco a poco se tornaba de un rojo carmesí, un color tan intenso como aquel campo de rosas donde aceptaron tener aquel prohibido romance. Intentaba alejar aquellos pensamientos pero a quien engañaba, su corazón dolía por el alemán, y no quería dejarlo ir─ Los pequeños estarán bien... Lo prometo... ─Se obligaba a no decir nada más pero no podía, era imposible no decir nada, su mano temblaba pero intentaba controlarse para no hacer nonguna estupidez. Bajó el arma meditando un poco la situación, hablando después de casi un minuto en silencio─ Todo esto fue un maldito error... Un error que me perseguirá por el resto de mis días, Nazi...
─ No me digas así, Soviet... B-bitte... ─Lo miró desanimado, no quería hacer lo que Hitler le había mandado a que hiciera en caso llegaba a suceder algo con el plan, pero no le quedaba de otra, no quería que el contrario tuviera que asesinarlo y tuviera que pasar por esa amargura─ Perdón por todo... Recuerda esto... Que el amor que tuve y tengo por ti nunca estuvieron el plan... Nunca fue fue parte del plan enamorarme de ti... Ich Liebe Dich, Sowjet...~ ─Sonrió amargamente y en un movimiento rápido levantó su pistola disparando directamente en su cabeza, dejando en blanco al soviético. El contrario sintió el frío recorrer su cuerpo, algo comenzó a oprimir su pecho y un nudo en su garganta comenzó a formarse─
─ ¿R-Reich...? ─Soltó el arma que cargaba corriendo hacia el alemán, cayendo de rodillas a su lado. No lograba entender lo que hacía, su cuerpo se movía inconsciente ante la situación y era como si no pudiese controlarlo. Tomó al alemán con suavidad levantando su cabeza llena de sangre, se había quedado marcado con aquella pequeña sonrisa, ojos dolidos y las lágrimas que botaba su cuerpo al aún seguir con vida. Agonizando, pero sin posibilidad de retorno─ Reich... Reich.. Despierta Reich... No puedes hacer esto... No puedes, no de nuevo... ¡No puedes irte así como así...! ─El cuerpo inerte del alemán yacía sobre el soviético. No se movía. No reaccionaba. No hablaba... Estaba a nada de morir, ya no había forma de sanarlo. Sus últimas palabras resonaban en su cabeza a cada segundo, ¿Todo el tiempo lo amó...? ¿Entonces porqué lo traicionó...?─
─Los minutos pasaron convirtiéndose en horas, el eslavo se había quedado ahí en el suelo, sentado mientras abrazaba el cuerpo del alemán. Lo había cubierto con su abrigo cubriéndolo del frio en un intento desesperado de mantener su calor sintiendo como poco a poco este se desvanecía. La noche caía y la temperatura descendía cada vez más pero eso no importaba, su corazón dolía y no tenía el valor de soltarlo y dejarlo ir─ No había amado a nadie... No había... Necesitado a nadie... Por qué... ¿Por qué me enamore de ti...? ¿Por qué me traicionaste...? ¿Por qué... Me amaste...?
─Los aliados posiblemente ya debían estar preocupándose de la ausencia del euroasiático pero no le tomaron mucha importancia, en especial su amigo China, que era uno de los pocos que sabían lo mucho que le dolió la traición al de ushanka. Cargó el cuerpo del alemán por el bosque, caminó sin detenerse aun ue su cuerpo entumecido por el frio gritara por un descanso. Solo caminó─
─Mantenía al contrario cubierto aún con su abrigo. La noche había caído y ni siquiera la luna había aparecido en esa sombría noche. Llegó hasta aquella cabaña que fue testigo de encuentros pecaminosos que estaban condenados a la misma desgracia, encuentros que los llevaron a a quebrantar las barreras de aquella época tan cruel y vil, ahora siendo testigo del último adiós al amor
fragmentado y doloroso de dos amantes que se obligaron cada uno a odiarse. El eslavo entró para llegara la habitación y recostó al alemán sobre la cama─
─Habían muchas cosas regadas por el suelo; botellas de licor vacías y otras tantas hechas pedazos, todo en un intento desesperado por apagar el resentimiento y dolor por una traición. Parecía que se encontraba en un sueño, un sueño del cual jamás despertaría, beso su frente y quitó de su cuello una bufanda color rojo sangre que él mismo le había dado, aquella que inició con lo que fue su aventura de amor en esos cortos y felices 2 años. La colocó alrededor de su cuello y se alejó de ahí, saliendo de la habitación y después de la cabaña, dándole una última mirada para suspirar y alejarse, dejando lo que alguna vez sintió ahí encerrado─
waa, ambos estábamos queriendo llorar en ese momento ;;;
« aclaraciones »
↬ este rol lo empezamos más decente, así que solo acomodé y arreglé algunas cosas para darle sentido y que se viera bien. sobretodo faltas ortográficas de ambos y errores del teclado..
↬ lloren, aunque esto no va a ser lo más doloroso de todo, HAHAHAHA.
↬ ¿alguna duda?-
↬ el regreso es el más original de todos, ae.
↬ tuve que cambiar el guión largo por "─", algo sucedía que lo veía como un simple guión y me incomodaba.
y sin más que decir, adiós¡!~
- reich y urss.
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