07
"HAY DOS TIPOS DE DOLOR; UNO ES EL QUE TE LASTIMA Y EL OTRO EL QUE TE CAMBIA"
La campana de las clases sonó nuevamente en la escuela, todos inmediatamente se fueron a sus clases, yo cerré mi casillero y empecé a caminar por el pasillo que en un segundo se quedó solitario. Era mi clase de biología, la que menos me gusta. Paré en seco al escuchar la voz de Peter, se suponía que él también estaba en clases. Me regresé en mis pies y me asomé por la ventana de la puerta, viendo a MJ con Peter. Fruncí el ceño. Presioné el botón de mi oído, era un pequeño aparato que me había fabricado para escuchar más. Aunque ahora me siento mal por oír las conversaciones de mi novio.
— MJ, enserio que me alaga que te guste pero... Tengo novia, y la quiero — le habló el arácnido mirándola. Ella se mantenía quieta al frente de él.
— Alaia siempre ha tenido lo que quiere. — dijo — ni siquiera sé porqué te gusta. Yo puedo tratarte mejor que ella, hacerte más feliz. Y no estoy siendo una perra, simplemente soy honesta.
— Y lo sé, sé que lo eres. Pero enserio, ¿podrías dejar de intentar que esté contigo, por favor? mi relación con ella va bien y no quiero que todo salga mal — le pidió.
— Desde hace seis años fue así. Desde hace tiempo que me gustas, te he observado y sé todo sobre tí, mucho más que Alaia — pausó — y sé que si ella no estuviera todo sería más fácil
— Tú no me gustas. — le repitió mirándola sin expresión — debes entenderlo. Yo la amo a ella.
— Peter, yo no estoy siendo egoísta. Y mucho menos con Alaia. Por eso decidí terminar nuestra amistad, para no lastimarla con esto. — suspiró — seré más discreta, pero no prometo que me dejes de gustar.
MJ empezó a caminar hacia la puerta, me escondí casi corriendo en la otra punta del pasillo y me asomé un poco mirándola caminar hacia el otro lado. Peter salió y subió las escaleras desapareciendo. Suspiré y apagué el aparato en mi oído. Sé que no debí espiarlo, pero mis ganas de saber qué le diría me comían más. Seguí el camino por el pasillo para tratar de llegar a mi clase atrasada.
[...]
Abrí las puertas de la escuela cuando ya todo acabó. Estaba saliendo con Ned después de hablar de algo con Betty. Peter no sé dónde estaba metido, pero necesitaba hablar con él sobre MJ ya que sentía que algo estaba mal. Empezamos a caminar entre el montón de personas, pero paré en seco al ver que todos tenían su mirada encima mía, bajé mi mirada y me removí en mi sitio incómoda.
— ¿Porqué todos me están mirando así? —susurré al chico gordito a mi lado, él se encogió de hombros sin saber. Aveces maldigo ser una Stark.
— Vaya, Alaia, ¿de verdad no lo sabes? — Flash apareció al frente de nosotros — vamos, eres muy lista cómo para no saberlo.
— ¿Saber qué? — pregunté confundida y mirándolo con el ceño fruncido. No tenía ni idea de qué hablaba.
— Todo lo que haces sale en los medios, y claramente ya todos nos enteramos que Michelle está enamorada de Peter. ¿No te sientes algo intimidada de que quieran quitarte el novio? — preguntó.
— ¿De qué estás hablando, Flash? — pregunté molesta — además, ¿cómo te enteraste de todo eso?
— Golpeaste a Michelle por Peter. — me soltó. Lo miré con bastante confusión — ella tiene un morado en su mejilla y nos contó llorando que le pegaste porque no querías que te alejara de Parker.
Esa maldita perr... — yo no hice eso, nunca golpearía a alguien.
— ¿Ah, no? ¿entonces se lo hizo ella misma, um? — preguntó obvio — todos sabemos que con la muerte de tu padre te volviste una abusiva
— Ya basta. — le ordené. No quería llorar en estos momentos.
— Y también una manipuladora y depresiva. Parker sólo está contigo por lástima, y creo que él debería pedirle a Michelle que sea su novia, porque tú ya estás muy baja de nivel. — me siguió hablando
— Flash, ya cálla... — el moreno empujó a Ned para atrás que intentaba defenderme
— Tu padre merecía morir. Seguramente fue un plan de ustedes dos para que ganes más fama, porque todos saben que los Stark sólo buscan una cosa. — se acercó a mí, retrocedí — dinero.
— Cállate. Eso no es verdad. — mis ojos se cristalizaron de la impotencia. Realmente tenía ganas de hundir el maldito botón del reloj de mi muñeca y llamar a mi traje para callarlo, pero no podía hacerlo. — tú no sabes por lo que he pasado.
— Y es cierto, no lo sabemos. Porque no has pasado por nada, te haces la débil pero la realidad es otra — choqué con una pared — tú y tu familia son unos falsos
Mordí mi labio inferior para no arrancar a llorar. Me quedé callada sin saber qué más decir. Esas palabras me habían dolido, y mucho.
— Será mejor que la dejes, Flash. — ambos volteamos a la derecha, encontrando a Peter con el ceño fruncido. Se colocó al frente mío. — mejor vete de aquí.
Flash sonrió cínico — cómo digas, Pito Parker. — se dió la vuelta y empezó a caminar hacia su auto gris alejándose de nosotros. Peter se volteó mirándome con tristeza, Ned se nos acercó.
— ¿Estás bien? — preguntó el gordito. Asentí lentamente — pensé que te haría algo grave.
— Quiero irme a casa. — murmuré bajo — adiós, Ned — me despedí
Empecé a caminar rápidamente alejándome de la escuela, obviamente Peter iba detrás mío. Llegué al callejón de siempre y me adentré.
— Hey. — se puso adelante deteniéndome y me tomó por los hombros — todo lo que dijo Flash es una idiotez. Obviamente tú nunca golpearías a alguien.
— Tú no sabes lo que sentí, Peter. — dije mirándolo con mis ojos llenos de lágrimas. Lo esquivé y seguí caminando — mi vida empeoró desde que papá murió, ya no le veo sentido a las cosas
— Alaia... — tomó mi mano. Me volteé a verlo con obligación. — sé que las cosas son difíciles últimamente, pero tratemos de ver el lado bueno a las cosas. Estamos juntos en esto y podemos seguir adelante. Las opiniones de los demás no deben importarte.
— Trato de hacerlo pero... Soy débil, Flash tiene razón, me convertí en una maldita depresiva que llora por todo — pasé mis manos por mi cabello estresada. Sollozé. — ya no sé qué hacer... Ella está arruinando todo...
Empecé a llorar. Peter me abrazó recostando mi cabeza en su pecho. Cerré mis ojos. Acarició mi cabello lentamente para tranquilizarme. Ahora mismo me sentía como una copa de cristal a punto de romperse.
[...]
— ¡Y claro que debemos darle gracias a Spiderman por estar aquí esta noche! — habló May por el micrófono. Yo estaba detrás de la cortina mirándolos.
Estábamos en la recaudación de caridad de Festín, el lugar donde trabaja May. Pepper y yo donamos mucho dinero para todas esas personas sin hogar e invitamos a Spiderman para que entretenga a las personas. Peter estaba nervioso y más con su traje de hierro. Después de lo que pasó con el asunto de Flash decidí calmarme, tomarme todo a la ligera y olvidar las cosas. Dejar de pensar en papá. Trataré de mostrar una sonrisa.
— Ehh... Muchas gracias por invitarme. — fue lo único que dijo Peter.
— Bueno, en unos minutos Spiderman podrá responder preguntas, así que, esperen. — dijo May.
Los dos caminaron hacia acá con el montón de personas gritando. Peter entró y se quitó su casco. — ¡oh, Dios mío! eso estuvo muy bien — él y May chocaron los cinco — ¿lo hice bien?
— Sí. Estuviste excelente pero pudiste ponerle algo más de conversación, ya sabes, flow. — respondió May
La puerta del otro lado se abrió. Peter se colocó su máscara por si acaso pero se la quitó nuevamente al ver que era Happy con un gigante bono de dinero firmado por Pepper.
— Hola May. — saludó a la mayor. Me coloqué al lado de Peter — ¿el vestido es nuevo?
— Sí. ¿Cómo lo notaste? — preguntó sonriendo y mirándolo
— Nunca lo habías usado antes. — ambos rieron al mismo tiempo con gracia. Yo miré a Peter de reojo y él a mí con el ceño fruncido.
— Bueno, iré a seguir con el evento. Prepárate, en unos segundos te llamaré — le avisó al arácnido. May cruzó la cortina y siguió con la presentación
— ¿Qué está pasando? — preguntó Peter mirándolo con confusión por lo que pasó con su tía — Happy, ¿qué estás tramando?
— ¿Yo? nada. — se encogió de hombros sin importancia — oh, se me había olvidado. Nick Fury los va a llamar a algunos de ustedes dos en cualquier momento
— ¿Qué? — preguntamos al mismo tiempo confundidos. ¿Nick Fury? — ¿porqué Nick Fury nos va a llamar? — pregunté.
— Hay problemas y los necesita. Él sabe que tienes el traje, toda la compañía de Stark Industries lo sabe — dijo lo último mirándome
El teléfono de Peter comenzó a sonar, él lo tomó, ví por encima de su hombro y era un número desconocido. — ese es él. — habló Happy
— No voy a hablar con Nick Fury. — se negó mi novio enseguida con miedo. Happy lo miró con el ceño fruncido — ¿porqué debo hacerlo?
— Porque son cosas de superhéroes y se supone que tú eres uno. Alaia es hija de Tony y tiene un traje entonces ella prácticamente también lo es — le explicó rápidamente
Peter presionó el botón de cancelar llamada en la cara del guardaespaldas. — ¡no puedes mandar a Nick Fury al buzón!
— ¡Lo siento, tengo que irme, me están llamando, oigo mi nombre! — se acercó a mí y dejó un beso en mis labios empezando a caminar hacia la cortina
— ¡No puedes dejarlo en el buzón de voz! — le repitió el gordito, Peter se fue regresando al escenario. Suspiró — ese chico se las va a ver conmigo...
Happy dejó el cheque grande en la mesa y se fue por la puerta. Me acerqué a la cortina y me asomé un poco viendo cómo a mi novio lo atacaban con preguntas de todo tipo. Desde si sería el nuevo Iron Man o si protegería a Nueva York solo. Ví que se despidió de todos rápidamente y se fue con sus telarañas sin decir más nada. Sé que había puesto mal, siempre cuando habla sobre mi padre es así.
Toqué mi reloj llamando a mi traje, en un segundo llegó. Salí del edificio por las puertas traseras con cuidado de que nadie me viera y volé alrededor del edifico buscándolo. Lo encontré sentado en una esquina del techo, me senté a su lado dejando mis piernas en el aire.
— ¿Te sientes bien? — pregunté mirándolo. Él miraba a la calle debajo de nosotros — sé que los reporteros y eso te hicieron sentir mal...
— Lo mismo de siempre— respondió — me preguntan sobre él todo el tiempo
Volteé a mi derecha viendo un muro, donde estaba pintado Iron Man en grande con muchos colores de naranja, amarillo y rojo. Volví mi vista hacia Peter. — serías un buen Iron Man — le dije con una sonrisa. Él sonrió sin mostrar los dientes. Apoyó su cabeza en mi hombro.
— ¿Sabes que el viaje a Europa se aplazó para pasado mañana? — preguntó — bueno, ya lo sabes.
Reí. Puse mi mano encima de la suya mientras veíamos las estrellas de la noche de Nueva York.
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top