Capítulo Veintidós.

TaeHyung había experimentado las malas mirada de mucha gente a la misma vez cuando cursó la escuela primaria. Gente como, maestros, compañeros o incluso los padres de estos mismos, quienes lo miraban con asco y en los peores casos con lástima.

Pero TaeHyung podía ignorarlos puesto que esa gente no era nada de él, no tenían ningún vínculo de ninguna manera y puesto que él sabía que terminando los años escolares jamás volvería a ver a nadie. O eso era lo que esperaba él.

Pero la realidad ahora era diferente porque se encontraba con bastantes pares de ojos sobre él. Personas que supuso eran sus primos, tíos o simplemente amigos de la familia que murmuraban entre sí sin creer lo que estaban viendo.

- No se queden ahí- siguió la señora Kim aún con JungKook tomándole la mano-. La fiesta los espera.

- Bruja...- murmuró JiMin aunque sabía que su abuela tenía buen oído pero que de todos modos no lo reprenderian por eso porqué tenía toda la razón.

A excepción de su padre SeokJin quien le dió un pellizco del cual no se quejó y que si no quería armar escándalo no debía gritar del dolor que sintió.

-¡Pero miren a quién tenemos aquí!

De lo lejos, una mujer alta, de pechos grandes y un labial muy exageradamente rojo, se acercaba haciendo resonar los altos tacones que llevaba puestos y moviendo las lentejuelas de su horrendo vestido verde en forma de sirena.

- Tápate los ojos JungKook- habló JiMin tapando los ojos de su hermano quien corrió a su lado de sólo escuchar la voz nefasta de la tía Helen-. No queremos que te den pesadillas en la noche.

-¡Mi querido y guapo sobrino NamJoon!- siguió la mayor y el nombrado solo fingio una sonrisa cuando la mujer lo abrazó-. Claro, y su familia.

Ante eso, JiMin sólo alzó las cejas ofendido mientras ponía las manos en sus caderas en forma de jarra.

- ¿Qué dijo la bruja mayor? - volvió a murmurar y SeokJin sólo le dió una mirada de advertencia que lo hizo callar a regañadientes.

- Vamos pasen, hay mucha gente esperando por todos ustedes.

Y efectivamente así era, todos volteaban asombrados de ver a TaeHyung, y aunque él sabía que tal vez era muy obvia la razón de que él era un nuevo integrante. Cuando llegó a estar frente a frente hacia el señor Kim, entendió porque todos lo veían boquiabiertos.

Él... digamos qué TaeHyung era la imagen pura de su abuelo, sólo que el señor Kim tenía pequeñas arrugas en el rosotro y alguna que otra cana en sus cabellos. Dejándo eso de lado, era como verse a sí mismo en un espejo, dejando de lado también qué se parecía a NamJoon, ahora podía decir que tenía un gemelo cuarenta años mayor que él.

-Dios...-Susurró TaeHyung y casi enseguida la señora Kim llegó con una sonrisa burlona. Viendo la expresión seria de su esposo.

-TaeHyung, él es tu abuelo-

-Kim Joon- interrumpió el hombre mayor. Y ahí TaeHyung entendió porqué su abuela había dicho que hasta en eso se parecían desde un principio.

-Kim TaeHyung- siguió éste mismo, estirando la mano solo para qué el señor Kim la recibiera aún seguro y sin expresión.

-Papá- esta vez fue NamJoon, algo nervioso por la situación-. Él es TaeHyung, mi hijo. Es... tu nieto.

-Lo sé, se acaba de presentar. No estoy sordo- Él frunció el ceño.

-Sí... lo siento- contestó decaído y por parte de SeokJin recibió una palmadita en la espalda como muestra de apoyo.

-Iré por algo de tomar- siguió el señor Kim-. ¿Vienes?

Para sorpresa de todos, el abuelo Joon no le hablaba a su hijo mayor, sino a su nieto mayor, quien algo dudoso aceptó la invitación ignorado la mirada asombrada y ofendida de JiMin.

Y es que aquel chico rubio se había esforzado tanto en llamar la atención de su abuelo, contándole chistes, bailando muy cool, todo para que sólo se ganará el apodo de "Mallitas". Cómo odiaba a ese viejo... así que se rindió en ganarse a su abuelo, pero no iba a negar que estaba muy ofendido de ver como su hermano mayor sí lo había logrado.

JiMin y todos sus primos, claro.

Sin embargo la fiesta continuó por un rato, los niños más chicos corrían de un lado a otro, los adolescentes reían y jugueteaban entre todos mientras que los adultos tomaban vino en copas y tenían charlas amenas. Todo eso mientras, efectivamente, una orquesta aburrida tocaba música aburrida como lo había dicho JiMin.

Y hablando de JiMin. El personaje principal en ese tipo de fiestas.

Se encontraba al rededor de su primos, Daehyun la única mujer y San junto con Vernon y Mark quienes sólo se burlaban por cualquier cosa.

-Realmente tu hermano se parece al abuelo Kim- comenzó Mark en modo de burla-. ¿Deberíamos tratarlo cómo un coronel y tenerle miedo?

Los demás rieron a excepción de JiMin quien sólo arqueó una ceja imprudente.

-Sigues siendo para nada chistoso primo- contestó seguro-. TaeHyung sólo es físicamente como el abuelo, pero para nada que es cómo él mentalmente. Creo.

-¿Crees?- siguió Dae con una sonrisita.- se ve tan aburrido que incluso prefiero hacerte platica a ti.

-¿Sigues con las clases de ballet?- esta vez fue Vernon.

-No es ballet, es danza contemporánea.

-¿Y qué diferencia hay?- se burló San a la par de los demás-. Sigues usando mallitas ¿no? ¿Usas mallitas porque eres gay, o eres gay porque usas mallitas?

JiMin soltó un tks sin chiste.
-Y tú que vas a saber idiota. Soy más guapo que tú y por eso me molestas, no creas que no lo he notado eh.

Los cuatro primos contrarios se voltearon a ver entre sí antes de soltar risas escandalosas. Y eso sólo fue señal para JiMin de dar media vuelta y huir de ahí lo más rápido que podía mientras viraba los ojos.

Ya estando solo buscó en todo el salón de fiestas a sus padres, a TaeHyung o ya de perdido a JungKook quien sabía le hacía compañía cuando estaba solo.

Y hablando de su hermano menor quien también era un personaje principal en ese tipo de fiestas.

Lo encontró siendo acorralado por las manos enormes de la tía Helen quien sólo lo regañaba por alguna razón.
Y eso lo hizo virar los ojos una vez más porque esa señora sí que era nefasta.

-¡JungKook! Debes saludarme, saliste corriendo desde que llegaste, y eso es muy mal educado de tu parte- exclamó la tía y JungKook sólo hizo una mueca desganada.

-Tía tengo que irme, quiero ir a jugar- rogó notando cómo sus primos menores lo veían con lástima y pena.

-No JungKook, tienes que saludarme con un beso porque hoy es un día importante para mi, ¿qué no lo sabes?- siguió ella.

-Felicidades tía, pero quiero ir a jugar. Por esta vez déjame ir.

-Esta señora...-Murmuró JiMin cuando la tia Helen siguió de aferrada-. Debería ir antes de que pase algo malo.

-¡Por supuesto que no! Salúdame cómo debe de ser. No seas grosero.

Esta vez, JungKook frunció el ceño, porque él no era grosero ni maleducado. Simplemente no quería saludarla.

-¡No quiero! Vieja bruja- exclamó el menor y pareció que a la tía estaba por darle un infarto.

-¡Eres el diablo en persona!- gritó ahora ella, llamando la atención de algunos ahí cerca, incluyendo a la abuela Kim quien estaba por acercarse y preguntar qué pasaba.

Pero la tía Helen levantó la mano con toda la intención de propinarle un buen golpe a JungKook, en modo de corregirlo para que supiera que "lo que estaba haciendo estaba mal"

Claro que no.

Y todo pasó en cámara lenta, la abuela Kim paró de golpe asombrada por lo que veía, JiMin trató de correr para impedir el golpe hacia su hermano, JungKook cerró los ojos esperando el golpe y los demás ahogaron un grito asustados.

Pero el golpe nunca llegó.

Así que JungKook abrió los ojos lentamente y lo siguiente que vió fue a su padre NamJoon frente a él, deteniendo la mano de la tía con una expresión que, sí, a más de uno causó escalofríos.

-Puedo saber, ¿qué es lo que iba a hacerle a mi hijo?- preguntó y la señora Kim se sorprendió de escuchar aquel tono en su hijo, quien por lo general era tranquilo y amable. Ahora era todo lo contrario.

-¡NamJoon!- volvió a exclamar la tía Helen-. Yo sólo le dije a JungKook que debía saludarme correctamente. Fue muy grosero aún sabiendo que era mi cumpleaños.

-¿Es asi?- ella asintió-. De todos modos no era razón para querer golpearlo.

-S-Solo iba a corregirlo. No sé cómo educas a tus hijos pero parece que les hace falta mano dura.

-Pues no creo- su tono de voz se hizo más duro, y NamJoon sintió a JungKook esconderse atrás de él entre sus piernas-. Última vez que hace algo como esto, y si alguno de mis tres hijos no quiere saludarla a usted o a alguien más entonces para mí está bien.

-¿Qué? Solo haces que sean groseros y-

-No están siendo groseros, porque si no quieren saludar a alguien es porque se sienten incómodos y jamás permitiría qué mis hijos se sintieran así y mucho menos con la familia. Más bien usted cambie su forma de ser porque a mis hijos los educó solamente yo y mi esposo.

-¡NamJoon-

-¡Helen!- esta vez interrumpió la señora Kim, llegando casi de inmediato junto a SeokJin quien sostuvo a JungKook en sus brazos y JiMin quien le preguntaba a su hermano si estaba bien en un susurro-. ¿Te atreviste a levantarle la mano a mi nieto?

-¿Crees qué eso tiene importancia ahora?- preguntó ofendida la mujer contraria-. Tu hijo es totalmente un grosero, debiste mandarlo con los monjes cómo te lo dije cuando aún era joven.

NamJoon suspiró cansado de todo lo que sucedía, de las miradas de los demás y de los gritos de su madre y tía.

-Será mejor que nos vayamos- interrumpió el moreno hacia su esposo e hijos quienes asintieron rápidamente.

Y antes de que NamJoon se atreviera incluso a pensar en su hijo mayor, la carcajada del señor Kim resonó en todo el salón llamando la atención de todo el mundo.
Y claro, haciendo a JiMin mirar con horror la escena siguiente.

El abuelo Kim todo rojo del rosotro, con pequeñas lágrimas en los ojos, una enorme sonrisa adornaba sus labios mientras seguía carcajeando.
En frente suyo TaeHyung con una enrome sonrisa a labios cerrados.

-¡Mujer!- exclamó el señor Kim hacia su esposa quien lo veía rara-. Tae acaba de decir que toda esta escena parece una telenovela mexicana.

-¿Tae?- preguntó bajito ella antes de que su esposo siguiera.

-¡Y dijo que tu horrenda hermana era la gaviota! ¡la gaviota!- siguiente a eso otra enorme carcajada que tomó desprevenido a todos una vez más-¡No se parece a la actriz! ¡se parece a una gaviota! ¡Horrenda, horrenda!

-Ya, va. Se va a acabar el mundo, fue un placer conocerlos- exclamó JiMin super indignado.

Siguiente a eso y una pelea entre NamJoon y su padre sobre que tenían que irse, todos abordaron camino hacia su dulce, dulce hogar....




Y así señores, así es como un macho alfa defiende a su manada...
Alto capo mi NamJoon quien no dejo abajo a la raza.

Posible Lemon NamJin en el siguiente cap.

¿Todavía se le dice Lemon? No sé, ya estoy vieja para eso, ya me truenan las rodillas jajajaja...😪

-Kim_SeokJin_05.

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