Chapter11:-

-Te lo pregunté una y otra vez.-le regañaba.- Desdé cuándo sabés de esto.

-U-una semana.

-Una semana.-repitió.- ¡Una semana escondiéndolo, Roseanne! ¡¿qué es lo que tienes en la cabeza, niña?! -gritó asustando la.

Se aproximó a la menor y ella cerró los ojos esperando el golpe. Éste nunca llegó.

-Quién es el padre.

-No lo sé.-murmuró bajo, aunque la adulta sí alcanzó a escucharla claramente.

-¿Qué?

-Mamá, yo... -sus manos temblaban y su voz ya no salía.

-¡Qué fue lo que hicisteis en las vacaciones! -la tomó de los brazos y comenzó a zarandearla.- ¡¿Qué?!

-¡¡Me acosté con otro hombre!! -gritó fuerte. La mujer le soltó lentamente anonadada. Después le dio la espalda.

-Me enamoré de ese hombre. Desdé la primera vez que lo vi, no lo pude olvidar.-le decía.-Me gustaba estar entre sus brazos y ser besada por él. Ser querida y deseada por la misma manera que yo a él.

-¡¡Callate!! -le abofeteó.-¡Cierra la boca! Tú... -la apuntó.-Tú como pudisteis. ¡Estabas de novia con JongIn!

-¡Yo no quería a Kai! ¡Sólo quería olvidarme de Jimin! Y aún así... -sus ojos ya eran cristalinos por las lágrimas acumuladas.-No pude.-negó.-No pude olvidarlo.

-Qué tiene que ver ese tipo aquí.-la menor se mantuvo en silencio. Hay fue cuando lo entendió todo.
-No me digas que ese maldito bastardo, fue hasta allá y... Tú y él...

La castaña asintió.

-Eres una...

-Decírmelo. Me lo merezco.-se puso recta.-Sí. Me acosté con Park Jimin.-le confesó.-Es el único hombre que me vuelve loca en la cama, gritar y desearlo cada vez más.

-¡Callate! No puedo creer las barbaridades que dices.

-Amo a Jimin, mamá. Lo amo.

-Si lo quieres tanto, veté con él.

-Mamá, tú...

-Fuiste lo demasiado adulta para entregarte a el, ahora ve y quedarte a su lado.

-No mamá.-negó.-Tu eres mi madre, no pienso dejarte sola.-fue hasta ella y la abrazó.-Eres la única que me quedá.

-Chaeyoung... -suspiró.

-Prometo no ser una carga, trabajaré duró, y no te molestaré. Seré más responsable desde ahora en adelanté.

-Debisteis de haberlo hecho antes, Roseanne.

-Perdonadme. Fue un accidente, no sabía...

-¿Ellos lo saben, alguien más lo sabe?

-Sí. Chanyeol también esta enterado.

-Seremos lo más discretas con tu estado, no quiero ni pensar que dirán los vecinos.

-No deberían de decir nada, sus hijas son peores.

-Rose, deben de hacerse la prueba de paternidad.

-Lo sé.

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Días después...
13:19 pm.

-Sé que debes estar molestó.-comenzó a decir.

-¿Molestó? Furioso querrás decir.-se quejó.

-Jimin, escucharme.-él le dio la espalda.-Jimin, por favor...

-Chaeyoung, te hice mía.-las mejillas de la menor se tiñeron de rosa.-Eras mí chica, y tú... Te acostasteis con ese idiota. Con ese imbécil que conocisteis por casualidad, ¡el rival del equipó!

-¡Esto no esta relacionado con él basketball!

-¡¿Quieres que te felicité?! -explotó.

-¡Fue sólo una vez! .-grito.- Sólo una vez Jimin, lo juró. No dejé que me tocará nuevamente.-en su rostro se notaba lo afligida.-El único que sabe mis puntos débiles eres tú, maldito desgraciado.

La confesión lo dejo sin hablá.

Suspiró. Inhaló y exhaló.

-¿Qué quieres que haga? -preguntó después de unos segundos.

-Necesitó que se hagan la prueba de paternidad.

Suspiró nuevamente. Agobiado.

-Aquí la pregunta más importante es, ¿lo tendrás?

-... Según quién sea el padre.

-Qué quieres decir. ¿abortarás?

-No tengo otra salida. No quiero ser madre, no me siento preparada para ser lo.

-Roseanne Park.-la tomó de los hombros obligado la a mirarlo.-No os atreváis a hacerlo.-demandó.-Si lo hacés, soy capaz de todo.

-No tomes decisiones por mí Jimin. Yo sé que hacer.

-¿Te está obligando ése bastardo?

Ella bajo la mirada.

-¡Park Chaeyoung!

-¡Dejarme ir! -intentó zafarse. Algo que no consiguió.- Sueltame, ¡Park Jimin! -insistió.

La abrazó fuertemente tratando de tranquilizarla. Ella comenzó a llorar para después golpearle el pecho masculino.

-N-no sé que hacer.-dijo la menor.-No lo sé.

-Calla. No tienes que hacerlo, el único mounstro fui yo.-luego le regaló un beso en la frente.

Castaña se relajó y sonrió con las mejillas sonrosadas.

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-Qué hace éste punk aquí.-se quejó el moreno cuando lo vio deslizar la puerta.

-Tenemos que hablar.-comento ella.- Los tres.

-¿Estas loca? Me voy.-se levantó de su asiento. Pero Jimin lo obligó a sentarse nuevamente.-¡Muevete idiota! -lo empujó lejos, causando que el rubio se golpeará con un pupitre.

-¡¡Kim!! -gruñó.

Se olvidaron que había una chica presente y comenzaron a golpearse.

Rose se metió. Kai la alejó, empujándola fuertemente cegado por la rabia.

La castaña cayó al suelo golpeándose el hombro.

Un fuerte gritó llegó a sus oídos.

- ¡¡Separarse ahora mismo!!

El director de carrera se encontraba con un semblante nada bueno.

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-¡No lo soportó! Ya no son unos niños de primaria, hasta ellos son más gente que ustedes.-les reprendaba.-Y usted señorita Park.-la chica lo miró un segundo.-Debió de haberme llamado en el primer segundo que comenzaron a golpearse estos dos.-los señaló.

-Lo lamento. No me dio tiempo de hacerlo.-se disculpó inclinándose un poco.

-No los expulsaré como se debe. A cambio de eso, harán trabajó escolar.

-¡Oiga! No estamos en preparatoria.-se molesto Kai.

-¿Quiere que cancelé su matricula señor Kim? -el joven se tenso.- Esta a solamente unos meses de graduarse. No creó que a sus padres les gustaría que dejase el establecimiento a un semestre de irse. ¿O si?

-Que molestó.-susurro.

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-Habla Roseanne, no tengo todo el día para ti.

-¡Yah! Kim JongIn.

-No te metas en esto Park.-lo miró con fastidio.-Es con esta... Chica. Si es que se le puede llamar así.

-¡Kim JongIn! -gritó ella.

-¡Yah! Tú realmente... -lo tomó del cuello de la camisa con intención de golpearlo. Tenía el puño en el aire.

-Jimin.-dijo ella tomándole del brazo.- Dejarlo, no vale la pena.

-Ja. No me hagáis reír Chaeyoung, aquí el único que es víctima soy yo.-se apuntó.-Por tener a una novia de zorra.

-¡Ahora si imbécil!

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-Vengo por Park Chaeyoung.-dijo la mujer.

Un oficial le dijo que lo siguiera. La menor estaba en una celda.

Los tres separados.

-Número dos.-ella levantó la mirada.-pagaron tu fianza. Te puedes ir.

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-No tienes nada que decirme, Roseanne.-decía mientras conducía.

-No quiero hablar ahora madre.

-Esta bien. Lo haremos en casa.

La joven observó la oscura calle por la ventanilla. Sólo esperaba que esto acabase lo más pronto posible.

-Eres un estorbó, bebé.

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Momo 🍑💞