Capítulo XV: Hoppelessly devoted to you (*)

LIZ MORTENSON

Que mala suerte, cuando besé a Will la maestra de matemáticas nos vio y nos mandó a la dirección y lo que es peor, llamo a nuestras mamás, solo espero que papá no haya contestado el teléfono o estaré muerta.

Ambos estábamos esperando en el pasillo mientras nuestras mamás hablaban con la directora, aunque por fortuna el profesor Clark salió en nuestra defensa.

Golpeaba constantemente mi tenis contra el suelo mientras que posaba mi mano en mi rodilla sin dejar de abrirla y cerrarla por los nervios. Will estaba a mi lado y ni siquiera nos mirábamos desde que vimos entrar a nuestras respectivas madres con el director, y por supuesto la mirada matadora que me dio mi mamá diciendo que nos arreglaríamos en casa

—Perdón— jugué con mis manos mientras al fin levantaba la vista de mi tenis para ver a Will— no pensé que terminaríamos en la dirección

La verdad en el momento en que me dijo que solo quería ser mi amigo, no sabía qué hacer para darle a entender que no solo quería ser su amiga, y sin pensarlo ya lo había besado rogando que no me rechazara, no me rechazo, y en cambio me dio otro beso, de nuevo sentí eso que ahora pensaba que era mis intestinos acomodándose, aunque todo se acabó cuando la maestra de matemáticas nos encontró, y nos gritó para luego mandarnos a la dirección

—No te preocupes, yo también te bese— me sonroje cuando me dijo eso, volví a bajar la cabeza cuando note mi cara colorada— creo que ambos tenemos un poquito de culpa, aunque no creo que nos expulsen, es el último día

—No sé, algo me dijo que debía hacerlo— dije con una ligera sonrisa— ¿Quieres ser mi novio?— dije sin pensar

Cuando me di cuenta de lo que había salido de mi boca, me hice pequeña en mi asiento, me lleve la mano a la frente quitando el cabello que tenía despeinado por este rogando en mis adentros que un hueco en la tierra se abriera y me tragara

《Eres una estúpida, Liz 》

《¿Cómo se te ocurre preguntar eso así como así?》

Si, ahora debe pensar que soy extraña, o que soy una lanzada, por lo que gire la cara desviando cualquier contacto visual esperando que mi mamá saliera de esa oficina para poder salir corriendo y encerrarme en una cueva hasta januca

—Sí— fueron segundos de un tortuoso silencio, pero cuando Will dijo eso, inmediatamente lo miré— sí, sí quiero ser tu novio.

Tomo mi mano que estaba sobre el brazo de la silla, me dio pena porque sentía mi mano sudada, nuestros dedos se entrelazaron entre ellos, mire mis manos por varios segundos hasta que levante la vista conectando mi mirada con la de Will, cuando me sonrió... sentí como mi corazón se aceleraba y una inmensa felicidad me inundaba por completo

—Te daría otro beso pero puede venir alguien y ahí sí nos van a terminar de expulsar— confesé con las mejillas rojas sin alejar mi mano de la de él 

—¿Uno rápido?— ambos miramos que nadie nos viera y nos dimos un beso de piquito

Solté una risita mientras me volvía a encoger en mi silla, sabía que nadie nos había visto, pero no pude evitar ponerme roja, si es que eso era posible, pero aun así no quería soltar su mano de la mía

—Te quiero— gire la cabeza al sentir como se me aceleraba el corazón en mi pecho al oírlo decir esas dos palabras— no te lo pude decir el día que tú me lo dijiste, porque aún no me podía creer, pero desde ese día debí decirte que te quería

Estuve a punto de volver a repetirle aquello que le dije el día que nos besamos, sin embargo varias voces y pasos acercándose hicieron que diéramos un pequeño brinco mirando la puerta de la dirección, claro que sin soltarnos las manos

La puerta de la dirección se abrió y ahí estaba mi mamá con una cara nada feliz, llegando a casa me pegaría con el zapato, estoy segura.

Al lado de mi mamá estaba la maestra que matemáticas que no se veía nada feliz, para molestarla, no solté la mano de Will, sino que ambos seguimos con nuestros dedos entrelazados sin dejar de mover las manos juntas

También en la puerta había una señora castaña de cabello largo que tenía cierto aire a Will, en cuanto su mirada cayó sobre nosotros, sonrió ampliamente

—Oh, tú debes ser la famosa Liz— la señora me sonrió, parecía amable a simple vista

—Mamá...— susurró Will avergonzado

Querida, no le des mala impresión a la suegra

—Señora Byers— me levante mirándola con una sonrisa mientras extendía mi mano que ella tomó— es un placer conocerla

—Lo mismo digo de ti— a la señora Byers solo le bastó sonreír para relajar el ambiente tajante— Will ha hablado mucho sobre ti

—Mamá... — Will se volvió a cubrir la cara, avergonzado

—No te preocupes, Will— abrí los ojos en exceso cuando mi mamá empezó a acercarse con una sonrisa amplia— no creas que mi hija no me ha hablado de ti también

Arg, traidora

Me di un duelo de miradas con mi mamá por un par de segundos, aunque no duró mucho cuando bajé la cabeza. Podré manipular a las personas y levantar objetos con la mente, pero mi mamá aún era una autoridad que respetaba

—Señora Mortenson— Will extendió su mano hacia mí mamá que ella tomó sin borrar su sonrisa del demonio— también me alegro conocerla

—Bueno, Joyce— mi mamá se dirigió a la mamá de Will después de soltar su mano— creo que nuestros retoños parecen avergonzados de la razón por la que nos llamaron, de mi parte no tengo intención de castigar a mi hija

—Yo tampoco, Maddie— la señora Byers le regresó la sonrisa a mi mamá

—Bueno, ahora que todo está aclarado— mamá se dirigió a mí con su sonrisa que empezaba a darme pánico— Elideth, tenemos que ir por tus resultados del laboratorio, así que toma tus cosas

《¡¡Significa peligro!!》

Mi madre me llamó por mi nombre completo y estaba riéndose y con esa maldita sonrisa dulce, había dicho que no me castigaría y eso le creo, más bien creo que significa que hoy moriría

—Will, también nos vamos, ya es tarde— la señora Byers le hizo un gesto de lado a su hijo

—Está bien— ambos tomamos nuestras mochilas y nos levantamos del asiento

—Lamento todo esto— empecé a jugar con el anillo que tenía en mi índice— ¿nos vemos mañana? Inician vacaciones

—De hecho— Will hizo un gesto de dudas por unos segundos— se supone que hoy iría a burger king con los chicos, pero puedes venir cuando salgas del doctor

—Claro, nos vemos allá

Ambos nos acercamos y el me dio un beso en la mejilla, aproveche la cercanía y también le di un beso en la mejilla.

Salí huyendo antes de que notara que de nuevo me puse tan roja como una fresa. Mamá me dio una mirada de arriba a abajo cuando vio que llegue con una sonrisa estúpida a su lado en el auto, negó con gracia antes de lanzarme las llaves para abrir la puerta del copiloto 

(...)

Mamá cada tanto me miraba de reojo al verme desafinar no sé cuántas veces mientras cantaba Hoppelessly devoted to you de Olivia Newton-John, y aunque amábamos a Olivia, también debía de admitir que hasta mi perico cantaba mejor que yo, bueno, hoy simplemente era imposible que algo me pusiera de mal humor

—Generalmente estarías suplicando que no te quitará tus discos de Queen y de Michael Jackson, ¿Qué te pasa?— preguntó mi mamá viéndome de reojo sin dejar de manejar en cuanto la canción acabó

—Que hoy nada me va a poner de mal humor— dije viendo a la ventana mientras suspiraba

—La maestra dijo que te besaste con alguien cuyo nombre es Will— no pude evitarlo y me sonroje— y que sus besos eran llenos de pasión— dijo con una voz rara-

—Eso no es cierto, solo le dí un beso muy pequeño en la boca— dije algo enojada— la gente inventa cada cosa— dije y rodé los ojos

—¿Y porque besaste a Will?— me vio por un segundo y luego siguió con la vista en el camino

—Quería hacerlo y luego le pedí que fuera mi novio y me dijo que sí— mire a mi mamá y alzó las cejas

—Vaya... — mamá abrió los ojos sorprendida— cuando tu padre se entere... va a sacar la escopeta que compró hace dos semanas y que tiene en el garaje

—Pero no se va a enterar de nada porque tú no vas a decirle nada— advertí apuntando a mi mamá con mi índice, mamá me dio una mirada desinteresada— tu eres comprensiva y no vas a decirle nada, porque tampoco quieres que estrene su escopeta nueva ¿verdad, mami linda? — aletee las pestañas falsamente

—No, solo te pido que me des tu foto de los Guns N' Roses— dijo con una sonrisa descarada

Abrí la boca completamente ofendida ante su amenaza—Eres un monstruo, mi Axl Rose— dije entrecerrando los ojos— pero aun así no le dirás a mi papá que tengo novio.

—¿O qué? — Alce mi mano moviendo ligeramente mis dedos— si manipulas mi mente, venderé tu tocadiscos— baje la mano ante su amenaza

—Mamá... — Hice una rabieta. Podré tener todos los malditos poderes del mundo y mi mamá siempre me ganaría, todas las mamás lo hacen

—Es mentira, solo préstame tu álbum de los The Beatles y te dejaré en paz— dijo viendo hacia el camino

—¿Prometes que me lo regresas?— pregunte entrecerrando los ojos

—Si— se hizo un silencio de varios minutos donde solo me limite a cruzar mis brazos sobre mi pecho— un momento... ¿Tú fuiste la que le pidió a Will que fuera tu novio?

Claro, ella me había dicho que eso lo tenía que preguntar Will, y aunque tal vez debí esperar que él me preguntará eso, ahora que sé que fui yo quien lo preguntó, no me molestaba, porque estaba segura que una gran parte de mi habló cuando le pregunté si quería ser mi novio, además de que era suficiente saber que me dijo que sí y que me dijo que me quería

—Si— con un pequeño tono de superioridad

—¿Y tu dignidad?

—La perdí cuando le agarre la mano a una señora y no eras tú, en el centro comercial— bufé y mi mamá rodó los ojos

—De cualquier modo, tarde o temprano le tendrás que decir a tu papá que ya tienes novio— mamá sacó su sonrisa descarada de nuevo

—Y papá sacará el rifle del garaje— mamá me dio la razón cuando ladeó la cabeza riendo— solo lo iré preparando para la noticia y mientras no puedes decir nada

Mamá me prometió que no le diría nada a mi papá, mientras que volvía su vista al camino y cuando menos me di cuenta, ya habíamos llegado al lugar donde me sacaron sangre, se bajó a recoger el sobre y de nuevo puso el auto en marcha sin decirme a dónde vamos

Ya nos habían dado el sobre, llevaba manejando como diez minutos y aún no sé a dónde me lleva, solo sé que no a mí casa

—¿A dónde vamos?— pregunté viendo a mi mamá mientras seguía conducía

—Con la doctora Torres— respondió sin quitar su vista del frente

《¡¡Sal de ahí!!》

Solo queda abrir la puerta y caerme en la carretera

《Que lista eres, Liz》

Si, era una idea genial, abrir la puerta y aventarme. Mi mano tiró de la manija de la puerta, pero esta no cedía, luego me di cuenta que tenía seguro y que no había nada que me iba a librar de una nueva visita al médico

—Liz, tenemos que ir con la doctora Torres— mamá me dijo eso al ver que seguía tirando de la puerta esperando que en una de esas se abriera

—No, vas a decirle que me ponga una vacuna contra la viruela— recargue mi cabeza en la ventana

—Si no te resistes a ir al hospital y no gritas con la vacuna te compro el álbum de solista de Freddie Mercury— dijo viendo el camino con una sonrisa malévola

—¿Mr. Bad Guy? — De sólo imaginar ese precioso vinilo al lado de mi colección, casi extendía el brazo lista para la vacuna, pero me retracte y cruce mis brazos— me tientas pero no.

—The Works— dijo acercándose a mi y me tapé los oídos— Hot Space— dijo susurrando cerca de mi oído

—Kiss anuncio su nuevo álbum— dije subiendo y bajando las cejas

Mamá pensó un segundo antes de suspirar, rodar los ojos y asentir. Aplaudí muchas veces con emoción, la emoción de saber que me salí con la mía

(...)

¿4 álbumes por dejarme vacunar? Me parecía justo.

Mi madre me llevó al hospital y la doctora Torres nos atendió, debía admitir que la doctora me estaba pareciendo más amable de lo que generalmente me parecen los extraños, casi podría decir que llegaría a confiar en ella.

—Hola, Liz, ¿Cómo has estado?— preguntó la doctora Torres mientras tomaba asiento y me hacía un ademán señalando las sillas frente a ella donde mi mamá y yo también nos sentamos

—Bien— me encogí de hombros con desinterés sin detener mi mirada en un lugar en específico

—Vamos a ver cómo saliste de tus resultados— mi mamá le entregó el sobre con los resultados y empezó a leer— aun tienes anemia, tu electro esta normal, pero no es algo para dejar a la ligera, te daré vitaminas para la anemia y revisión a tu corazón para tres meses— la doctora Torres se quitó los lentes— Ahora, en el ámbito de la psicología. ¿Dijiste que tuviste una visión, no es así?

—Fue muy raro, imposible, me sentía congelada— dije sería parpadeando varias veces— pero, no se ofenda, doctora, pero aún no me gustaría hablarle de eso

—Ok, estas en todo tu derecho de poner límites, Liz— ahora la doctora miró a mi mamá antes de sacar de su cajón un frasco de píldoras— que las tome para dormir, pero solo si es necesario— le entregó el frasco a mi mamá

—Otra cosa, doctora, ¿Le podría poner a Liz una vacuna contra la viruela?— dijo mientras tocaba mi cabello, suspire mientras enterraba mis uñas en mis palmas al saber lo que venía

—Liz— mire a la doctora— Prometes no patear está vez— dijo viéndome

—Me prometió 3 álbumes de Queen y el siguiente de Kiss, así que vamos— dije y me levanté la manga de mi blusa descubriendo mi hombro

Empecé a respirar pesado pero trataba de calmarme, y no recordar el trasfondo de mi fobia a las agujas, pero aun así, cuando el olor del alcohol golpeó mi nariz, estuve a punto de arrepentirme y salir corriendo hacia la puerta sin importarme mis futuros vinilos

《No estás ahí, estás con mamá y no te lastimarán》

La doctora se acercó y antes de que mi mamá alejara la alcanzé a tomar del brazo.

Un par de lágrimas se me salieron por los ojos rodando hasta mis mejillas cuando la aguja se encajó en mi brazo, apreté los dientes y el brazo que tenía agarrado de mi mamá, mientras trataba de respirar con normalidad y no seguir llorando

—Ya acabamos, Liz— la doctora me puso un algodón justo en el lugar donde encajo la aguja, cuando abrí los ojos, me relajé al saber que seguía justo a mi mamá que me acariciaba el cabello con una sonrisa reconfortante que siempre me hacía sentir bien

—No estuvo tan mal— me levanté de la silla jugando con el algodón que estaba pegado a mi brazo. Sin embargo hice una mueca cuando mi mamá me extendió su brazo enseñándome que estaba rojo por las marcas de mis uñas en su piel— lo siento— hice una sonrisa exagerada

Nos despedimos de la doctora Torres luego de que me dijera que aún tendríamos que volver a la escuela para recoger al enano y cuando así fue, mis ojos se iluminaron cuando vi como mamá nos llevaba al centro comercial

La tienda de música era una de las cosas más bellas que podrían existir y estar aquí, viendo toda la mercancía de colección y más sabiendo que no tendría que hacer rabietas para que me compraran hoy algo, era simplemente perfecto

—¡Vamos a drogarnos con discos de Bob Marley!— grite y corrí al interior de la tienda

Me emocione un poco más de lo normal, no solo lleve mis álbumes restantes de Queen, también un par de posters de los álbumes y de la colaboración de Queen con David Bowie, y a pesar de que mi mamá me dijo que no llevara tantas cosas, al momento de pagar no me dijo que no cuando le dije que de verdad lo quería

Aun no me lo podría creer

Llevo lo mejor que me ha pasado entre las manos, envuelto en una bolsa de papel, en el momento en que la cajera de la tienda de música me cobro, oficialmente tenía todos los vinilos de Queen, al fin no tendría que esperar a que en la radio repitieran Under Pressure, ya podría escucharlo en mi tocadiscos

Este era oficialmente el mejor día de mi vida

—¿Me dejas verlo? — Aarón señaló la bolsa de papel que abrazaba como si en cualquier momento me lo fueran a quitar

—¡No! — abrace protectoramente mi bolsa con mis vinilos

—Liz...— mi mamá me regaño mientras caminábamos al Burger King— deja que los vea

—Si lo arruinas, te asesino. — le advertí a mi hermano mientras sacaba el álbum para que lo viera

La verdad por eso no me preocupaba, Aarón ya sabía la verdadera cultura desde que mi papá y yo prácticamente lo arrastramos al sillón para que viera todos los conciertos de Queen que papá tenía en VHS, por lo cual estaba segura que entendería el valor del vinilo que tenía entre las manos

—Cuando lo escuches, quiero estar ahí— Aarón me devolvió el vinilo

—Está bien— le desordené el cabello mirándolo con orgullo— y en unos días, los veremos en el Live aid...

—Será el mejor día de nuestras vidas— asentí dándole la razón a mi hermano

—Esperen­­— mamá se giró a vernos algo confundida— ¿Cómo es que van a ver el Live aid si se supone que pasara en antena de satélite?

Mierda, me olvide del detalle que mamá no sabía que papá se había gastado el dinero de la factura de gas para que tuviéramos antena de satélite para la siguiente semana cuando fuera en Live Aid

—¿No me digan que compraron el canal para su concierto cuando les dije que no lo hicieran? — Ni el niño y yo decíamos nada, simplemente hicimos una mueca de inocencia mirando a nuestra creadora con los ojos abiertos. Mamá soltó un suspiro pesado entendiendo nuestro silencio— ¿les parece que somos ricos?

—De hecho, si lo somos— conteste con una pequeña risita

—No te quejes— habló Aarón— estarán David Bowie y The Who, ¿son tus favoritos, no?

—Aún así— mamá nos miraba sin dejar de mover la cabeza— cuando llegue su padre, le diré lo que hicieron

—¿Y de quien crees que fue la idea? — le cubrí la boca al enano cuando se le escapó. Mamá nos miró con la boca abierta ante la confesión que acabamos de soltar, terminó por negar múltiples veces con la cabeza

Papá me va a quitar la mesada

--------------------------------


-Ellis

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top