Es nauseabunda la energía que Seungwan recibe al entrar a la habitación, normalmente no se quejaría y disfrutaría de su alimento, pero este no le agrada.

Sino fuera porque reconoce las prácticas de la chica sentada en el suelo al otro lado de donde Seungwan está, podría apostar que es una de ellos.

Hoy finalmente Sooyoung la trajo a conocer quien la devolverá a su plano. La pelinegra más alta pasó todo el último mes intentando conseguir alguien con el suficiente conocimiento en invocaciones y magia oscura para darle descanso a su híbrida.

Todos su búsqueda resulto en Yerim, una supuesta experta en el tema de demonología y hasta ahora parece realmente serlo, Seungwan está convencida y eso es lo importante.

ㅡNombre. ㅡYerim pide encendiendo una vela.

ㅡOstiarius Exul.

Y justo como la extraña mujer esperaba, la vela se apaga al demonio revelar su nombre. Tanto por miedo como por reacción imvoluntaria, Sooyoung comienza un padre nuestro en silencio, llamando la atención de las otras dos.

ㅡDebes estar jodiendome... ㅡSeungwan susurra para si misma. ㅡSoo, espera afuera. Estas cosas no son buenas para ti.

ㅡ¿Que? ¡No! ㅡagitando su terror fuera de su cuerpo, Sooyoung reacciona. ㅡNo quiero que te vayas sin antes despedirte. Te he mantenido los últimos cuatro meses, merezco un adiós apropiado. Ni me van a sentir de lo quieta que voy a estar.

Yerim rueda los ojos ante la ridicules de la mayor, mientras que Seungwan traga pesado. Hay cosas que es mejor hacerlas a un lado.

La castaña sigue una serie de pasos, enciende una vela distinta y escribe el nombre en un papel que luce gastado. Más que un ritual, es proceso para entender al demonio con el que trata y como ayudarlo.

ㅡ¿Cuántos años llevas en este plano?

ㅡCiento cuarenta y tres.

Otra vez Sooyoung interrumpe con un quejido de sorpresa pero solo Seungwan lo escucha, mirándola de reojo para asegurarse de que esté bien y nada de lo que Yerim hace la esté afectando.

¿Quien puede recriminarle a Sooyoung? Enterarse que la sexy mujer con la que comparte casa, comida y tiempo tiene más años de los que alguna vez pudo haber imaginado es una enorme sorpresa. Las mujeres mayores nunca estuvieron dentro de los intereses de Sooyoung, hasta ahora.

ㅡ¿Cuál fue el propósito de la invocación que te dejó aquí? ㅡYerim lanza la pregunta al aire sin saber la magnitud de su impacto sobre el demonio.

Seungwan pone en consideración todas sus opciones. Puede mentir, puede decir que no lo recuerda, al igual que puede hacer pasar a Yerim por una farsa y salir corriendo de este tétrico estudio con Sooyoung sobre su espalda.

Pero todo recae en el hecho de que tendría que quedarse en este plano un poco más, y aunque pasar más tiempo con Sooyoung no estaría mal, Seungwan no quiere acostumbrarse a algo que perderá de todas formas.

ㅡLo hicieron para acabar con mi demonio a través de la forma física que debo usar en este plano. Por eso no me regresaron. ㅡel demonio abre el libro de su historia sintiendo en su nuca todas las preguntas que se están formando en la cabeza de Sooyoung. ㅡDijeron que era una limpieza.

Una vela más se apaga pero esta vez Yerim no se preocupa en encenderla, ahora entiende a lo que se enfrenta; la tristeza en la mirada perdida de Seungwan es tanta que raya en lo humano.

Yerim había leído al respecto sobre estos demonios, pero en todos los años que lleva negociando con ellos, esta es la primera vez que se encuentra frente a uno. Puede manejarlo, solo que no sabe cómo. Todavía.

ㅡDe acuerdo, necesito que me den algo de tiempo. ㅡbuscando algo en los libros que la rodean, Yerim detiene todo. ㅡPodre regresarte, pero necesito hacer un poco de investigación antes. Has pasado mucho tiempo entre nosotros y eso puede afectar algunas cosas, además es la primera vez que terminaría la invocación de una...

"No lo digas", una advertencia se infiltra en la mente de Yerim. ㅡLa primera vez que terminaría una invocación tan larga.

Seungwan y Sooyoung se miran entre si y luego de regreso a la menor que sigue en su búsqueda.

ㅡ¿Estás bien con eso? ㅡSooyoung corta distancia, sentándose aún lado del demonio en el suelo.

ㅡSi, pero me gustaría ir con Joohyun un rato antes de ir a casa.

Wendy intenta hacerlo pasar por desapercibido, pero la mano que se posa sobre su muslo le dice que ha fallado, Sooyoung puede sentir su frustración.

No quiere que se vaya, aún así, Sooyoung tampoco quiere que se quede si eso no la hace feliz.

Yerim regresa con ellas pero con las manos vacías, un intercambio más de palabras junto la promesa de hacer su mejor esfuerzo en ayudar a Seungwan y hacen su camino a la salida.

ㅡEn todas estas, ¿Cómo conseguiste a Yerim? ㅡel demonio pregunta subiendose al auto.

ㅡBusque en todas partes por alguien que supuse demonología pero al parecer esas no son prácticas comunes. Luego me acordé de una chica con la que salí en la secundaria que le gustaba ese tipo de cosas y Yerim vino a salvar el día.

ㅡ¡¿Ella es tu ex?!

Bastante impresionante es que el pequeño cuerpo de Seungwan pueda albergar una voz tan fuerte, su grito incluso espanta las palomas que picoteaban el asfalto alrededor del auto.

ㅡNo la consideraría ex, salimos como por dos semanas nada más. Ella comenzó a actuar extraño y le termine por miedo que fuera por sus juegos con entes malignos.

ㅡAhora vives con uno, que ironía. ㅡla falta de simpatía de Seungwan se siente en su risa.

¿Está Seungwan celosa? Para nada, ¿Por qué lo estaría?

Sooyoung se preocupo por ella y le brindó ayuda, la trajo con Yerim, su ex, la chica con la que salió por catorce días cuando era una adolescente, para que fuera ella quien le devolviera a su plano. Por supuesto que no está celosa.

(Lo está).

ㅡEn mi defensa... ㅡSoo se hace a un lado para tomar el cinturón de seguridad de Seungwan y encajarlo en su lugar. ㅡ¿Por qué me conformaría con alguien que habla con demonios si puedo tener uno propio?

Si Joohyun estuviera ahí, se daría un festín.