Unos pasos más y porfin encontró las puertas que daban hacia la cafetería. Recorrió con su mirada todo el lugar, fascinada al ver el orden que había y la cantidad de personas que habían en el lugar.

Su mirada escaneó el lugar rápido, buscando a la persona que la autoridad de la institución le había pedido que contactase. Una vez vió al chico que buscaba, tomó la mano de la amiga que le acompañaba para poder acercarse a saludar. No obstante, la otra chica se negó a acercarse, probablemente por timidez al estar en una nueva escuela.

Claro que eso no fué impedimento para que la pequeña niña continuara caminando hacia la mesa donde estaba Sunghoon.

—¡Hola!— saludó la linda niña rubia a Sunghoon, su aroma a miel y fresas le indicaban al alfa que obviamente se trataba de una omega —¿Tu eres Park Sunghoon?

—H-Hola— devolvió el saludo el pequeño chico, siendo un poco tímido al respecto y sin saber porqué —Si, yo soy Sunghoon ¿Necesitas algo? —cuestionó en seguida, pues jamás había visto a esta niña en la escuela.

—Oh si, mi amiga y yo somos nuevas en la escuela y la directora dijo que podrías darnos un recorrido— explicó, señalando a lo lejos a otra chica la cual se veía bastante tímida — Claro, si no estás ocupado ahora— agregó, sintiéndose algo apenada al notar que su petición había sonado algo directa o incluso grosera, pues nisiquiera se había fijado si ese Sunghoon ya había terminado su desayuno.

Claramente Sunghoon negó reiteradas veces, sonriendo en grande mientras se ponía de pie. De todas formas ya quería irse del lugar, ambos niños caminaron hacia la tercera chica y comenzaron el recorrido por la grande institución.

—Y... ¿Cómo se llaman?— cuestionó el alfita llamando la atención de ambas chicas.

—¡Cierto! Yo soy Jo Serim, pero me gusta que me digan Onda— se presentó la rubia, sin quitar aquella sonrisa de su rostro —Ella se llama Wang Yiren, y le gusta que le digan... Yiren— dijo esta vez señalando a su amiga —Creo que ya notaste que es muy tímida, no te tomes a mal si no llega a contestarte, ella no es de aquí y apenas está dominando el hangul.

Sunghoon miró a la callada omega, notando que ella le estaba mirando con evidente curiosidad. Cuando Yiren se dió cuenta que había sido atrapada observando al alfa, rápidamente apartó la mirada.

Serim estaba distraída recorriendo con la mirada los pasillos, por lo que no se dió cuenta de lo que pasaba a sus espaldas.

—Veo correcto presentarme a cómo se debe, yo soy Park Sunghoon, tengo 12 años... Aunque en Diciembre cumplo 13.

—¡Wow! ¿Tienes 12? ¡Significa que eres mayor que yo!— exclamó Onda eufórica —Yo tengo 10 años aún.

Jo Serim era una niña nueva en la ciudad al igual que Yiren, a su corta edad se había presentado cómo omega y claro estaba, pues sus delicadas pero adorables facciones al igual que su actitud la delataban. Era una niña muy extrovertida y sociable, por lo que siempre estaba rodeada de amigos y sonrisas. Siempre lograba agradarle a las personas.

Y Sunghoon no era la excepción, Serim se le había hecho una niña muy amigable.

Por otro lado estaba Yiren, quien hasta el momento se la estaba pasando callada y analizando al alfa de pies a cabeza. Esto en cierta parte incomodaba a Sunghoon, es decir, ¿Por qué lo miraba tanto? ¿Tenía algo en la cara? Aquellas acciones hacían que Sunghoon tuviera cierta curiosidad sobre la omega, e intentaría hablar con ella para que se sienta cómoda en la escuela.

Así que cuando pausaron el recorrido para que Serim fuera al baño, Sunghoon aprovechó la oportunidad para hablarle.

—¿Te ha gustado la institución? ¿Qué opinas? — preguntó Sunghoon con lo primero que se le vino a la cabeza.

Yiren rápidamente puso su total atención en el alfa, tomándose su tiempo para elegir las palabras adecuadas para responder. Sunghoon tenía presente que Yiren no dominara muy bien el idioma, tal y como Onda le dijo. Así que esperaba la respuesta paciente.

—E-En verdad m-me gusta, me gusta mucho— respondió la omega luego de un rato, en un coreano algo mal pronunciado, pero comprensible.

—Eso me alegra mucho— expresó con una sonrisa —¿Y cuánto tiempo llevas aquí en Corea?— preguntó para sacar algo de plática y se sintiera más cómoda.

Su mamá le decía que para hacer amigos debías mostrar una buena actitud, y si había un tema de conversación, podría servirle para iniciar alguna plática y que esta misma con el tiempo se iba a hacer más larga.

Pero al percatarse que la chica no contestaba, se decepcionó un poco.

—No comprendo, perdón— dijo Yiren y posterior a eso hizo una reverencia hacia Sunghoon— We can speak in English, I have a good command of the language— (Podemos platicar en inglés, domino muy bien el idioma).

—¡Great! I asked you if How long have you been living in Korea— (genial, te pregunté si cuánto tiempo llevas viviendo en Corea).

—I've been living here for six months, at home we usually speak Chinese. ¡But I'm already learning the basics of hangul! Mom and Dad teach me because they speak it very well— (vivo aquí desde hace seis meses, en casa solemos a hablar en chino. ¡pero ya estoy aprendiendo lo básico del hangul! papá y mamá me enseñan porque ellos lo hablan muy bien).

—¡That's Awesome!— (eso es asombroso) dijo Sunghoon.

—But it is a sad sometimes, I can only talk to Onda because she can speak Chinese, sometimes, I would like to make more friends apart from her.— (pero es algo triste a veces, sólo puedo hablar con Onda porque ella sabe hablar chino, a veces me gustaría hacer más amigos aparte de ella.)

—I can be your friend, and I could teach you hangul too— (yo puedo ser tu amigo, también podría enseñarte hangul) ofreció amablemente Sunghoon, internamente agradecía a su mamá de haberlo metido a esos cursos de inglés para que lo supiera hablar mejor.

Yiren lo miró, con pequeñas lucecitas resplandeciendo en su miranda.

—¿Really? ¿Would you really do it?— (¿de verdad? ¿de verdad lo harías?) preguntó la omega, y al ver que Sunghoon asintió, no pudo evitar alegrarse tanto que literalmente se lanzó a abrazarlo —¡Muchas gracias Sunghoon! ¡Gracias por ser mi amigo!— agradeció esta vez en hangul.

Sunghoon algo tímido correspondió el abrazo, palmeando levemente la espalda contraria.

Casi al mismo tiempo, Sunoo salía del baño para omegas cuando pudo presenciar la escena. Rápidamente volvió a meterse al baño, arrastrándose consigo a Jake y a Soobin quienes lo habían acompañado.

—¿Se están abrazando?— preguntó Sunoo incrédulo, eso sólo lo hacían los novios, ¿Sunghoon y esa niña eran novios? Pero Sunghoon era el destinado de Jaeyoon, no de ella.

—¿Quienes?— preguntó Jake.

—¡Sunghoon y una niña! ¡Los ví abrazarse!

—Seguro sólo son amigos— dijo esta vez Soobin.

Mientras tanto, algo en el interior de Jaeyoon le decía que haber escuchado eso no le había gustado nada. ¿Quién sería esa niña?

—Pero está abrazando a Sunghoon y él le pertenece a Jaeyoon— excusó el pequeño Kim— Jakey, deberías decirle algo a Sunghoon.

—No tengo porqué decirle algo, no somos nada y él no me interesa, que abrace a las omegas que quiera— dijo el australiano cruzándose de brazos.

Tanto Sunoo cómo Soobin se sorprendieron ante las palabras de Jake, pero luego los tres omegas y principalmente Jake, entraron en pánico cuando una persona salió de uno de los cubículos del baño, por azares del destino, esa persona era Onda.

—¡Hola! Me llamo Jo Serim, pero me gusta que me digan Onda— se presentó la chica con una sonrisa, luego de percatarse que los tres omegas la veían asustados. Luego pasó entre ellos para poder alcanzar uno de los banquitos y subirse en este para poder llegarle al lavamanos.

—T-Tú... ¿Escuchaste algo de lo que dijimos?— preguntó Jake, sabiendo aún así la obvia respuesta.

—¿Hablas de lo de Sunghoon? Sipidipi— respondió, soltando una pequeña risita mientras se lavaba las manos, cuando terminó, se bajó del banquito para ponerlo nuevamente en donde lo encontró y se dirigió hacia la secadora para secar sus manos— Perdóname si es que no debía saberlo, pero es algo imposible no escucharlo si lo hablan en voz alta en un baño.

Una vez terminó su labor, comenzó a caminar hacia la puerta, pero la voz de Jaeyoon la detuvo nuevamente.

—¡Espera!— llamó el omega —¿Podrías guardar el secreto y no decirle nada?

Serim alzó una ceja extrañada, pero decidió no darle importancia y se encogió de hombros, mamá le decía que no era bueno meterse en los asuntos que no le incumbían.

—Está bien, no diré nada. ¡Nos vemos luego!— se despidió agitando su manita para después salir del baño.

Los tres omegas suspiraron aliviados, desde afuera lograron escuchar la voz de Serim gritar un claramente "¡Yiren, Sunghoon! ¡Ya volví!", cosa que hizo reír levemente a Soobin.

—¿Qué? Ella es muy tierna— comentó.

—Yo puedo serlo más— protestó Sunoo, haciendo un puchero.

No obstante, Jake se quedó pensando en lo que había escuchado.

"Así que se llama Yiren..."

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casi me da un bloqueo, pero por suerte no sucedió KDBFND.

ponemos a las nenas de everglow pq las amo y pq si.

no se encariñen👁.

por si no conocen a yiren y a onda, son ellas<|3

avisenme si hay un error, nos leemos luego♡.