Después de haber visitado la tumba de Shion, ambos rubios volvieron a casa. Toda la noche hubo un silencio por parte de los dos, habían tantos sentimientos encontrados ese día para tanto Naruto como para Boruto.

Luego de varias horas, Naruto pudo lograr que Bolt se durmiera. Se encontraba en un sillón que esta en su habitación, el cual se encuentra frente a un gran ventanal.

Estaba ahí, en silencio, observando las estrellas, las observaba como si estuviera buscando entre ellas a su amada.

Solo la luna y las estrellas se encontraban acompañándolo.

—Aún no puedo entender por qué mi corazón está tan roto ¿por qué...aún no he podido sanarlo? —

Esas palabras rondaban por la mente de Naruto una y otra vez.

Estaba perdido en sus pensamientos, cuando recordó la carta que le había dado su hijo. No la había abierto aún, estaba esperando estar a solas para hacerlo.

Sacó la carta de su bolsillo. La contempló por unos segundos, como si tuviera miedo a abrirla. Respiró hondo y la abrió lentamente.

Feliz día, papi.

Gracias por siempre cuidarme, aunque a veces no soy un buen niño y hago que te enojes.

Gracias por ser mi mami y mi papi. Te quiero mucho, mucho.

A veces te pones triste, cuando pasa, yo también me pongo triste, así que ya no llores, sonrie como siempre lo haces, pero cuando ya no puedas, como cuando trato de contener las lágrimas cuando me caigo o cuando me lastimo, puedes venir donde mi, como yo voy a ti.

También quiero cuidarte, así que trataré de ser un buen niño, haré que siempre papi este feliz porque me gusta mucho la sonrisa de papá.

Tal vez mami no esté con nosotros, pero Hinata sensei me dijo que ella está ahí sólo que no podemos verla porque es un ángel, ella nos cuida, así que no vuelvas a llorar, ella también se pone triste cuando lo haces.

Te amo, eres el mejor.

No bien terminó de leer la carta, cuando las lágrimas bajaban, haciendo que la carta se empezara a mojar mientras la apretaba. Sentía que todo se había detenido, quería gritar, quería sacar todo ese dolor que ha sentido, que se ha guardado.

— Bolt...¿como puedes decir eso? Tú eres el mejor, eres quien ha sufrido más, y aún así...—

Las lágrimas no paraban. Llevó sus manos a su rostro. Quería salir corriendo, quería salir de ese horror que ha tenido que vivir día a día. Quería volver a sentir ese amor que hace tiempo olvido como se sentía.

Quería volver a sentirse amado por la persona que no ha dejado de amar.

Seguía en su dolor, siendo observado por una silueta. Se acercó y acarició su pelo. Estaba triste. Lo observó fijamente. Las lágrimas también brotaban por sus ojos.

Naruto...ya no sufras, me duele verte así...por favor, se feliz, quiero que seas feliz al lado de nuestro hijo, no te preocupes por mi, ya viví lo que tenia que vivir, pero tu no, te falta tiempo para vivir. Estoy segura que encontrarás a esa persona que tanto buscas, ella esta donde menos te lo esperas, por favor...notala, ella esta ahi, esperándote...