El norte
Kagami y Kuroko se dirigieron al hospital e ingresaron a la habitación de Mayuzumi, el cual se veía más pálido de lo normal y tenía un expresión cansada
-Como te sientes Mayuzumi-san?- le preguntó Kuroko sentándose a su lado
-Bueno...al menos estoy vivo- suspiro y se rió levemente
Los otros dos sonrieron levemente y comenzaron a contarle todo lo que había pasado hasta ahora...
Por otro lado, Aomine estaba mirando alrededor, hasta que su mirada se posó en una extraña estructura incompleta a un lado del hospital así que se le acercó
-Oiga, que es eso a un lado del hospital?- le pregunto el moreno
-Esa estructura? Bueno, pues ya que el hospital que logramos asegurar es relativamente pequeño, estamos pensando en expandirlo pero nos hacen falta materiales- explico el hombre y volvió a sus asuntos
Aomine asintió y siguió caminando por los alrededores, fue entonces que noto que la zona residencial, donde estaban todas las casas, estaba separada de la otra zona segura por un muro de concreto, y el resto de la zona segura estaba rodeada por grandes rejas y uno que otro muro, pero noto que si los zombies llegarán a entrar, lo más seguro sería resguardarse en la zona residencial...
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2 días después...
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4 días habían pasado desde que habian visto a Akashi por última vez, y los chicos habían comenzado a trabajar en lo alrededores para ayudar en las mejoras de la ciudad y para evitar que los alimentos escasearan.
Midorima procuraba ir todos los días al hospital para visitar a Takao, el cual aún seguía en coma, y le hablaba sobre todo lo que había estado sucediendo hasta ahora, y ese día no fue la excepción
-Kuroko a estado ayudando con algunos niños del lugar y también estamos poniendo un huerto para que no falte la comida- explico acariciándole la mano y luego suspirando-...Bakao...tienes que despertar...me hiciste una promesa...- su voz antes tranquila, se había vuelto llena de angustia y comenzaba a quebrarse mientras intentaba contener las lágrimas
Cuando comenzó a sollozar, se puso de pie y se apresuró a salir del lugar...
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Akashi y Nash se encontraban en la carretera, Nash al volante de la camioneta, hasta que está empezó a ir más lento hasta finalmente detenerse
-Qué sucede? Se acabó el combustible?- preguntó el pelirrojo a lo que el rubio asintió y bajo del vehículo
Akashi suspiro y bajo también, dirigiéndose a la parte trasera de la camioneta y de la caja saco las cosas que tenía Nash y se puso una mochila sobre la espalda a lo que Nash hizo lo mismo.
Una vez tomaron todas las cosas de la camioneta siguieron su camino a pie, caminando por la orilla de la carretera, cerca del bosque
-Y por qué vamos hacia el norte?- le pregunto Akashi
-Hace un par de días, antes de encontrarte, estuve en un pequeño refugio, una pequeña casa con otras personas, se rumoreaba que el virus había venido del sur, por lo que si eso es cierto, entonces el norte debe ser más seguro- explico el rubio
Akashi asintió comprendiendo y estaba por decir algo, hasta que se escuchó un grito femenino pidiendo ayuda. Se miraron entre ellos y comenzaron a correr hacia donde provenía el grito mientras Nash sacaba un cuchillo de su cinturón y le daba su arma cargada a Akashi
-Sahes usar una de esas?- preguntó sin dejar de correr
Akashi miro el arma por un momento y luego la tomo- Si...creo que sí- asintió mientras la revisaba
-Muy bien, no sabemos que tan grave sea el asunto, pero el ruido podría atraer más, así que solo usala en caso de que la cosa se ponga muy fea- le advirtió a lo que el otro asintió
Llegaron al lugar de donde provenía el grito y se encontraron a una chica parada sobre el techo de un auto llorando y pidiendo por ayuda mientras 3 zombies intentaban alcanzarla y otros 2 parecían estar comiéndose a alguien
-Quedate atrás...- le pidió Nash al pelirrojo y se acercó a uno de los zombies que intentaba llegar a la chica y le clavó el cuchillo en la cabeza, luego lo saco y se lo clavó al más cercano y cuando el otro se estaba acercando a el, lo pateó con fuerza en la rodilla y cuando cayo al suelo, le clavó el cuchillo en la sien, pero no noto cuando un de los zombies que anteriormente estaba con el cuerpo se comenzó a acercar a él y lo agarro por los hombros
-Maldito...- maldijo e intento alejarlo con una mano mientras que con la otra intentaba sacar su cuchillo del zombie al que había matado
Nash pudo sentir el desagradable aliento de la bestia sobre su cuello y de repente el peso de la criatura se desvaneció y cuando volteó para ver, se encontró a Akashi que había matado al zombie con otro cuchillo y ya había acabado con el otro
-No necesito quedarme atrás, se cuidarme- le aseguro sonriendo
El rubio sonrió de vuelta y luego miró a la muchacha sobre el auto y se acercó a ella
-Oye, te encuentras bien? Qué sucedió?- le pregunto ayudandola a bajar del auto
La mujer estaba temblando mientras sollozaba, pero después de un rato finalmente se animó a hablar-...Mi novio y yo...nos dirigiamos a un refugio en el norte...se dañó el auto y el bajo a revisar, y cuando se distrajo...esas cosas aparecieron y...- la muchacha ya no pudo más y comenzó a llorar
Nash miro a Akashi con los ojos bien abiertos y el pelirrojo le devolvió la mirada-...lamento escuchar eso, pero...dijiste un refugio?- pregunto el rubio sujetándola por los hombros
La mujer asintió y se limpió las lágrimas- Antes de que la radio muriera, escuchamos que un grupo de civiles había armado un refugio en el norte en una granja- explicó la mujer mirando al piso
-Entonces allá es dónde iremos- dijo Akashi a Nash sonriendo levemente
-Por favor...déjenme ir con ustedes...no quiero estar sola- les suplico la mujer
Ambos se pusieron de acuerdo, así que la dejaron unirse a ellos en su viaje- Mi nombre es Nash, el es Akashi, como te llamas?- los presento el rubio
-...me llamo Emika- se presento la muchacha
-Sahes que tan lejos está el refugio?- le pregunto Akashi a la chica
-En auto debería estar alrededor de 4 horas, pero a pie podría tomarnos el doble...- explico mirando hacia el cadáver de quién había sido su pareja
-Entonces será mejor que nos pongamos en marcha!- exclamó Nash dándole una palmada en la espalda a la mujer y comenzando a caminar
Y así, los 3 se pusieron en marcha hacia el norte en busca del refugio...
Caminaron por un par de horas, hasta que el solo comenzaba a ponerse y la oscuridad pronto les sería un problema
-Deberíamos buscar un lugar para pasar la noche- sugirió Nash ingresando al bosque
-Creés que encontremos un lugar para pasar la noche en el bosque?- le pregunto la chica
-Si la suerte esta de nuestro lado, sí- respondió, y parecía que así era el caso pues unos minutos después se encontraron con una vieja cabaña bastante cerca de la carretera
-Eso debería ser suficiente, solo hay que asegurarnos que en verdad está vacía- comentó Akashi sacando su cuchillo
Nash lo imitó y primero revisaron las ventanas y luego abrieron la puerta, examinando cada habitación pero para su gran suerte, no había nadie pero si había algunos escasos suministros que podrían servirles en su viaje.
Akashi se encontraba examinando un par de latas de comida que había encontrado bajo la cama y estaba revisando las fechas de caducidad, cuando escucho a Nash en la habitación de a lado acercándose
-Somos unos bastardos suertudos!- exclamó sonriendo y cuando Akashi lo volteó a ver, vio que estaba sujetando una caja y cuando se asomó a ver, sus ojos se iluminaron al ver, no solo municiones, sino también varias barras de chocolate y un par de botellas de alcohol
-Pero si todo eso está ahí...no crees que es por qué alguien tal vez este viviendo aquí y pronto volverá?- pregunto el pelirrojo dudoso
-Quien sabe, pero eso ya no importa, por hoy vamos a descansar- sugirió el rubio tomándolo por la muñeca y guiandolo a la sala
Los tres se acomodaron sobre mantas viejas y no tardaron en caer dormidos, hasta que Akashi escuchó el ruido de lo que parecía ser un motor, así que se puso de pie y por un hueco en la vieja pared de madera se asomó. Pudo ver una gran camioneta estacionarse en la carretera y varios hombres bajando de ella mientras reían hasta que un comenzó a entrar al bosque y se paró contra un árbol hasta que noto la cabaña
-Oigan! Vengan acá, encontré una cabaña!- anunció el hombre y pronto el resto se comenzó a acercar
-maldito sea...- susurró Akashi, pues desconocía las intenciones de esos hombres y no podían darse el lujo de confiar ciegamente así que se acercó a Nash y comenzó a sacudirlo- Nash! Despierta...- lo llamó en susurros
-Qué? Qué está pasando?- pregunto el rubio confundido y adormilado
Akashi escuchó la madera de las escaleras de la entrada crujir bajo posadas y pronto la puerta se abrió
-...hm? Vaya vaya, que tenemos aquí...
Continuará...
Un gracias especial a Nana por estarme ayudando con este libro:3
Espero les esté gustando! Nos leemos pronto!
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